• Ocasionalmente me quedo mirando al vacío, pero no estoy mirando el presente.
    Estoy mirando a Jan gritar sin mandíbula. A Elias con la mirada fija, como si todavía siguiera vivo o a Richard decir como un mantra "Dios nos abandonó" Mientras sangre negra sale de entre su uniforme.

    Los veo caer una y otra vez, cada vez que cierro los ojos. Cada vez que alguien en la calle levanta la voz.
    Cada vez que huelo el metal quemado o siento temblar el suelo.

    No puedo explicarlo. No quiero explicarlo.
    Sólo sé que, cuando me quedo quieto… la guerra regresa.
    Mis muertos me miran desde la sombra de cada pared blanca.

    Dormir no es descansar.
    Es una lucha.

    Mi cuerpo se olvida de respirar. Me despierto jadeante, con el corazón como un martillo contra mi fragil cuerpo.
    Sueño que estoy bajo de la tierra en las trincheras de vez en cuando. De vez en cuando, hay fuego.
    Y de vez en cuando, cuando finalmente logro dormir, un condenado ruido lo arruina todo:
    una moto, un grito, un portazo… y vuelvo a ese lugar. Al frente. Al caos.

    Me cuesta salir de ahí.

    Los perros me ponen tenso.
    No los odio… pero no puedo evitarlo. Sus ladridos me atraviesan como un disparo,
    hay algo en su mirada —cuando fijan los ojos, cuando corren sin aviso—
    me recuerda a cosas que preferiría enterrar.

    No le cuento esto a nadie.
    No quiero lástima.
    Solo… a veces, me gustaría poder dormir sin luchar.
    Sin sobresaltos.
    Sin fantasmas.
    Sin el miedo de no despertar… o peor, de despertar en el infierno de nuevo.
    Ocasionalmente me quedo mirando al vacío, pero no estoy mirando el presente. Estoy mirando a Jan gritar sin mandíbula. A Elias con la mirada fija, como si todavía siguiera vivo o a Richard decir como un mantra "Dios nos abandonó" Mientras sangre negra sale de entre su uniforme. Los veo caer una y otra vez, cada vez que cierro los ojos. Cada vez que alguien en la calle levanta la voz. Cada vez que huelo el metal quemado o siento temblar el suelo. No puedo explicarlo. No quiero explicarlo. Sólo sé que, cuando me quedo quieto… la guerra regresa. Mis muertos me miran desde la sombra de cada pared blanca. Dormir no es descansar. Es una lucha. Mi cuerpo se olvida de respirar. Me despierto jadeante, con el corazón como un martillo contra mi fragil cuerpo. Sueño que estoy bajo de la tierra en las trincheras de vez en cuando. De vez en cuando, hay fuego. Y de vez en cuando, cuando finalmente logro dormir, un condenado ruido lo arruina todo: una moto, un grito, un portazo… y vuelvo a ese lugar. Al frente. Al caos. Me cuesta salir de ahí. Los perros me ponen tenso. No los odio… pero no puedo evitarlo. Sus ladridos me atraviesan como un disparo, hay algo en su mirada —cuando fijan los ojos, cuando corren sin aviso— me recuerda a cosas que preferiría enterrar. No le cuento esto a nadie. No quiero lástima. Solo… a veces, me gustaría poder dormir sin luchar. Sin sobresaltos. Sin fantasmas. Sin el miedo de no despertar… o peor, de despertar en el infierno de nuevo.
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  • ────╮
    ────𓉑 𝐍𝐄𝐖 غٹؚ   
    ㅤㅤ ⎯꯭ㅤ ㅤ𝕴𝗻𝗳𝗲𝗿𝗻𝗼ㅤ 𓈒𓆰𓆪
    ───────────────


    Los demonios no tomaban la apariencia humana de una forma gratuita, con ello conllevaba sufrimiento momentáneo y prolongado, ya que era como estar naciendo de nuevo. Así que muchos demonios se quedaban con esa apariencia por un largo tiempo y sólo cuando era necesario, volvían a su físico demoníaco natural, pero con el mismo procedimiento.

    En su transformación experimentó como un fuego consumía su esencia demoníaca hasta los cimientos, no era sólo el calor, ni el dolor, sino una sensación visceral de desgarro auténtico, como ser arrancado de su naturaleza original. Sus poderes y toda su energía caótica siendo oprimida y disminuida dentro de una nueva piel; débil y frágil. Junto a un vacío momentáneo en el que no reconocía quién o qué era, si un demonio, si un humano o solamente cenizas, como algo indefinido.

