• "Hoy me tocó tatuar a uno de los que me gustan.
    Cómo profesional que soy tengo que mantenerme a la altura y todo para no caer en tentación, amén."

    A no, así no es.
    "Hoy me tocó tatuar a uno de los que me gustan. Cómo profesional que soy tengo que mantenerme a la altura y todo para no caer en tentación, amén." A no, así no es.
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  • Los regalos inesperados son los que más valoro y este de Soomin Park es uno que aprecio especialmente.
    Los regalos inesperados son los que más valoro y este de [The_Perverse_Muse] es uno que aprecio especialmente.
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  • Reunión familiar
    Fandom Hellaverse
    Categoría Slice of Life
    𝑅𝑜𝓁 𝓅𝓇𝒾𝓋𝒶𝒹𝑜 𝒸𝑜𝓃: Striker

    𝐿𝓊𝑔𝒶𝓇: Anillo de la ira.


    Nevaba…En el infierno ¿Era eso si quiera posible? Y más en un anillo que literalmente era como meterse en un wéstern.

    Ya estaba en la mansión qje sería para ambos, mirando a través de uno de los grandes ventanales en uno de los pasillos del piso superior, observaba como copos de nieve caían del cielo ¿Cuanto hacía que no veía eso? Recordó al tiempo en el que estaba vivo, como la nieve se acumulaba en el jardín del mismo modo que lo hacia alli, rememorando cuando los tres de niños salían a jugar, y Anthony y Moira le pedían que les ayudase a hacer muñecos de nieve.

    Suspiró. Eso le recordó por que estaba ahí en primer lugar, por que había aceptado ocupar su lugar de el lugar de su hermano menor. A fin de cuentas, ya era hora de comportarse como un hermano mayor de verdad y él tampoco tenía nada que perder. Finalmente había llegado la reunión familiar en la que evaluarían a Striker y, visto lo visto; ya no podría aferrarse a la idea de que aquel imp presuntuoso metiera la pata y la familia lo repudiase. Arackniss junto a algunos guardias habían sido los primeros en llegar, a fin de cuentas por tradición debían ir su prometido y él juntos. Hablando de él, aún y por suerte no se había cruzado con Striker, lo cual era una buena noticia por que… bastante espantoso era el concepto de aquel día, como para además tener wue empezar a soportar sus excentricidades y faltas de respeto de buena mañana. Pero, sin dudas lo peor era saber que seguramente debería hacerlo por el resto de la eternidad.

    Por algo aquel lugar era el infierno ¿No?
    𝑅𝑜𝓁 𝓅𝓇𝒾𝓋𝒶𝒹𝑜 𝒸𝑜𝓃: [C0WBOY] 𝐿𝓊𝑔𝒶𝓇: Anillo de la ira. Nevaba…En el infierno ¿Era eso si quiera posible? Y más en un anillo que literalmente era como meterse en un wéstern. Ya estaba en la mansión qje sería para ambos, mirando a través de uno de los grandes ventanales en uno de los pasillos del piso superior, observaba como copos de nieve caían del cielo ¿Cuanto hacía que no veía eso? Recordó al tiempo en el que estaba vivo, como la nieve se acumulaba en el jardín del mismo modo que lo hacia alli, rememorando cuando los tres de niños salían a jugar, y Anthony y Moira le pedían que les ayudase a hacer muñecos de nieve. Suspiró. Eso le recordó por que estaba ahí en primer lugar, por que había aceptado ocupar su lugar de el lugar de su hermano menor. A fin de cuentas, ya era hora de comportarse como un hermano mayor de verdad y él tampoco tenía nada que perder. Finalmente había llegado la reunión familiar en la que evaluarían a Striker y, visto lo visto; ya no podría aferrarse a la idea de que aquel imp presuntuoso metiera la pata y la familia lo repudiase. Arackniss junto a algunos guardias habían sido los primeros en llegar, a fin de cuentas por tradición debían ir su prometido y él juntos. Hablando de él, aún y por suerte no se había cruzado con Striker, lo cual era una buena noticia por que… bastante espantoso era el concepto de aquel día, como para además tener wue empezar a soportar sus excentricidades y faltas de respeto de buena mañana. Pero, sin dudas lo peor era saber que seguramente debería hacerlo por el resto de la eternidad. Por algo aquel lugar era el infierno ¿No?
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  • Siempre lo he pensado pero no lo había pronunciado en voz alta, somos la pareja perfecta Sergio Williams
    Siempre lo he pensado pero no lo había pronunciado en voz alta, somos la pareja perfecta [Thx_Snow]
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  • Ha sido una noche la cual evidentemente jamás voy a poder olvidar, Dios nos ha bendecido con una preciosa niña la cual bautizaremos como Agatha Anne Bridgerton.
    También escucho mis plegarias para que anoche no fuera la última y ver crecer a nuestra princesa

