• {Desde que se habia unido al circo su vida era mucho mas divertida. Cada dia era una aventura. Y aunque ganaban lo suficiente para vivir no contaba con muchos lujos. Tampoco era que le hicieran falta. Pero su nueva vida la expuso a la gente del pueblo y sus realidades. Algo que jamas habria experimentado si hubiera continuado su vida como miembro de la nobleza}

    {Vivir entre la gente de bajos recursos le abrio los ojos a lo injusta que era la sociedad. Con criminales que asaltaban a la gente. Policias ineficientes o muchas veces corruptos. Muchas fueron las veces donde deseo el poder hacer algo al respecto. Concentrando sus esfuerzos en traer sonrisas a la gente durante sus shows}

    {Sin embargo, esto cambiaria unos años despues. Una tarde en la que se dirigia al hogar que compartia con sus amigos y amigas del circo algo llamo su atencion. Un ruido que provenia de un callejon, algo que desperto su curiosidad y la llevo a investigar que pasaba. Ahi encontro a un hombre sentado contra la pared, con una profunda herida en el vientre y sangrando demasiado. Estaba sujetando un pequeño maletin}

    {Al ver el rostro del hombre le reconocio casi de inmediato. Era un inventor reconocido dueño de un taller. Lucia tan palido que sabia que no iba a sobrevivir. Aun asi el inventor alzo la vista y con lo que parecia sus ultimas fuerzas presiono su maletin hacia ella pidiendole que se llevara el contenido y no dejara que los hombres que estaban buscandolo pudieran obtenerlo}

    {Al inicio no supo que hacer pero termino aceptando. Al menos queria darle algo de paz a aquel hombre que iba a fallecer. Y se mantuvo a su lado un par de minutos hasta vio sus ojos cerrarse por ultima vez. Poco despues abrio el maletin para ver el contenido. Que podria ser que le habia costado la vida a alguien? Lo que encontro dentro fue un par de guantes negros. Al inicio no entendio que tenian de especial hasta decidio ponerselos}

    {En cuanto se habia puesto ambos escucho un sonido casi como una alerta que venian de los mismos guantes. Y un momento despues comenzaron a cambiar convirtiendose en dos grandes guanteletes de metal. Que a pesar de su tamaño y material por alguna razon no le resultaban pesados en absoluto. Vio esto con asombro, y tan rapido como aparecieron volvieron a cambiar en 2 guantes negros. Tenia tantas preguntas pero al oir una serie de pasos acercandose al callejon decidio irse de ahi rapidamente}
    {Desde que se habia unido al circo su vida era mucho mas divertida. Cada dia era una aventura. Y aunque ganaban lo suficiente para vivir no contaba con muchos lujos. Tampoco era que le hicieran falta. Pero su nueva vida la expuso a la gente del pueblo y sus realidades. Algo que jamas habria experimentado si hubiera continuado su vida como miembro de la nobleza} {Vivir entre la gente de bajos recursos le abrio los ojos a lo injusta que era la sociedad. Con criminales que asaltaban a la gente. Policias ineficientes o muchas veces corruptos. Muchas fueron las veces donde deseo el poder hacer algo al respecto. Concentrando sus esfuerzos en traer sonrisas a la gente durante sus shows} {Sin embargo, esto cambiaria unos años despues. Una tarde en la que se dirigia al hogar que compartia con sus amigos y amigas del circo algo llamo su atencion. Un ruido que provenia de un callejon, algo que desperto su curiosidad y la llevo a investigar que pasaba. Ahi encontro a un hombre sentado contra la pared, con una profunda herida en el vientre y sangrando demasiado. Estaba sujetando un pequeño maletin} {Al ver el rostro del hombre le reconocio casi de inmediato. Era un inventor reconocido dueño de un taller. Lucia tan palido que sabia que no iba a sobrevivir. Aun asi el inventor alzo la vista y con lo que parecia sus ultimas fuerzas presiono su maletin hacia ella pidiendole que se llevara el contenido y no dejara que los hombres que estaban buscandolo pudieran obtenerlo} {Al inicio no supo que hacer pero termino aceptando. Al menos queria darle algo de paz a aquel hombre que iba a fallecer. Y se mantuvo a su lado un par de minutos hasta vio sus ojos cerrarse por ultima vez. Poco despues abrio el maletin para ver el contenido. Que podria ser que le habia costado la vida a alguien? Lo que encontro dentro fue un par de guantes negros. Al inicio no entendio que tenian de especial hasta decidio ponerselos} {En cuanto se habia puesto ambos escucho un sonido casi como una alerta que venian de los mismos guantes. Y un momento despues comenzaron a cambiar convirtiendose en dos grandes guanteletes de metal. Que a pesar de su tamaño y material por alguna razon no le resultaban pesados en absoluto. Vio esto con asombro, y tan rapido como aparecieron volvieron a cambiar en 2 guantes negros. Tenia tantas preguntas pero al oir una serie de pasos acercandose al callejon decidio irse de ahi rapidamente}
    Me gusta
    3
    0 turnos 0 maullidos 537 vistas
  • —Se acomoda con su tarrina de helado de chocolate y observa la fauna. Sobre todo, viendo a Emily Castle espiando a Sam. Deja ir una risita divertida—
    —Se acomoda con su tarrina de helado de chocolate y observa la fauna. Sobre todo, viendo a [1ShxrtnSweet] espiando a Sam. Deja ir una risita divertida—
    7 turnos 0 maullidos 265 vistas
  • 》Cita BMF《