    Ya no estaban sus alas y no podía sacarlas a su voluntad a menos que se hiciera fuerte con éste nuevo cuerpo. Seguía teniendo sus poderes, pero en menor cantidad. Antes era invencible, podía durar en una batalla con otros seres infernales a la vez, ahora debía ser consciente de que no era tan fuerte y que cualquier ataque podría debilitarlo por días.

    Era el demonio Belial, señor del Caos y del engaño. La última vez que estuvo consciente de sus actos fue durante la Peste negra, durante los campos de Concentración, durante muchos tiempos caóticos, siempre estuvo presente, ahora se había reducido a un simple mortal con algunas habilidades extras. Su orgullo estaba jodidamente herido, pero no podía rebelarse y tampoco lo veía necesario. Quería descubrir porqué había sido enviado al mundo humano en ese tiempo y quizás un poco más que eso.
    ────╮ ────𓉑 𝐍𝐄𝐖 غٹؚ    ㅤㅤ ⎯꯭ㅤ ㅤ𝕴𝗻𝗳𝗲𝗿𝗻𝗼ㅤ 𓈒𓆰𓆪 ─────────────── Los demonios no tomaban la apariencia humana de una forma gratuita, con ello conllevaba sufrimiento momentáneo y prolongado, ya que era como estar naciendo de nuevo. Así que muchos demonios se quedaban con esa apariencia por un largo tiempo y sólo cuando era necesario, volvían a su físico demoníaco natural, pero con el mismo procedimiento. En su transformación experimentó como un fuego consumía su esencia demoníaca hasta los cimientos, no era sólo el calor, ni el dolor, sino una sensación visceral de desgarro auténtico, como ser arrancado de su naturaleza original. Sus poderes y toda su energía caótica siendo oprimida y disminuida dentro de una nueva piel; débil y frágil. Junto a un vacío momentáneo en el que no reconocía quién o qué era, si un demonio, si un humano o solamente cenizas, como algo indefinido. Ya no estaban sus alas y no podía sacarlas a su voluntad a menos que se hiciera fuerte con éste nuevo cuerpo. Seguía teniendo sus poderes, pero en menor cantidad. Antes era invencible, podía durar en una batalla con otros seres infernales a la vez, ahora debía ser consciente de que no era tan fuerte y que cualquier ataque podría debilitarlo por días. Era el demonio Belial, señor del Caos y del engaño. La última vez que estuvo consciente de sus actos fue durante la Peste negra, durante los campos de Concentración, durante muchos tiempos caóticos, siempre estuvo presente, ahora se había reducido a un simple mortal con algunas habilidades extras. Su orgullo estaba jodidamente herido, pero no podía rebelarse y tampoco lo veía necesario. Quería descubrir porqué había sido enviado al mundo humano en ese tiempo y quizás un poco más que eso.
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  • Is that you?
    Categoría Suspenso
    01.06.2024
    Múnich, Alemania.

    Aloysia no pudo evitar quedarse mirando al desconocido de forma fija.

    Su mente era un remolino de emociones ¿Era acaso aquél hombre su amante del año 1902?
    No, no podía ser. Se veía joven para haber pasado más de cien años, además, ella lo había visto morir ¿Verdad?

    Ella se había hecho cargo de que sus ojos se cierren para siempre.

    ¿Podría acaso ser su descendencia? Pero, él solo había estado con ella ¿O la había engañado?
    Su cuerpo comenzó a temblar de miedo, de vergüenza, de ¿amor?

    Aquello último era más que posible. Ver al desconocido estar igual que su último amante, le revolvía todos sus sentimientos. Especialmente, aquellos guardados hace tiempo.

    De repente, recibió un llamado; era su jefe. Rápidamente atendió.

    J: — Aloysia, preciso que mandes los documentos hoy mismo.

    La por ahora pelinegra soltó un pequeño suspiro. Odiaba que el hombre ni siquiera fuese capaz de saludarla.

    — Entendido, señor. Se lo mandaré en unos minutos.

    J: — Gracias.

    Su jefe cortó la llamada, y ella no había perdido de vista a aquél supuesto amante.
    Al contrario, ella comenzó a seguirlo durante largos -muy largos- minutos.