    Ha sido una noche la cual evidentemente jamás voy a poder olvidar, Dios nos ha bendecido con una preciosa niña la cual bautizaremos como Agatha Anne Bridgerton. También escucho mis plegarias para que anoche no fuera la última y ver crecer a nuestra princesa ❤️
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  • Faust ha pensado... si reclutar cazadores de anomalias. Es una decision arriesgada pero.. pensará al respecto. Probablemente hoy decida si es conventiente o no.
    Faust ha pensado... si reclutar cazadores de anomalias. Es una decision arriesgada pero.. pensará al respecto. Probablemente hoy decida si es conventiente o no.
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  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    Usuario: cambio de forma: color rubio

    Les puedo hacer una pregunta: ¿Ustedes saben porque un chico joven le interesa una mujer mayor o que se debe ello? Esa mi duda
    Usuario: cambio de forma: color rubio Les puedo hacer una pregunta: ¿Ustedes saben porque un chico joven le interesa una mujer mayor o que se debe ello? Esa mi duda :STK-49: :STK-78:
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  • Seguimos con el rescate de mi hija.
    Del engendro 001.

    El plan de Axel es tan simple como suicida: entrar reventando… y salir con la bestia.
    Sin rodeos. Sin segundas oportunidades.

    Avanzamos en un APC blindado, el motor rugiendo como una declaración de guerra. Las vallas de la prisión ceden bajo el peso del vehículo, doblándose como si nunca hubieran servido para contener nada realmente peligroso.

    Al llegar a la puerta principal, Axel escala la torreta con una calma que solo tienen quienes ya han aceptado la posibilidad de no salir vivos.
    Apunta.
    Dispara.

    El misil impacta en la torre de defensa y la explosión sacude la estructura entera de la prisión. Alarmas. Gritos. Caos.
    Es entonces cuando Veythra decide actuar.

    No por amor.
    No por compasión.

    Toma mi cuerpo porque 001 le pertenece. Porque es la más excepcional de todas las aberraciones engendradas. Porque algo así no puede quedar en manos humanas.

    Mi cuerpo es débil, roto, aún pagando partos imposibles… pero Veythra no pide permiso.
    Yo dejo de ser yo.

    Salto del APC y entro en la prisión bajo una lluvia de balas. Los disparos atraviesan mi carne una y otra vez, pero no me detienen. Poco a poco el sonido de las armas se apaga, ahogado por gritos desesperados. Los guardias caen de rodillas, suplicando por su vida… o por una muerte rápida. El dolor los consume desde dentro, algo invisible, absoluto.

    Serynthia entra también.
    Su poder es majestuoso y aterrador. Las paredes se derriten a su paso. Las armas se funden en las manos de los soldados, quemándoles la piel hasta el hueso. La sangre de nuestros enemigos hierve en sus venas, matándolos sin que ella siquiera los toque.

    Llegamos al lugar donde tienen a 001.
    Un laboratorio.
    Frío. Clínico. Profano.

    La han diseccionado viva. Han estudiado su regeneración, su simbiosis con un parásito, su resistencia a límites que no deberían existir. Los documentos son un tesoro para Faust, que trabaja incluso allí, incluso ahora. Guarda informes, muestras de sangre, piel, pelo. Conecta un USB al ordenador principal y extrae todo lo que puede, sin perder un segundo.

    Y entonces…
    Veythra se retira.
    Se disipa dentro de mi alma.
    Yo vuelvo.
    Y lo único que puedo hacer es mirar.

    La niña cuelga sin vida, suspendida por cadenas. Su cuerpo pequeño está marcado, herido, profanado. Me acerco con pasos temblorosos, la bajo con cuidado y la estrecho contra mí.

    La abrazo.
    La beso.

