𝐖𝐇𝐘 𝐀𝐋𝐖𝐀𝐘𝐒 𝐌𝐄!? | 𝕻𝖗𝖔𝖑𝖔𝖌𝖚𝖊 – 𝕮𝖍𝖆𝖕𝖙𝖊𝖗 [𝟑]
La noche era eterna en ese momento donde la vida para él ya no valía absolutamente nada. Los policías lo tenían allí, golpeado, lastimado y una 9mm apuntando a su rostro.
Aquél policía, no se contuvo, era la corrupción que gobernaba en esa ciudad y hasta las autoridades hacían lo que se les plazca. Fue un destello, un disparo certero en la cabeza de Santiago que le perforó el costado de su cabeza. La sangre comenzó a brotar de la zona perforada de una forma abundante dejando un largo camino de este.
Los causantes del acto corrieron ante esta situación asegurándose que nadie los haya visto. Subieron a la patrulla rápidamente y pisaron el acelerador.
Él, yacía allí, recostado, desvanecido, quizá esperando su muerte pero se da cuenta que sigue consciente y no vagando en el otro mundo. Cerró sus ojos en ése momento y de su espalda se desplegaron un par de alas de color negro con un aleteo débil y suave, como si tratará de escapar de ese sitio.
Abrió sus ojos nuevamente percatándose de la presencia de un auto negro y lujoso. Este se estacionó y de allí salieron varios hombres, en traje y entre ellos uno cuál tenía vestimenta distinta figurando ser el jefe. Santiago solo logró alzar su vista unos segundos para obsevar aquel grupo de hombres rodearlo antes de desvanecerse.
❝ ¡𝘌𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘦, 𝘫𝘦𝘧𝘦! 𝘌𝘭 𝘴𝘶𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘰 á𝘯𝘨𝘦𝘭 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘵á𝘣𝘢𝘮𝘰𝘴 𝘣𝘶𝘴𝘤𝘢𝘯𝘥𝘰. ❞
Alcanzó a decir uno de los hombres. El jefe, dejó ver una sonrisa y fue acercándose más a Santiago para proceder a pisar su cabeza con la suela de su zapato en ése momento. Solo escuchó unas últimas palabras de este mismo.
❝ ¡𝘗𝘦𝘳𝘧𝘦𝘤𝘵𝘰! 𝘕𝘰𝘴 𝘴𝘦𝘳á 𝘥𝘦 𝘮𝘶𝘤𝘩𝘢 𝘶𝘵𝘪𝘭𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘥𝘦𝘴𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢𝘥𝘰. 𝘕𝘰𝘴 𝘭𝘰 𝘭𝘭𝘦𝘷𝘢𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴. ❞
La noche era eterna en ese momento donde la vida para él ya no valía absolutamente nada. Los policías lo tenían allí, golpeado, lastimado y una 9mm apuntando a su rostro.
Aquél policía, no se contuvo, era la corrupción que gobernaba en esa ciudad y hasta las autoridades hacían lo que se les plazca. Fue un destello, un disparo certero en la cabeza de Santiago que le perforó el costado de su cabeza. La sangre comenzó a brotar de la zona perforada de una forma abundante dejando un largo camino de este.
Los causantes del acto corrieron ante esta situación asegurándose que nadie los haya visto. Subieron a la patrulla rápidamente y pisaron el acelerador.
Él, yacía allí, recostado, desvanecido, quizá esperando su muerte pero se da cuenta que sigue consciente y no vagando en el otro mundo. Cerró sus ojos en ése momento y de su espalda se desplegaron un par de alas de color negro con un aleteo débil y suave, como si tratará de escapar de ese sitio.
Abrió sus ojos nuevamente percatándose de la presencia de un auto negro y lujoso. Este se estacionó y de allí salieron varios hombres, en traje y entre ellos uno cuál tenía vestimenta distinta figurando ser el jefe. Santiago solo logró alzar su vista unos segundos para obsevar aquel grupo de hombres rodearlo antes de desvanecerse.