    -el conejito habia planeado una cita divertida para sus novios [o al menos para el era divertido, despues de todo coleccionar rocas no seria en vano] le habia dicho a Monty Gator y Glamrock Freddy que vinieran a su camerino en la tarde/noche, que les daria una sorpresa, y ahi estaba esperando a ambos amores, en una mesita estaban varios bocadillos, comida, snacks y bebidas gaseosas, y en el centro de su camerino, habia una manta con varias rocas, la mayoria sin nada puesto, y muchos plumones, colores y cosas para manualidades, el wonejito estaba nervioso, y si no les agradaba lo que habia hecho?... esas dudas y anciedad le consumian, pero aun asi decidio solo esperar-


    Bien... no deben de tardar...
    》Cita BMF《 -el conejito habia planeado una cita divertida para sus novios [o al menos para el era divertido, despues de todo coleccionar rocas no seria en vano] le habia dicho a [BigGator1] y [FreddyGlamrock79] que vinieran a su camerino en la tarde/noche, que les daria una sorpresa, y ahi estaba esperando a ambos amores, en una mesita estaban varios bocadillos, comida, snacks y bebidas gaseosas, y en el centro de su camerino, habia una manta con varias rocas, la mayoria sin nada puesto, y muchos plumones, colores y cosas para manualidades, el wonejito estaba nervioso, y si no les agradaba lo que habia hecho?... esas dudas y anciedad le consumian, pero aun asi decidio solo esperar- Bien... no deben de tardar...
    Me encocora
    2
    24 turnos 0 maullidos 474 vistas
  • Ingresando datos en Archivo: He aprendido que la amistad es Ayuda y Compartir. Es muy divertida pero también muy impredecible. Cómo conclusión, todos necesitan buenos amigos. La Amistad es un fenómeno bastante ilógico.
    Ingresando datos en Archivo: He aprendido que la amistad es Ayuda y Compartir. Es muy divertida pero también muy impredecible. Cómo conclusión, todos necesitan buenos amigos. La Amistad es un fenómeno bastante ilógico.
    Me encocora
    Me gusta
    4
    0 turnos 0 maullidos 448 vistas
  • -Diferente a otras veces, esta ves las aventuras de la demonio acontecian en un mercado que parecía ser de estilo medieval o renacentista. Los edificios son de estilo gótico, con techos altos de tejas rojas, fachadas ornamentadas, y grandes ventanales con vitrales decorativos. Los comerciantes exhiben sus productos en mesas de madera, y los transeúntes, vestidos con ropas tradicionales de la época, pasean mientras observan los artículos a la venta. Hay una mezcla de figuras, lo que sugiere un lugar frecuentado tanto por aldeanos comunes como por aventureros.-

    -El ambiente es bullicioso pero acogedor, con la luz del día iluminando la escena y reflejando un día claro. Se puede sentir la historia en el aire, como si cada rincón de este mercado tuviera una historia que contar, mientras los sonidos de conversaciones y el aroma de especias y comida llenan el aire. Es un lugar donde se mezclan las vidas de diversos personajes en una comunidad vibrante y llena de vida.-

