๐๐๐ ๐๐๐๐๐๐ ๐๐!? | ๐ป๐๐๐๐๐๐๐ – ๐ฎ๐๐๐๐๐๐ [๐]
La noche era eterna en ese momento donde la vida para él ya no valía absolutamente nada. Los policías lo tenían allí, golpeado, lastimado y una 9mm apuntando a su rostro.
Aquél policía, no se contuvo, era la corrupción que gobernaba en esa ciudad y hasta las autoridades hacían lo que se les plazca. Fue un destello, un disparo certero en la cabeza de Santiago que le perforó el costado de su cabeza. La sangre comenzó a brotar de la zona perforada de una forma abundante dejando un largo camino de este.
Los causantes del acto corrieron ante esta situación asegurándose que nadie los haya visto. Subieron a la patrulla rápidamente y pisaron el acelerador.
Él, yacía allí, recostado, desvanecido, quizá esperando su muerte pero se da cuenta que sigue consciente y no vagando en el otro mundo. Cerró sus ojos en ése momento y de su espalda se desplegaron un par de alas de color negro con un aleteo débil y suave, como si tratará de escapar de ese sitio.
Abrió sus ojos nuevamente percatándose de la presencia de un auto negro y lujoso. Este se estacionó y de allí salieron varios hombres, en traje y entre ellos uno cuál tenía vestimenta distinta figurando ser el jefe. Santiago solo logró alzar su vista unos segundos para obsevar aquel grupo de hombres rodearlo antes de desvanecerse.
โ ¡๐๐ด ๐ฆ๐ด๐ต๐ฆ, ๐ซ๐ฆ๐ง๐ฆ! ๐๐ญ ๐ด๐ถ๐ฑ๐ถ๐ฆ๐ด๐ต๐ฐ á๐ฏ๐จ๐ฆ๐ญ ๐ฒ๐ถ๐ฆ ๐ฆ๐ด๐ตá๐ฃ๐ข๐ฎ๐ฐ๐ด ๐ฃ๐ถ๐ด๐ค๐ข๐ฏ๐ฅ๐ฐ. โ
Alcanzó a decir uno de los hombres. El jefe, dejó ver una sonrisa y fue acercándose más a Santiago para proceder a pisar su cabeza con la suela de su zapato en ése momento. Solo escuchó unas últimas palabras de este mismo.
โ ¡๐๐ฆ๐ณ๐ง๐ฆ๐ค๐ต๐ฐ! ๐๐ฐ๐ด ๐ด๐ฆ๐ณá ๐ฅ๐ฆ ๐ฎ๐ถ๐ค๐ฉ๐ข ๐ถ๐ต๐ช๐ญ๐ช๐ฅ๐ข๐ฅ ๐ฆ๐ด๐ต๐ฆ ๐ฅ๐ฆ๐ด๐จ๐ณ๐ข๐ค๐ช๐ข๐ฅ๐ฐ. ๐๐ฐ๐ด ๐ญ๐ฐ ๐ญ๐ญ๐ฆ๐ท๐ข๐ณ๐ฆ๐ฎ๐ฐ๐ด. โ
La noche era eterna en ese momento donde la vida para él ya no valía absolutamente nada. Los policías lo tenían allí, golpeado, lastimado y una 9mm apuntando a su rostro.
Aquél policía, no se contuvo, era la corrupción que gobernaba en esa ciudad y hasta las autoridades hacían lo que se les plazca. Fue un destello, un disparo certero en la cabeza de Santiago que le perforó el costado de su cabeza. La sangre comenzó a brotar de la zona perforada de una forma abundante dejando un largo camino de este.
Los causantes del acto corrieron ante esta situación asegurándose que nadie los haya visto. Subieron a la patrulla rápidamente y pisaron el acelerador.
Él, yacía allí, recostado, desvanecido, quizá esperando su muerte pero se da cuenta que sigue consciente y no vagando en el otro mundo. Cerró sus ojos en ése momento y de su espalda se desplegaron un par de alas de color negro con un aleteo débil y suave, como si tratará de escapar de ese sitio.
Abrió sus ojos nuevamente percatándose de la presencia de un auto negro y lujoso. Este se estacionó y de allí salieron varios hombres, en traje y entre ellos uno cuál tenía vestimenta distinta figurando ser el jefe. Santiago solo logró alzar su vista unos segundos para obsevar aquel grupo de hombres rodearlo antes de desvanecerse.