❝ ¡𝘌𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘦, 𝘫𝘦𝘧𝘦! 𝘌𝘭 𝘴𝘶𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘰 á𝘯𝘨𝘦𝘭 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘵á𝘣𝘢𝘮𝘰𝘴 𝘣𝘶𝘴𝘤𝘢𝘯𝘥𝘰. ❞
Alcanzó a decir uno de los hombres. El jefe, dejó ver una sonrisa y fue acercándose más a Santiago para proceder a pisar su cabeza con la suela de su zapato en ése momento. Solo escuchó unas últimas palabras de este mismo.
❝ ¡𝘗𝘦𝘳𝘧𝘦𝘤𝘵𝘰! 𝘕𝘰𝘴 𝘴𝘦𝘳á 𝘥𝘦 𝘮𝘶𝘤𝘩𝘢 𝘶𝘵𝘪𝘭𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘥𝘦𝘴𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢𝘥𝘰. 𝘕𝘰𝘴 𝘭𝘰 𝘭𝘭𝘦𝘷𝘢𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴. ❞
𝐖𝐇𝐘 𝐀𝐋𝐖𝐀𝐘𝐒 𝐌𝐄!? | 𝕻𝖗𝖔𝖑𝖔𝖌𝖚𝖊 – 𝕮𝖍𝖆𝖕𝖙𝖊𝖗 [𝟑]
La noche era eterna en ese momento donde la vida para él ya no valía absolutamente nada. Los policías lo tenían allí, golpeado, lastimado y una 9mm apuntando a su rostro.
Aquél policía, no se contuvo, era la corrupción que gobernaba en esa ciudad y hasta las autoridades hacían lo que se les plazca. Fue un destello, un disparo certero en la cabeza de Santiago que le perforó el costado de su cabeza. La sangre comenzó a brotar de la zona perforada de una forma abundante dejando un largo camino de este.
Los causantes del acto corrieron ante esta situación asegurándose que nadie los haya visto. Subieron a la patrulla rápidamente y pisaron el acelerador.
Él, yacía allí, recostado, desvanecido, quizá esperando su muerte pero se da cuenta que sigue consciente y no vagando en el otro mundo. Cerró sus ojos en ése momento y de su espalda se desplegaron un par de alas de color negro con un aleteo débil y suave, como si tratará de escapar de ese sitio.
Abrió sus ojos nuevamente percatándose de la presencia de un auto negro y lujoso. Este se estacionó y de allí salieron varios hombres, en traje y entre ellos uno cuál tenía vestimenta distinta figurando ser el jefe. Santiago solo logró alzar su vista unos segundos para obsevar aquel grupo de hombres rodearlo antes de desvanecerse.
❝ ¡𝘌𝘴 𝘦𝘴𝘵𝘦, 𝘫𝘦𝘧𝘦! 𝘌𝘭 𝘴𝘶𝘱𝘶𝘦𝘴𝘵𝘰 á𝘯𝘨𝘦𝘭 𝘲𝘶𝘦 𝘦𝘴𝘵á𝘣𝘢𝘮𝘰𝘴 𝘣𝘶𝘴𝘤𝘢𝘯𝘥𝘰. ❞
Alcanzó a decir uno de los hombres. El jefe, dejó ver una sonrisa y fue acercándose más a Santiago para proceder a pisar su cabeza con la suela de su zapato en ése momento. Solo escuchó unas últimas palabras de este mismo.
❝ ¡𝘗𝘦𝘳𝘧𝘦𝘤𝘵𝘰! 𝘕𝘰𝘴 𝘴𝘦𝘳á 𝘥𝘦 𝘮𝘶𝘤𝘩𝘢 𝘶𝘵𝘪𝘭𝘪𝘥𝘢𝘥 𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘥𝘦𝘴𝘨𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢𝘥𝘰. 𝘕𝘰𝘴 𝘭𝘰 𝘭𝘭𝘦𝘷𝘢𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴. ❞


