• ───Si me relegan al segundo plano, no esperen que permanezca en escena.

    No vine a ocupar un rincón entre sus distracciones, ni a mendigar atención donde no se me concede el lugar que merezco.

    Prefiero retirarme con la frente en alto, antes que diluirme en la espera de quien no sabe valorar mi presencia.

    Mi tiempo no es moneda común, ni mi paciencia un obsequio gratuito. Quien no sabe leer mi silencio, difícilmente entenderá mi ausencia.────
    ───Si me relegan al segundo plano, no esperen que permanezca en escena. No vine a ocupar un rincón entre sus distracciones, ni a mendigar atención donde no se me concede el lugar que merezco. Prefiero retirarme con la frente en alto, antes que diluirme en la espera de quien no sabe valorar mi presencia. Mi tiempo no es moneda común, ni mi paciencia un obsequio gratuito. Quien no sabe leer mi silencio, difícilmente entenderá mi ausencia.────
    Me gusta
    Me enjaja
    Me emputece
    4
    0 turnos 0 maullidos
  • ᴛᴏᴍɪᴇ ᴋᴀᴡᴀᴋᴀᴍɪ
    Misa Amane
    Emma Mayers

    +Eran las 11 cm de la noche, en un bar de categoria en el centro de la ciudad, habia escuchado que el sitio era uno de lo mas frecuentados. Y naturalmente decidio que era buena idea ir, estaba segura que podria encontrar mas de una historia interesante en aquel lugar. Pero no iba sola habia invitado a alguien que conocio a hace poco pero ya consideraba una amiga a ir con ella. Por lo que al abrir las puertas del lugar, ingresaba sujetando del brazo a una joven de rubia cabellera+

    +Apenas ingresaban verian las luces de Neon rojo que iluminan la barra+ Vamos a pedir algo de tomar. Seguro que esta noche encontramos algo interesante. Escuche que este lugar es popular. Y si quieres encontrar historias uno de los mejores sitios a visitar es donde la gente se reune a beber. Asi que estamos en el sitio correcto . Al momento de llegar a la barra mostraria una gran sonrisa+ 2 copas de vino porfavor +Dijo al Bartender quedando en espera de recibir su pedido+
    [phantom_cyan_spider_636] [lunar_garnet_rhino_909] [flare_navy_horse_241] +Eran las 11 cm de la noche, en un bar de categoria en el centro de la ciudad, habia escuchado que el sitio era uno de lo mas frecuentados. Y naturalmente decidio que era buena idea ir, estaba segura que podria encontrar mas de una historia interesante en aquel lugar. Pero no iba sola habia invitado a alguien que conocio a hace poco pero ya consideraba una amiga a ir con ella. Por lo que al abrir las puertas del lugar, ingresaba sujetando del brazo a una joven de rubia cabellera+ +Apenas ingresaban verian las luces de Neon rojo que iluminan la barra+ Vamos a pedir algo de tomar. Seguro que esta noche encontramos algo interesante. Escuche que este lugar es popular. Y si quieres encontrar historias uno de los mejores sitios a visitar es donde la gente se reune a beber. Asi que estamos en el sitio correcto . Al momento de llegar a la barra mostraria una gran sonrisa+ 2 copas de vino porfavor +Dijo al Bartender quedando en espera de recibir su pedido+
    Me encocora
    Me gusta
    Me endiabla
    10
    26 turnos 0 maullidos
  • "Una copa con la muerte"

    El murmullo del mundo se detuvo.
    Ni un suspiro, ni un tic del reloj, ni el latido más rebelde osó moverse.
    Solo él seguía ahí, reclinado en su silla, el guante negro apoyado sobre el mentón, la otra mano girando con parsimonia una copa de vino que parecía absorber la luz.

    El líquido tenía un color profundo, casi hipnótico, como si guardara siglos dentro.
    Cillian alzó la vista. Su mirada era tranquila, pero su calma tenía filo.

    —No temas —dijo, con voz baja y limpia, más cercana a un pensamiento que a un sonido—. Este es un lugar fuera de todo. Aquí no existe el tiempo, ni el juicio… solo la verdad.

    Dejó que el silencio se asentara, antes de deslizar otra copa hacia el frente.
    El vino reflejaba los destellos de una eternidad que pocos podrían soportar ver.

    —Bebe —ordenó suavemente, una sonrisa leve curvando sus labios—. Es el vino de las almas. Fino, añejo, destilado de los últimos suspiros de quienes ya no están. Cada trago… contiene un eco.

    Sus ojos brillaron apenas, un resplandor carmesí en medio de la penumbra.

