⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝑇ℎ𝑒𝑟𝑒 𝑔𝑜𝑒𝑠 𝑚𝑦 ℎ𝑒𝑎𝑟𝑡 𝑏𝑒𝑎𝑡𝑖𝑛𝑔 ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀'𝐶𝑎𝑢𝑠𝑒 𝑦𝑜𝑢 𝑎𝑟𝑒 𝑡ℎ𝑒 𝑟𝑒𝑎𝑠𝑜𝑛 ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀𝐼'𝑚 𝑙𝑜𝑠𝑖𝑛𝑔 𝑚𝑦 𝑠𝑙𝑒𝑒𝑝 ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ ⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ 𝑃𝑙𝑒𝑎𝑠𝑒 𝑐𝑜𝑚𝑒 𝑏𝑎𝑐𝑘 𝑛𝑜𝑤 ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍⤹ Rol con [witcheddemon] —Tras la batalla contra Ramiel en el cementerio Gallowglass se había llevado a Danny a casa. Ambos estaban heridos, por suerte no de gravedad, aunque Danny se había llevado la peor parte al ser él quien recibió los rayos del demonio, al menos aquel último que lo había derribado por completo. Le ardía el pecho, de hecho. Apenas había tenido tiempo de llorar por la ruptura con Oliver y había tenido que encajar que sus padres biológicos estaban muertos, para encima ser atacado por aquel maldito demonio, algo que empezaba a pensar que había sido a posta, golpear justo en aquel momento para pillarlo desprevenido y con la mente a otra cosa. Sin embargo al ungido le había salido mal, aunque una vez más había escapado. Pero ese fue un antes y un después, ahora el joven Bishop estaba decidido a acabar con él. Necesitaba más información de la que ya conocía por el Libro de las Sombras, que no era demasiada, en realidad. Por suerte Gallowglass le había dicho que en aquella biblioteca que frecuentaba su madre había una sección oculta, para gente como él. Tardó unos días en recuperarse de la batalla antes de que el vampiro le dejase salir de casa libremente, aunque le costó una discusión con él sabiendo dónde se dirigía. La Biblioteca Bodleiana, una vez más. Se adentró como el mismo día que llegó, caminando por los pasillos en busca de aquella sección de la que le había hablado el vampiro. Fueron vagas las descripciones que le dio, concluyendo con un cliché de manual: lo sabrás cuando lo veas. Aquello le hizo rodar los ojos al escucharlo pero en esos momentos, parado frente a una estantería algo diferente a las demás, no pudo sino chasquear la lengua, negando levemente. Se inclinó a empujar uno de los libros, después otro y luego un tercero, todos ellos con una única D en el costado. Al hacerlo la estantería se deslizó hacia atrás, antes de comenzar a deslizarse de nuevo hacia otro lado, revelando así aquella sala. Entró en esta, mirando a su alrededor, viendo la cantidad de estanterías y libros que había allí, hasta otra sala contigua que ya exploraría más adelante. De momento comenzó a mirar por las estanterías, en busca de un libro que le diese la información que necesitaba. Entonces, a su espalda, un libro cayó al suelo. Se giró de golpe, sobresaltado, viendo el tomo en el suelo, para entonces acercarlo y cogerlo— Los Ungidos… —leyó el título en voz alta, antes de abrirlo y fijarse en la primera página— Los Ungidos, un grupo de demonios de élite… —aquella primera línea fue suficiente para despertar su interés. Comenzó a pasar las páginas una tras otra, hasta dar con una que confirmó sus sospechas— Te tengo —dijo leyendo el nombre de Ramiel, como subtítulo de aquella página. Así pues se guardó el libro, para salir de allí con él, dirigiéndose de nuevo hacia la casa de Gallowglass. Poco sabía él que el Ungido al que investigaba le seguía la pista de cerca, esperando el momento oportuno para atacarlo, esta vez con la intención de acabar con su vida antes de que siquiera supiera que estaba allí.

