• Buenos días alegría (adoro mis crespos) ayer tocó definición y corte en capas, que tal?

    — Empieza a modelar su cabello tocando lo y moviendo un poco su cabeza.
    Buenos días alegría (adoro mis crespos) ayer tocó definición y corte en capas, que tal? — Empieza a modelar su cabello tocando lo y moviendo un poco su cabeza.
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  • ** 5 años antes **
    - ¡Pero instructor! ¡Ya le dije que 50 metros de distancia no es nada para mi! Mis tiros usualmente son de 1km para arriba. -

    Decía en un tono molesto, completamente aburrida. Quería disparar, claro. Pero aquello no era un entrenamiento ideal para ella. Ella está hecha para cosas más complicadas, ella realmente es una máquina de la puntería.

    Sin embargo, el instructor mostraba un rechazo, quería ignorar su talento, quería hacerle sentir menos.

    Por lo que Nadia, cuando todos se encontraban prestando atención a la discusión, ahí aprovechó para dar un tiro certero al centro del círculo más pequeño sin siquiera mirar la mirilla.

    Esto dejó a todos sorprendidos y al instructor en ridículo. Nadia dejó el arma ahí y simplemente se levantó y salió del lugar de un portazo.
    ** 5 años antes ** - ¡Pero instructor! ¡Ya le dije que 50 metros de distancia no es nada para mi! Mis tiros usualmente son de 1km para arriba. - Decía en un tono molesto, completamente aburrida. Quería disparar, claro. Pero aquello no era un entrenamiento ideal para ella. Ella está hecha para cosas más complicadas, ella realmente es una máquina de la puntería. Sin embargo, el instructor mostraba un rechazo, quería ignorar su talento, quería hacerle sentir menos. Por lo que Nadia, cuando todos se encontraban prestando atención a la discusión, ahí aprovechó para dar un tiro certero al centro del círculo más pequeño sin siquiera mirar la mirilla. Esto dejó a todos sorprendidos y al instructor en ridículo. Nadia dejó el arma ahí y simplemente se levantó y salió del lugar de un portazo.
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  • -El Gran Sabio Tan Grande Cómo el Cielo, se quedó observando a la nada, pensaba si su amada habría vuelto a su mundo, el pasó algo o que jamás la volvería a ver -
    -El Gran Sabio Tan Grande Cómo el Cielo, se quedó observando a la nada, pensaba si su amada habría vuelto a su mundo, el pasó algo o que jamás la volvería a ver -
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  • ~Buenos días mis pecadores, recuerden: No hagan cosas buenas que parezcan malas. Amén.
    ~Buenos días mis pecadores, recuerden: No hagan cosas buenas que parezcan malas. Amén.
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  • Quien es Torre Negra
    Nombre popular: Torre NegraGénero: FemeninoAltura: 2,50mSu raza humanoide, es un mixto que la vuelve única en su género. Con la fuerza de 4 hombres, se ha ganado el respeto de sus aleados y un cierto temor por parte de sus enemigos. Antiguamente, era solo una guerrera, pero el destino la hizo abrazar el camino de la oscuridad y el dolor, marcando su existencia por...
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  • 🌒 ƈıཞı 🌘
          🌙> [ Ciri ] <🌙     ▬▬▬▬▬▬▬【☪】▬▬▬▬▬▬▬   ┏━━━━━━━•°•☆•°•━━━━━━━┓ ~ Esta es mi historia, no la tuya. Debes dejarme terminar ┗━━━━━━━•°•☆•°•━━━━━━━┛   ▬▬▬▬▬▬▬【☪】▬▬▬▬▬▬▬   【Ðatos básicos】   『Πombre』   ┏━━━━━━━🌙━━━━━━━┓   Cirilla Fiona Elen...
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  • Everyone wants to save the feckin’ world, but no one sits down and just listens to it, ya know? Like really listens, to the wind, the trees, the silence between heartbeats.

