• El Valle del Lamento
    Fandom Mo Dao Zu Shi
    Categoría Fantasía
    Starter libre
    Título: El Valle del Lamento


    El viento soplaba con fuerza entre las montañas, arrastrando consigo las hojas secas que cubrían el suelo.

    El aire estaba cargado de una energía oscura, un presagio inquietante que hacía que los árboles susurraran.

    Wei Wuxian caminaba sin rumbo fijo entre las rocas y el follaje.

    A pesar de la quietud del lugar, el ambiente parecía estar lleno de presencias. Wei Wuxian detuvo su marcha, percibiendo una leve vibración en el aire.

    Una risa suave, casi inaudible, se filtró entre los susurros de la naturaleza. Una risa que le resultaba… familiar.

    —¿Ya has vuelto, huh? —murmuró para sí mismo, los ojos entrecerrados, su mirada fija en la sombra que se movía entre los árboles.

    Un paso atrás y un suspiro. La magia de la cultivación fluyó por su cuerpo, casi como si hubiera estado esperando a despertar. Pero algo era diferente, algo no estaba bien. Las huellas de un viejo enemigo parecían dejarse sentir en cada rincón del valle.

    ¿Quién había osado revivir los ecos de su pasado en este lugar olvidado? Era una pregunta que Wei Wuxian ya intuía, pero prefería no responder todavía.

    De repente, el aire se volvió más espeso, las sombras parecían cobrar vida y, en el centro de todo eso, una figura emergió lentamente.
    ✨ Starter libre ✨ 🌿 Título: El Valle del Lamento 🌿 El viento soplaba con fuerza entre las montañas, arrastrando consigo las hojas secas que cubrían el suelo. El aire estaba cargado de una energía oscura, un presagio inquietante que hacía que los árboles susurraran. Wei Wuxian caminaba sin rumbo fijo entre las rocas y el follaje. A pesar de la quietud del lugar, el ambiente parecía estar lleno de presencias. Wei Wuxian detuvo su marcha, percibiendo una leve vibración en el aire. Una risa suave, casi inaudible, se filtró entre los susurros de la naturaleza. Una risa que le resultaba… familiar. —¿Ya has vuelto, huh? —murmuró para sí mismo, los ojos entrecerrados, su mirada fija en la sombra que se movía entre los árboles. Un paso atrás y un suspiro. La magia de la cultivación fluyó por su cuerpo, casi como si hubiera estado esperando a despertar. Pero algo era diferente, algo no estaba bien. Las huellas de un viejo enemigo parecían dejarse sentir en cada rincón del valle. ¿Quién había osado revivir los ecos de su pasado en este lugar olvidado? Era una pregunta que Wei Wuxian ya intuía, pero prefería no responder todavía. De repente, el aire se volvió más espeso, las sombras parecían cobrar vida y, en el centro de todo eso, una figura emergió lentamente.
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  • **El Errante y el Dragón Azul**

    El mundo se abría ante Jimoto como un lienzo infinito, cada viaje una pincelada de experiencias, cada encuentro una historia por contar. Había recorrido valles dorados donde el trigo bailaba con el viento, selvas densas donde la vida vibraba en cada sombra, y desiertos tan vastos que las estrellas parecían más cercanas. Pero fue en las Montañas Esmeralda donde su destino se entrelazó con el de una criatura legendaria.

    El día en que conoció a Shunrei, el Dragón Azul, la neblina cubría los riscos como un manto. Jimoto había oído rumores sobre un ser majestuoso que protegía esas tierras, pero lo que encontró fue una batalla injusta.

    Un grupo de cazadores y taladores clandestinos había invadido el bosque sagrado de la montaña, armados con armas y sierras, listos para acabar con todo lo que se interpusiera en su camino. En el centro del conflicto, Shunrei rugía con furia, su enorme cuerpo de escamas azul celeste reflejando la luz entre los árboles. Su aliento crepitaba con energía, pero algo no estaba bien: sus alas estaban heridas, y aunque peleaba con fiereza, los cazadores lo superaban en número.

    Jimoto no lo pensó dos veces. Se lanzó entre los atacantes con la destreza que había perfeccionado en sus viajes. Con movimientos rápidos, derribó a los taladores más cercanos, arrebatándoles sus herramientas. Usó su velocidad y fuerza para confundir a los cazadores, derribando sin causar mayor daño pues solo quería auyentarles, cuando el líder de los invasores intentó atacar con una daga envenenada, Jimoto la interceptó con su propia mano, partiéndola en dos con un solo movimiento.

    El bosque quedó en silencio. Los cazadores, atónitos, entendieron que no podrían ganar. Uno a uno, huyeron dejando atrás su equipo y su orgullo.

    Shunrei, aún receloso, lo observó con ojos de un azul profundo. Jimoto sintió algo extraño en su mente, como un murmullo antiguo, un lenguaje que no debería entender… pero lo hizo.

    —*Tú… ¿puedes oírme?* —la voz de Shunrei resonó en su mente, profunda y sabia.

    Jimoto parpadeó, sorprendido.

    —Sí… ¿cómo es posible?

    Shunrei inclinó su gran cabeza, inspeccionándolo con curiosidad.

    —*Durante siglos, los humanos han intentado hablarme, pero nunca han comprendido mis palabras. Eres el primero… el único.*

    Desde ese día, Jimoto y Shunrei forjaron una amistad única. El dragón, antiguo guardián de las montañas, compartía con él los secretos de la naturaleza y la historia de los tiempos olvidados. Jimoto, a su vez, le contaba sobre el mundo de los humanos, sobre los lugares que había visto y las maravillas que aún deseaba conocer.

    Juntos, viajaron más allá de las montañas, explorando lo desconocido. Donde Jimoto encontraba peligro, Shunrei lo protegía. Donde el dragón hallaba desesperanza en la humanidad, Jimoto le mostraba la bondad que aún existía.