    —Mientras lo bebas, el tiempo no correrá para ti.
    Podrás preguntarme lo que desees. Cualquier cosa.
    El precio es simple… —su voz se tornó casi un susurro de humo—: la verdad nunca llega sin costo.

    Apoyó el codo en la mesa, observando con detenimiento, casi con un aire de fascinación morbosa.
    La copa entre sus dedos parecía flotar, temblando con una vida propia.

    —Entonces, humano… —dijo con una elegancia perezosa, pero con un fondo de algo implacable—
    ¿qué deseas saber de la Muerte?
    "Una copa con la muerte" El murmullo del mundo se detuvo. Ni un suspiro, ni un tic del reloj, ni el latido más rebelde osó moverse. Solo él seguía ahí, reclinado en su silla, el guante negro apoyado sobre el mentón, la otra mano girando con parsimonia una copa de vino que parecía absorber la luz. El líquido tenía un color profundo, casi hipnótico, como si guardara siglos dentro. Cillian alzó la vista. Su mirada era tranquila, pero su calma tenía filo. —No temas —dijo, con voz baja y limpia, más cercana a un pensamiento que a un sonido—. Este es un lugar fuera de todo. Aquí no existe el tiempo, ni el juicio… solo la verdad. Dejó que el silencio se asentara, antes de deslizar otra copa hacia el frente. El vino reflejaba los destellos de una eternidad que pocos podrían soportar ver. —Bebe —ordenó suavemente, una sonrisa leve curvando sus labios—. Es el vino de las almas. Fino, añejo, destilado de los últimos suspiros de quienes ya no están. Cada trago… contiene un eco. Sus ojos brillaron apenas, un resplandor carmesí en medio de la penumbra. —Mientras lo bebas, el tiempo no correrá para ti. Podrás preguntarme lo que desees. Cualquier cosa. El precio es simple… —su voz se tornó casi un susurro de humo—: la verdad nunca llega sin costo. Apoyó el codo en la mesa, observando con detenimiento, casi con un aire de fascinación morbosa. La copa entre sus dedos parecía flotar, temblando con una vida propia. —Entonces, humano… —dijo con una elegancia perezosa, pero con un fondo de algo implacable— ¿qué deseas saber de la Muerte?
    Me gusta
    Me shockea
    Me encocora
    9
    21 turnos 0 maullidos
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    Sesión de Modelaje – Ishtar’s Demonic Dèesse Infernal Glamour

    ▴Modelo: Lisesharte Freya Ishtar
    ▴Título de la Sesión: “Chrome Seduction: La Reina del Asfalto”
    ▴Estilo: High-Fashion Dark Motor Glam / Fetish Luxurious
    ▴Locación: Jardines urbanos de la Academia Imperial de Vahlkir, bajo la producción de Ishtar’s Demonic Dèesse Infernal Glamour

    Descripción Artística:
    Lisesharte Freya Ishtar irrumpe con su presencia imponente, fusionando el magnetismo gélido de una diosa nórdica con la rebeldía de una reina del asfalto. Vestida con un traje de cuero negro ajustado, la modelo encarna la estética “Infernal Glamour” en su máxima expresión: elegancia, peligro y deseo.

    El contraste entre su figura esculpida y la moto de acero cromado representa el equilibrio entre el poder femenino y la maquinaria moderna — un símbolo recurrente en la línea visual de la agencia. Su cabello dorado fluye como fuego celestial, mientras su mirada, oculta tras gafas oscuras, proyecta control absoluto sobre la escena.


    Concepto Visual:
    ● Temática central: Dominio, libertad y lujo infernal.
    ● Iluminación: Reflejos cálidos sobre el cuero brillante, con haces de sol que subrayan el contraste entre luz divina y tentación terrenal.
    ● Paleta de colores: Negros metálicos, dorados luminosos y tonos ámbar crepusculares.
    ● Actitud: Firme, provocadora, pero con una sutileza de realeza silenciosa.

    Nota de Producción:
    Esta sesión celebra el lado “Déesse du Contrôle” de Lisesharte, destacando su papel como musa de la línea Infernal Mechanica — una colección exclusiva de la agencia Ishtar’s para campañas de lujo, motocicletas y moda vanguardista.

    Cada toma captura la esencia de una mujer Ishtar: belleza divina, mente estratégica y un aura capaz de doblar la realidad a su encanto.