    01.06.2024 Múnich, Alemania. Aloysia no pudo evitar quedarse mirando al desconocido de forma fija. Su mente era un remolino de emociones ¿Era acaso aquél hombre su amante del año 1902? No, no podía ser. Se veía joven para haber pasado más de cien años, además, ella lo había visto morir ¿Verdad? Ella se había hecho cargo de que sus ojos se cierren para siempre. ¿Podría acaso ser su descendencia? Pero, él solo había estado con ella ¿O la había engañado? Su cuerpo comenzó a temblar de miedo, de vergüenza, de ¿amor? Aquello último era más que posible. Ver al desconocido estar igual que su último amante, le revolvía todos sus sentimientos. Especialmente, aquellos guardados hace tiempo. De repente, recibió un llamado; era su jefe. Rápidamente atendió. J: — Aloysia, preciso que mandes los documentos hoy mismo. La por ahora pelinegra soltó un pequeño suspiro. Odiaba que el hombre ni siquiera fuese capaz de saludarla. — Entendido, señor. Se lo mandaré en unos minutos. J: — Gracias. Su jefe cortó la llamada, y ella no había perdido de vista a aquél supuesto amante. Al contrario, ella comenzó a seguirlo durante largos -muy largos- minutos.
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  • No hay nada más bello y perfecto que un cuerpo vivo y cálido. ♡
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  • El umbral del placer...
    Categoría Original
    Christopher Baudelair

    La neblina acariciaba los adoquines mojados por la reciente lluvia. Sibiu, con su aire medieval y sus techos puntiagudos, parecía sumida en un sueño extraño, donde el tiempo no corría igual. En medio de esa quietud etérea, un afiche húmedo se deslizó con el viento y cayó justo frente a los pies de Lia.

    Era negro, con detalles en rojo carmesí y una tipografía elegante. En el centro, una silueta masculina envuelta en sombras.

    “SE BUSCA MUSA.
    Ministry Nightclub – Contratación inmediata.
    Belleza, oscuridad y deseo… sin límites.”

    La imagen era sugerente, casi perturbadora. Lia dudó. ¿Publicidad barata… o algo más? Pero no pudo ignorar la sensación que le erizó la piel al tocar el papel...una especie de pulso, casi imperceptible, vibrando en el aire.

    Sin pensarlo demasiado, caminó hacia el paradero más cercano y tomó el primer taxi que se detuvo ante su señal. Una vez dentro, las luces de la ciudad pasaban como manchas de neón sobre los cristales empañados. Lia revisaba el afiche una y otra vez. Una parte de ella gritaba que todo aquello era una mala idea… pero otra, más profunda, más insistente, ansiaba descubrir qué la llamaba desde ese lugar.

    Mientras su mente divagaba, dando vueltas sobre lo mismo, la voz del conductor la sacó de su trance.

    —¿Ministry? Hmm… lugar raro. La gente entra con una cara… y sale con otra —comentó, en un tono ambiguo, como si escondiera un significado entre líneas. Lia no supo si se trataba de una advertencia, una anécdota o un simple comentario al aire.

    —¿Qué tipo de gente va ahí? —preguntó, sintiendo que cuanto más indagaba, más crecía dentro de ella esa urgencia incontrolable.

    —Gente con hambre… pero no de comida —fue lo último que dijo el conductor antes de subir el volumen de la radio, como si quisiera cerrar el tema, o evitar decir algo de lo que pudiera arrepentirse.

    Veinte minutos después…
    https://www.youtube.com/watch?v=OlUGhOmIpOA

    El club se alzaba como una iglesia profana en medio de los edificios apagados. Columnas góticas, vitrales rojos iluminados desde dentro y un portón de hierro forjado le daban un aspecto imponente y algo inquietante.

    Cuando las puertas se abrieron, una explosión de luces intermitentes, perfumes embriagantes y música industrial la envolvió de inmediato. El aire olía a flores marchitas, cuero y humo dulce. Un portero vestido como un sacerdote del inframundo la dejó pasar sin hacer preguntas, como si ya estuvieran esperándola.

    Dentro, los cuerpos se movían como mareas humanas, entrelazados en deseo, música y delirio. Era un espectáculo entre lo tribal y lo divino, una danza donde no existía el tiempo ni la culpa. Y entonces lo vio...

