Tolek Zientek:
Echa a andar la roomba mágica para que se pasee por el piso del bar limpiando tanto la mugre como las energías tóxicas que suelen depositarse en los rincones y los no tan rincones.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Es viernes y su cuerpo lo sabe. Se ha tomado su tiempo para arreglarse; el cabello ondulado cae perfecto sobre sus hombros, su maquillaje resaltando esos ojos verdes que tan bien sabe usar. Lleva puesta una falda negra ajustada y una camisa abierta justo lo suficiente para provocar miradas. Con paso seguro, entra en el viejo bar que descubrió la noche anterior. No es el club elegante al que está acostumbrado, pero tiene un encanto decadente que le intriga. Para su sorpresa, algo se interpone en su camino. --- Con permiso, amiguito ---dice, divertido, dando un paso más largo para evadir la aspiradora.
Skylar Jarsson
-Baja del ático mientras se peina el cabello con la mano derecha y sobandose los ojos que los traía hinchados. Saluda a Tolek con la mano izquierda y va a prepararse su acostumbrado bocadillo de manzanas con mantequilla de maní-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Sigue hasta la barra notando las descuidada apariencia de la mujer. --- Alguien tuvo una mala noche ---comenta al sentarse, mirando las botellas en busca de cual le antoja está vez.
Tolek Zientek:
— Buenas, Jonathan. Creo que le caíste bien —saluda y luego comenta al ver como el coqueto muchacho le pide permiso a la roomba—. Hola, Sky —saluda también a Skylar más tarde.
Skylar Jarsson
-Toma asiento en una banca para partir los trozos de manzana en unos más pequeños, con ayuda de un tenedor se dispone a comer la fruta-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Hola, jefe ---le guiña un ojo al cantinero para volver la mirada a la roomba--- Suele pasar que le caigo bien a los aparatos ---vuelve a mirarle--- Pero no tanto a las aparatas.
Tolek Zientek:
— Es difícil caerle bien a las aparatas, siempre están tan llenas de sí mismas que no cabe nadie más en ellas —concuerda, de buen humor—. ¿Qué vas a tomar?
Skylar Jarsson
-Sigue comiendo de su fruta hasta terminar, se pone de pie dejando el plato dentro del lavabo. Se regresa para tomar asiento y poner los codos sobre la mesa-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Su sonrisa crece con picardia. Su tono juguetón. --- Qué triste. Yo la paso mucho mejor cuando me llena alguien más. ¿Qué tal un AppleTini? ¿El jefe conoce la receta?
Tolek Zientek:
— ¿Con... vodka? ¿O con vermut? —Pregunta, creyendo recordar la receta.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Vodka, por supuesto.
Tolek Zientek:
— Por la madre Rusia —declara, antes de ir en busca de las botellas de vodka, licor de manzana y jugo de manzana—. ¿Era con almíbar o con granadina?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Apoya los codos en la barra y el mentón en las manos mirando con atención cada movimiento y elección del cantinero. --- Arruinarás el color si usas granadina, jefe.
Skylar Jarsson
-Saca del cajón una hoja de papel, es el mensaje que Abel le dejó anoche – ¿crisis? No recuerdo eso... –dice para si misma y mira sus nudillos lastimados – Con razón me duelen las manos... – vuelve a decir con el mismo tono suave de voz y chasquea la lengua negando con decepción-
Tolek Zientek:
— El color... claro... —dice, con indiferencia, pero procede a usar almíbar.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Mira a la mujer de reojo. Se muerde el labio para sofocar una risilla devolviendo su atención al cantinero, quien luce muy dispuesto a ignorar a la mujer. --- ¿Siempre es así?
Skylar Jarsson
Soy peor -Dice con una sonrisita y luego sonríe de manera encantadora para sacar del mismo cajón otra hoja de papel y empezar a doblarla-
Tolek Zientek:
— Sí, siempre es así...
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Qué miedo ---dramatiza con un movimiento de cejas.
Tolek Zientek:
Pone el appletini frente a Nathan y sobre la barra, y el color verde característico del trago está intacto. — ¿Te dan miedo las chicas locas?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Me dan cringe ---corrige tomando la copa por el tallo. Al mirarlo, el color intacto del cóctel realza el verde de sus ojos--- Se deshacen por atención y no saben hacer más que repeler a quienes les rodean ---mira al dueño--- Espero nunca llegar a tanto.
Skylar Jarsson
-Bosteza cubriendose la boca con el dorso de la mano y ahora coloca los brazos sobre la mesa y apoyar su cara sobre ellos y cerrar los ojos dejándose vencer por el sueño-
Tolek Zientek:
— Eso suena un poco contradictorio, ¿No? —Comenta, alzando una ceja y cruzándose de brazos—. Quien busca atención no suele rechazarla, a menos que no esté buscando atención realmente o... esté recibiendo la atención equivocada.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- ¿Hay una mejor palabra que "contradictoria" para definir a una mujer? ---prueba el trago, se relame con gusto--- Parece que el óxido no arruina tu filo, jefe. Está delicioso.
Tolek Zientek:
Sonríe al recibir el cumplido de Nathan. — Emocional —responde—. Y algunos hombres también lo somos, aunque nunca a tanto nivel.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Touché ---concede mirando a la mujer de reojo, sintiéndose identificado también con las palabras de Tolek.
Gervont Whittaker
Aparece por la puerta del bar, como de costumbre, liándose un cigarrillo. Empuja la puerta con el hombro, ya que tiene ambas manos ocupadas en el proceso. Al entrar, alza la mirada, echando un vistazo a la gente en el interior, mientras pasa la lengua por el borde del papel de liar para que quede bien pegado. —Paz —saluda con su tono habitual, sin perder el ritmo mientras termina de preparar el cigarrillo.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Llegaron mis tragos gratis ---comenta con una media sonrisa al ver a Gervont.
Tolek Zientek:
— Hola, Gervont —saluda al recién llegado—. ¿Tú también te consideras un hombre emocional? —Y le pregunta, porque sí.
Skylar Jarsson
-Se despierta luego de un rato bostezando y cubriendo su boca. La espalda le duele por estar sentada en mala posición. Se levanta y camina pesadamente para subir hacia el ático-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- ¿Puedo ser indiscreto? ---se arrima un tanto a Tolek no pidiendo su permiso, sino su complicidad.
Tolek Zientek:
Está con los brazos apoyados sobre la barra cuando Nathan parece pedir su cooperación. — Depende, todo depende.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- ¿Cuáles son las condiciones?
Tolek Zientek:
— Qué pereza pensarlas ahora mismo... —declara, sin ganas—. Mejor sólo finjamos que he dicho que sí.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Vale ---ensancha la sonrisa, complacido, dispuesto a aprovechar la oportunidad--- Ella vive aquí, ¿Verdad?
Tolek Zientek:
— ¿Skylar? Sí, ¿Por qué? —Responde, mostrándose curioso.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Porque tu eres el dueño y se nota que no te agrada. Salta a la vista que no necesitas el dinero que podría darte como pago de renta, ya me has dicho que no hay nada sexual entre ustedes y... Francamente, no parece el tipo de persona que ayude con nada, ya sea en una casa o un negocio. ¿Por qué está aquí?
Tolek Zientek:
— Me ayuda con la clientela cuando yo no estoy —responde sin misterios—. Aunque no lo parezca dados sus largos períodos de apatía, a veces se muestra centrada y cocina o sirve a los clientes con buena cara.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Eso si es una sorpresa ---se admira, sinceramente, apartándose un tanto de la barra para buscar el vape que guarda en la bota--- ¿Te molesta si...? ---enseña el aparato con una sonrisilla.
Tolek Zientek:
— Es un bar, Jonathan. Fumar es parte de lo que se hace en un bar. Ya ves como Gervont respira mota cada vez que le da la gana... —aclara, permitiéndole a Nathan fumar y echándole un vistazo a Gervont.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Pero seguro tus ojos estarían sobre Gervont mucho más tiempo si te pidiera permiso antes de encender sus placeres ---comenta, ladino, mirándole a los ojos, activando el vape del que brota un suave vaho con aroma a cereza que pronto inunda su boca.
