• • En el Gimnasio de Blackthorn City, un vasto templo a los pokémon de Tipo Dragón se erigía como último reto a los jóvenes entrenadores aspirantes al título de Campeón en la Liga Indigo.

    La encargada de poner a prueba a los mismos poseía una reputación temible. Muchos llegaban confiando en sus habilidades para ser totalmente humillados en segundos durante su primer enfrentamiento contra la Maestra Dragón aún utilizando un equipo diseñado para probar a los retadores en lugar del suyo propio.

    Otro entrenador al cual no se le veía la cara debido a la penumbra algo mitigada por la lava de la cueva caería de rodillas recogiendo a su Typhlosion en la correspondiente poké ball. La peliazul, con mirada firme devolvería a Dragonair del campo a la ball para que descansase, casi sin apenas heridas justo antes de retroceder para sentarse en su trono cruzando las piernas. Con gesto serio, aunque sin faltas de respeto se dirigió al contrario, lista para hacerle ver la realidad.

    – No te voy a engañar: eres débil.

    + Cómo, ¿Por qué no pude hacer nada?

    – Porque no estás preparado. El orden natural de las cosas es que todos empiezan siendo débiles, y están en su mano volverse fuertes. Ahora que tienes ante tí un muro, ¿qué vas a hacer, eh?

    • Determinado, su oponente se pone de pie cerrando el puño. Clair esboza una ligera sonrisa.

    – Así me gusta. Más vale que mañana temprano vengas, porque no voy a tener piedad. Y si consigues vencerme, la Liga tampoco la va a tener contigo. Vamos, ¡A qué esperas! ¡A trabajar! Tú eres el único culpable de tu debilidad, y al mismo tiempo eres el único que lo puede cambiar. ¿Quieres mi medalla? Gánatela.

    • La maestra de Dragones lo señala, motivándolo a su manera con un firme discurso realista. Tras sus palabras, su oponente, conteniendo el llanto se marcha con un gesto de determinación en su rostro.

    – (Si mantiene esta actitud, mejorará rápido. Ahora veamos si es capaz de no romperse por mucho que lo intente)

    • Piensa para sí misma, descansando la espalda en el trono del templo.



    • En el Gimnasio de Blackthorn City, un vasto templo a los pokémon de Tipo Dragón se erigía como último reto a los jóvenes entrenadores aspirantes al título de Campeón en la Liga Indigo. La encargada de poner a prueba a los mismos poseía una reputación temible. Muchos llegaban confiando en sus habilidades para ser totalmente humillados en segundos durante su primer enfrentamiento contra la Maestra Dragón aún utilizando un equipo diseñado para probar a los retadores en lugar del suyo propio. Otro entrenador al cual no se le veía la cara debido a la penumbra algo mitigada por la lava de la cueva caería de rodillas recogiendo a su Typhlosion en la correspondiente poké ball. La peliazul, con mirada firme devolvería a Dragonair del campo a la ball para que descansase, casi sin apenas heridas justo antes de retroceder para sentarse en su trono cruzando las piernas. Con gesto serio, aunque sin faltas de respeto se dirigió al contrario, lista para hacerle ver la realidad. – No te voy a engañar: eres débil. + Cómo, ¿Por qué no pude hacer nada? – Porque no estás preparado. El orden natural de las cosas es que todos empiezan siendo débiles, y están en su mano volverse fuertes. Ahora que tienes ante tí un muro, ¿qué vas a hacer, eh? • Determinado, su oponente se pone de pie cerrando el puño. Clair esboza una ligera sonrisa. – Así me gusta. Más vale que mañana temprano vengas, porque no voy a tener piedad. Y si consigues vencerme, la Liga tampoco la va a tener contigo. Vamos, ¡A qué esperas! ¡A trabajar! Tú eres el único culpable de tu debilidad, y al mismo tiempo eres el único que lo puede cambiar. ¿Quieres mi medalla? Gánatela. • La maestra de Dragones lo señala, motivándolo a su manera con un firme discurso realista. Tras sus palabras, su oponente, conteniendo el llanto se marcha con un gesto de determinación en su rostro. – (Si mantiene esta actitud, mejorará rápido. Ahora veamos si es capaz de no romperse por mucho que lo intente) • Piensa para sí misma, descansando la espalda en el trono del templo.
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  • ... [ Bad Ending ] ...
    ( Las muñecas no pueden desear algun tipo de apariencia, aceptarán lo que se les coloque y serán felices. )

