• Nota mental: no crear pociones de 𝐀yane 𝐈𝐬𝐡𝐭𝐚𝐫 sin seguir bien las pautas de las letras pequeñas. Se suponía que debía causar terror... Dragóna, Gorila... En fin.

    Resultado del experimento:
    — Orejas adorables
    — Cuernos cuquis
    — Cero control sobre mis patitas
    — Ayane riéndose desde la ventana mientras yo intento no tropezar con mi propia sombra.

    Moraleja:
    La magia puede cambiar tu forma,
    pero nunca tu torpeza.
    Nota mental: no crear pociones de [Ayane_Ishtar] sin seguir bien las pautas de las letras pequeñas. Se suponía que debía causar terror... Dragóna, Gorila... En fin. Resultado del experimento: — Orejas adorables ✔️ — Cuernos cuquis ✔️ — Cero control sobre mis patitas ❌ — Ayane riéndose desde la ventana mientras yo intento no tropezar con mi propia sombra. Moraleja: La magia puede cambiar tu forma, pero nunca tu torpeza.
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  • - Salió a comprar con lo primero que encontro, lastima que Salem eligió la ropa(?)-

    Salem: así conseguirás más descuentos...

    O tarjetas de proxenetas.. gracias Salem
    - dice con ironía (?)-

    - Salió a comprar con lo primero que encontro, lastima que Salem eligió la ropa(?)- Salem: así conseguirás más descuentos... O tarjetas de proxenetas.. gracias Salem - dice con ironía (?)-
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  • La sala estaba envuelta en penumbra, solo iluminada por los haces de luz que se filtraban entre las grietas del techo. El aire olía a hierro y silencio. En el centro, sobre un trono de piedra tallada, Katarina reposaba como una reina sin corona, pero con más poder que cualquier monarca.

    Sus dagas descansaban en sus manos, girando lentamente entre sus dedos como si fueran una extensión de su pensamiento. Una sonrisa apenas perceptible se dibujaba en sus labios, esa que anuncia peligro antes de que la sangre toque el suelo.

    Había vuelto de otra misión, una más que terminaba con precisión quirúrgica. Y, aunque su cuerpo pedía descanso, su mente seguía despierta, analizando, recordando, esperando. Los enemigos podían esconderse, pero nunca escapar del filo que ella servía con devoción.

    La mirada de Katarina, fría y calculada, se perdió por un instante en el vacío de la habitación. No había gloria en la muerte, ni redención en la sangre. Solo la certeza de que, mientras ella respirara, el nombre Du Couteau seguiría siendo temido.

    Con un leve movimiento, se incorporó, dejando que la luz acariciara su cabello carmesí. Las dagas brillaron, reflejando su resolución.
    —Aún quedan nombres en la lista —susurró.
    La sala estaba envuelta en penumbra, solo iluminada por los haces de luz que se filtraban entre las grietas del techo. El aire olía a hierro y silencio. En el centro, sobre un trono de piedra tallada, Katarina reposaba como una reina sin corona, pero con más poder que cualquier monarca. Sus dagas descansaban en sus manos, girando lentamente entre sus dedos como si fueran una extensión de su pensamiento. Una sonrisa apenas perceptible se dibujaba en sus labios, esa que anuncia peligro antes de que la sangre toque el suelo. Había vuelto de otra misión, una más que terminaba con precisión quirúrgica. Y, aunque su cuerpo pedía descanso, su mente seguía despierta, analizando, recordando, esperando. Los enemigos podían esconderse, pero nunca escapar del filo que ella servía con devoción. La mirada de Katarina, fría y calculada, se perdió por un instante en el vacío de la habitación. No había gloria en la muerte, ni redención en la sangre. Solo la certeza de que, mientras ella respirara, el nombre Du Couteau seguiría siendo temido. Con un leve movimiento, se incorporó, dejando que la luz acariciara su cabello carmesí. Las dagas brillaron, reflejando su resolución. —Aún quedan nombres en la lista —susurró.
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  • *Era el único en el gimnasio a esta hora de la noche; sus golpes al saco de boxeo resonaban por todo el lugar, más fuerte que el sonido de cualquier disparo*

    —Estoy harto… Que molestia… QUE RABIA!—

    *Estaba muy molesto, tanto que de un golpe, el saco exploto y la arena en su interior se esparció por todo el lugar, también cayéndole en la cara; aunque se mantuvo quieto, y solo suspiró.*