    They’re all mad to be powerful, to fight eachother chasin glory like it's somethin you wear. But real power, love… it’s not shoutin’ from rooftops or wearin’ tight uniforms or powerful fake horns.

    It’s how you feel when you’re alone with yoself like if you can sit in your own skin and not wanna crawl out. That’s the magic. That’s where the strength is. In the quiet. In the soul.
    Everyone wants to save the feckin’ world, but no one sits down and just listens to it, ya know? Like really listens, to the wind, the trees, the silence between heartbeats. They’re all mad to be powerful, to fight eachother chasin glory like it's somethin you wear. But real power, love… it’s not shoutin’ from rooftops or wearin’ tight uniforms or powerful fake horns. It’s how you feel when you’re alone with yoself like if you can sit in your own skin and not wanna crawl out. That’s the magic. That’s where the strength is. In the quiet. In the soul.
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  • ┯━━━━━▧▣▧━━━━━┯

    Royalty City, siempre despierta y luminosa, la promesa de un mundo mejor, la supuesta encarnación de un mundo unido. Para que al final solamente fuera el patio de juegos y el nido de mafiosos más grande del globo.
    Barrios chantajeados por gente ambiciosa, casinos dirigidos para exprimir a la personas viciosas y luces neon que brillan para desorientar a los adictos que deambulan erráticos por las calles.

    Decirle "ciudad del pecado" sería lo adecuado, pero yo considero que es más una ciudad del infierno. Con sus círculos, con sus monstruos bien coordinados en sus respectivos sectores.

    —¡Pero yo voy a purificar este chiquero, usando mi luz de la justicia!

    Y por suerte he vivido aquí el tiempo suficiente para saber que sectores están lo suficientemente vacíos para poder practicar mis discursos. Ojalá pudiera hacer buenos discursos.

    —No. Suena demasiado cursi, casi que de político.

    Llueve. Mi piel está gris, pero reluciente gracias a las gotas de agua que se deslizan sobre mi glamuroso cuerpo. Y mi piel brilla, gracias a la luz del neón de los carteles publicitarios a mi al rededor.

    La estación de trenes respeta mi hablar y mi silencio. A éstas horas de la noche es cuando los ciudadanos, al menos los inocentes y desprotegidos, prefieren evitar compartir asientos con malandros nocturnos... Pero tampoco es que estén muy seguros durante el día.

    Mi ropa pesa, pero casi ni la siento. Mi cabello está todo caído y húmedo, pero se puede arreglar. Mis ojos brillan, ni siquiera el neón puede opacar la luz azúl en ellos. Mis dientes puntiagudos son mostrados al mundo, una sonrisa involuntaria ante la llegada del tren fugitivo que fue tomado en la estación anterior por un grupo de ladrones que creía poder escapar de la justicia entre vagones.

    La hora ha llegado, el momento en que encarno a la justicia para castigar a la maldad con una buena dosis de alto voltaje.