โ ¡๐๐ด ๐ฆ๐ด๐ต๐ฆ, ๐ซ๐ฆ๐ง๐ฆ! ๐๐ญ ๐ด๐ถ๐ฑ๐ถ๐ฆ๐ด๐ต๐ฐ á๐ฏ๐จ๐ฆ๐ญ ๐ฒ๐ถ๐ฆ ๐ฆ๐ด๐ตá๐ฃ๐ข๐ฎ๐ฐ๐ด ๐ฃ๐ถ๐ด๐ค๐ข๐ฏ๐ฅ๐ฐ. โ
Alcanzó a decir uno de los hombres. El jefe, dejó ver una sonrisa y fue acercándose más a Santiago para proceder a pisar su cabeza con la suela de su zapato en ése momento. Solo escuchó unas últimas palabras de este mismo.
โ ¡๐๐ฆ๐ณ๐ง๐ฆ๐ค๐ต๐ฐ! ๐๐ฐ๐ด ๐ด๐ฆ๐ณá ๐ฅ๐ฆ ๐ฎ๐ถ๐ค๐ฉ๐ข ๐ถ๐ต๐ช๐ญ๐ช๐ฅ๐ข๐ฅ ๐ฆ๐ด๐ต๐ฆ ๐ฅ๐ฆ๐ด๐จ๐ณ๐ข๐ค๐ช๐ข๐ฅ๐ฐ. ๐๐ฐ๐ด ๐ญ๐ฐ ๐ญ๐ญ๐ฆ๐ท๐ข๐ณ๐ฆ๐ฎ๐ฐ๐ด. โ
๐๐๐ ๐๐๐๐๐๐ ๐๐!? | ๐ป๐๐๐๐๐๐๐ – ๐ฎ๐๐๐๐๐๐ [๐]
La noche era eterna en ese momento donde la vida para él ya no valía absolutamente nada. Los policías lo tenían allí, golpeado, lastimado y una 9mm apuntando a su rostro.
Aquél policía, no se contuvo, era la corrupción que gobernaba en esa ciudad y hasta las autoridades hacían lo que se les plazca. Fue un destello, un disparo certero en la cabeza de Santiago que le perforó el costado de su cabeza. La sangre comenzó a brotar de la zona perforada de una forma abundante dejando un largo camino de este.
Los causantes del acto corrieron ante esta situación asegurándose que nadie los haya visto. Subieron a la patrulla rápidamente y pisaron el acelerador.
Él, yacía allí, recostado, desvanecido, quizá esperando su muerte pero se da cuenta que sigue consciente y no vagando en el otro mundo. Cerró sus ojos en ése momento y de su espalda se desplegaron un par de alas de color negro con un aleteo débil y suave, como si tratará de escapar de ese sitio.
Abrió sus ojos nuevamente percatándose de la presencia de un auto negro y lujoso. Este se estacionó y de allí salieron varios hombres, en traje y entre ellos uno cuál tenía vestimenta distinta figurando ser el jefe. Santiago solo logró alzar su vista unos segundos para obsevar aquel grupo de hombres rodearlo antes de desvanecerse.
โ ¡๐๐ด ๐ฆ๐ด๐ต๐ฆ, ๐ซ๐ฆ๐ง๐ฆ! ๐๐ญ ๐ด๐ถ๐ฑ๐ถ๐ฆ๐ด๐ต๐ฐ á๐ฏ๐จ๐ฆ๐ญ ๐ฒ๐ถ๐ฆ ๐ฆ๐ด๐ตá๐ฃ๐ข๐ฎ๐ฐ๐ด ๐ฃ๐ถ๐ด๐ค๐ข๐ฏ๐ฅ๐ฐ. โ
Alcanzó a decir uno de los hombres. El jefe, dejó ver una sonrisa y fue acercándose más a Santiago para proceder a pisar su cabeza con la suela de su zapato en ése momento. Solo escuchó unas últimas palabras de este mismo.
โ ¡๐๐ฆ๐ณ๐ง๐ฆ๐ค๐ต๐ฐ! ๐๐ฐ๐ด ๐ด๐ฆ๐ณá ๐ฅ๐ฆ ๐ฎ๐ถ๐ค๐ฉ๐ข ๐ถ๐ต๐ช๐ญ๐ช๐ฅ๐ข๐ฅ ๐ฆ๐ด๐ต๐ฆ ๐ฅ๐ฆ๐ด๐จ๐ณ๐ข๐ค๐ช๐ข๐ฅ๐ฐ. ๐๐ฐ๐ด ๐ญ๐ฐ ๐ญ๐ญ๐ฆ๐ท๐ข๐ณ๐ฆ๐ฎ๐ฐ๐ด. โ


