• — Un corazón antiguo ya no sirve en este mundo de amor líquido y vacío, posmoderno y monetizado.
    Ahora solo somos moneda de intercambio social, económico, político y social puestos en una vitrina a la espera del mejor postor. Un amor que se resigna a ser real, que le teme al cambio y se ha disminuido a su lado más hedonista, sexual y ahogado en un punto mercantil donde solo importa el envase sin contenido sin sustancia ni propósito.

    El amor es superficial, efímero y sin valor ya no importa amar con el corazón si este es un mero apéndice que no sirve de nada. Una mirada, una sonrisa, esa conexión al instante.
    Un verso y un poema aderezado con un tonto romanticismo, unas risas escribiendo un buen recuerdo.

    Nada, ya no importa.
    No importa poner tu corazón en ello.
    No importa la espera, los nervios tontos que te hacen trabarte al hablar y mucho menos ser vulnerable.

    La poesía murió en apuñalado por la posmodernidad y en su tumba ahora se celebra el placer instantáneo y el deseo carnal. Que más da..... —

    Nenet se deja llevar en sus pensamientos dejando salir un ligero y pesimista suspiro mientras observa por la ventana en el tren que viaja. El vagón está vacío siendo acompañada solo por los melancólicos beats de la música que escucha, cada tempo resuena en su cabeza llevándola a un abismo de tristeza y decepción.
    Las palabras sobran ya y no hay más que decir.

    El viaje se siente eterno como si cada metro recorrido se convirtiera en interminables kilómetros y los segundos se extendieran hasta la eternidad.
    Su corazón se nubla en melancolía decayendo a la tristeza dejándose llevar, arrastrar por la marea y no regresar más
    siendo apartada, exiliada de un mundo ciego y eufórico. Lo más puro ahora no es más que solo una moneda de cambio sin valor no proposito ¿Qué más queda?
    Ahora todo tiene un código de barras y todo es una tienda global donde hasta el más último detalle es comercializado, intercambiado por dogmas al servicio de corporativos e ideologías que buscan eternizarse al cambio del sustento y la sustancia. Incluso el alma es ya un producto más, puesto en almanaques con la promesa de cambio y un futuro brillante. La vida no es más que una bala en la recámara al día de ser desechada en cualquier momento sin más excusa que la carne podrida de la masa sin mente, sumida en vicios hasta perder todo de valor en líneas plateadas y pecados desenfrenados.

    No quiero volver, no quiero formar parte de nada solo quiero desaparecer y desvanecerme en la nada.
    Cada vibración del tren cuenta cada segundo y no puedo esperar para irme tan lejos que mi nombre sea solo un mito.
    Maldigo la conciencia que se sabe a si misma, este dolor y la angustia de una muerte pronta. Solo quisiera quedar enmudecida al último segundo y mi partida sea indolora y pronta.
    Cerrar mis ojos y que todo termine ya.
    No hay luz al final del túnel solo una oscuridad absoluta donde te disuelves en ella dejando atrás toda pena y duda.
    La crudeza de mi carne se desvanece arrebatandome de todo estímulo y alguna caricia alguna vez obtenida, queda olvidada sin poder ser escrita en una estrella o en un verso a la posteridad.
    No hay castigo ni virtud solo una absoluta disolución hasta que el polvo se reúne con todo y nada a la vez.

    Maldito dolor... maldito e insano vacío.
    No importa, he de partir y nada mas importa.