    Eran diferentes en todo sentido, pero en su soledad compartida encontraron un lazo irrompible. Un viajero de las estrellas y un guardián ancestral, unidos por un destino que aún estaba por escribirse.
    **El Errante y el Dragón Azul** El mundo se abría ante Jimoto como un lienzo infinito, cada viaje una pincelada de experiencias, cada encuentro una historia por contar. Había recorrido valles dorados donde el trigo bailaba con el viento, selvas densas donde la vida vibraba en cada sombra, y desiertos tan vastos que las estrellas parecían más cercanas. Pero fue en las Montañas Esmeralda donde su destino se entrelazó con el de una criatura legendaria. El día en que conoció a Shunrei, el Dragón Azul, la neblina cubría los riscos como un manto. Jimoto había oído rumores sobre un ser majestuoso que protegía esas tierras, pero lo que encontró fue una batalla injusta. Un grupo de cazadores y taladores clandestinos había invadido el bosque sagrado de la montaña, armados con armas y sierras, listos para acabar con todo lo que se interpusiera en su camino. En el centro del conflicto, Shunrei rugía con furia, su enorme cuerpo de escamas azul celeste reflejando la luz entre los árboles. Su aliento crepitaba con energía, pero algo no estaba bien: sus alas estaban heridas, y aunque peleaba con fiereza, los cazadores lo superaban en número. Jimoto no lo pensó dos veces. Se lanzó entre los atacantes con la destreza que había perfeccionado en sus viajes. Con movimientos rápidos, derribó a los taladores más cercanos, arrebatándoles sus herramientas. Usó su velocidad y fuerza para confundir a los cazadores, derribando sin causar mayor daño pues solo quería auyentarles, cuando el líder de los invasores intentó atacar con una daga envenenada, Jimoto la interceptó con su propia mano, partiéndola en dos con un solo movimiento. El bosque quedó en silencio. Los cazadores, atónitos, entendieron que no podrían ganar. Uno a uno, huyeron dejando atrás su equipo y su orgullo. Shunrei, aún receloso, lo observó con ojos de un azul profundo. Jimoto sintió algo extraño en su mente, como un murmullo antiguo, un lenguaje que no debería entender… pero lo hizo. —*Tú… ¿puedes oírme?* —la voz de Shunrei resonó en su mente, profunda y sabia. Jimoto parpadeó, sorprendido. —Sí… ¿cómo es posible? Shunrei inclinó su gran cabeza, inspeccionándolo con curiosidad. —*Durante siglos, los humanos han intentado hablarme, pero nunca han comprendido mis palabras. Eres el primero… el único.* Desde ese día, Jimoto y Shunrei forjaron una amistad única. El dragón, antiguo guardián de las montañas, compartía con él los secretos de la naturaleza y la historia de los tiempos olvidados. Jimoto, a su vez, le contaba sobre el mundo de los humanos, sobre los lugares que había visto y las maravillas que aún deseaba conocer. Juntos, viajaron más allá de las montañas, explorando lo desconocido. Donde Jimoto encontraba peligro, Shunrei lo protegía. Donde el dragón hallaba desesperanza en la humanidad, Jimoto le mostraba la bondad que aún existía. Eran diferentes en todo sentido, pero en su soledad compartida encontraron un lazo irrompible. Un viajero de las estrellas y un guardián ancestral, unidos por un destino que aún estaba por escribirse.
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  • El que ha desplazado la montaña es el que comenzó por quitar las pequeñas piedras.
    El que ha desplazado la montaña es el que comenzó por quitar las pequeñas piedras.
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  • -Sun Wukong nació de una piedra mítica del Monte Huaguo, la Montaña de las Flores y Frutas. La piedra tomó la forma de un híbrido mitad hombre y mitad mono (Espiritu Mono), creado a partir de la esencia del cielo y de la tierra, concebido por el sol y la luna, siendo la creación misma del cielo y de la tierra. Después de unirse a un clan de monos, lo llamaron Mono Piedra, este se ganó su respeto por el descubrimiento de la Cueva Cortina de Agua, detrás de una gran cascada; donde el clan hizo su nuevo hogar. Los otros monos lo nombraron como su rey, dandole el título "El apuesto Rey Mono". No obstante, su mejor amigo ya viejo, una tarde se desplomo muerto en el risco de una montaña, pronto se dió cuenta que el también con el tiempo iba a morir, de que a pesar de su poder sobre los monos, era un simple mortal. Decidido a encontrar la inmortalidad, viajó en una balsa a tierras civilizadas, al mundo de los humanos en la búsqueda del inmortal maestro taoísta, Subhuti, inicialmente estaba reacio a ilustrarlo porque no era humano; pero la insistencia del mono impresionó al maestro, aceptandolo cómo su discipulo.-
    -Sun Wukong nació de una piedra mítica del Monte Huaguo, la Montaña de las Flores y Frutas. La piedra tomó la forma de un híbrido mitad hombre y mitad mono (Espiritu Mono), creado a partir de la esencia del cielo y de la tierra, concebido por el sol y la luna, siendo la creación misma del cielo y de la tierra. Después de unirse a un clan de monos, lo llamaron Mono Piedra, este se ganó su respeto por el descubrimiento de la Cueva Cortina de Agua, detrás de una gran cascada; donde el clan hizo su nuevo hogar. Los otros monos lo nombraron como su rey, dandole el título "El apuesto Rey Mono". No obstante, su mejor amigo ya viejo, una tarde se desplomo muerto en el risco de una montaña, pronto se dió cuenta que el también con el tiempo iba a morir, de que a pesar de su poder sobre los monos, era un simple mortal. Decidido a encontrar la inmortalidad, viajó en una balsa a tierras civilizadas, al mundo de los humanos en la búsqueda del inmortal maestro taoísta, Subhuti, inicialmente estaba reacio a ilustrarlo porque no era humano; pero la insistencia del mono impresionó al maestro, aceptandolo cómo su discipulo.-
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  • En la última semana, Apolo y Ellie han fortalecido su relación durante su viaje a Disneyland París, compartiendo momentos de amor, diversión y descubrimientos inesperados.

    Comenzaron explorando el parque, disfrutando de atracciones y espectáculos, con Ellie emocionada por encontrar a sus princesas favoritas, especialmente Rapunzel y Ariel. A lo largo del viaje, su conexión se volvió más profunda, culminando en una noche de pasión donde Apolo, en un arrebato de amor, la marcó como suya con una mordida. Sin embargo, este acto resultó ser mucho más que un simple gesto de posesión: al parecer, la marca divina tenía implicaciones que ninguno de los dos esperaba.

    Ellie comenzó a experimentar cambios sutiles en su cuerpo, lo que les llevó a darse cuenta de que la mordida de Apolo podría estar transformándola en algo más… posiblemente inmortal. A pesar de su amor por él, la revelación la asustó, y aunque no rechazó la conexión, pidió tiempo para procesarlo. Apolo, siempre paciente y protector, le aseguró que no la presionaría y que enfrentarían cualquier cambio juntos.