    —Carajo… Ya van 999 que rompo… Bueno, voy por el mil—

    *Se limpia la arena de la cara y se gira hacia otro saco de boxeo para poder seguir golpeando algo. El suelo del gimnasio estaba lleno de la arena de todos los sacos de boxeo que había estado reventando durante horas y horas sin parar.*
    *Era el único en el gimnasio a esta hora de la noche; sus golpes al saco de boxeo resonaban por todo el lugar, más fuerte que el sonido de cualquier disparo* —Estoy harto… Que molestia… QUE RABIA!— *Estaba muy molesto, tanto que de un golpe, el saco exploto y la arena en su interior se esparció por todo el lugar, también cayéndole en la cara; aunque se mantuvo quieto, y solo suspiró.* —Carajo… Ya van 999 que rompo… Bueno, voy por el mil— *Se limpia la arena de la cara y se gira hacia otro saco de boxeo para poder seguir golpeando algo. El suelo del gimnasio estaba lleno de la arena de todos los sacos de boxeo que había estado reventando durante horas y horas sin parar.*
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  • ˖ ݁𖥔. ݁ . 𝑬𝒍 𝑫𝒊𝒂𝒓𝒊𝒐 𝒅𝒆 𝑺𝒄𝒂𝒓𝒍𝒆𝒕𝒕 . ݁.𖥔 ݁ ˖

    𝑪𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑰𝑰: 𝑳𝒂𝒔 𝑪𝒂𝒅𝒆𝒏𝒂𝒔 𝒅𝒆𝒍 𝑳𝒖𝒋𝒐

    Querido diario…

    Hoy he comprendido que no todas las jaulas son de hierro… algunas son de oro, cubiertas de terciopelo y perfumadas con rosas


    En esta casa, el futuro no se elige: se dicta.

    
Cada uno de nosotros tiene un destino cuidadosamente bordado por las manos de mis padres, como si fuéramos piezas en un tapiz que debe mantenerse perfecto, sin hilos fuera de lugar.

    Luca, mi hermano mayor, se casará con la princesa Enyadres de Bélgica.
    Una unión estratégica, dicen.
    La combinación ideal entre el poder de la vieja nobleza italiana y la elegancia de una corona europea.
    Él no protestó.
    Nunca lo hace.

    Sus ojos grises no revelan emoción alguna, pero cada vez que la mencionan, su mandíbula se tensa.

    Yo lo noto.
    Siempre lo noto.

    Adriano, en cambio, se unirá a la princesa Amara de Grecia, una mujer de belleza exótica y sonrisa disciplinada.
    Él finge estar complacido, incluso bromea sobre ello, pero sus manos tiemblan cuando piensa que, al decir “sí”, estará enterrando la libertad que tanto ama.

    Giulia, la joya más preciada de mi madre, sellará su futuro con el Duque Lorenzo di Castellano, un hombre doce años mayor que ella. Un matrimonio de conveniencia, disfrazado de elegancia.

    Dicen que juntos representarán el renacer de la aristocracia italiana.
    A veces veo a Giulia mirarse al espejo por horas, inmóvil, como si tratara de reconocer a la mujer que el destino le impuso ser.

    Y yo…

    Mi futuro también está escrito.
Desde que era niña, he escuchado su nombre en los labios de mis padres, como una profecía que debía cumplirse: el príncipe Nikolai Romanov de Rusia.
    
El más admirado y temido entre los herederos de la nueva nobleza.

    Dicen que su mirada puede congelar la sangre, y que su sonrisa es tan peligrosa como la corona que heredará algún día.

    A los catorce, me dijeron que sería su prometida cuando cumpliera la mayoría de edad.
    
A los quince, me explicaron que mi unión con él no solo uniría dos linajes, sino que también aseguraría la inmortalidad del apellido Moretti.

    Pero nadie me preguntó si quería ser inmortal.

    No quiero un palacio en San Petersburgo ni un trono de invierno.
    
No quiero joyas que brillen más que mi risa ni vestidos tan pesados que ahoguen mi respiración.

    
Quiero… respirar sin permiso.

    Quiero caminar sin que me sigan los pasos del deber.
    Quiero vivir una vida que me pertenezca.

    Esta noche he decidido algo, querido diario.
No puedo seguir viviendo bajo el techo de quienes ya han decidido quién debo ser.
    
La perfección que tanto veneran es una prisión que no me deja existir.