    Castigo:
    《Tiempo para ser reparada: Indeterminado.》
    ... [ Bad Ending ] ... ( Las muñecas no pueden desear algun tipo de apariencia, aceptarán lo que se les coloque y serán felices. ) ⚠️Castigo: 《Tiempo para ser reparada: Indeterminado.》
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  • La tarde está perezosa. -Llega un determinado momento en que por su naturaleza, le da mucho sueño y tiene que dormir.-
    La tarde está perezosa. -Llega un determinado momento en que por su naturaleza, le da mucho sueño y tiene que dormir.-
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  • mi hermano siempre esta ansioso de que algun dia pueda encontrar a mi compañero de guerra.... saber el echo de que no es una chica lo que deseo... tal vez lo enloquezca un poco de rabia. Pero nada mas con el intricado deseo de mi felicidad.. seguro entendería que mi chico ideal llegaria a mi...

    estará mas que deacuerdo y con calma al saber que tengo alguien que me cuide y tambien le cuide... no hay duda que algun dia un guerrero... sabrá escoger un chamán como yo... frajil en sus sentidos. fuerte en sus deseos y constante, admirable y determinado en su dia a dia sin rendirse.

    ...no lo crees?.. bah, tal vez hablo demasiado... disfruta de la compañía conmigo si?
    mi hermano siempre esta ansioso de que algun dia pueda encontrar a mi compañero de guerra.... saber el echo de que no es una chica lo que deseo... tal vez lo enloquezca un poco de rabia. Pero nada mas con el intricado deseo de mi felicidad.. seguro entendería que mi chico ideal llegaria a mi... estará mas que deacuerdo y con calma al saber que tengo alguien que me cuide y tambien le cuide... no hay duda que algun dia un guerrero... sabrá escoger un chamán como yo... frajil en sus sentidos. fuerte en sus deseos y constante, admirable y determinado en su dia a dia sin rendirse. ...no lo crees?.. bah, tal vez hablo demasiado... disfruta de la compañía conmigo si?
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  • hay algo detras de la puerta
    eres joven apenas unos 10 años y constantemente fuiste regañado por tus padres por abrir la puerta a desconocidos lo que en una oportunidad termino en que roben la casa, esta determinado, aprendiste tu leccion y no volveras a abrir la puerta, estas solo en la sala de tu casa, y de repente todo, abosolutamente todo sonido se apaga, ya no escuchas nisiquiera el tic tac del reloj, y em medio de ese abrumador silencio escuchas como tocan la puerta.
    toc toc
    hey niñ@ podrias abrir la puerta?
    hay algo detras de la puerta eres joven apenas unos 10 años y constantemente fuiste regañado por tus padres por abrir la puerta a desconocidos lo que en una oportunidad termino en que roben la casa, esta determinado, aprendiste tu leccion y no volveras a abrir la puerta, estas solo en la sala de tu casa, y de repente todo, abosolutamente todo sonido se apaga, ya no escuchas nisiquiera el tic tac del reloj, y em medio de ese abrumador silencio escuchas como tocan la puerta. toc toc hey niñ@ podrias abrir la puerta?
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  • Me voy a dormir por tiempo indeterminado.

    Good bye and good nigth!
    Me voy a dormir por tiempo indeterminado. Good bye and good nigth!
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  • "𝓢𝓲𝓰𝓷𝓼 𝓸𝓯 𝓣𝓻𝓸𝓾𝓫𝓵𝓮"

    Motel "Town House" — Algún lugar entre Kansas y Arkansas | 03:47 AM

    El chillido de un neón maltrecho era el único sonido que se colaba por la ventana abierta. "MOTEL • TV • A/C • NO DEVILS ALLOWED" decía el letrero, parpadeando con más miedo que autoridad. A un costado del edificio, un par de máquinas expendedoras emitían luces verdes y rojas como si fuesen parte de un ritual improvisado. Y encima de todo eso… silencio. Ese tipo de silencio que siempre anticipa el desastre.

    Adentro de la habitación 6, una luz tenue iluminaba la escena.

    Un viejo celular Motorola Razr vibró contra la mesa de noche. Su tono predeterminado, una secuencia digital absurda, rompió el ambiente como una cuchillada en un santuario. El nombre que parpadeaba en pantalla era ilegible, distorsionado. Como si ni siquiera el propio aparato quisiera reconocer quién estaba del otro lado.

    Sentada en el borde de la cama, con las piernas cruzadas y los dedos envueltos en vendas oscuras, Tanya Miller tarareaba algo. Muy bajito. Como si la canción fuese un secreto solo para ella. Era esa misma melodía infantil que solía cantarle a los cadáveres con ojos vacíos que dejaba a su paso. Algo de un saco lleno de serpientes y un hombre al que nadie debería molestar de noche.

    Su chaqueta de cuero colgaba del respaldo de la silla, aún húmeda con lo que claramente no era agua bendita. En la mesa, una bala plateada bailaba al ritmo de sus dedos. Justo al lado, un frasquito con sal roja, cenizas y un mechón de cabello rubio.