    Tras esta revelación, la pareja decidió no dejar que el miedo arruinara su viaje y continuaron disfrutando de su tiempo juntos. Entre juegos, bromas y muestras de cariño, Ellie insistió en buscar a Rapunzel y Ariel, mientras Apolo, rendido a sus encantos, se comprometió a hacer de su día en el parque una aventura inolvidable, incluyendo montañas rusas y paseos en trenecitos.

    Ahora, con el misterio de la marca aún latente, pero con su amor más fuerte que nunca, Apolo y Ellie siguen disfrutando de su viaje, sabiendo que, sin importar lo que venga, lo enfrentarán juntos.
    En la última semana, Apolo y [GIRL0FSADNESS] han fortalecido su relación durante su viaje a Disneyland París, compartiendo momentos de amor, diversión y descubrimientos inesperados. Comenzaron explorando el parque, disfrutando de atracciones y espectáculos, con Ellie emocionada por encontrar a sus princesas favoritas, especialmente Rapunzel y Ariel. A lo largo del viaje, su conexión se volvió más profunda, culminando en una noche de pasión donde Apolo, en un arrebato de amor, la marcó como suya con una mordida. Sin embargo, este acto resultó ser mucho más que un simple gesto de posesión: al parecer, la marca divina tenía implicaciones que ninguno de los dos esperaba. Ellie comenzó a experimentar cambios sutiles en su cuerpo, lo que les llevó a darse cuenta de que la mordida de Apolo podría estar transformándola en algo más… posiblemente inmortal. A pesar de su amor por él, la revelación la asustó, y aunque no rechazó la conexión, pidió tiempo para procesarlo. Apolo, siempre paciente y protector, le aseguró que no la presionaría y que enfrentarían cualquier cambio juntos. Tras esta revelación, la pareja decidió no dejar que el miedo arruinara su viaje y continuaron disfrutando de su tiempo juntos. Entre juegos, bromas y muestras de cariño, Ellie insistió en buscar a Rapunzel y Ariel, mientras Apolo, rendido a sus encantos, se comprometió a hacer de su día en el parque una aventura inolvidable, incluyendo montañas rusas y paseos en trenecitos. Ahora, con el misterio de la marca aún latente, pero con su amor más fuerte que nunca, Apolo y Ellie siguen disfrutando de su viaje, sabiendo que, sin importar lo que venga, lo enfrentarán juntos.
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  • Si no soy yo quién está en la cima, solo tengo que volver a subir la montaña.
    Si no soy yo quién está en la cima, solo tengo que volver a subir la montaña.
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  • Nací en mi reino, el Monte Huago se cree que fue hace unos 4.000 atrás aproximadamente. El Monte Huago, la Montaña de Flores y Frutas de Aioli se encuentra en China en un lugar aislado de la humanidad.
    Nací en mi reino, el Monte Huago se cree que fue hace unos 4.000 atrás aproximadamente. El Monte Huago, la Montaña de Flores y Frutas de Aioli se encuentra en China en un lugar aislado de la humanidad.
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  • El Gran Sabio Tan Grande Cómo El Cielo
    Fandom Viaje al Oeste/Crossover
    Categoría Original

    -Una noche ya habia caído en ese bosque de tierras nuevas, caminando por ese lugar un ser se apróxima lentamente. La luz de la luna se refleja sobre ese ser, un hombre con los rasgos chinos de un mono de pelaje dorado; ataviado con armadura dorada china digna de un rey, acompañada de una gran capa roja que cae sobre su espalda, una corona china dorado adorna su cabeza; sobre sus hombros descansa su báculo ságrado con puntas de oro, la vara complaciente que alguna vez fue el pilar de los Oceanos llamada Ru Yi Bang. Sun Wukong, el Apuesto Rey Mono y el Gran Sabio tan grande cómo el Cielo, la leyenda china viviente sobre un legendario guerrero que desató la guerra en el Cielo de las dioses chinos en su búsqueda de la inmortalidad, adquiriendo los poderes de un Dios por su sed de poder luego confinado a 500 años bajo una montaña por Buda, y liberado por la Diosa Guan Yin, ordenandolo monje budista para poder perdonar su castigo y protegerá a su segundo maestro junto a sus condiscipulos, sus nuevos hermanos mientras estuviera en el camino del budismo. Sun Wukong fue ascendido a buda al iluminarse tras cumplir su misión ságrada de proteger a su maestro y conseguir las ságradas escrituras; Buda Tathagata lo ascendió bajo el título de Buda Luchador Victorioso.