    -Star caminaba lentamente por las adoquinadas calles del mercado, sus botas modernas chocando con el suelo de piedra en un ritmo constante. Aunque su capa con capucha la cubría, ocultando la mayor parte de su figura, no podía evitar llamar la atención con cada paso que daba. Los colores vibrantes y el diseño ajustado de su ropa bajo la capa contrastaban marcadamente con las prendas simples y holgadas de los aldeanos que la rodeaban. Sin embargo, el bullicio del mercado la mantenía en el anonimato, permitiéndole disfrutar de su entorno sin ser reconocida.-

    -Sus ojos se movían de un lado a otro, fascinados por los detalles de los puestos de mercado. Frutas y verduras frescas se apilaban en pirámides perfectas, sus colores brillantes resaltando bajo la luz del sol. Los artesanos ofrecían joyas finamente trabajadas, tallas en madera y utensilios de metal, todos exhibidos con orgullo en mesas robustas de madera. Los aromas de especias exóticas y alimentos cocinados al momento le llenaban los sentidos-

    "Esto es asombroso..."

    -murmuró para sí misma, sus palabras casi perdidas en el bullicio de la multitud. Cada pequeño detalle del mercado parecía transportarla a otro mundo, uno que solo había soñado en su juventud.-

    -Una sonrisa traviesa se formó en su rostro mientras imaginaba una escena distinta a la que solía vivir.-

    (Imagina Star... Aquí podrías ser la princesa en apuros, esperando a que un valiente caballero venga a rescatarte...)

    -Su risa suave resonó bajo la capucha mientras se perdía en su fantasía-

    "Pero no soy una simple princesa... Sería la princesa más intrigante de todas, una que guarda una trágica historia, poderes ocultos y además que es una demonio, pero ¿Quien sospecharía? Con mis cuernos y cola ocultos soy solo una mas entre toda esta gente~ Aun que tal vez deberia comprar ropa a corde a la epoca~~ ¡Kya! ¡Vestidos largo y hermosos!)

    -Su sonrisa se amplió mientras miraba a los guardias que patrullaban el mercado, sus armaduras brillando al sol. Los hombres, altos y fuertes, parecían sacados directamente de un cuento de hadas. Star no pudo evitar fantasear con la idea de ser rescatada por uno de ellos, aunque sabía muy bien que, en realidad, era ella quien solía salvar a otros.-

    (Quizás podría dejar que uno de ellos intente rescatarme... solo para ver cómo se desenvolverían las cosas)

    - bromeó en su mente, divertida por la idea. Pero claro en el fondo sabía bastante bien que no sería correcto causar problemas en un mundo que no es el suyo-
    -Diferente a otras veces, esta ves las aventuras de la demonio acontecian en un mercado que parecía ser de estilo medieval o renacentista. Los edificios son de estilo gótico, con techos altos de tejas rojas, fachadas ornamentadas, y grandes ventanales con vitrales decorativos. Los comerciantes exhiben sus productos en mesas de madera, y los transeúntes, vestidos con ropas tradicionales de la época, pasean mientras observan los artículos a la venta. Hay una mezcla de figuras, lo que sugiere un lugar frecuentado tanto por aldeanos comunes como por aventureros.- -El ambiente es bullicioso pero acogedor, con la luz del día iluminando la escena y reflejando un día claro. Se puede sentir la historia en el aire, como si cada rincón de este mercado tuviera una historia que contar, mientras los sonidos de conversaciones y el aroma de especias y comida llenan el aire. Es un lugar donde se mezclan las vidas de diversos personajes en una comunidad vibrante y llena de vida.- -Star caminaba lentamente por las adoquinadas calles del mercado, sus botas modernas chocando con el suelo de piedra en un ritmo constante. Aunque su capa con capucha la cubría, ocultando la mayor parte de su figura, no podía evitar llamar la atención con cada paso que daba. Los colores vibrantes y el diseño ajustado de su ropa bajo la capa contrastaban marcadamente con las prendas simples y holgadas de los aldeanos que la rodeaban. Sin embargo, el bullicio del mercado la mantenía en el anonimato, permitiéndole disfrutar de su entorno sin ser reconocida.- -Sus ojos se movían de un lado a otro, fascinados por los detalles de los puestos de mercado. Frutas y verduras frescas se apilaban en pirámides perfectas, sus colores brillantes resaltando bajo la luz del sol. Los artesanos ofrecían joyas finamente trabajadas, tallas en madera y utensilios de metal, todos exhibidos con orgullo en mesas robustas de madera. Los aromas de especias exóticas y alimentos cocinados al momento le llenaban los sentidos- "Esto es asombroso..." -murmuró para sí misma, sus palabras casi perdidas en el bullicio de la multitud. Cada pequeño detalle del mercado parecía transportarla a otro mundo, uno que solo había soñado en su juventud.- -Una sonrisa traviesa se formó en su rostro mientras imaginaba una escena distinta a la que solía vivir.- (Imagina Star... Aquí podrías ser la princesa en apuros, esperando a que un valiente caballero venga a rescatarte...) -Su risa suave resonó bajo la capucha mientras se perdía en su fantasía- "Pero no soy una simple princesa... Sería la princesa más intrigante de todas, una que guarda una trágica historia, poderes ocultos y además que es una demonio, pero ¿Quien sospecharía? Con mis cuernos y cola ocultos soy solo una mas entre toda esta gente~ Aun que tal vez deberia comprar ropa a corde a la epoca~~ ¡Kya! ¡Vestidos largo y hermosos!) -Su sonrisa se amplió mientras miraba a los guardias que patrullaban el mercado, sus armaduras brillando al sol. Los hombres, altos y fuertes, parecían sacados directamente de un cuento de hadas. Star no pudo evitar fantasear con la idea de ser rescatada por uno de ellos, aunque sabía muy bien que, en realidad, era ella quien solía salvar a otros.- (Quizás podría dejar que uno de ellos intente rescatarme... solo para ver cómo se desenvolverían las cosas) - bromeó en su mente, divertida por la idea. Pero claro en el fondo sabía bastante bien que no sería correcto causar problemas en un mundo que no es el suyo-
    Me gusta
    Me encocora
    6
    17 turnos 0 maullidos 1029 vistas
  • estubo muy divertida la pelea con el chico lindo!
    -dijo soltando una pequeña risa-
    lo malo? mi ropa se arruino, ahhh! que horror