    —¿Dónde estás, cariño? —murmuró con voz ronca, la mirada fija en el teléfono como si pudiera matarlo si parpadeaba.

    Los ángeles no se habían vuelto a reportar desde hacía horas.

    Los sueños estaban más agitados de lo normal.

    Y en el cielo, las estrellas parecían moverse.

    Era de esos días. De esos que huelen a sangre, a azufre… y a decisiones que no se pueden deshacer.

    El pitido de la tetera eléctrica anunció que el agua estaba lista. Tanya se levantó con pereza felina, dejando que el silencio volviera a reinar por un instante. Solo por un instante.

    Fuera de la habitación, algo se movía entre las sombras.

    Y el motel... empezaba a respirar.
    "𝓢𝓲𝓰𝓷𝓼 𝓸𝓯 𝓣𝓻𝓸𝓾𝓫𝓵𝓮" 📍 Motel "Town House" — Algún lugar entre Kansas y Arkansas | 03:47 AM El chillido de un neón maltrecho era el único sonido que se colaba por la ventana abierta. "MOTEL • TV • A/C • NO DEVILS ALLOWED" decía el letrero, parpadeando con más miedo que autoridad. A un costado del edificio, un par de máquinas expendedoras emitían luces verdes y rojas como si fuesen parte de un ritual improvisado. Y encima de todo eso… silencio. Ese tipo de silencio que siempre anticipa el desastre. Adentro de la habitación 6, una luz tenue iluminaba la escena. Un viejo celular Motorola Razr vibró contra la mesa de noche. Su tono predeterminado, una secuencia digital absurda, rompió el ambiente como una cuchillada en un santuario. El nombre que parpadeaba en pantalla era ilegible, distorsionado. Como si ni siquiera el propio aparato quisiera reconocer quién estaba del otro lado. Sentada en el borde de la cama, con las piernas cruzadas y los dedos envueltos en vendas oscuras, Tanya Miller tarareaba algo. Muy bajito. Como si la canción fuese un secreto solo para ella. Era esa misma melodía infantil que solía cantarle a los cadáveres con ojos vacíos que dejaba a su paso. Algo de un saco lleno de serpientes y un hombre al que nadie debería molestar de noche. Su chaqueta de cuero colgaba del respaldo de la silla, aún húmeda con lo que claramente no era agua bendita. En la mesa, una bala plateada bailaba al ritmo de sus dedos. Justo al lado, un frasquito con sal roja, cenizas y un mechón de cabello rubio. —¿Dónde estás, cariño? —murmuró con voz ronca, la mirada fija en el teléfono como si pudiera matarlo si parpadeaba. Los ángeles no se habían vuelto a reportar desde hacía horas. Los sueños estaban más agitados de lo normal. Y en el cielo, las estrellas parecían moverse. Era de esos días. De esos que huelen a sangre, a azufre… y a decisiones que no se pueden deshacer. El pitido de la tetera eléctrica anunció que el agua estaba lista. Tanya se levantó con pereza felina, dejando que el silencio volviera a reinar por un instante. Solo por un instante. Fuera de la habitación, algo se movía entre las sombras. Y el motel... empezaba a respirar.
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  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    Me niego a aceptar que todo está determinado por el destino, o por algún tipo de ser "superior"...
    Nada de esa mierda existe. Mi destino lo decido yo.
    Y la astrología, concretamente el tarot, también es una gran mentira...
    Me niego a aceptar que todo está determinado por el destino, o por algún tipo de ser "superior"... Nada de esa mierda existe. Mi destino lo decido yo. Y la astrología, concretamente el tarot, también es una gran mentira...
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  • *Mientras entrenaba en el gimnasio, Cal meditaba acerca de esa visión...*

    Todo lo que pueda venir ya ha venido, y así todo ya está determinado... El tiempo es un círculo. Pero eso causa muchos conflictos...

    *Entonces repara en la hora y se da cuenta que es muy tarde. Además de que está cansada. Así que mejor decide volver a casa en su motocicleta para dormir.*
    *Mientras entrenaba en el gimnasio, Cal meditaba acerca de esa visión...* Todo lo que pueda venir ya ha venido, y así todo ya está determinado... El tiempo es un círculo. Pero eso causa muchos conflictos... *Entonces repara en la hora y se da cuenta que es muy tarde. Además de que está cansada. Así que mejor decide volver a casa en su motocicleta para dormir.*
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  • [∆] Tener cabello tiene sus retos. Tener cabello que regresa al largo predeterminado cada vez que lo corto, retos un poco diferentes. [∆]
    [∆] Tener cabello tiene sus retos. Tener cabello que regresa al largo predeterminado cada vez que lo corto, retos un poco diferentes. [∆]
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