    Pero las cosas para Sun Wukong no terminaron allí, cómo todo hombre, rey y deidad siguió con su vida adelante: redimiendo demonios, enseñando a los mortales para que tomarán el camino recto de la budeidad camino hacia la iluminación cómo monje budista.

    El Gran Sabio continua merodeando por ese bosque esperando encontrarse con algúnmortal y otra clase de ser y de pasó, ver si podría ser de ayuda mientras estuviera en territorio ajeno.-
    -Una noche ya habia caído en ese bosque de tierras nuevas, caminando por ese lugar un ser se apróxima lentamente. La luz de la luna se refleja sobre ese ser, un hombre con los rasgos chinos de un mono de pelaje dorado; ataviado con armadura dorada china digna de un rey, acompañada de una gran capa roja que cae sobre su espalda, una corona china dorado adorna su cabeza; sobre sus hombros descansa su báculo ságrado con puntas de oro, la vara complaciente que alguna vez fue el pilar de los Oceanos llamada Ru Yi Bang. Sun Wukong, el Apuesto Rey Mono y el Gran Sabio tan grande cómo el Cielo, la leyenda china viviente sobre un legendario guerrero que desató la guerra en el Cielo de las dioses chinos en su búsqueda de la inmortalidad, adquiriendo los poderes de un Dios por su sed de poder luego confinado a 500 años bajo una montaña por Buda, y liberado por la Diosa Guan Yin, ordenandolo monje budista para poder perdonar su castigo y protegerá a su segundo maestro junto a sus condiscipulos, sus nuevos hermanos mientras estuviera en el camino del budismo. Sun Wukong fue ascendido a buda al iluminarse tras cumplir su misión ságrada de proteger a su maestro y conseguir las ságradas escrituras; Buda Tathagata lo ascendió bajo el título de Buda Luchador Victorioso. Pero las cosas para Sun Wukong no terminaron allí, cómo todo hombre, rey y deidad siguió con su vida adelante: redimiendo demonios, enseñando a los mortales para que tomarán el camino recto de la budeidad camino hacia la iluminación cómo monje budista. El Gran Sabio continua merodeando por ese bosque esperando encontrarse con algúnmortal y otra clase de ser y de pasó, ver si podría ser de ayuda mientras estuviera en territorio ajeno.-
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  • A la estrella nocturna

    ¡Tú, ángel rubio de la noche,
    ahora, mientras el sol descansa en las montañas, enciende
    tu brillante tea de amor! ¡Ponte la radiante corona
    y sonríe a nuestro lecho nocturno!
    Sonríe a nuestros amores y, mientras corres los
    azules cortinajes del cielo, siembra tu rocío plateado
    sobre todas las flores que cierran sus dulces ojos
    al oportuno sueño. Que tu viento occidental duerma en
    el lago. Di el silencio con el fulgor de tus ojos
    y lava el polvo con plata. Presto, prestísimo,
    te retiras; y entonces ladra, rabioso, por doquier el lobo
    y el león echa fuego por los ojos en la oscura selva.
    La lana de nuestras majadas se cubre con
    tu sacro rocío; protégelas con tu favor

    -El joven leía el poema en voz alta -
    A la estrella nocturna ¡Tú, ángel rubio de la noche, ahora, mientras el sol descansa en las montañas, enciende tu brillante tea de amor! ¡Ponte la radiante corona y sonríe a nuestro lecho nocturno! Sonríe a nuestros amores y, mientras corres los azules cortinajes del cielo, siembra tu rocío plateado sobre todas las flores que cierran sus dulces ojos al oportuno sueño. Que tu viento occidental duerma en el lago. Di el silencio con el fulgor de tus ojos y lava el polvo con plata. Presto, prestísimo, te retiras; y entonces ladra, rabioso, por doquier el lobo y el león echa fuego por los ojos en la oscura selva. La lana de nuestras majadas se cubre con tu sacro rocío; protégelas con tu favor -El joven leía el poema en voz alta -
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