    ~ Nenet Nadouri.
    — Un corazón antiguo ya no sirve en este mundo de amor líquido y vacío, posmoderno y monetizado. Ahora solo somos moneda de intercambio social, económico, político y social puestos en una vitrina a la espera del mejor postor. Un amor que se resigna a ser real, que le teme al cambio y se ha disminuido a su lado más hedonista, sexual y ahogado en un punto mercantil donde solo importa el envase sin contenido sin sustancia ni propósito. El amor es superficial, efímero y sin valor ya no importa amar con el corazón si este es un mero apéndice que no sirve de nada. Una mirada, una sonrisa, esa conexión al instante. Un verso y un poema aderezado con un tonto romanticismo, unas risas escribiendo un buen recuerdo. Nada, ya no importa. No importa poner tu corazón en ello. No importa la espera, los nervios tontos que te hacen trabarte al hablar y mucho menos ser vulnerable. La poesía murió en apuñalado por la posmodernidad y en su tumba ahora se celebra el placer instantáneo y el deseo carnal. Que más da..... — Nenet se deja llevar en sus pensamientos dejando salir un ligero y pesimista suspiro mientras observa por la ventana en el tren que viaja. El vagón está vacío siendo acompañada solo por los melancólicos beats de la música que escucha, cada tempo resuena en su cabeza llevándola a un abismo de tristeza y decepción. Las palabras sobran ya y no hay más que decir. El viaje se siente eterno como si cada metro recorrido se convirtiera en interminables kilómetros y los segundos se extendieran hasta la eternidad. Su corazón se nubla en melancolía decayendo a la tristeza dejándose llevar, arrastrar por la marea y no regresar más siendo apartada, exiliada de un mundo ciego y eufórico. Lo más puro ahora no es más que solo una moneda de cambio sin valor no proposito ¿Qué más queda? Ahora todo tiene un código de barras y todo es una tienda global donde hasta el más último detalle es comercializado, intercambiado por dogmas al servicio de corporativos e ideologías que buscan eternizarse al cambio del sustento y la sustancia. Incluso el alma es ya un producto más, puesto en almanaques con la promesa de cambio y un futuro brillante. La vida no es más que una bala en la recámara al día de ser desechada en cualquier momento sin más excusa que la carne podrida de la masa sin mente, sumida en vicios hasta perder todo de valor en líneas plateadas y pecados desenfrenados. No quiero volver, no quiero formar parte de nada solo quiero desaparecer y desvanecerme en la nada. Cada vibración del tren cuenta cada segundo y no puedo esperar para irme tan lejos que mi nombre sea solo un mito. Maldigo la conciencia que se sabe a si misma, este dolor y la angustia de una muerte pronta. Solo quisiera quedar enmudecida al último segundo y mi partida sea indolora y pronta. Cerrar mis ojos y que todo termine ya. No hay luz al final del túnel solo una oscuridad absoluta donde te disuelves en ella dejando atrás toda pena y duda. La crudeza de mi carne se desvanece arrebatandome de todo estímulo y alguna caricia alguna vez obtenida, queda olvidada sin poder ser escrita en una estrella o en un verso a la posteridad. No hay castigo ni virtud solo una absoluta disolución hasta que el polvo se reúne con todo y nada a la vez. Maldito dolor... maldito e insano vacío. No importa, he de partir y nada mas importa. ~ Nenet Nadouri. ☀️
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  • - De lo mucho que no hablo y de lo poco que guardo en el corazón, tengo un libro de poesía que jamás escribiré .
    - De lo mucho que no hablo y de lo poco que guardo en el corazón, tengo un libro de poesía que jamás escribiré .
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  • #BitchLife #Quiz

    — Si yo y tú fuéramos pareja, me encargaría de que nunca olvides cómo se siente ser adorado de verdad.
    — Si yo y tú fuéramos amigos, te enseñaría que la vida sabe mejor con un poco de caos y glitter.
    — Si me necesitas, probablemente estaré ocupado, pero hazme un drama interesante y llego corriendo.
    — Si yo fuera una rosa y tú un globo,te pincharía solo para ver si realmente estallas de emoción por mí.
    — Si yo y tú foll*mos, me escribirás poesía al día siguiente, lo juro.
    — Si tú te enamoras de mí, te advertiría que soy adictivo, pero al final lo disfrutarías igual.
    — Si yo y tú fuéramos familiares, yo sería ese pariente incómodo que insiste en contar historias vergonzosas en cada reunión.