    Mañana, cuando el reloj del vestíbulo marque las tres y trece —esa hora maldita que detiene el tiempo en esta casa—, haré lo que ninguna Moretti se ha atrevido jamás a hacer:

    romper mi destino.

    Quizá el mundo fuera de estas paredes sea cruel.
Quizá nadie recuerde mi nombre.
    
Pero prefiero eso a convertirme en una sombra elegante con un apellido brillante y un corazón vacío.

    Si algún día alguien encuentra estas páginas, quiero que sepa que yo, Scarlett Moretti, nací con un fuego que no puede ser contenido por el mármol ni por los lazos de sangre.

    Esta será la primera noche de mi libertad.




    O la última de mi nombre.



    — 𝑆𝑐𝑎𝑟𝑙𝑒𝑡𝑡 𝑀𝑜𝑟𝑒𝑡𝑡𝑖
    ˖ ݁𖥔. ݁ . 𝑬𝒍 𝑫𝒊𝒂𝒓𝒊𝒐 𝒅𝒆 𝑺𝒄𝒂𝒓𝒍𝒆𝒕𝒕 . ݁.𖥔 ݁ ˖ 𝑪𝒂𝒑í𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑰𝑰: 𝑳𝒂𝒔 𝑪𝒂𝒅𝒆𝒏𝒂𝒔 𝒅𝒆𝒍 𝑳𝒖𝒋𝒐 Querido diario… Hoy he comprendido que no todas las jaulas son de hierro… algunas son de oro, cubiertas de terciopelo y perfumadas con rosas En esta casa, el futuro no se elige: se dicta. 
Cada uno de nosotros tiene un destino cuidadosamente bordado por las manos de mis padres, como si fuéramos piezas en un tapiz que debe mantenerse perfecto, sin hilos fuera de lugar. Luca, mi hermano mayor, se casará con la princesa Enyadres de Bélgica. Una unión estratégica, dicen. La combinación ideal entre el poder de la vieja nobleza italiana y la elegancia de una corona europea. Él no protestó. Nunca lo hace. Sus ojos grises no revelan emoción alguna, pero cada vez que la mencionan, su mandíbula se tensa. Yo lo noto. Siempre lo noto. Adriano, en cambio, se unirá a la princesa Amara de Grecia, una mujer de belleza exótica y sonrisa disciplinada. Él finge estar complacido, incluso bromea sobre ello, pero sus manos tiemblan cuando piensa que, al decir “sí”, estará enterrando la libertad que tanto ama. Giulia, la joya más preciada de mi madre, sellará su futuro con el Duque Lorenzo di Castellano, un hombre doce años mayor que ella. Un matrimonio de conveniencia, disfrazado de elegancia. Dicen que juntos representarán el renacer de la aristocracia italiana. A veces veo a Giulia mirarse al espejo por horas, inmóvil, como si tratara de reconocer a la mujer que el destino le impuso ser. Y yo… Mi futuro también está escrito.
Desde que era niña, he escuchado su nombre en los labios de mis padres, como una profecía que debía cumplirse: el príncipe Nikolai Romanov de Rusia. 
El más admirado y temido entre los herederos de la nueva nobleza. Dicen que su mirada puede congelar la sangre, y que su sonrisa es tan peligrosa como la corona que heredará algún día.
 A los catorce, me dijeron que sería su prometida cuando cumpliera la mayoría de edad. 
A los quince, me explicaron que mi unión con él no solo uniría dos linajes, sino que también aseguraría la inmortalidad del apellido Moretti. Pero nadie me preguntó si quería ser inmortal. No quiero un palacio en San Petersburgo ni un trono de invierno. 
No quiero joyas que brillen más que mi risa ni vestidos tan pesados que ahoguen mi respiración. 
Quiero… respirar sin permiso. Quiero caminar sin que me sigan los pasos del deber. Quiero vivir una vida que me pertenezca. Esta noche he decidido algo, querido diario.
No puedo seguir viviendo bajo el techo de quienes ya han decidido quién debo ser. 
La perfección que tanto veneran es una prisión que no me deja existir. Mañana, cuando el reloj del vestíbulo marque las tres y trece —esa hora maldita que detiene el tiempo en esta casa—, haré lo que ninguna Moretti se ha atrevido jamás a hacer: romper mi destino. Quizá el mundo fuera de estas paredes sea cruel.
Quizá nadie recuerde mi nombre. 
Pero prefiero eso a convertirme en una sombra elegante con un apellido brillante y un corazón vacío. Si algún día alguien encuentra estas páginas, quiero que sepa que yo, Scarlett Moretti, nací con un fuego que no puede ser contenido por el mármol ni por los lazos de sangre. Esta será la primera noche de mi libertad.
 O la última de mi nombre. — 𝑆𝑐𝑎𝑟𝑙𝑒𝑡𝑡 𝑀𝑜𝑟𝑒𝑡𝑡𝑖
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  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
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    Con tal de no seguir viendo lo pesados que son algunos...
    He de reconocer que el final no me gusta de la historia, lo desarrollan muy rápido, pero meh, pasable.
    Con tal de no seguir viendo lo pesados que son algunos... He de reconocer que el final no me gusta de la historia, lo desarrollan muy rápido, pero meh, pasable.
    5 a 30 líneas por Día
    Fandom
    Culpa mía, culpa tuya, culpa nuestra.
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    Disponible
    No copio escenas de los libros para no ser predecible y perder interés en la trama.
    crearemos nuestra propia historia con la misma energía, tensión y emoción.