Tolek Zientek:
— ¿Estás diciendo que te gusta que tenga los ojos encima tuyo? —Indaga, porque esto de las indirectas, suposiciones y similares no se le dan nada bien y prefiere pecar de idiota.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Lo has pillado ---le felicita entre líneas de humo blanco, girando el vape entre los dedos como si fuera la baqueta de un baterista. Al final del giro, la boquilla apunta hacia Tolek en una oferta sutil.
Tolek Zientek:
Declina la invitación negando con la cabeza, aunque aprecia bien la habilidad de los dedos de Nathan. — Supongo que tengo los ojos más cómodos de ver en este lugar...
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Con otro hábil movimiento, vuelve a cambiar la orientación del vape y se lo lleva a los labios. Responde después de una lenta calada. --- La heterocromia es sexy, pero me atrae más tu honestidad. Eres el único aquí que no pretende ser algo que no es.
Tolek Zientek:
— Hablas como si supieras qué soy —comenta, dejando escapar una risita sardónica antes—. ¿Eres psíquico, manejas la telepatía o algo así?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Algunos leen libros, yo leo personas. ¿Lo hago bien?
Tolek Zientek:
— Lo haces muy bien, de hecho —responde, sonriente—. Creo que te tardaste menos que nadie en encontrarle las cosquillas a Sky. Hacía siglos que no la oía insultar con tanta vulgaridad.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Crecí rodeado de mujeres rotas, ya son un cliché para mi ---no lo cree una gran hazaña--- Pero el grandote de las dreads si me sorprendió, no esperaba que explotara con tan poco ---vapea--- Tu sigues siendo un enigma, si te soy sincero.
Tolek Zientek:
— Algo me ha dicho que Gervont no aprecia que le ignoren, lo cual dice mucho acerca de cuanto invierte en sus relaciones, y no tardó en encontrarse en una encrucijada cuando dejaste en evidencia a Sky ayer. El pobre no sabía si defender su inversión en Sky o a sí mismo —teoriza, echando un vistazo a Gervont.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Si es así, pobre de él. Está tirando tiempo y esfuerzo a la basura. ¿Qué me dices de ti y las relaciones?
Tolek Zientek:
— Te lo diré si me cuentas a qué te refieres exactamente con que creciste entre mujeres rotas.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- No tengo padres, crecí en la calle. El burdel más marginal que puedas imaginar fue mi escuela y hogar. ¿Qué más podría esculpir una personalidad como esta? ---sin perder la sonrisa ni la chispa en la mirada, vapea--- Tu turno.
Tolek Zientek:
Tiene muchas dudas acerca de las formas en que se puede esculpir una personalidad como la de Jonathan y si necesariamente conducirían a esta, pero antes de pensar en ello intenta reunir suficiente voluntad para responder lo que debe primero. — Es... complicado. Pero trataré de resumirlo tan bien como lo hiciste tú: soy despreciable y desagradable.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Su sonrisa crece un punto al oír esas dos particulares palabras que le calzan como anillo al dedo. --- Vale, ya tenemos dos cosas en común
Tolek Zientek:
— ¿Ah, sí? —Indaga, sonriendo con cierto deje de resignación—. ¿Lo dices por como hiciste enfadar a Gervont anoche o por algo más?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Gervont no es el único que se ha enfadado conmigo en las últimas veinticuatro horas ---presume evidentemente divertido--- Está la chica de ático también, que cree que soy un maricón idiota y un bombón rubio que se ha molestado muy dignamente porque mi opinión desfavoreció su postura motivacional digna de un curso de autoayuda. Soy un cabrón, nueve de cada diez ovejas lo avalan.
Tolek Zientek:
— Y pareces muy orgulloso de ello. Felicidades —congratula, aunque no se le note mucho alegría alguna.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- La verdad, me encanta. Si le gusto a quien quiero gustarle, ya gané. Si no... Bueno, siempre es un placer incomodar a la gente que me desagrada.
Tolek Zientek:
— ¿Le gustas a alguien actualmente? Alguien a quien quieras gustarle, quiero decir.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Eso lo sabes tu mejor que yo. ¿Te gusto?
Tolek Zientek:
— Es un poco pronto como para empezar con los coqueteos, ¿No crees? —Aventura, forzando una sonrisa.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Auch ---aparta la mirada y cubre con el vape lo que ha sobrevivido de su sonrisa.