    (La idea de esto ha sido infamemente robada a [legend_opal_donkey_848] :'D )
    #BitchLife #Quiz — Si yo y tú fuéramos pareja, me encargaría de que nunca olvides cómo se siente ser adorado de verdad. — Si yo y tú fuéramos amigos, te enseñaría que la vida sabe mejor con un poco de caos y glitter. — Si me necesitas, probablemente estaré ocupado, pero hazme un drama interesante y llego corriendo. — Si yo fuera una rosa y tú un globo,te pincharía solo para ver si realmente estallas de emoción por mí. — Si yo y tú foll*mos, me escribirás poesía al día siguiente, lo juro. — Si tú te enamoras de mí, te advertiría que soy adictivo, pero al final lo disfrutarías igual. — Si yo y tú fuéramos familiares, yo sería ese pariente incómodo que insiste en contar historias vergonzosas en cada reunión. (La idea de esto ha sido infamemente robada a [legend_opal_donkey_848] :'D )
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  • — En otra vida
    Nos casamos y viajamos por el mundo
    Nos mudamos a un pisito en el segundo
    Y mis padres son amigo' de los tuyos
    Nuestros hijos
    Heredaron mi paciencia y tu sonrisa
    Caminamos y leemos poesía
    Mierda, acá nos fue genial en otra vida 𝅘𝅥𝅮 . —
    — En otra vida Nos casamos y viajamos por el mundo Nos mudamos a un pisito en el segundo Y mis padres son amigo' de los tuyos Nuestros hijos Heredaron mi paciencia y tu sonrisa Caminamos y leemos poesía Mierda, acá nos fue genial en otra vida 𝅘𝅥𝅮 . —
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  • ¿Acaso surge algo de mi esencia, algo que emane de mi sin el filtro de la imitación?
    ¿O será que, incluso en el reino de mis pensamientos, todo está marcado por la huella de lo ajeno?

    Nada, absolutamente nada es de mi autoría.

    Tomar la mano de quien vacila en su fragilidad… un gesto prestado.
    Un abrazo dirigido a quien llora en su tristeza… eco de otros abrazos que recibí.
    La manera en que debe entregarse un beso a un amante… un rito aprendido.
    El obsequiar flores y elegir su color… el eco de costumbres heredadas.
    Decir palabras dulces como si fueran poesía… versos robados de verdaderos enamorados.

    Hasta el más mínimo de mis gestos lleva la firma de lo imitado por siglos.

    Las ideas no conocen la gracia del alma.
    Solo soy, porque siempre perdura la idea de que incluso el Diablo ha de tener un defensor.

