Fyrefly Type-IV Strategic Assault Mech (AR-26710)
ᴅᴇꜱᴀꜰᴏʀᴛᴜɴᴀᴅᴀᴍᴇɴᴛᴇ ɴᴀᴄí ᴄᴏᴍᴏ ᴜɴ ᴀʀᴍᴀ, ꜱᴇʀ ᴅᴇꜱᴛʀᴜɪᴅᴀ ᴇꜱ ᴍɪ ᴅᴇꜱᴛɪɴᴏ.



【Información Básica】
Nombre
Firefly (Luciérnaga)
✦ Alias SAM (Strategic Assault Mech)
✦ Recompensa por captura (viva o muerta) 9.723 Billones de créditos
✦ Mundo de origen Glamoth
✦ Facción Cazadores de Stellarón 
Caballería de Hierro (anteriormente)

 



【Apariencia Física】



FORMA HUMANA

✦Cabello Plateado, largo y brillante, evocando un hilo de luz en la oscuridad.
✦Ojos Azules intensos, que reflejan tanto melancolía como determinación.
✦Complexión Atlética y elegante, diseñada para el combate, pero delicada.
✦Ropa Mezcla de tonos oscuros y detalles lumínicos, con piezas inspiradas en el diseño de las luciérnagas.
✦Estatura 165cm - 159cm (sin zapatos)


SAM (MECH)

 

✦ Estatura 
225cm
 Su armadura es imponente, con líneas ardientes que simbolizan el fuego de Glamoth. La armadura es una extensión de su cuerpo, y su activación crea una presencia sobrecogedora en el campo de batalla.


【Personalidad】

A simple vista, una chica humana indefensa como cualquier otra, siempre tranquila y mostrando una sonrisa en todo momento.  

En el fondo, Firefly es resistente frente a la adversidad, pero su alma está marcada por las cicatrices de la guerra. Tiene una personalidad introspectiva, siempre cuestionando su propósito y el significado de su existencia.

Su deseo de encontrar un "sueño" y entender qué significa realmente vivir la impulsa a enfrentarse a peligros que muchos evitarían.

Aunque respeta el legado de Glamoth, busca definir su identidad fuera de las sombras de la República.


Historia & Origen

Creación y Primer Despertar
Firefly fue creada como parte de un programa genético llevado a cabo por la República de Glamoth. Este programa buscaba crear soldados de élite que pudieran operar y controlar las armas más avanzadas de su civilización. Su vida comenzó en una cápsula de incubación, suspendida en un líquido sintético que mantenía su cuerpo en un estado de latencia hasta que estuviera lista para despertar.

Cuando su cápsula fue abierta, lo primero que escuchó fueron las palabras rituales de sus creadores:

“Guerreros, es hora de despertar… Por su majestad…”

La luz artificial del laboratorio bañaba su rostro mientras abría los ojos por primera vez. Su entorno era frío y calculado, lleno de tecnología brillante y ecos de las órdenes de sus supervisores. Aún sin comprender completamente el significado de estas palabras, Firefly las guardó en su memoria como un eco persistente de su propósito.

El Mundo Desolado
Tras abandonar su cápsula, Firefly se encontró en un palacio en ruinas rodeado por un vasto jardín lleno de cadáveres de insectos colosales y otras cápsulas vacías. Cada paso que daba reforzaba la sensación de que el esplendor de Glamoth había quedado atrás, reducido a un mero susurro de lo que había sido. Columnas agrietadas sostenían un techo parcialmente derrumbado, mientras una brisa helada traía consigo un olor metálico y amargo.

En el centro del palacio, encontró a la Emperatriz de Glamoth, una figura imponente envuelta en una capa carmesí que destellaba bajo la tenue luz. Sus ojos, cansados pero llenos de determinación, se fijaron en Firefly mientras pronunciaba su mandato final:

“Que tu fuego arda hasta el último momento por el futuro de Glamoth.”

Firefly aceptó el mandato con firmeza, aunque el panorama desolador de su entorno sembró una duda en su mente: ¿existía algo más allá de cumplir un mandato predeterminado?

 

El Campo de Batalla y la Caballería de Hierro

 


Con el paso del tiempo, Firefly se acostumbró al horror del campo de batalla. Los cielos ennegrecidos por el humo de las explosiones y los gritos de sus camaradas caídos se convirtieron en parte de su realidad cotidiana. En cada enfrentamiento, se enfrentó a enemigos descomunales y vio caer a sus camaradas ante sus propios ojos. La Caballería de Hierro estaba compuesta por otros Caballeros de Incubación, cada uno con una personalidad y un destino propio, cuyos recuerdos quedaban grabados en su memoria.

Cada pérdida plantaba una pregunta en la mente de Firefly: ¿acaso cada ser era único? ¿Era su sacrificio parte de un plan mayor o solo una consecuencia inevitable de su existencia?

 

La Batalla contra El Enjambre 


Una de las misiones más devastadoras para Firefly fue el enfrentamiento contra El Enjambre, una amenaza colosal formada por insectos cósmicos liderados por el Insecto Madre. La batalla comenzó en un paisaje estéril y desolado, donde los cielos estaban cubiertos por un manto negro de criaturas aladas. La Caballería de Hierro resistió valientemente, formando líneas defensivas que brillaban como brasas en la oscuridad. Sin embargo, la ferocidad de la ofensiva fue sin precedentes.

A medida que las filas caían, las luciérnagas sobrevivientes continuaban el ataque suicida. Su objetivo era detonar una bomba capaz de destruir al Insecto Madre y poner fin a la amenaza. 

El caos consumía el campo de batalla mientras las criaturas descendían en oleadas interminables. Una de las Luciérnagas planeó un ataque suicida, donde limpiaría por completo la amenaza pero llevando consigo grandes consecuencias. El detonador le fue confiado a Firefly, quien estuvo esperando el momento indicado mientras miraba de uno en uno caer a sus aliados, hasta que el momento predestinado llegó. Todo los enemigos incluidos sus camaradas fueron erradicados del planeta, pero Firefly protegida por su armadura SAM al despertar y darse cuenta que era la única superviviente de su raza, cayó en la desesperación, lo único que le ayudó a continuar fue el deseo de encontrar el significado de vivir.   

 



El nido de las alas enemigas revolotear hizo crecer una llama de furia dentro del corazón de Firefly, con su armadura resplandeciente como un faro en la oscuridad, se lanzó directamente hacia el Insecto Madre. En el momento culminante, cerró los ojos y una explosión iluminó el cielo como una supernova, destruyendo el enjambre. Sin embargo, el impacto la lanzó lejos, dejándola gravemente herida y al borde de la muerte.

 

Despertar en un Universo Desconocido
Tras la batalla, Firefly despertó en una galaxia desconocida. Estaba rodeada de plancton cósmico luminiscente que flotaba a su alrededor como un rayo de esperanza en la vastedad del espacio. El paisaje era un caleidoscopio de colores, con nebulosas brillando en la distancia y asteroides cubiertos de cristales que reflejaban la luz de estrellas lejanas.

Con la República de Glamoth destruida, Firefly era ahora una huérfana galáctica, con solo los ecos de su pasado para guiarla. En este estado de incertidumbre, Firefly descubrió que su cuerpo había sido diseñado con un defecto genético que aceleraba su envejecimiento, una medida de control impuesta por los científicos de Glamoth. Este descubrimiento intensificó sus preguntas: ¿por qué había sido creada solo para destruirse a sí misma?

Gracias por leer