    https://youtu.be/WF5jIb_ioKs?si=JVKQnYZ9DiqA7BmZ
    estubo muy divertida la pelea con el chico lindo! -dijo soltando una pequeña risa- lo malo? mi ropa se arruino, ahhh! que horror https://youtu.be/WF5jIb_ioKs?si=JVKQnYZ9DiqA7BmZ
    Me gusta
    3
    0 turnos 0 maullidos 305 vistas
  • Un día en la playa
    Fandom Original.
    Categoría Original
    Agatha decidió irse de viaje, hacer una escapada a alguna playa paradisiaca. Olvidándose de todos los problemas que había en su casa. Así no iba a escuchar a su padre protestar sobre su Escuela de Karate y de su alumnado. Siempre rodaba los ojos al escuchar sus protestas. Ella se fue a vivir con su padre tras el fallecimiento de su madre, fue un cambio muy radical. No estaba acostumbrada a las normas tan estrictas de su padre, además él quería que practicará Karate pero no le atraía.

    Se escapó de la casa tomando algunas prendas, unos vaqueros, algún que otro vestido, pijamas y trajes de baño. Esbozando una sonrisa ya que tomó prestada la tarjeta de su padre. - Bien, ahora a divertirme. - Comentó mientras ponía sobre su hombro la mochila.

    Miró hacia los lados para no ser descubierta por algún que otro alumno que le estuviera haciendo la pelota a su padre y fuera con el cotilleo. -Bien no hay alumnado por la costa - Comentó con una sonrisa divertida para salir corriendo de la casa, bajo el manto de la noche.