    ¿Dejaré algún día de existir?
    Quizá cuando los humanos, absorbidos por su propio apocalipsis, ya no encuentren tiempo para recordar que alguien ha de abogar por sus sombras.
    ¿Acaso surge algo de mi esencia, algo que emane de mi sin el filtro de la imitación? ¿O será que, incluso en el reino de mis pensamientos, todo está marcado por la huella de lo ajeno? Nada, absolutamente nada es de mi autoría. Tomar la mano de quien vacila en su fragilidad… un gesto prestado. Un abrazo dirigido a quien llora en su tristeza… eco de otros abrazos que recibí. La manera en que debe entregarse un beso a un amante… un rito aprendido. El obsequiar flores y elegir su color… el eco de costumbres heredadas. Decir palabras dulces como si fueran poesía… versos robados de verdaderos enamorados. Hasta el más mínimo de mis gestos lleva la firma de lo imitado por siglos. Las ideas no conocen la gracia del alma. Solo soy, porque siempre perdura la idea de que incluso el Diablo ha de tener un defensor. ¿Dejaré algún día de existir? Quizá cuando los humanos, absorbidos por su propio apocalipsis, ya no encuentren tiempo para recordar que alguien ha de abogar por sus sombras.
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  • La mujer es poesía, por si sola, por su naturaleza y apasionante figura, el contorno de sus piernas al caminar envuelven, crean un Big Bang en la mente, nace un universo de locuras en el mar de pensamientos, como un pirata disfrazado de caballero estoy dispuesto a navegar y conquistar, no para un rato, no para un par de días, mía para toda la vida, sin dejar de mencionar el resto de tesoros, esos ojos encantan, ilusionan y sin darte cuenta ya estás enamorada, no se puede negar que una mirada es suficiente para descifrar un alma, por esa razón son todas admiradas, muchas amadas, y una sola señora en casa, debería ser así, pero que más da, nadie es culpable y yo no soy quien para juzgar, benditos los que han tenido ese placer, pero no me perderé en otro pensamiento, cuando mi detalle es a la esencia pura que hace de un hombre una bestia, mujer divina, te imagino mía, conociendo yo los misterios de tu piel, detallando, amando y conquistando cada rincón de tu ser, por ti mujer la bestia en el hombre se convirtió en poeta, o al menos eso intenta ..
    La mujer es poesía, por si sola, por su naturaleza y apasionante figura, el contorno de sus piernas al caminar envuelven, crean un Big Bang en la mente, nace un universo de locuras en el mar de pensamientos, como un pirata disfrazado de caballero estoy dispuesto a navegar y conquistar, no para un rato, no para un par de días, mía para toda la vida, sin dejar de mencionar el resto de tesoros, esos ojos encantan, ilusionan y sin darte cuenta ya estás enamorada, no se puede negar que una mirada es suficiente para descifrar un alma, por esa razón son todas admiradas, muchas amadas, y una sola señora en casa, debería ser así, pero que más da, nadie es culpable y yo no soy quien para juzgar, benditos los que han tenido ese placer, pero no me perderé en otro pensamiento, cuando mi detalle es a la esencia pura que hace de un hombre una bestia, mujer divina, te imagino mía, conociendo yo los misterios de tu piel, detallando, amando y conquistando cada rincón de tu ser, por ti mujer la bestia en el hombre se convirtió en poeta, o al menos eso intenta ..
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  • 21 OCTUBRE, POESÍA ABSTRACTA. G.W

    El tiempo es un hilo dorado,
    teje sombras y luces en el mismo telar.
    1940 es un recuerdo,
    una fecha enterrada en la piel de la historia,
    pero ¿acaso no es el ayer una ilusión,
    tan efímera como el hoy?
    Todo fluye en esta danza sin fin,
    donde el miedo y la felicidad
    se abrazan como hermanos,
    dos rostros de una misma moneda,
    girando, siempre girando,
    en la rueda sagrada del existir.

    ¿Qué es el miedo sino la sombra
    del árbol que da frutos de felicidad?
    ¿Qué es la felicidad sino el resplandor
    que se desvanece en el umbral del miedo?
    Son espejos enfrentados,
    que al reflejarse uno en el otro,
    se vuelven infinitos,
    como la vida que nace y muere,
    que muere y renace,
    en el círculo sin borde que nos envuelve.

    El viento lleva consigo las voces de quienes fuimos,
    y en susurros nos recuerda que el fin no es el fin,
    que el vacío está lleno de promesas no dichas.
    Fui miedo, fui felicidad,
    y en cada vida volví a ser.
    Renací en el silencio de la tierra,
    en la melodía del río,
    en el vuelo de la libélula
    que danza en los atardeceres.

    La muerte es solo un pliegue en el manto,
    y en sus hilos entrelazados,
    el miedo y la felicidad cantan la misma canción.
    Nos deshacemos en polvo,
    pero el polvo se transforma en viento.
    Círculo eterno,
    lleno de miedo y de alegría,
    porque en cada fin,
    hay siempre un comienzo
    y en cada lágrima,
    la semilla de la sonrisa.