    Al fondo, en un balcón alto de hierro negro, una figura observaba todo. Un hombre imponente, elegante, intocable. Vestido con la precisión de un noble en medio del pecado.

    Sus ojos grises recorrían el lugar con calma depredadora… hasta que se cruzaron con los de Lia. Fue solo un instante, pero suficiente, para que un escalofrío recorriera su espina dorsal, haciéndola temblar. Sin darse cuenta, arrugó el afiche entre sus dedos.
    [frost_topaz_hare_445] La neblina acariciaba los adoquines mojados por la reciente lluvia. Sibiu, con su aire medieval y sus techos puntiagudos, parecía sumida en un sueño extraño, donde el tiempo no corría igual. En medio de esa quietud etérea, un afiche húmedo se deslizó con el viento y cayó justo frente a los pies de Lia. Era negro, con detalles en rojo carmesí y una tipografía elegante. En el centro, una silueta masculina envuelta en sombras. “SE BUSCA MUSA. Ministry Nightclub – Contratación inmediata. Belleza, oscuridad y deseo… sin límites.” La imagen era sugerente, casi perturbadora. Lia dudó. ¿Publicidad barata… o algo más? Pero no pudo ignorar la sensación que le erizó la piel al tocar el papel...una especie de pulso, casi imperceptible, vibrando en el aire. Sin pensarlo demasiado, caminó hacia el paradero más cercano y tomó el primer taxi que se detuvo ante su señal. Una vez dentro, las luces de la ciudad pasaban como manchas de neón sobre los cristales empañados. Lia revisaba el afiche una y otra vez. Una parte de ella gritaba que todo aquello era una mala idea… pero otra, más profunda, más insistente, ansiaba descubrir qué la llamaba desde ese lugar. Mientras su mente divagaba, dando vueltas sobre lo mismo, la voz del conductor la sacó de su trance. —¿Ministry? Hmm… lugar raro. La gente entra con una cara… y sale con otra —comentó, en un tono ambiguo, como si escondiera un significado entre líneas. Lia no supo si se trataba de una advertencia, una anécdota o un simple comentario al aire. —¿Qué tipo de gente va ahí? —preguntó, sintiendo que cuanto más indagaba, más crecía dentro de ella esa urgencia incontrolable. —Gente con hambre… pero no de comida —fue lo último que dijo el conductor antes de subir el volumen de la radio, como si quisiera cerrar el tema, o evitar decir algo de lo que pudiera arrepentirse. Veinte minutos después… https://www.youtube.com/watch?v=OlUGhOmIpOA El club se alzaba como una iglesia profana en medio de los edificios apagados. Columnas góticas, vitrales rojos iluminados desde dentro y un portón de hierro forjado le daban un aspecto imponente y algo inquietante. Cuando las puertas se abrieron, una explosión de luces intermitentes, perfumes embriagantes y música industrial la envolvió de inmediato. El aire olía a flores marchitas, cuero y humo dulce. Un portero vestido como un sacerdote del inframundo la dejó pasar sin hacer preguntas, como si ya estuvieran esperándola. Dentro, los cuerpos se movían como mareas humanas, entrelazados en deseo, música y delirio. Era un espectáculo entre lo tribal y lo divino, una danza donde no existía el tiempo ni la culpa. Y entonces lo vio... Al fondo, en un balcón alto de hierro negro, una figura observaba todo. Un hombre imponente, elegante, intocable. Vestido con la precisión de un noble en medio del pecado. Sus ojos grises recorrían el lugar con calma depredadora… hasta que se cruzaron con los de Lia. Fue solo un instante, pero suficiente, para que un escalofrío recorriera su espina dorsal, haciéndola temblar. Sin darse cuenta, arrugó el afiche entre sus dedos.
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  • -ni haber parido me quita el buen cuerpo, estás curvas son eternas cariño- soltó unas risitas mientras pasaba