    Se subió al primer autobús que fuera a la playa. Llegando al destino, se metió en un hotel que habia cerca de la playa donde pasó el resto de la noche. A la mañana siguiente, se fue a la playa tras ponerse su bikini de dos colores para tumbarse en una de las tumbonas. - Mmmmm que bien....que paz....no tengo que escuchar los gritos ni ir vestida de Karateca.....- Dijo acomodandose, sintiendose observada.
    Agatha decidió irse de viaje, hacer una escapada a alguna playa paradisiaca. Olvidándose de todos los problemas que había en su casa. Así no iba a escuchar a su padre protestar sobre su Escuela de Karate y de su alumnado. Siempre rodaba los ojos al escuchar sus protestas. Ella se fue a vivir con su padre tras el fallecimiento de su madre, fue un cambio muy radical. No estaba acostumbrada a las normas tan estrictas de su padre, además él quería que practicará Karate pero no le atraía. Se escapó de la casa tomando algunas prendas, unos vaqueros, algún que otro vestido, pijamas y trajes de baño. Esbozando una sonrisa ya que tomó prestada la tarjeta de su padre. - Bien, ahora a divertirme. - Comentó mientras ponía sobre su hombro la mochila. Miró hacia los lados para no ser descubierta por algún que otro alumno que le estuviera haciendo la pelota a su padre y fuera con el cotilleo. -Bien no hay alumnado por la costa - Comentó con una sonrisa divertida para salir corriendo de la casa, bajo el manto de la noche. Se subió al primer autobús que fuera a la playa. Llegando al destino, se metió en un hotel que habia cerca de la playa donde pasó el resto de la noche. A la mañana siguiente, se fue a la playa tras ponerse su bikini de dos colores para tumbarse en una de las tumbonas. - Mmmmm que bien....que paz....no tengo que escuchar los gritos ni ir vestida de Karateca.....- Dijo acomodandose, sintiendose observada.
    Tipo
    Individual
    Líneas
    10
    Estado
    Disponible
    Me encocora
    Me gusta
    4
    0 turnos 0 maullidos 1069 vistas
  • -Vamos, debes admitir que que te caigo bien...

    Dijo aquello de forma divertida.

    -Quita la cara de amargura...
    -Vamos, debes admitir que que te caigo bien... Dijo aquello de forma divertida. -Quita la cara de amargura...
    Me gusta
    Me encocora
    14
    8 turnos 0 maullidos 532 vistas
  • —"Me dijeron que la playa sería divertida... Yay..."
    —"Me dijeron que la playa sería divertida... Yay..."
    Me gusta
    Me encocora
    9
    1 turno 0 maullidos 278 vistas
  • ∆ No leer está publicación si no toleras el contenido fuerte ∆




    La habitación solo era ilumina por la luz que emitía la televisión pegada a la pared, proyectando al otro extremo de la habitación un par de siluetas.

    - Las desapariciones y desmebramientos de hoy en día se están haciendo más comunes de los que a la gente le gustaría. La policía sigue tratando de encontrar al responsables pero no se sabe de este criminal más que
    su gusto por quitarle a sus víctimas ojos, corazón e hígado, las víctimas van desde personas mayores hasta niños de menos de cuatro años... -

    La reportera hacia su anuncio nocturno sobre la situación tan horrible que pasaba.

    En el sillón de la sala habían dos siluetas sentadas mirando la televisión, aún que ninguna se movía mientras a sus pies habían otras dos, una tirada en el suelo y otra sentada en el piso alfombrado.

    Pasó entre mis dedos un cuchillo que brilla con el resplandor del televisión.

    Estaba tan aburrida. Aún que matar se hacía más difícil cada vez perdía más esa emoción de euforia. Esto era igual a cuando un adicto se vuelve resistente a su droga favorita. mñMe sentía hueca, el sentimiento de vacío eterno que me perseguía ahora se aferraba con todo a mi, suspirado aún lado de mi oído.

    Suelto un quejido fastidiada antes de clavar el cuchillo a un lado mío y oevmtarme del suelo con peresa.

    - Que aburrimiento, ya no importa cuánto haga ya me sé de memoria todas sus expresiones ¿Es que no pueden hacer esto más emocionante? -

    Volteo a ver a mi espaldas viendo a la mujer y a al hombre que tenían amordazados y atados en el sillón.

    Los cables estaban atadaso en sus muñecas brazos, rodillas y tobillos para evitar que se moviran, sus bocas eran cubiertas por cinta gris para que no pudieran gritar. Respiraban erráticamente mientras me miraban aterrorizados y dolidos.

    Me hagacho y saco el cuchillo de la espalda del joven chico que ya hacía muerto, con la grimas en la cara y sangre brotando de su boca, su mirada perdida y vacía revelaban que ya tenía un rato muerto así como la sangre oscura que mancha la alfombra.

    Entre movimientos perezosos de muñeca apuntó el cuchillo entre uno y otro mientras los miro desanimada.

    - Mari de do pingue ¿A quien mataré primero? ¿A mamá o a papá? -

    Dijo pasando mis ojos de uno a otro junto al cuchillo antes de centrarme sobre el regazo del señor.

    - Hmmmm -

    Ronroneo mirándolo a los ojos mientras deslizó la hoga del cuchillo muy peligrosamente sobre la piel sudada de su cuello.

