Apenas fue consciente de su caída, la derrota fue inmediata, su cuerpo siente el calor del dolor, su sangre parece querer abandonar su antaño, poderoso cuerpo impenetrable por hechicería, bajo una luz intensa, lo último que sus ojos captaron antes del gran apagón, fue la silueta de un hombre, sujetando una hoz en su espalda.

En medio de la oscuridad, solo escuchan muchas voces, la muerte no puede darle el descanso que deseaba, no sentía frío ni calor, no era consciente de su cuerpo, pero era capaz de oír voces, varias de hecho.

"La muerte sería demasiado piadoso para alguien tirano como él"

"Debe existir algo que le haga pagar por sus pecados y sus crímenes"

Simplemente, en su mente comienza a reírse, sin saber que posea un cuerpo capaz de expresar la ridiculez de esa discusión, no sabe si tiene los ojos cerrados, pero por ahora solo resta esperar la decisión final, por su orgullo no buscaría piedad, ni perdón ni arrepentimiento, menos antes esos frágiles primates.

"De hecho, tengo una buena idea"

Se escucha una voz de fondo, femenina y gentil, no alcanzó a escuchar más, pero pronto sabría su penitencia, total, no rogaría nada de esos bastardos.

Sus ojos siente la luz, el calor de un día, la suavidad de una fina tela cubriendo su cuerpo nuevo, se levanta de pronto, sorprendido por el repentino cambio de lugar y tiempo, sin embargo, no se siente igual, acaricia su torso, un cuerpo encurtido y envejecido, no hay energía ni fuerza sobrenatural en estos músculos comprimidos.

La peor parte siente tejido, piel y vellos, por lo que se inclina hacia el sonido de un río donde contempla con horror el resultado en el reflejo del agua, no hay un dragonoid, un ser draconiano, un orgulloso hijo de la serpiente, solo hay un anciano con un traje que reconoce de inmediato.

Solo grita y luego se ríe captando el mensaje, probablemente no puede hacer daño ahora, ser un simple sirviente, con sus manos quieres desgarrar su propio rostro, pero nuevamente su orgullo vuelve a controlar sus emociones derrotistas.

"No rogaré por volver... si eso quieren... someteré este mundo de nuevo, les demostraré que se equivocaron de soberano..."

Luego, de manera repentina, siente un dolor punzante que atraviesa su espalda, intenta voltear, pero solo escucha unas palabras.

"Se llama dolor, es bueno que te acostumbres, soberano hijo del dragón."