-Diferente a otras veces, esta ves las aventuras de la demonio acontecian en un mercado que parecía ser de estilo medieval o renacentista. Los edificios son de estilo gótico, con techos altos de tejas rojas, fachadas ornamentadas, y grandes ventanales con vitrales decorativos. Los comerciantes exhiben sus productos en mesas de madera, y los transeúntes, vestidos con ropas tradicionales de la época, pasean mientras observan los artículos a la venta. Hay una mezcla de figuras, lo que sugiere un lugar frecuentado tanto por aldeanos comunes como por aventureros.-
-El ambiente es bullicioso pero acogedor, con la luz del día iluminando la escena y reflejando un día claro. Se puede sentir la historia en el aire, como si cada rincón de este mercado tuviera una historia que contar, mientras los sonidos de conversaciones y el aroma de especias y comida llenan el aire. Es un lugar donde se mezclan las vidas de diversos personajes en una comunidad vibrante y llena de vida.-
-Star caminaba lentamente por las adoquinadas calles del mercado, sus botas modernas chocando con el suelo de piedra en un ritmo constante. Aunque su capa con capucha la cubría, ocultando la mayor parte de su figura, no podía evitar llamar la atención con cada paso que daba. Los colores vibrantes y el diseño ajustado de su ropa bajo la capa contrastaban marcadamente con las prendas simples y holgadas de los aldeanos que la rodeaban. Sin embargo, el bullicio del mercado la mantenía en el anonimato, permitiéndole disfrutar de su entorno sin ser reconocida.-
-Sus ojos se movían de un lado a otro, fascinados por los detalles de los puestos de mercado. Frutas y verduras frescas se apilaban en pirámides perfectas, sus colores brillantes resaltando bajo la luz del sol. Los artesanos ofrecían joyas finamente trabajadas, tallas en madera y utensilios de metal, todos exhibidos con orgullo en mesas robustas de madera. Los aromas de especias exóticas y alimentos cocinados al momento le llenaban los sentidos-
"Esto es asombroso..."
-murmuró para sí misma, sus palabras casi perdidas en el bullicio de la multitud. Cada pequeño detalle del mercado parecía transportarla a otro mundo, uno que solo había soñado en su juventud.-
-Una sonrisa traviesa se formó en su rostro mientras imaginaba una escena distinta a la que solía vivir.-
(Imagina Star... Aquí podrías ser la princesa en apuros, esperando a que un valiente caballero venga a rescatarte...)
-Su risa suave resonó bajo la capucha mientras se perdía en su fantasía-
"Pero no soy una simple princesa... Sería la princesa más intrigante de todas, una que guarda una trágica historia, poderes ocultos y además que es una demonio, pero ¿Quien sospecharía? Con mis cuernos y cola ocultos soy solo una mas entre toda esta gente~ Aun que tal vez deberia comprar ropa a corde a la epoca~~ ¡Kya! ¡Vestidos largo y hermosos!)
-Su sonrisa se amplió mientras miraba a los guardias que patrullaban el mercado, sus armaduras brillando al sol. Los hombres, altos y fuertes, parecían sacados directamente de un cuento de hadas. Star no pudo evitar fantasear con la idea de ser rescatada por uno de ellos, aunque sabía muy bien que, en realidad, era ella quien solía salvar a otros.-
(Quizás podría dejar que uno de ellos intente rescatarme... solo para ver cómo se desenvolverían las cosas)
- bromeó en su mente, divertida por la idea. Pero claro en el fondo sabía bastante bien que no sería correcto causar problemas en un mundo que no es el suyo-
-El ambiente es bullicioso pero acogedor, con la luz del día iluminando la escena y reflejando un día claro. Se puede sentir la historia en el aire, como si cada rincón de este mercado tuviera una historia que contar, mientras los sonidos de conversaciones y el aroma de especias y comida llenan el aire. Es un lugar donde se mezclan las vidas de diversos personajes en una comunidad vibrante y llena de vida.-
-Star caminaba lentamente por las adoquinadas calles del mercado, sus botas modernas chocando con el suelo de piedra en un ritmo constante. Aunque su capa con capucha la cubría, ocultando la mayor parte de su figura, no podía evitar llamar la atención con cada paso que daba. Los colores vibrantes y el diseño ajustado de su ropa bajo la capa contrastaban marcadamente con las prendas simples y holgadas de los aldeanos que la rodeaban. Sin embargo, el bullicio del mercado la mantenía en el anonimato, permitiéndole disfrutar de su entorno sin ser reconocida.-
-Sus ojos se movían de un lado a otro, fascinados por los detalles de los puestos de mercado. Frutas y verduras frescas se apilaban en pirámides perfectas, sus colores brillantes resaltando bajo la luz del sol. Los artesanos ofrecían joyas finamente trabajadas, tallas en madera y utensilios de metal, todos exhibidos con orgullo en mesas robustas de madera. Los aromas de especias exóticas y alimentos cocinados al momento le llenaban los sentidos-
"Esto es asombroso..."