    Con mi mano libre le tomo de los cabellos de atras y tiro de su cabeza para verlo mejor antes de ir enterrando muy lentamente la punta en su cuello.

    Sus gritos eran ahogados por la cinta mientras un fino hilo de sangre escurre de la herida que le provocaba hasta que me detengo.

    Para contemplar esa expresión tan patética que tenía.

    - Aburres -

    Le dijo tajante antes de soltar su cabeza y quitar de un tirón el cuchillo, no había perforando lo suficientemente como para matarlo pero si para dejar que se desangrara tortuosamente lento.

    La mujer grito por la herida que había provocado a su esposo mientras sus mejillas se llenaban de lágrimas.

    Volteo los ojos hacia ella y me cambio a su regazo para ahora examinarla.

    - Tampoco eres divertida -

    Le habló decepcionada antes de acercar el cuchillo a su cara justo a un lado de su oreja.

    - Pero creo que puedo solucionar eso -

    Cambio mi tono a uno expectante antes de comenzar a cortar su rostro con mucho cuidado estado de fondo del noticiero y los hornos de su esposo que veía horrorizado como iba quitando la piel de la cara de su esposa hasta que está dejo de gritar de dolor y su cuerpo quedó completamente flácido, como una marioneta de cuerdas sin cuerdas.

    Con cuidado termino de quitar su cara del cuerpo y la la piel curiosa antes de darle la vuelta para ver las venas que habían en la piel resaltando por la tenue luz de fondo.

    Mi mano comenzaba a cubrirse con su sangre mientras el sillón se empapaba en un húmedo charco rojo que se deslizaba hasta la alfombra.

    Si que sangraba está mujer.

    Pongo su cara sombre la mía reteniéndola de los lado antes de guiarme al hombre y para verlo con la piel de su mujer. El espacio de los ojos estaba estirada mientras el de la boca cauida en una muñeca que se podría decir de tristeza.

    - ¿Te parezco más bonita ahora? -

    Mi voz es amortiguada por la piel para d spues despegarme de ella dejando mi rostro lleno de sangre.

    - ¿O me veo mejor así? -

    Le sonrió en burla ante mi broma tan bizarra, a lo que el hombre trata de decir algo sin lograrse terminar de entender a su vez que luchaba contra el sueño de la muerte.

    - Tranquilo en un momento arreglaré todo este dezatre -

    Le dijo con casualidad antes de clavar el cuchillo en su pecho hasta que el mango medio se india en su piel.

    - Ahora muerte ¿Si? -

    Inclinó la cabeza a su vez que le sonrió para justo después bajar de un tirón, rompiendo su hueso torácico y órganos antes de que estos salieran de su cuerpo ante la falta de soporte.

    La sonrisa en mi rostro se borra y regresa el aburrimiento mientras saco el cuchillo y tomos los intestinos del hombre para ponerlos sobre mi cuello como una bufanda antes de darme la vuelta y acercarme al televisor.

    - Mañana nos volveremos a ver... Señorita reportera -

    Hablo al aire antes de apagar el televisor.

