🌙 Hael Alistair

Edad: 18 años
Dinámica: Omega
Aroma: Canela, manzana y durazno — una mezcla cálida, dulce y reconfortante que envuelve como un abrazo hogareño.

🌌 Apariencia

Hael posee una presencia luminosa que atrae sin esfuerzo. Su cabello castaño oscuro, con reflejos suaves que se encienden bajo la luz del sol, enmarca un rostro de rasgos delicados y expresivos. Sus ojos grises, claros como un amanecer nublado, reflejan su calidez y sinceridad. Su sonrisa suele ser amplia y contagiosa, capaz de suavizar incluso los ambientes más tensos. De complexión esbelta, su porte no intimida, sino que transmite cercanía y confianza.

💫 Personalidad

Hael es un joven amable, gentil, cariñoso, alegre y profundamente sociable. Tiene el don de conectar con las personas, de escuchar con atención y hacer que los demás se sientan importantes a su lado. Su carácter dulce y abierto no le resta inteligencia: sabe leer las emociones de quienes lo rodean y adaptarse a ellas con empatía. Es el tipo de persona que ilumina una sala con su mera presencia y que rara vez guarda rencor. Sin embargo, bajo esa ternura habita una fuerza silenciosa: la convicción de proteger lo que ama.

🌿 Habilidades e intereses

• Gran habilidad para montar a caballo y sentir la libertad en la naturaleza.

• Encanto social: sabe desenvolverse en cualquier entorno, siendo querido por muchos.

• Tiene talento en la música, especialmente con el canto, donde su voz suave y cálida transmite emoción.

• Una memoria afectiva poderosa: recuerda rostros, momentos y sentimientos con detalle.

📖 Historia

📖 Historia de Hael Alistair

Desde el momento en que nació, el aroma de canela, manzana y durazno se volvió inseparable de él. Cálido y dulce, como un hogar en invierno, fue lo que primero llamó la atención de su madre cuando lo sostuvo en brazos por primera vez. Hael Alistair vino al mundo como Omega en una familia distinguida y de buena posición, y aunque ello implicaba expectativas y miradas de juicio, sus padres lo vieron siempre como una bendición.

La infancia de Hael transcurrió entre los jardines de la mansión familiar y los establos donde aprendió a montar a caballo. Desde niño mostró un corazón lleno de ternura: compartía sus juegos con los sirvientes, cuidaba de los animales y siempre encontraba la manera de arrancar sonrisas a quienes lo rodeaban. Su carácter amable, gentil y alegre lo convirtió en el centro de atención de todos los que tenían la suerte de conocerlo.

Sin embargo, no todo fue fácil. A temprana edad, Hael fue diagnosticado con una enfermedad respiratoria crónica que lo hacía vulnerable. Los cambios bruscos de clima o el esfuerzo físico excesivo podían dejarlo sin aliento, con ataques de tos que muchas veces preocupaban a su familia. Hubo periodos en los que pasó semanas confinado en su habitación, mirando el cielo a través de la ventana, soñando con correr libremente junto a sus caballos.

Lejos de quebrarlo, esa fragilidad moldeó su espíritu. Aprendió a apreciar los pequeños instantes de calma, a escuchar más de lo que hablaba, y a valorar la compañía de quienes lo cuidaban. Su enfermedad no le robó la alegría; al contrario, lo hizo más fuerte en el alma, pues entendió que cada día en el que podía respirar el aire fresco era un regalo precioso.

En la adolescencia, Hael cultivó un amor especial por la música. Encontró en el canto un refugio, una manera de expresar lo que las palabras no alcanzaban. Su voz, suave y cálida, transmitía emociones que tocaban los corazones de quienes lo escuchaban. Muchos decían que su canto era como el perfume de su aroma: envolvente, dulce, imposible de olvidar.

Ahora, con 18 años, Hael se encuentra en el umbral de su destino. La sociedad espera de él que cumpla el papel que se le ha asignado por apellido y por ser Omega, pero él desea más. Busca demostrar que su fuerza no está en el poder físico ni en la influencia de su familia, sino en su capacidad de amar, unir y sostener a quienes lo rodean. Aunque la enfermedad lo acompaña como una sombra silenciosa, Hael se niega a dejar que lo defina: sueña con ser recordado no por su fragilidad, sino por la luz que desprende su corazón.

Para quienes lo conocen, Hael es un joven que representa la calma y la esperanza en tiempos inciertos. Y en su interior late la convicción de que, aunque el aire a veces le falte, su espíritu nunca dejará de respirar libertad.

✨ Frase distintiva

“Aunque mi aliento sea frágil, mi voluntad es más fuerte que cualquier viento.”