·!¦[· De Vuelta a Casa (2da parte) ·]¦!·
— ¿Qué nos has traído?
— Conciencias menores.
— Más vale que no se trate de una broma.
— No estamos aquí para discutir el valor de las conciencias menores, ¿No es así?
— Ya está claro que las conciencias menores no nos sirven, ¿Por qué nos has reunido?
— Los he reunido porque quiero que entiendan algo importante. Estas conciencias menores han muerto hace poco a causa de un desequilibrio emocional.
— Eso es normal...
— ¡Shh! Déjale terminar.
— El desequilibrio emocional del que les hablo no se dio en estas conciencias. No fue un suicidio, fue una consecuencia de otra entidad. No hablo de asesinato.
— Ya me lo temía...
— No. No hablo de asesinato. Hablo de una consecuencia más parecida a alguna clase de simbiosis.
— ¿Han muerto por causa del desequilibrio de alguien más?
— ¿Y sin que se trate de asesinato ni suicidio? ¿No han muerto por su propia voluntad?
— ¿Ni porque fuera su hora?
— Han muerto como consecuencia directa.
— ¿Cómo es posible? Ninguna conciencia puede morir si no es por sí misma.
— Estas sí. Y es lo que quiero que comprendamos. Estas conciencias, independientes en sí mismas, habitaban en la dimensión personal de la Eterna del caos quien ha estado muy molesta últimamente, de ahí pasó a estar deprimida y, como consecuencia, aquí están las conciencias de sus criaturas. Muertas en conflicto.
— ¡Eternos haciendo de las suyas!
— Esto cambiará muchas cosas...
— Tendremos que analizar mejor este suceso.
— ¿Qué pasará cuando las conciencias sean absorbidas por la voluntad de los Eternos?
— Eso no volverá a pasar... ¿Cierto?
— ¡Las conciencias ya son libres!
— Ella es la Eterna del caos, el caos no tiene límites ni leyes. No podemos ir a prohibirle que cree lo que se le de la gana en su propia dimensión.
— ¿Por qué necesita una dimensión?
— Todos los Eternos la necesitan.
— Cierto.
— Será un costo alto para las conciencias de la creación.
— Todo cambio es bienvenido.
— Pero la esclavitud de las conciencias es algo que ya sucedió antes.
— ¿Volverá a suceder?
— No se sabe.
— La Eterna del caos está pasando por un ciclo de desequilibrio de sus emociones. Ella está aprendiendo... al igual que yo.
— ¡Imposible! ¿Qué será del todo si hasta los Eternos se infectan de los sentimientos?
— Sobrevendrá el caos...
·!¦[· De Vuelta a Casa (2da parte) ·]¦!·
— ¿Qué nos has traído?
— Conciencias menores.
— Más vale que no se trate de una broma.
— No estamos aquí para discutir el valor de las conciencias menores, ¿No es así?
— Ya está claro que las conciencias menores no nos sirven, ¿Por qué nos has reunido?
— Los he reunido porque quiero que entiendan algo importante. Estas conciencias menores han muerto hace poco a causa de un desequilibrio emocional.
— Eso es normal...
— ¡Shh! Déjale terminar.
— El desequilibrio emocional del que les hablo no se dio en estas conciencias. No fue un suicidio, fue una consecuencia de otra entidad. No hablo de asesinato.
— Ya me lo temía...
— No. No hablo de asesinato. Hablo de una consecuencia más parecida a alguna clase de simbiosis.
— ¿Han muerto por causa del desequilibrio de alguien más?
— ¿Y sin que se trate de asesinato ni suicidio? ¿No han muerto por su propia voluntad?
— ¿Ni porque fuera su hora?
— Han muerto como consecuencia directa.
— ¿Cómo es posible? Ninguna conciencia puede morir si no es por sí misma.
— Estas sí. Y es lo que quiero que comprendamos. Estas conciencias, independientes en sí mismas, habitaban en la dimensión personal de la Eterna del caos quien ha estado muy molesta últimamente, de ahí pasó a estar deprimida y, como consecuencia, aquí están las conciencias de sus criaturas. Muertas en conflicto.
— ¡Eternos haciendo de las suyas!
— Esto cambiará muchas cosas...
— Tendremos que analizar mejor este suceso.
— ¿Qué pasará cuando las conciencias sean absorbidas por la voluntad de los Eternos?
— Eso no volverá a pasar... ¿Cierto?
— ¡Las conciencias ya son libres!
— Ella es la Eterna del caos, el caos no tiene límites ni leyes. No podemos ir a prohibirle que cree lo que se le de la gana en su propia dimensión.
— ¿Por qué necesita una dimensión?
— Todos los Eternos la necesitan.
— Cierto.
— Será un costo alto para las conciencias de la creación.
— Todo cambio es bienvenido.
— Pero la esclavitud de las conciencias es algo que ya sucedió antes.
— ¿Volverá a suceder?
— No se sabe.
— La Eterna del caos está pasando por un ciclo de desequilibrio de sus emociones. Ella está aprendiendo... al igual que yo.
— ¡Imposible! ¿Qué será del todo si hasta los Eternos se infectan de los sentimientos?
— Sobrevendrá el caos...