    #Historia #Oc #Gore #Original #Violencia #+18
    ∆ No leer está publicación si no toleras el contenido fuerte ∆ La habitación solo era ilumina por la luz que emitía la televisión pegada a la pared, proyectando al otro extremo de la habitación un par de siluetas. - Las desapariciones y desmebramientos de hoy en día se están haciendo más comunes de los que a la gente le gustaría. La policía sigue tratando de encontrar al responsables pero no se sabe de este criminal más que su gusto por quitarle a sus víctimas ojos, corazón e hígado, las víctimas van desde personas mayores hasta niños de menos de cuatro años... - La reportera hacia su anuncio nocturno sobre la situación tan horrible que pasaba. En el sillón de la sala habían dos siluetas sentadas mirando la televisión, aún que ninguna se movía mientras a sus pies habían otras dos, una tirada en el suelo y otra sentada en el piso alfombrado. Pasó entre mis dedos un cuchillo que brilla con el resplandor del televisión. Estaba tan aburrida. Aún que matar se hacía más difícil cada vez perdía más esa emoción de euforia. Esto era igual a cuando un adicto se vuelve resistente a su droga favorita. mñMe sentía hueca, el sentimiento de vacío eterno que me perseguía ahora se aferraba con todo a mi, suspirado aún lado de mi oído. Suelto un quejido fastidiada antes de clavar el cuchillo a un lado mío y oevmtarme del suelo con peresa. - Que aburrimiento, ya no importa cuánto haga ya me sé de memoria todas sus expresiones ¿Es que no pueden hacer esto más emocionante? - Volteo a ver a mi espaldas viendo a la mujer y a al hombre que tenían amordazados y atados en el sillón. Los cables estaban atadaso en sus muñecas brazos, rodillas y tobillos para evitar que se moviran, sus bocas eran cubiertas por cinta gris para que no pudieran gritar. Respiraban erráticamente mientras me miraban aterrorizados y dolidos. Me hagacho y saco el cuchillo de la espalda del joven chico que ya hacía muerto, con la grimas en la cara y sangre brotando de su boca, su mirada perdida y vacía revelaban que ya tenía un rato muerto así como la sangre oscura que mancha la alfombra. Entre movimientos perezosos de muñeca apuntó el cuchillo entre uno y otro mientras los miro desanimada. - Mari de do pingue ¿A quien mataré primero? ¿A mamá o a papá? - Dijo pasando mis ojos de uno a otro junto al cuchillo antes de centrarme sobre el regazo del señor. - Hmmmm - Ronroneo mirándolo a los ojos mientras deslizó la hoga del cuchillo muy peligrosamente sobre la piel sudada de su cuello. Con mi mano libre le tomo de los cabellos de atras y tiro de su cabeza para verlo mejor antes de ir enterrando muy lentamente la punta en su cuello. Sus gritos eran ahogados por la cinta mientras un fino hilo de sangre escurre de la herida que le provocaba hasta que me detengo. Para contemplar esa expresión tan patética que tenía. - Aburres - Le dijo tajante antes de soltar su cabeza y quitar de un tirón el cuchillo, no había perforando lo suficientemente como para matarlo pero si para dejar que se desangrara tortuosamente lento. La mujer grito por la herida que había provocado a su esposo mientras sus mejillas se llenaban de lágrimas. Volteo los ojos hacia ella y me cambio a su regazo para ahora examinarla. - Tampoco eres divertida - Le habló decepcionada antes de acercar el cuchillo a su cara justo a un lado de su oreja. - Pero creo que puedo solucionar eso - Cambio mi tono a uno expectante antes de comenzar a cortar su rostro con mucho cuidado estado de fondo del noticiero y los hornos de su esposo que veía horrorizado como iba quitando la piel de la cara de su esposa hasta que está dejo de gritar de dolor y su cuerpo quedó completamente flácido, como una marioneta de cuerdas sin cuerdas. Con cuidado termino de quitar su cara del cuerpo y la la piel curiosa antes de darle la vuelta para ver las venas que habían en la piel resaltando por la tenue luz de fondo. Mi mano comenzaba a cubrirse con su sangre mientras el sillón se empapaba en un húmedo charco rojo que se deslizaba hasta la alfombra. Si que sangraba está mujer. Pongo su cara sombre la mía reteniéndola de los lado antes de guiarme al hombre y para verlo con la piel de su mujer. El espacio de los ojos estaba estirada mientras el de la boca cauida en una muñeca que se podría decir de tristeza. - ¿Te parezco más bonita ahora? - Mi voz es amortiguada por la piel para d spues despegarme de ella dejando mi rostro lleno de sangre. - ¿O me veo mejor así? - Le sonrió en burla ante mi broma tan bizarra, a lo que el hombre trata de decir algo sin lograrse terminar de entender a su vez que luchaba contra el sueño de la muerte. - Tranquilo en un momento arreglaré todo este dezatre - Le dijo con casualidad antes de clavar el cuchillo en su pecho hasta que el mango medio se india en su piel. - Ahora muerte ¿Si? - Inclinó la cabeza a su vez que le sonrió para justo después bajar de un tirón, rompiendo su hueso torácico y órganos antes de que estos salieran de su cuerpo ante la falta de soporte. La sonrisa en mi rostro se borra y regresa el aburrimiento mientras saco el cuchillo y tomos los intestinos del hombre para ponerlos sobre mi cuello como una bufanda antes de darme la vuelta y acercarme al televisor. - Mañana nos volveremos a ver... Señorita reportera - Hablo al aire antes de apagar el televisor. #Historia #Oc #Gore #Original #Violencia #+18
    Me gusta
    Me encocora
    Me endiabla
    Me shockea
    9
    0 turnos 0 maullidos 630 vistas
Ver más resultados
Patrocinados