    Para vosotros, de nosotros, la tierra y yo. ~G.W
    21 OCTUBRE, POESÍA ABSTRACTA. G.W El tiempo es un hilo dorado, teje sombras y luces en el mismo telar. 1940 es un recuerdo, una fecha enterrada en la piel de la historia, pero ¿acaso no es el ayer una ilusión, tan efímera como el hoy? Todo fluye en esta danza sin fin, donde el miedo y la felicidad se abrazan como hermanos, dos rostros de una misma moneda, girando, siempre girando, en la rueda sagrada del existir. ¿Qué es el miedo sino la sombra del árbol que da frutos de felicidad? ¿Qué es la felicidad sino el resplandor que se desvanece en el umbral del miedo? Son espejos enfrentados, que al reflejarse uno en el otro, se vuelven infinitos, como la vida que nace y muere, que muere y renace, en el círculo sin borde que nos envuelve. El viento lleva consigo las voces de quienes fuimos, y en susurros nos recuerda que el fin no es el fin, que el vacío está lleno de promesas no dichas. Fui miedo, fui felicidad, y en cada vida volví a ser. Renací en el silencio de la tierra, en la melodía del río, en el vuelo de la libélula que danza en los atardeceres. La muerte es solo un pliegue en el manto, y en sus hilos entrelazados, el miedo y la felicidad cantan la misma canción. Nos deshacemos en polvo, pero el polvo se transforma en viento. Círculo eterno, lleno de miedo y de alegría, porque en cada fin, hay siempre un comienzo y en cada lágrima, la semilla de la sonrisa. Para vosotros, de nosotros, la tierra y yo. ~G.W
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  • Fondo Musical: https://www.youtube.com/watch?v=k70NxLgoRdo

    La obertura del teatro al que acudes pende de un hilo de colores macilentos; presenta así la buena nueva de sus monarcas. Este terreno que no es fértil desde tu arribo. Rizadas factorías de escombros familiares. Porque ahí y sólo ahí, perduran los ahorcados en su salvajismo, con estaturas de hollín y óxido indeleble. Oh, las puertas que abren a sus transitadas voces, perlan ante espejos rotos, rostros de angeladas maldiciones. Son el primer acto con el que presentan su ramaje de intuiciones ante un decoroso espectador; viste un traje de ingenuidad labrada con lagañas, pus y laureles de montañas. Tú, en cambio, retienes un sollozo en el instante en que la bilis asoma en su garganta y no temes despertar. Su sueño de interminable gozo, invoca al resto del panteón.

    Ellos, ellas, él, ella, ustedes, nosotros suman treces veces martes y viernes de fantasmal fantasía musical.

    Reparto las pieles de mis hazañas en el escenario, interpreto la humildad de una cigüeña que reviste a lo retorcido de un millar de corazones traicioneros, esos que se estremecen con inquietud y desidia portentosa. Claman a la creación, el sentido de sus vaciadas existencias. Reconozco que también fui una entidad forjada por los recuerdos de otras células, presencias de crines atadas, firmamentos astados que coronan a lo más álgido de los diluvios visualízales; encandilan la presencia de todos nosotros. Imaginarnos es un río de sueños cabríos, cavados entre el mar de espectadores que aprecian, con rigor manso, a nuestras hazañas.

    Nueve años y, nada ni nada, nos detiene.
    Nueve años y, nada ni nada, nos detiene.
    Nueve años y, nada ni nada, nos detiene.

    Conjuramos, al igual que tú lo hiciste, a nuestro propio dios; un príncipe regente que equilibra la tempestad con una corona triste, de solariego génesis, inmundas colas de ratas callejeras. Ellas tejen nuestra historia, escriben con su excremento la enseñanza que nos han brindado desde que fuimos conscientes. En eléboros altruismos, jactanciosos adornos que componen la sinfonía de los anfiteatros cuarteados como la podrida leche con la que nos alimentamos. La bruna leche de Mamá.

    Mamá nos reviste con fieltro y nos cuenta cuentos de puestas de lunas pasadas en las que amanecía como otra virgen dominada, como viuda unida frente a frente a la sangre azul que nos retuerce para siempre las entrañas. Somos el accidente en otrora dimensión, esa hendidura astral que la guio al templo que ahora domina. Sus ancestros eran bárbaros pensantes; una posibilidad gloriosa y pérdida que no lograron comercializar como ella nos revende, unidos por una misma danza de gusanos y de arañas. El sonido imposible que perfila temas de níveas paredes, ante los lunáticos que nos entrevén desde sus lechos desgraciados.