Tolek Zientek:
— Vamos, no te hagas. No puedo ser el único con el que coqueteas, salta a la vista con sólo verte. ¿Por qué te iba a doler perder a una oveja?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Soy un pastor celoso de mi rebaño ---le sigue el juego porque, aún derrotado, nunca humillado. Da otra calada al vape y vuelve a mirarle. --- ¿Qué tal si ahora me pones una mimosa?
Skylar Jarsson
-Baja del ático con el cabello mojado, viste un simple vestido de color crema de falda larga y vendas negras cubriendo sus pies. Alza las cejas sorprendida de que aún el sujeto maquillado aún esté allí. De la bolsa que trae en la mano saca unas agujas y un ovillo de lana ya con un tejido avanzado para continuar-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Qué hay ---corresponde al recién llegado, casual, echándole una breve mirada. Después, atiende a las palabras de Tolek sintiendo que no todo está perdido por la forma en que le llama; nota cierta simpatía por su parte y no necesita más que un pequeño escalón por donde comenzar a escalar. --- Hazlo rosa y me tendrás para ti toda la noche ---afirma, haciendo referencia a la granadina que, en su opinión, le da un toque mágico a los destornilladores.
Skylar Jarsson
-Alza la mirada distinguiendo a Abel y sólo alza la mano derecha en señal de saludo para él y examina su tejido, chasquea la lengua, pues se equivocó en algunos puntos-
Tolek Zientek:
Apenas echa un vistazo al recién llegado Abel, acostumbrado a que no interactúe con nadie excepto Skylar y, por tanto, sin querer desperdiciar atención en él. — Entonces, en qué quedamos. ¿Una mimosa o un screwdriver?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Es un poco pronto para que me tengas toda la noche, ¿No crees? Dame una mimosa y nos lo tomamos con calma.
Tolek Zientek:
— Especialmente si quieres que te tenga encima o debajo toda la noche —asegura, ahogando una risita, antes de tomar una botella de champán sin abrir.
Skylar Jarsson
-Vuelve los ojos a su tejido para deshacer todo lo avanzado y volver a empezar-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Eso ya es ser ambicioso ---sonríe de medio lado mirándole hacer.
Tolek Zientek:
Las palabras de Nathan le arrancan una carcajada mientras termina de preparar la mimosa en un vaso largo para servírselo justo en frente. — ¿Con cuántos ambiciosos tienes que lidiar día a día? Un promedio, más o menos.
Abel T Kovacs
— Sacó el último cigarrillo y encendió el mismo; una nubecilla de humo rondaría su rostro al exhalar.— Veo que estás bien. — Mencionó y luego observó a la bartender por algunos segundos, luego de ello volvería en pie dejando el envase vacío sobre la mesa.— Solo pase a saludar y comprobar lo obvio, Nos vemos en otro momento. — Metió la derecha con el lighter al bolsillo lateral de su pantalón y volteó para ir en dirección de la salida, se sentía incomodo con aquel traje tan formal.—
Skylar Jarsson
-Ella alza la vista y nada más lo despide con la mano y alzandose de hombros-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Con la zurda, acerca el vaso. Humedece la yema del índice con la punta de la lengua y desliza por el borde del vidrio sin apartar los ojos del bartender. --- ¿Cuántos crees? Tengo curiosidad; di un número y vemos si tu también lees a las personas.
Skylar Jarsson
-Observa por un momento a Tolek para dar un rápido análisis de sus medidas para un nuevo suéter.-
Tolek Zientek:
— Vale, hablaré en contexto de discoteca: al menos tres por noche —adivina, sin tener que echarle un vistazo más allá de a sus ojos, estando recargado sobre la barra una vez más.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Oh~ Si hablamos del nightclub donde trabajo estás siendo muy, muy modesto.
Skylar Jarsson
-Saca dos ovillos de lana, uno de color azul eléctrico y uno gris. Se acerca a el y extiende los ovillos- Decide, ¿Cuál color te gusta?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Su sonrisa crece, ladina y divertida, cuando la mujer interrumpe. --- ¿Es lo mejor que tienes, reina? ¿Segura que comportarte como la abuela que nunca tuvo te llevará a donde quieres llegar? Mirando a la mujer, bebe un trago del cóctel.