    ¿Qué ofrezco?
    • Trama con drama, tensión, atracción prohibida y momentos intensos.
    • Rol fluido, con descripciones cuidadas pero sin eternizarme.
    • Mucha iniciativa para que la historia nunca se estanque.
    • Posibilidad de ir desde la primera parte hasta crear nuevas historias después.


    ¿Qué busco en ti?
    • Que disfrutes interpretando a Noah, con tu toque personal.
    • Que tengas ganas de química, conflicto y evolución real entre los personajes.
    • Que participes en la creación de nuevas tramas, giros y problemas.
    • Que, si varios días no puedes responder, avises para no dejar el rol colgado.


    Normas básicas (para no abandonar la historia)
    • Constancia sin presión: no pido rapidez, sino continuidad.
    • Si los personajes no conectan, lo hablamos y ajustamos, no me dejes esperando.
    • Drama SÍ, toxicidad fuera del rol NO.
    • Respuestas de varias líneas, pero sin convertirlo en novela.
    • Comunicación abierta: si algo no te gusta, lo dices.
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  • — Tu expresión me dice que no es tu estilo, ¿verdad? Vamos . . . prueba, haz el esfuerzo. Si no te gusta, conseguiré algo más propio de ti.
    — Tu expresión me dice que no es tu estilo, ¿verdad? Vamos . . . prueba, haz el esfuerzo. Si no te gusta, conseguiré algo más propio de ti.
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  • ROL LIBRE]
    -CHINA ANTIGUA.-

    -Secta LanLing Jin.- La conferencia de cultivo en la secta había terminado, tanto lideres como sus discípulos retornaban a sus respectivos clanes, se despedían de manera aporpiada tanto del lider como de su mano derecha, un joven Jin Guangyao que servia a su padre y obedecía ciegamente todo lo que este deseara.

    Para el joven taoista Daozhaang Xiao Xingchen que habia terminado en primer lugar se le ofreció quedarse unos dias pues deseaban conocerlo mas y posiblemente que les ayudara con algunos asuntos, pues era bien sabido que la maestra del joven monje era muy afamada en el mundo de cultivo, llamada la Inmortal Baoshan Sanren.

    Así fue su estadía en la secta sin saber a ciencia cierta quien conocería antes de poder seguir su camino como un errante en su deseo de ayudar a las personas.
    ROL LIBRE] -CHINA ANTIGUA.- -Secta LanLing Jin.- La conferencia de cultivo en la secta había terminado, tanto lideres como sus discípulos retornaban a sus respectivos clanes, se despedían de manera aporpiada tanto del lider como de su mano derecha, un joven Jin Guangyao que servia a su padre y obedecía ciegamente todo lo que este deseara. Para el joven taoista Daozhaang Xiao Xingchen que habia terminado en primer lugar se le ofreció quedarse unos dias pues deseaban conocerlo mas y posiblemente que les ayudara con algunos asuntos, pues era bien sabido que la maestra del joven monje era muy afamada en el mundo de cultivo, llamada la Inmortal Baoshan Sanren. Así fue su estadía en la secta sin saber a ciencia cierta quien conocería antes de poder seguir su camino como un errante en su deseo de ayudar a las personas.
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  • ━━ Yo si quería seguir durmiendo con este frío.
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  • *Sudadera, mantita y chocolate caliente desde por la mañana para seguir con el libro que anda estudiando a conciencia junto al brasero, que ya hace un frío del carajo.*
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