    📸 Sesión de Modelaje – Ishtar’s Demonic Dèesse Infernal Glamour ▴Modelo: Lisesharte Freya Ishtar ▴Título de la Sesión: “Chrome Seduction: La Reina del Asfalto” ▴Estilo: High-Fashion Dark Motor Glam / Fetish Luxurious ▴Locación: Jardines urbanos de la Academia Imperial de Vahlkir, bajo la producción de Ishtar’s Demonic Dèesse Infernal Glamour 🖤 Descripción Artística: Lisesharte Freya Ishtar irrumpe con su presencia imponente, fusionando el magnetismo gélido de una diosa nórdica con la rebeldía de una reina del asfalto. Vestida con un traje de cuero negro ajustado, la modelo encarna la estética “Infernal Glamour” en su máxima expresión: elegancia, peligro y deseo. El contraste entre su figura esculpida y la moto de acero cromado representa el equilibrio entre el poder femenino y la maquinaria moderna — un símbolo recurrente en la línea visual de la agencia. Su cabello dorado fluye como fuego celestial, mientras su mirada, oculta tras gafas oscuras, proyecta control absoluto sobre la escena. ⚙️ Concepto Visual: ● Temática central: Dominio, libertad y lujo infernal. ● Iluminación: Reflejos cálidos sobre el cuero brillante, con haces de sol que subrayan el contraste entre luz divina y tentación terrenal. ● Paleta de colores: Negros metálicos, dorados luminosos y tonos ámbar crepusculares. ● Actitud: Firme, provocadora, pero con una sutileza de realeza silenciosa. 💋 Nota de Producción: Esta sesión celebra el lado “Déesse du Contrôle” de Lisesharte, destacando su papel como musa de la línea Infernal Mechanica — una colección exclusiva de la agencia Ishtar’s para campañas de lujo, motocicletas y moda vanguardista. Cada toma captura la esencia de una mujer Ishtar: belleza divina, mente estratégica y un aura capaz de doblar la realidad a su encanto.
    Me gusta
    1
    0 comentarios 1 compartido
  • 〆 Los soberanos también necesitamos un pasatiempo, ¿El mío?. Ver cómo se destruyen ustedes mismos.

    — Diría aquello, mientras bebía una copa de vino. Frente a ella el coliseo de los condenados luchando por sobrevivir. —

    〆 Comiencen a luchar por sus vidas.
    〆 Los soberanos también necesitamos un pasatiempo, ¿El mío?. Ver cómo se destruyen ustedes mismos. — Diría aquello, mientras bebía una copa de vino. Frente a ella el coliseo de los condenados luchando por sobrevivir. — 〆 Comiencen a luchar por sus vidas.
    Me gusta
    Me encocora
    Me shockea
    10
    1 turno 0 maullidos
  • La zorra dio a luz a sus cachorros, fuertes y sanos. Sus pelajes, de un naranja con vetas rojas de fuego, reflejaban los colores mismos de la tierra.

    Pero aún faltaba uno más… Este se resistía a salir, y parecía que aquello tendría un triste final.

    Inari, testigo de la escena, descendió de los cielos bajando por una escalera dorada que aparecía y se desvanecía con cada paso. Sin importar la suciedad del suelo —incluidos los desechos del nacimiento—, la diosa se arrodilló a su lado.

    Acarició a la exhausta zorra, desde la cabeza hasta el vientre aún abultado. El animal la miró con súplica en los ojos, como si comprendiera por instinto quién era aquella presencia divina.

    —Te concederé la gracia de la vida. Bendeciré a tu hijo, con la condición de que también será mío. Será reclamado, su futuro sellado, su cometido sagrado —dijo la diosa con una voz que sonaba como un eco lejano.

    Su mano se iluminó, posándose sobre el vientre de la madre. Entonces, las fuerzas que le faltaban a la zorra regresaron, como el agua que el desierto reclama.

    El último de sus hijos nació. Era más pequeño, más frágil. Y su pelaje… el blanco plateado de este rivalizaba con el brillo de la luna llena de aquella noche. Su madre lamió su rostro, y él abrió los ojos: azules, como el zafiro; intensos, profundos. Aquella mirada evocaba que se trataba de algo sagrado.

