Tras un largo día ocupándose de los asuntos del día a día, por fin parecía haber finalizado la labor, al menos por esa jornada. Ya no recordaba a cuantos había matado ni como lo había hecho. ¿Se sentía satisfecho? ¿No se sentía conforme? Era algo difícil de saber, decidió abandonar el recinto donde había llevado a cabo la masacre, ya que solo era cuestión de tiempo para que llegaran las autoridades al lugar.
—Estos malditos sacos de mierda, son como las putas cucarachas, los mato una y otra vez y vuelven a aparecer. No me rendiré, los voy a cortar de raíz a como dé lugar.
Ese era el compromiso que hizo consigo mismo, seguir adelante con su objetivo de vida. Sea como sea, el mar de cadáveres dentro de aquel edificio viejo, estaba servido.
Tras un largo día ocupándose de los asuntos del día a día, por fin parecía haber finalizado la labor, al menos por esa jornada. Ya no recordaba a cuantos había matado ni como lo había hecho. ¿Se sentía satisfecho? ¿No se sentía conforme? Era algo difícil de saber, decidió abandonar el recinto donde había llevado a cabo la masacre, ya que solo era cuestión de tiempo para que llegaran las autoridades al lugar.
—Estos malditos sacos de mierda, son como las putas cucarachas, los mato una y otra vez y vuelven a aparecer. No me rendiré, los voy a cortar de raíz a como dé lugar.
Ese era el compromiso que hizo consigo mismo, seguir adelante con su objetivo de vida. Sea como sea, el mar de cadáveres dentro de aquel edificio viejo, estaba servido.