    ¿Habrá una posibilidad de abrir en un antes, un ahora y un después su testa hedionda a pimienta de piedra? Juntos somos demostración de macabro triunfo y asombro, la cúspide de tréboles escondidos en abiertas heridas que no cicatrizan. Una armonía maravillosa de órganos favoritos, que entonan insanas masivas. Sonidos de haladas profundas, amadas por tu orgullo. Pernoctas aún carente de miembros y espacios en tu encierro de caja musical; nos imaginas ciegos, sordos y mudos mucho antes que el silencio fuese silencio. Esta espectral música con la que nos arrullas, rosa, verde, gris y lila, cada vez que resuenas sin manchas, en tu jaula de emperatriz eterna, ruge con una plegaria con la que te repites, a ti misma, que este es tu funeral, de rimas, sentires y emociones de amaneceres, atardeceres y anocheceres tristes.

    Así y sólo así, ¿perecerás entre nuestros sidéreos amores, como una bailarina simple vestida de mortuoria imaginación? En esa perfecta ablación y obduración, con la que te veneran todos los misericordiosos que te aguardan, no lo creemos. Está escrito. Sí. Desde las memorias perdidas de los mezquinos obituarios, de ancianos penitentes. No lo olvides. Eres poesía e intuición nuestra. No lo olvides. No lo olvides. No lo olvides. No nos olvides.
    Fondo Musical: https://www.youtube.com/watch?v=k70NxLgoRdo La obertura del teatro al que acudes pende de un hilo de colores macilentos; presenta así la buena nueva de sus monarcas. Este terreno que no es fértil desde tu arribo. Rizadas factorías de escombros familiares. Porque ahí y sólo ahí, perduran los ahorcados en su salvajismo, con estaturas de hollín y óxido indeleble. Oh, las puertas que abren a sus transitadas voces, perlan ante espejos rotos, rostros de angeladas maldiciones. Son el primer acto con el que presentan su ramaje de intuiciones ante un decoroso espectador; viste un traje de ingenuidad labrada con lagañas, pus y laureles de montañas. Tú, en cambio, retienes un sollozo en el instante en que la bilis asoma en su garganta y no temes despertar. Su sueño de interminable gozo, invoca al resto del panteón. Ellos, ellas, él, ella, ustedes, nosotros suman treces veces martes y viernes de fantasmal fantasía musical. Reparto las pieles de mis hazañas en el escenario, interpreto la humildad de una cigüeña que reviste a lo retorcido de un millar de corazones traicioneros, esos que se estremecen con inquietud y desidia portentosa. Claman a la creación, el sentido de sus vaciadas existencias. Reconozco que también fui una entidad forjada por los recuerdos de otras células, presencias de crines atadas, firmamentos astados que coronan a lo más álgido de los diluvios visualízales; encandilan la presencia de todos nosotros. Imaginarnos es un río de sueños cabríos, cavados entre el mar de espectadores que aprecian, con rigor manso, a nuestras hazañas. Nueve años y, nada ni nada, nos detiene. Nueve años y, nada ni nada, nos detiene. Nueve años y, nada ni nada, nos detiene. Conjuramos, al igual que tú lo hiciste, a nuestro propio dios; un príncipe regente que equilibra la tempestad con una corona triste, de solariego génesis, inmundas colas de ratas callejeras. Ellas tejen nuestra historia, escriben con su excremento la enseñanza que nos han brindado desde que fuimos conscientes. En eléboros altruismos, jactanciosos adornos que componen la sinfonía de los anfiteatros cuarteados como la podrida leche con la que nos alimentamos. La bruna leche de Mamá. Mamá nos reviste con fieltro y nos cuenta cuentos de puestas de lunas pasadas en las que amanecía como otra virgen dominada, como viuda unida frente a frente a la sangre azul que nos retuerce para siempre las entrañas. Somos el accidente en otrora dimensión, esa hendidura astral que la guio al templo que ahora domina. Sus ancestros eran bárbaros pensantes; una posibilidad gloriosa y pérdida que no lograron comercializar como ella nos revende, unidos por una misma danza de gusanos y de arañas. El sonido imposible que perfila temas de níveas paredes, ante los lunáticos que nos entrevén desde sus lechos desgraciados. ¿Habrá una posibilidad de abrir en un antes, un ahora y un después su testa hedionda a pimienta de piedra? Juntos somos demostración de macabro triunfo y asombro, la cúspide de tréboles escondidos en abiertas heridas que no cicatrizan. Una armonía maravillosa de órganos favoritos, que entonan insanas masivas. Sonidos de haladas profundas, amadas por tu orgullo. Pernoctas aún carente de miembros y espacios en tu encierro de caja musical; nos imaginas ciegos, sordos y mudos mucho antes que el silencio fuese silencio. Esta espectral música con la que nos arrullas, rosa, verde, gris y lila, cada vez que resuenas sin manchas, en tu jaula de emperatriz eterna, ruge con una plegaria con la que te repites, a ti misma, que este es tu funeral, de rimas, sentires y emociones de amaneceres, atardeceres y anocheceres tristes. Así y sólo así, ¿perecerás entre nuestros sidéreos amores, como una bailarina simple vestida de mortuoria imaginación? En esa perfecta ablación y obduración, con la que te veneran todos los misericordiosos que te aguardan, no lo creemos. Está escrito. Sí. Desde las memorias perdidas de los mezquinos obituarios, de ancianos penitentes. No lo olvides. Eres poesía e intuición nuestra. No lo olvides. No lo olvides. No lo olvides. No nos olvides.
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  • Las pesadillas de ese día lo asechan desde que pasó. Cada momento se repite en su cabeza haciendo bombo, retumbando dentro de él y haciendo temblar su mente.