    Y rompo el juramento que me hice a mí misma de no mostrar afecto a los engendros del Caos.
    Porque al final…
    era mi hija.

    Mis lágrimas caen sobre su rostro, recorren su piel hasta llegar a sus labios. Y cuando una de ellas toca su boca…

    Sus ojos se abren de par en par.
    Las pupilas, completamente dilatadas, me miran desde un lugar que no debería existir. Se mueve. Se acurruca contra mi pecho como una bestia herida, buscando calor, buscando refugio.

    Tiembla.

    De sus labios salen palabras.
    No debería ser posible.
    Los engendros del Caos no tienen alma.

    No hablan.

    Y sin embargo, ella lo hace.

    —Tengo… frío…

    La estrecho con más fuerza.

    Serynthia Feu Naamah Lilim Agrat Eisheth Zenunim Faust Axel Koroved
    Seguimos con el rescate de mi hija. Del engendro 001. El plan de Axel es tan simple como suicida: entrar reventando… y salir con la bestia. Sin rodeos. Sin segundas oportunidades. Avanzamos en un APC blindado, el motor rugiendo como una declaración de guerra. Las vallas de la prisión ceden bajo el peso del vehículo, doblándose como si nunca hubieran servido para contener nada realmente peligroso. Al llegar a la puerta principal, Axel escala la torreta con una calma que solo tienen quienes ya han aceptado la posibilidad de no salir vivos. Apunta. Dispara. El misil impacta en la torre de defensa y la explosión sacude la estructura entera de la prisión. Alarmas. Gritos. Caos. Es entonces cuando Veythra decide actuar. No por amor. No por compasión. Toma mi cuerpo porque 001 le pertenece. Porque es la más excepcional de todas las aberraciones engendradas. Porque algo así no puede quedar en manos humanas. Mi cuerpo es débil, roto, aún pagando partos imposibles… pero Veythra no pide permiso. Yo dejo de ser yo. Salto del APC y entro en la prisión bajo una lluvia de balas. Los disparos atraviesan mi carne una y otra vez, pero no me detienen. Poco a poco el sonido de las armas se apaga, ahogado por gritos desesperados. Los guardias caen de rodillas, suplicando por su vida… o por una muerte rápida. El dolor los consume desde dentro, algo invisible, absoluto. Serynthia entra también. Su poder es majestuoso y aterrador. Las paredes se derriten a su paso. Las armas se funden en las manos de los soldados, quemándoles la piel hasta el hueso. La sangre de nuestros enemigos hierve en sus venas, matándolos sin que ella siquiera los toque. Llegamos al lugar donde tienen a 001. Un laboratorio. Frío. Clínico. Profano. La han diseccionado viva. Han estudiado su regeneración, su simbiosis con un parásito, su resistencia a límites que no deberían existir. Los documentos son un tesoro para Faust, que trabaja incluso allí, incluso ahora. Guarda informes, muestras de sangre, piel, pelo. Conecta un USB al ordenador principal y extrae todo lo que puede, sin perder un segundo. Y entonces… Veythra se retira. Se disipa dentro de mi alma. Yo vuelvo. Y lo único que puedo hacer es mirar. La niña cuelga sin vida, suspendida por cadenas. Su cuerpo pequeño está marcado, herido, profanado. Me acerco con pasos temblorosos, la bajo con cuidado y la estrecho contra mí. La abrazo. La beso. Y rompo el juramento que me hice a mí misma de no mostrar afecto a los engendros del Caos. Porque al final… era mi hija. Mis lágrimas caen sobre su rostro, recorren su piel hasta llegar a sus labios. Y cuando una de ellas toca su boca… Sus ojos se abren de par en par. Las pupilas, completamente dilatadas, me miran desde un lugar que no debería existir. Se mueve. Se acurruca contra mi pecho como una bestia herida, buscando calor, buscando refugio. Tiembla. De sus labios salen palabras. No debería ser posible. Los engendros del Caos no tienen alma. No hablan. Y sin embargo, ella lo hace. —Tengo… frío… La estrecho con más fuerza. [pulse_green_whale_937] [n.a.a.m.a.h] [nebula_charcoal_rat_655] [f_off_bih] [demonsmile01] [nebula_onyx_lizard_690] [Akly_5]
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  • El final de una mision y el comienzo de una aventura
    Fandom Mitología
    Categoría Acción
    Porfin la hemos encontrado, hacemos un buen duo no crees Akabane