    #SeductibeSunday
    -ni haber parido me quita el buen cuerpo, estás curvas son eternas cariño- soltó unas risitas mientras pasaba #SeductibeSunday
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  • -Me sentía aburrido, así que improvisé una pequeña interpretación mientras me movía por toda la casa. Mis sombras veían divertidas cómo las deleitaba con mis ocurrencias. Algunas sombras hacían coro, acompañándome mientras cantaba, dando pasos atrevidos y sensuales.-

    https://youtu.be/4z2skCr_Gck?si=513KcsANe6UxQ3Ju
    -Me sentía aburrido, así que improvisé una pequeña interpretación mientras me movía por toda la casa. Mis sombras veían divertidas cómo las deleitaba con mis ocurrencias. Algunas sombras hacían coro, acompañándome mientras cantaba, dando pasos atrevidos y sensuales.- https://youtu.be/4z2skCr_Gck?si=513KcsANe6UxQ3Ju
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  • Suspira otra vez y se pone de pie, con la espalda adolorida, luego de un intento más que termina en fracaso, su transferencia no está funcionando, no logra tomar el cuerpo de Chroma, solo a 2 metros de él, aun yace como una estatua sin vida, de pie con la vista hacia el vacío.

    Luego contempla sus propias manos, las cicatrices no se han ido y se fija en las manos de Chroma, posee las mismas heridas en la palma de sus manos, es demasiado extraño, le cuesta mucho formar sus puños porque nuevamente el dolor visita su mente.

    - Creo que aun no puedo volver a mi Warframe.
    Suspira otra vez y se pone de pie, con la espalda adolorida, luego de un intento más que termina en fracaso, su transferencia no está funcionando, no logra tomar el cuerpo de Chroma, solo a 2 metros de él, aun yace como una estatua sin vida, de pie con la vista hacia el vacío. Luego contempla sus propias manos, las cicatrices no se han ido y se fija en las manos de Chroma, posee las mismas heridas en la palma de sus manos, es demasiado extraño, le cuesta mucho formar sus puños porque nuevamente el dolor visita su mente. - Creo que aun no puedo volver a mi Warframe.
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  • ¿Sabes? Siempre me ha fascinado lo que un simple empujón puede hacer.
    Tan directo... tan íntimo.

    Oh, no te asustes. No es nada que no hayas sentido antes.
    Una entrada profunda, un jadeo entrecortado, la piel erizándose al contacto.

    ¿No te parece curioso cómo algunos lo llaman “penetración”?

    Tantas emociones se despiertan cuando se profana el cuerpo~

    Adrenalina... Un grito... Una lágrima...

    Adoro llegar al momento en que se vuelve imposible distinguir si es el dolor el que alimenta tus gemidos. O placer <3

    #SeductiveSunday
    ¿Sabes? Siempre me ha fascinado lo que un simple empujón puede hacer. Tan directo... tan íntimo. Oh, no te asustes. No es nada que no hayas sentido antes. Una entrada profunda, un jadeo entrecortado, la piel erizándose al contacto. ¿No te parece curioso cómo algunos lo llaman “penetración”? Tantas emociones se despiertan cuando se profana el cuerpo~ Adrenalina... Un grito... Una lágrima... Adoro llegar al momento en que se vuelve imposible distinguir si es el dolor el que alimenta tus gemidos. O placer <3 #SeductiveSunday
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  • Seductive Sunday
    Recuerda hidratarte. No solo el cuerpo lo agradece... también el alma.

    Hay días en que el calor aprieta, la piel arde y el tiempo parece detenerse.
    Días que invitan a deshacerse de todo peso innecesario, a buscar refugio en el agua, en el silencio, en lo esencial.

    Hoy, el mejor consejo es simple:
    Hidrátate. Refresca tu cuerpo, calma tu mente.
    El calor puede ser implacable, pero el placer de combatirlo está al alcance de una gota, de un suspiro... o de un baño.

    No subestimes el arte de detenerte.
    No subestimes el arte de cuidarte.

    Nos vemos en la próxima melodía.
    – Haneul

    #SeductiveSunday #StayCool #Haneul #SummerWhispers #RefrescaTuAlma
    🕶️ Seductive Sunday ☀️ Recuerda hidratarte. No solo el cuerpo lo agradece... también el alma. Hay días en que el calor aprieta, la piel arde y el tiempo parece detenerse. Días que invitan a deshacerse de todo peso innecesario, a buscar refugio en el agua, en el silencio, en lo esencial. Hoy, el mejor consejo es simple: Hidrátate. Refresca tu cuerpo, calma tu mente. El calor puede ser implacable, pero el placer de combatirlo está al alcance de una gota, de un suspiro... o de un baño. No subestimes el arte de detenerte. No subestimes el arte de cuidarte. Nos vemos en la próxima melodía. – Haneul #SeductiveSunday #StayCool #Haneul #SummerWhispers #RefrescaTuAlma
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