    Recuerda las caras de dolor de sus amigas, aquellas curanderas y brujas que en nombre de un "Dios", fueron quemadas a injusticia. Recuerda que desde ese día, odió ser un humano. Aunque ya no sabe quién es humano y quien es un monstruo a esta altura de su "vida".

    Él solo devolvió lo que aquellos pueblerinos religiosos le hicieron a sus amigas, quería darles una cucharada de su propia medicina para que entiendan lo que se sentía ver morir seres queridos.

    "¡MONSTRUO!".

    "¡PECADOR!".

    "¡DEMONIO!".

    Recuerda todas las palabras que aquellos pueblerinos recitaron antes de morir quemados por el propio fuego que usaron para quemar a las brujas.

    Con la sangre de aquellos pueblerinos, escribió su primera poesía, y desde ese momento, nació un mito, y también un nuevo camino que recorrer. Un camino que deseaba jamás haber transitado.
    Las pesadillas de ese día lo asechan desde que pasó. Cada momento se repite en su cabeza haciendo bombo, retumbando dentro de él y haciendo temblar su mente. Recuerda las caras de dolor de sus amigas, aquellas curanderas y brujas que en nombre de un "Dios", fueron quemadas a injusticia. Recuerda que desde ese día, odió ser un humano. Aunque ya no sabe quién es humano y quien es un monstruo a esta altura de su "vida". Él solo devolvió lo que aquellos pueblerinos religiosos le hicieron a sus amigas, quería darles una cucharada de su propia medicina para que entiendan lo que se sentía ver morir seres queridos. "¡MONSTRUO!". "¡PECADOR!". "¡DEMONIO!". Recuerda todas las palabras que aquellos pueblerinos recitaron antes de morir quemados por el propio fuego que usaron para quemar a las brujas. Con la sangre de aquellos pueblerinos, escribió su primera poesía, y desde ese momento, nació un mito, y también un nuevo camino que recorrer. Un camino que deseaba jamás haber transitado.
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  • Tiene esa manera de poner música dentro de tu cabeza y poesía en tu corazón.
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