-La Mayor Intendente se encontraba en su oficina, como costumbre , aprobando, rechazando, planeando, organizando, leyendo los reportes diarios de sus caballeros y haciendo los reportes para el día siguiente y firmando documentos. Posiblemente ni ella misma recordaba si había ido a su cama la noche anterior, una fría taza de té delataba que se la había servido tal vez para desayunar pero ni siquiera la había volteado a ver. Bastó un parpadeo y un suspiro para que su cuerpo y mente le recriminaran el descanso que merecía, cuando menos pensó, se quedó totalmente dormida en su escritorio, cosa que pasaba muy a menudo. -
-La Mayor Intendente se encontraba en su oficina, como costumbre , aprobando, rechazando, planeando, organizando, leyendo los reportes diarios de sus caballeros y haciendo los reportes para el día siguiente y firmando documentos. Posiblemente ni ella misma recordaba si había ido a su cama la noche anterior, una fría taza de té delataba que se la había servido tal vez para desayunar pero ni siquiera la había volteado a ver. Bastó un parpadeo y un suspiro para que su cuerpo y mente le recriminaran el descanso que merecía, cuando menos pensó, se quedó totalmente dormida en su escritorio, cosa que pasaba muy a menudo. -