    -miraria a su contraria con una sonrisa-

    [Despues de varios dias explorando Grecia en busca de la famosa espada de los dioses, el joven principe se unio a una joven que sabria donde encontrarla y junto a ella empezaria esta aventura. ¿Que le contara esa joven al principe del inframundo? ¿Seguiran de aventura o se separaran?]
    Porfin la hemos encontrado, hacemos un buen duo no crees Akabane -miraria a su contraria con una sonrisa- [Despues de varios dias explorando Grecia en busca de la famosa espada de los dioses, el joven principe se unio a una joven que sabria donde encontrarla y junto a ella empezaria esta aventura. ¿Que le contara esa joven al principe del inframundo? ¿Seguiran de aventura o se separaran?]
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  • 𝗡𝗘𝗪 𝗬𝗢𝗥𝗞 𝗙𝗔𝗦𝗛𝗜𝗢𝗡 𝗪𝗘𝗘𝗞
    Categoría Original
    * Si había cosa que le encantaba a June era hacerse un hueco en la agenda y acudir a un evento de moda. La semana de la moda de Nueva York tenía un sitio especial en el corazón de la primera hija de los estados unidos y moviendo un par de hilos se las apañó para estar allí.

    Le habían concedido un sitio de privilegio en las primeras filas frente a la pasarela mientras su gente de seguridad, Cash y Amy, estaban a pocos metros procurando por el bienestar de la hija de su presidenta. La morena posó para algunas fotos, saludó cortésmente a todo aquel que quisiera un minuto de su atención, y cuando las luces se apagaron los ojos castaños de June fueron absorbidos por la maravillosa colección que se estaba presentando en dicha ocasión. Las diferentes pasadas eran un sueño para ella que se deshizo en aplausos cuando el desfile concluyó. No obstante la noche era joven, y tras un poco de persuasión, consiguió que Amy le acompañará a una de las fiestas que siempre se hacían al final de los eventos, la revista Vogue siempre le enviaba una invitación y casi nunca tenía tiempo para aceptarlo.

    Esa noche procuró pasárselo muy bien entre algunas celebridades con las que entabló entretenidas conversaciones.

    Cuando tuvo sed fue en búsqueda de una copa, y al parecer no fue la única con la misma intención. El mesero más cercano solo tenía una copa en su bandeja, cuando la morena estiró la mano para cogerla alguien más intentaba lo mismo. June se rió con buen ánimo y se la cedió.


    — Adelante, cogela tú.

    𝐕𝐞𝐧𝐢𝐜𝐞 𝐉𝐨𝐧𝐞𝐬
    * Si había cosa que le encantaba a June era hacerse un hueco en la agenda y acudir a un evento de moda. La semana de la moda de Nueva York tenía un sitio especial en el corazón de la primera hija de los estados unidos y moviendo un par de hilos se las apañó para estar allí. Le habían concedido un sitio de privilegio en las primeras filas frente a la pasarela mientras su gente de seguridad, Cash y Amy, estaban a pocos metros procurando por el bienestar de la hija de su presidenta. La morena posó para algunas fotos, saludó cortésmente a todo aquel que quisiera un minuto de su atención, y cuando las luces se apagaron los ojos castaños de June fueron absorbidos por la maravillosa colección que se estaba presentando en dicha ocasión. Las diferentes pasadas eran un sueño para ella que se deshizo en aplausos cuando el desfile concluyó. No obstante la noche era joven, y tras un poco de persuasión, consiguió que Amy le acompañará a una de las fiestas que siempre se hacían al final de los eventos, la revista Vogue siempre le enviaba una invitación y casi nunca tenía tiempo para aceptarlo. Esa noche procuró pasárselo muy bien entre algunas celebridades con las que entabló entretenidas conversaciones. Cuando tuvo sed fue en búsqueda de una copa, y al parecer no fue la única con la misma intención. El mesero más cercano solo tenía una copa en su bandeja, cuando la morena estiró la mano para cogerla alguien más intentaba lo mismo. June se rió con buen ánimo y se la cedió. — Adelante, cogela tú. [Jones_V]
    Tipo
    Grupal
    Líneas
    20
    Estado
    Disponible
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