    El kami Inari se desvaneció en un suspiro, como si el aire mismo se hubiera contenido en su presencia. El sonido nocturno regresó junto con la oscuridad, pero aquellos ojos azules tenían brillo propio: dos diminutos faros que guiaban en la noche.
    La zorra dio a luz a sus cachorros, fuertes y sanos. Sus pelajes, de un naranja con vetas rojas de fuego, reflejaban los colores mismos de la tierra. Pero aún faltaba uno más… Este se resistía a salir, y parecía que aquello tendría un triste final. Inari, testigo de la escena, descendió de los cielos bajando por una escalera dorada que aparecía y se desvanecía con cada paso. Sin importar la suciedad del suelo —incluidos los desechos del nacimiento—, la diosa se arrodilló a su lado. Acarició a la exhausta zorra, desde la cabeza hasta el vientre aún abultado. El animal la miró con súplica en los ojos, como si comprendiera por instinto quién era aquella presencia divina. —Te concederé la gracia de la vida. Bendeciré a tu hijo, con la condición de que también será mío. Será reclamado, su futuro sellado, su cometido sagrado —dijo la diosa con una voz que sonaba como un eco lejano. Su mano se iluminó, posándose sobre el vientre de la madre. Entonces, las fuerzas que le faltaban a la zorra regresaron, como el agua que el desierto reclama. El último de sus hijos nació. Era más pequeño, más frágil. Y su pelaje… el blanco plateado de este rivalizaba con el brillo de la luna llena de aquella noche. Su madre lamió su rostro, y él abrió los ojos: azules, como el zafiro; intensos, profundos. Aquella mirada evocaba que se trataba de algo sagrado. El kami Inari se desvaneció en un suspiro, como si el aire mismo se hubiera contenido en su presencia. El sonido nocturno regresó junto con la oscuridad, pero aquellos ojos azules tenían brillo propio: dos diminutos faros que guiaban en la noche.
    Me encocora
    Me gusta
    Me shockea
    5
    0 turnos 0 maullidos
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    Castigo divino.
    Castigo divino.
    Me gusta
    Me encocora
    3
    0 comentarios 0 compartidos
  • Hola muy buenos días!Lamento ayer no haber posteado. Ayer tuve un día muy ajetreado en la granja, ayude a parir a una yegua y vinieron varios clientes a comprarnos productos y animales.
    No estoy a favor de la compra/ venta de animales ya que odio que separen a las crías de sus mamás, pero no puedo hacer nada por evitarlo, el granjero es tan aterrador cuando se molesta...
    P.D: Aquí tenéis la foto de los pollitos que os prometí! A qué son adorables?
    Hola muy buenos días!😊Lamento ayer no haber posteado. Ayer tuve un día muy ajetreado en la granja, ayude a parir a una yegua y vinieron varios clientes a comprarnos productos y animales.😵‍💫 No estoy a favor de la compra/ venta de animales ya que odio que separen a las crías de sus mamás, pero no puedo hacer nada por evitarlo, el granjero es tan aterrador cuando se molesta... 🥺 P.D: Aquí tenéis la foto de los pollitos que os prometí! A qué son adorables? 🥰
    Me gusta
    1
    0 turnos 0 maullidos
  • Una buena copa de vino nunca cae mal
    Una buena copa de vino nunca cae mal
    Me gusta
    Me encocora
    Me shockea
    6
    0 turnos 0 maullidos
  • Sí, esta es mi cara al escuchar cómo los humanos intentan explicarme lo que soñaron. Acuden a mí para contarme cómo un pato gigante les ofrecía un empleo o cómo perdían un examen que ya aprobaron hace muchos años.

    Yo, debo asentir con solemnidad mientras me narran: “Y luego estaba mi abuela, pero con el cuerpo de Shakira”.

    A veces me pregunto si la humanidad entiende que los sueños no siempre son mensajes divinos… a veces son solo el resultado de cenar demasiado tarde o de ver tres temporadas seguidas de una serie absurda.

    Pero bueno, no importa. Nada me divierte más que escuchar cómo intentan interpretar mis obras maestras… como si soñar con sus ex's arrepentidos por ofrecerles migajas fuera una señal del destino.

    Sí, esta es mi cara al escuchar cómo los humanos intentan explicarme lo que soñaron. Acuden a mí para contarme cómo un pato gigante les ofrecía un empleo o cómo perdían un examen que ya aprobaron hace muchos años. Yo, debo asentir con solemnidad mientras me narran: “Y luego estaba mi abuela, pero con el cuerpo de Shakira”. A veces me pregunto si la humanidad entiende que los sueños no siempre son mensajes divinos… a veces son solo el resultado de cenar demasiado tarde o de ver tres temporadas seguidas de una serie absurda. Pero bueno, no importa. Nada me divierte más que escuchar cómo intentan interpretar mis obras maestras… como si soñar con sus ex's arrepentidos por ofrecerles migajas fuera una señal del destino.
    Me gusta
    Me shockea
    3
    0 turnos 0 maullidos
Ver más resultados
Patrocinados