Tolek Zientek:
— ¿Trabajas en un nightclub? Eso explica muchas cosas —asegura, sorprendido. Luego, ve que Skylar se acerca con dos ovillos de lana y antes de que pueda decir nada, Nathan interviene.
Skylar Jarsson
-Asiente con la cabeza para alzarse de hombros, sintiéndose un tanto desanimada y emite a penas una disculpa para volver a su asiento guardando todo en su bolsa-
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Yo digo que el azul compite con el color de sus ojos ---interviene en vista del silencio de Tolek al respecto, para nada conmovido por la docilidad la mujer que le llamó maricón e idiota la noche anterior, mirando, precisamente, los ojos de él--- Usa el gris, es su estilo y le favorecerá.
Tolek Zientek:
Tampoco entiende cómo o porqué Skylar parece haber huido, literalmente, en una actitud muy diferente a la que tuvo anoche con Jonathan. Pero a estas alturas no espera consistencia en la personalidad de Skylar y prefiere no calentarse la cabeza con el asunto. — Lo que dijo Jonathan —secunda.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Sí, trabajo en un club nocturno ---retoma--- Hago lo mismo que haces tu aquí, pero con más gente, música y~ Magia. ¿Conoces el Black Butterfly? New York, en el centro.
Skylar Jarsson
-Suspira abrumada y se va a la cocina para prepararse una taza de té a la cual le hecha un par de cucharadas de miel y se prepara un platito de manzanas con mantequilla de maní. Se queda allí mirando el cazo de agua burbujear-
Tolek Zientek:
— No, no lo conozco. Me mudé desde Siberia directo aquí, a Vermont, y no me he movido desde entonces —explica—. Me ha tocado acompañar a un amigo a trabajar por esos lares, pero ni siquiera he pasado una noche ahí. Ni podría... cuánto ruido... y cuántas luces...
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- ¿Y no te da curiosidad siquiera intentar?
Skylar Jarsson
-Sale con su taza de té y sus manzanas sobre una bandeja y da un sorbo a su té-
Tolek Zientek:
— No, gracias. Los ruidos fuertes y las luces de esos sitios me aturden con facilidad —declara de buenas a primeras, pero tras una breve pausa de silencio agrega—. Aunque... quizás debería permitirme una visita, al menos...
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Eso está mejor. Qué pena no haber traído mi móvil para darte mi número; soy un excelente guía turístico.
Skylar Jarsson
-Termina de beber su taza de té y sigue ahora con su fruta-
Tolek Zientek:
— ¿Cómo te llevas con los cuervos? —Indaga, con una sonrisa misteriosa en el rostro.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
Su expresión se ensombrece notoriamente. --- No me gustan las mascotas, pero no me meto con ellos si no se meten conmigo. ¿Por qué...?
Tolek Zientek:
Sacude la cabeza restándole importancia al asunto. — No importa —cambia de tema—. ¿En qué horario trabajas ahí?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
El misterio mantiene su ceño bajo. Sospecha, pero nada necesariamente malo. --- Depende. Tenemos turnos rotativos. Esta semana estoy desde la medianoche hasta el cierre.
Tolek Zientek:
— ¿Esta semana? ¿La que acaba? —Trata de entender—. ¿O te refieres a la próxima?
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Hasta mañana, sábado ---puntualiza algo más relajado, le divierte cuando Tolek hace ese tipo de preguntas--- El club abre jueves, viernes y sábados.
Tolek Zientek:
— Entonces, el próximo fin de semana ya no estarás desde la medianoche al cierre... —replica, frunciendo el ceño ante lo complicado que está siendo la simple acción de hacerse una idea de cuándo encontrar a Jonathan en el nightclub.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- Lo sabré mañana en la noche. Hacen un poco lo que les da la gana con los horarios.
Tolek Zientek:
— Oh, no me digas —comenta, recién ahora cayendo en cuenta de ello—. Bueno, aquí ni siquiera tenemos horarios de atención... no debería quejarme.
𝖭𝖺𝗍𝗁𝖺𝗇 ᴿᵒˢᵉᴳᵒˡᵈ:
--- No parece que les hagan falta ---sonríe, divertido--- Te diré mis horarios de la próxima semana cuando los sepa. Nos vemos~