ㅤ ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ𝑂𝑝𝑒𝑛 𝑤𝑖𝑑𝑒 ㅤㅤㅤㅤㅤ ㅤ 𝑌𝑜𝑢 𝑤𝑒𝑟𝑒 𝑏𝑜𝑟𝑛 𝑡𝑜 ℎ𝑦𝑝𝑛𝑜𝑡𝑖𝑧𝑒 𝑡ℎ𝑒𝑚 𝑎𝑙𝑙 ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ 𝑇ℎ𝑒𝑦 𝑠𝑎𝑖𝑑 𝑡ℎ𝑒𝑖𝑟 𝑝𝑟𝑎𝑦𝑒𝑟𝑠 ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ 𝐶𝑎𝑛 𝑦𝑜𝑢 ℎ𝑒𝑎𝑟 𝑚𝑒 𝑢𝑝 𝑡ℎ𝑒𝑟𝑒? ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍⤹ starter para [witcheddemon] —Desde que había descubierto que era brujo su vida había cambiado bastante. Sin embargo, algunas cosas se mantenían igual. Aún no sabía de dónde venía. Sí, su vida en general había sido bastante buena, una infancia plena, con unos padres que lo adoran, nunca le faltó de nada, pero la pregunta siempre estuvo ahí. Tras descubrir que venía de un largo linaje de brujos dicha pregunta sólo se hizo más presente. ¿Quién era su verdadera familia? ¿Quién era Danny Bishop en realidad? Había estado estudiando el Libro en estos últimos meses, recibiendo clases por parte de Spinel y de Luke y lo cierto era que mejoraba bastante rápido. Por ello mismo era que había decidido dar aquel paso. Estuvo investigando zonas en las que había aparecido su apellido, contrastando entre lo que encontraba en Internet y de otros medios algo más místicos. El más reciente lo había llevado hasta aquella ciudad de Louisiana, más concretamente al Barrio Francés. Ya en un principio, nada más mencionarlo, su familiar le había contado la realidad de aquella ciudad: un hervidero de criaturas sobrenaturales, uno de los más importantes del mundo, incluso. El destino estaba decidido. Allí había conocido al mismísimo Klaus Mikaelson, el híbrido original, lo que al principio parecía una amenaza para su vida, pero acabó convirtiéndose en un punto de inflexión, pues no era la primera vez que este milenario híbrido se encontraba con un Bishop, en realidad. Fue así como Danny descubrió un nombre que hizo que le diese un vuelco el corazón, Diana Bishop, una bruja que había conocido treinta años antes y que era todo un prodigio con la magia. Pero no solo era una poderosa bruja, resultaba ser, también, la madre biológica de Danny. Una poderosa bruja, protectora de los inocentes, con el poder de controlar el tiempo. Una muchacha que vivía en Oxford, historiadora y aficionada a la alquimia. No supo decirle mucho más, pues Klaus tampoco conocía todos los detalles de la vida de Diana, pero sin duda era algo, una nueva pista, un poco de información. El chico volvió a Chicago, con esperanzas renovadas y un par de aventuras vividas nuevas. Pero, en todo ese tiempo, había una persona que había echado demasiado de menos. Nada más llegar a la ciudad, conforme se estaba subiendo al uber que lo llevaría a casa, Danny sacó su teléfono para mandarle un mensaje a Oliver. “Estoy de vuelta en Chicago, por fin. Aunque aún me quedan un par de días de vacaciones. ¿Sigues en Nueva York?” le escribió, esperando que le dijese que también estaba en la ciudad—

ㅤ ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ𝑅𝑒𝑑 𝑙𝑖𝑘𝑒 𝑟𝑜𝑠𝑒𝑠 ㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤㅤ 𝑓𝑖𝑙𝑙𝑠 𝑚𝑦 𝑑𝑟𝑒𝑎𝑚𝑠 ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍ ‍⤹ starter para [witcheddemon] —Era algo temprano cuando Danny se despertó, con el sonido de su teléfono. Había llegado la noche anterior tarde a casa, pues se había pasado todo el día fuera, haciendo fotos de absolutamente todo lo que le llamaba la atención, intentando despejar la mente de lo que había pasado esa misma mañana, o más bien de lo que habían descubierto esa mañana. Todo el trabajo de su último videojuego había desaparecido, tanto de las bases de datos como la copia física que guardaban por si acaso. Ni rastro. Su supervisor, Luke, tenía la teoría de que podría haber sido la competencia, pero nadie lo sabía con seguridad. Y aquella llamada de teléfono que tan temprano lo había despertado también tenía que ver con aquel incidente— Diga… —dijo nada más contestar, habiéndose estirado un poco antes por tal de que al otro lado no escuchasen su bostezo— Sí, soy yo… —asintió un par de veces, antes de suspirar ligeramente— Sí, claro, allí estaré —y así colgó la llamada. Dejó el teléfono a un lado, mirando entonces a su gato— ¿𝐿𝑎 𝑝𝑜𝑙𝑖𝑐𝑖́𝑎? —preguntó este, en lo que el brujo se ponía en pie y se dirigía al baño— Así es. Quieren que vaya a testificar —comenzó entonces a preparar las cosas para darse una ducha. El familiar se mantuvo en silencio durante unos instantes— 𝑇𝑒𝑛 𝑐𝑢𝑖𝑑𝑎𝑑𝑜, 𝐷𝑎𝑛𝑖𝑒𝑙 —aquello le extrañó, sin duda, pero no le dio mayor importancia, de momento. Se dio una ducha rápida, vistiéndose y desayunando también rápido para no perder mucho tiempo. Cuestión de tres cuartos de hora después apareció por la comisaría más cercana a las oficinas, pues era la que estaba llevando el caso del robo. Entró, diciendo quién era a uno de los policías presentes que rápidamente lo llevó a una de las mesas del lugar y le dijo que esperase. El brujo se sentó entonces, mientras que aquel chaval iba en busca del superior que vendría a tomarle declaración al joven Bishop—