-murmuró para sí misma, sus palabras casi perdidas en el bullicio de la multitud. Cada pequeño detalle del mercado parecía transportarla a otro mundo, uno que solo había soñado en su juventud.-
-Una sonrisa traviesa se formó en su rostro mientras imaginaba una escena distinta a la que solía vivir.-
(Imagina Star... Aquí podrías ser la princesa en apuros, esperando a que un valiente caballero venga a rescatarte...)
-Su risa suave resonó bajo la capucha mientras se perdía en su fantasía-
"Pero no soy una simple princesa... Sería la princesa más intrigante de todas, una que guarda una trágica historia, poderes ocultos y además que es una demonio, pero ¿Quien sospecharía? Con mis cuernos y cola ocultos soy solo una mas entre toda esta gente~ Aun que tal vez deberia comprar ropa a corde a la epoca~~ ¡Kya! ¡Vestidos largo y hermosos!)
-Su sonrisa se amplió mientras miraba a los guardias que patrullaban el mercado, sus armaduras brillando al sol. Los hombres, altos y fuertes, parecían sacados directamente de un cuento de hadas. Star no pudo evitar fantasear con la idea de ser rescatada por uno de ellos, aunque sabía muy bien que, en realidad, era ella quien solía salvar a otros.-
(Quizás podría dejar que uno de ellos intente rescatarme... solo para ver cómo se desenvolverían las cosas)
- bromeó en su mente, divertida por la idea. Pero claro en el fondo sabía bastante bien que no sería correcto causar problemas en un mundo que no es el suyo-
-Diferente a otras veces, esta ves las aventuras de la demonio acontecian en un mercado que parecía ser de estilo medieval o renacentista. Los edificios son de estilo gótico, con techos altos de tejas rojas, fachadas ornamentadas, y grandes ventanales con vitrales decorativos. Los comerciantes exhiben sus productos en mesas de madera, y los transeúntes, vestidos con ropas tradicionales de la época, pasean mientras observan los artículos a la venta. Hay una mezcla de figuras, lo que sugiere un lugar frecuentado tanto por aldeanos comunes como por aventureros.-
-El ambiente es bullicioso pero acogedor, con la luz del día iluminando la escena y reflejando un día claro. Se puede sentir la historia en el aire, como si cada rincón de este mercado tuviera una historia que contar, mientras los sonidos de conversaciones y el aroma de especias y comida llenan el aire. Es un lugar donde se mezclan las vidas de diversos personajes en una comunidad vibrante y llena de vida.-
-Star caminaba lentamente por las adoquinadas calles del mercado, sus botas modernas chocando con el suelo de piedra en un ritmo constante. Aunque su capa con capucha la cubría, ocultando la mayor parte de su figura, no podía evitar llamar la atención con cada paso que daba. Los colores vibrantes y el diseño ajustado de su ropa bajo la capa contrastaban marcadamente con las prendas simples y holgadas de los aldeanos que la rodeaban. Sin embargo, el bullicio del mercado la mantenía en el anonimato, permitiéndole disfrutar de su entorno sin ser reconocida.-
-Sus ojos se movían de un lado a otro, fascinados por los detalles de los puestos de mercado. Frutas y verduras frescas se apilaban en pirámides perfectas, sus colores brillantes resaltando bajo la luz del sol. Los artesanos ofrecían joyas finamente trabajadas, tallas en madera y utensilios de metal, todos exhibidos con orgullo en mesas robustas de madera. Los aromas de especias exóticas y alimentos cocinados al momento le llenaban los sentidos-
"Esto es asombroso..."
-murmuró para sí misma, sus palabras casi perdidas en el bullicio de la multitud. Cada pequeño detalle del mercado parecía transportarla a otro mundo, uno que solo había soñado en su juventud.-
-Una sonrisa traviesa se formó en su rostro mientras imaginaba una escena distinta a la que solía vivir.-
(Imagina Star... Aquí podrías ser la princesa en apuros, esperando a que un valiente caballero venga a rescatarte...)
-Su risa suave resonó bajo la capucha mientras se perdía en su fantasía-
"Pero no soy una simple princesa... Sería la princesa más intrigante de todas, una que guarda una trágica historia, poderes ocultos y además que es una demonio, pero ¿Quien sospecharía? Con mis cuernos y cola ocultos soy solo una mas entre toda esta gente~ Aun que tal vez deberia comprar ropa a corde a la epoca~~ ¡Kya! ¡Vestidos largo y hermosos!)
-Su sonrisa se amplió mientras miraba a los guardias que patrullaban el mercado, sus armaduras brillando al sol. Los hombres, altos y fuertes, parecían sacados directamente de un cuento de hadas. Star no pudo evitar fantasear con la idea de ser rescatada por uno de ellos, aunque sabía muy bien que, en realidad, era ella quien solía salvar a otros.-
(Quizás podría dejar que uno de ellos intente rescatarme... solo para ver cómo se desenvolverían las cosas)
- bromeó en su mente, divertida por la idea. Pero claro en el fondo sabía bastante bien que no sería correcto causar problemas en un mundo que no es el suyo-