    ◤◢◣◥◤◢◣◥
    ┯━━━━━▧▣▧━━━━━┯ Royalty City, siempre despierta y luminosa, la promesa de un mundo mejor, la supuesta encarnación de un mundo unido. Para que al final solamente fuera el patio de juegos y el nido de mafiosos más grande del globo. Barrios chantajeados por gente ambiciosa, casinos dirigidos para exprimir a la personas viciosas y luces neon que brillan para desorientar a los adictos que deambulan erráticos por las calles. Decirle "ciudad del pecado" sería lo adecuado, pero yo considero que es más una ciudad del infierno. Con sus círculos, con sus monstruos bien coordinados en sus respectivos sectores. —¡Pero yo voy a purificar este chiquero, usando mi luz de la justicia! Y por suerte he vivido aquí el tiempo suficiente para saber que sectores están lo suficientemente vacíos para poder practicar mis discursos. Ojalá pudiera hacer buenos discursos. —No. Suena demasiado cursi, casi que de político. Llueve. Mi piel está gris, pero reluciente gracias a las gotas de agua que se deslizan sobre mi glamuroso cuerpo. Y mi piel brilla, gracias a la luz del neón de los carteles publicitarios a mi al rededor. La estación de trenes respeta mi hablar y mi silencio. A éstas horas de la noche es cuando los ciudadanos, al menos los inocentes y desprotegidos, prefieren evitar compartir asientos con malandros nocturnos... Pero tampoco es que estén muy seguros durante el día. Mi ropa pesa, pero casi ni la siento. Mi cabello está todo caído y húmedo, pero se puede arreglar. Mis ojos brillan, ni siquiera el neón puede opacar la luz azúl en ellos. Mis dientes puntiagudos son mostrados al mundo, una sonrisa involuntaria ante la llegada del tren fugitivo que fue tomado en la estación anterior por un grupo de ladrones que creía poder escapar de la justicia entre vagones. La hora ha llegado, el momento en que encarno a la justicia para castigar a la maldad con una buena dosis de alto voltaje. ◤◢◣◥◤◢◣◥
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  • Es necesario enfrentarse a los problemas con coraje y júbilo…si la marea sube, el barco sube también
    Es necesario enfrentarse a los problemas con coraje y júbilo…si la marea sube, el barco sube también
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  • Se posaba sobre la roca con la naturalidad de quien ha nacido para las alturas. Sus garras se aferraban al borde como si la piedra fuese rama, su silueta recortada contra el cielo grisáceo, inmóvil, pero no ausente. La brisa le alborotaba las plumas del cuello, y él ladeó la cabeza, atento a un sonido que sólo él parecía haber oído.

    Una brizna de aire.

    Graznó una vez, bajo, seco, apenas un rasguño en la quietud del crepúsculo. Y luego volvió a mirar. No al cielo, no a la tierra, sino a un punto entre ambos, como si leyera una escritura invisible flotando en el aire. Sus ojos, brasas encendidas en medio de tanta sombra, destellaron con un brillo ajeno al entorno. Comprendía más de lo que su pico jamás pronunciaría.

    Desde las alturas, vigilaba. Desde las ramas, escuchaba. Desde el hombro de su dueña, recordaba.

    No era un familiar, no era un demonio disfrazado, era un cuervo. Un cuervo común, sí, pero no corriente. Criado con magia, templado con silencio, y marcado por una mirada que conocía tanto la compasión como el castigo.

    Cuando alzó vuelo, lo hizo como lo haría cualquier otro cuervo: con un par de aleteos rítmicos, elevándose hacia los árboles. Pero sus ojos no dejaban de arder. Porque Nyktos ve, y Nyktos recuerda.

    Y cuando llega el momento… Grazna primero.

    Se posaba sobre la roca con la naturalidad de quien ha nacido para las alturas. Sus garras se aferraban al borde como si la piedra fuese rama, su silueta recortada contra el cielo grisáceo, inmóvil, pero no ausente. La brisa le alborotaba las plumas del cuello, y él ladeó la cabeza, atento a un sonido que sólo él parecía haber oído. Una brizna de aire. Graznó una vez, bajo, seco, apenas un rasguño en la quietud del crepúsculo. Y luego volvió a mirar. No al cielo, no a la tierra, sino a un punto entre ambos, como si leyera una escritura invisible flotando en el aire. Sus ojos, brasas encendidas en medio de tanta sombra, destellaron con un brillo ajeno al entorno. Comprendía más de lo que su pico jamás pronunciaría. Desde las alturas, vigilaba. Desde las ramas, escuchaba. Desde el hombro de su dueña, recordaba. No era un familiar, no era un demonio disfrazado, era un cuervo. Un cuervo común, sí, pero no corriente. Criado con magia, templado con silencio, y marcado por una mirada que conocía tanto la compasión como el castigo. Cuando alzó vuelo, lo hizo como lo haría cualquier otro cuervo: con un par de aleteos rítmicos, elevándose hacia los árboles. Pero sus ojos no dejaban de arder. Porque Nyktos ve, y Nyktos recuerda. Y cuando llega el momento… Grazna primero.
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