• Claramente Joel no conocía el contexto de aquel lugar ni sus planes o vivencias, pero sí le quedaba claro que esa mujer tenia la suficiente sangre fría como para saltarse las ordenes que le hubiesen dado… ¿Por qué? Seria interesante averiguarlo…

    Se mantuvo en silencio, pero algo inquieto dejando a sus ojos pardos analizar la situación y aquella rara entrega de víveres a cambio de… ¿Qué? ¿Su gente? ¿Porqué arriesgar tanto por personas que ella no conocía? Allí había gato encerrado… y Joel comenzaba a sentirse demasiado interesado…

    Siguió a Harper y los demás tras la señal del tal Jules por aquel intrincado de callejones y calles hasta dar con lo que antaño debió de haber sido un colegio.


    ───── extracto de mi rol con Harper Morgan
    Claramente Joel no conocía el contexto de aquel lugar ni sus planes o vivencias, pero sí le quedaba claro que esa mujer tenia la suficiente sangre fría como para saltarse las ordenes que le hubiesen dado… ¿Por qué? Seria interesante averiguarlo… Se mantuvo en silencio, pero algo inquieto dejando a sus ojos pardos analizar la situación y aquella rara entrega de víveres a cambio de… ¿Qué? ¿Su gente? ¿Porqué arriesgar tanto por personas que ella no conocía? Allí había gato encerrado… y Joel comenzaba a sentirse demasiado interesado… Siguió a Harper y los demás tras la señal del tal Jules por aquel intrincado de callejones y calles hasta dar con lo que antaño debió de haber sido un colegio. ───── extracto de mi rol con [HarperMorgan]
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  • ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ 「 音楽 | 𝔇𝔢𝔞𝔱𝔥 𝔬𝔯 𝔩𝔬𝔳𝔢 𝔱𝔬𝔫𝔦𝔤𝔥𝔱 」


    ㅤBobby salió de entre la multitud con la adrenalina a tope. Tenía una sonrisa de oreja a oreja que le adornaba el rostro y hacía sus ojos más pequeños que de costumbre.

    ㅤCaminó en busca del stand de las bebidas, sin dejar de sentir el cuerpo todavía en llamas por la euforia y podía jurar que hasta le temblaban las manos. Tenía el cabello revuelto y la voz completamente rota de tanto gritar y corear las canciones durante la presentación.

    ㅤ—¡No puede ser! ¡Gaga es una diosa... un ángel!

    ㅤNo solo era el estar en Coachella sino que acababa de corear Bad Romance y Abracadabra como si no hubiera un mañana ¡y en vivo! Caminaba como guiado por le instinto, todo había sido tan épico que seguía sin creerlo. Lo único que necesitaba ahora era algo helado que lo regresara a la tierra.

    ㅤ—Una cerveza bien fría, por favor, que acabo de dejar mi alma allá atrás.

    ㅤLe dijo al tipo del puesto y él se rio como si entendiera su emoción y cuando por fin recibió la lata, la abrió de inmediato. El primer trago se sintió como si le hubieran dado el mejor y más refrescante beso de toda su vida.

    ㅤ—Creo que me enamoré de Lady Gaga —Comentó al aire ya con el alma en el cuerpo, anclada por la cerveza fría en su mano.

    ㅤEra una noche para nunca olvidar.
    ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ 「 音楽 | 𝔇𝔢𝔞𝔱𝔥 𝔬𝔯 𝔩𝔬𝔳𝔢 𝔱𝔬𝔫𝔦𝔤𝔥𝔱 」 ㅤBobby salió de entre la multitud con la adrenalina a tope. Tenía una sonrisa de oreja a oreja que le adornaba el rostro y hacía sus ojos más pequeños que de costumbre. ㅤCaminó en busca del stand de las bebidas, sin dejar de sentir el cuerpo todavía en llamas por la euforia y podía jurar que hasta le temblaban las manos. Tenía el cabello revuelto y la voz completamente rota de tanto gritar y corear las canciones durante la presentación. ㅤ—¡No puede ser! ¡Gaga es una diosa... un ángel! ㅤNo solo era el estar en Coachella sino que acababa de corear Bad Romance y Abracadabra como si no hubiera un mañana ¡y en vivo! Caminaba como guiado por le instinto, todo había sido tan épico que seguía sin creerlo. Lo único que necesitaba ahora era algo helado que lo regresara a la tierra. ㅤ—Una cerveza bien fría, por favor, que acabo de dejar mi alma allá atrás. ㅤLe dijo al tipo del puesto y él se rio como si entendiera su emoción y cuando por fin recibió la lata, la abrió de inmediato. El primer trago se sintió como si le hubieran dado el mejor y más refrescante beso de toda su vida. ㅤ—Creo que me enamoré de Lady Gaga —Comentó al aire ya con el alma en el cuerpo, anclada por la cerveza fría en su mano. ㅤEra una noche para nunca olvidar.
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  • Pesadilla en la Iglesia.
    Fandom OC.
    Categoría Slice of Life
    𝕬𝒓𝒚𝒂 𝕮𝒓𝒂𝒘𝒇𝒐𝒓𝒅

    ⠀⠀Era una tarde particularmente gris en España. El antiguo convento se alzaba como un testigo mudo, tallado sobre ruinas que nunca terminaron de morir. Los muros, oscurecidos por la humedad y el tiempo, respiraban el aliento agrio de un pasado más antiguo que el cristianismo mismo. Sobre su portón romano aún se podía distinguir, casi borrado, el perfil de una historia de mármol, susurros recorrían sus oídos al tocarlo.

    ⠀⠀El antiguo monasterio de Poblet, brindaba una especie de confort al transeúnte, probablemente por el tipo de estructura que fue y lo grande que es. Tocó el mármol una vez más, viejo y repleto de polvo, cuántas historias habrían ocurrido aquí.
    ⠀⠀Pero algo ocurría aquí, una extraña sensación, de la que no podía quitarse ese sabor amargo, no como un café o vino añejo, más bien como una flema que no podías escupir. Observó detrás de sí, dos hermanas, una anciana y otra joven.

    ⠀⠀⸻ "Señor Cipriano, un gusto. Soy la hermana Eunice. Ella es la hermana Dakota, recién ingresada." ⸻ La más anciana habló, la joven respondió con una reverencia. Ahora mismo, el santo lucía como apenas un mocoso de unos veinte y cinco años, pero era por siglos mucho más mayor que ellas.
    ⠀⠀Silencioso y cortante, dedicó una miada fría y se acercó a las mismas, también le daban una sensación extraña, ocultaban algo, pero no musitó palabras, su lenguaje corporal fue más que suficiente, pasando de largo. ⸻ "Prepárenme una habitación, dormiré temprano." ⸻ Susurró en un perfecto español. Para luego ingresar nuevamente a la estructura. La hermana más joven quedó atónita, incluso a punto de decirle algo, pero la más anciana simplemente la detuvo, no era bueno provocar la ira de un santo.

    ⠀⠀En su camino por los antiguos pasillos del monasterio, se quedó en silencio, parecía que nadie recorría esta área. A su derecha, la fuente del patio central, a la izquierda, un pasillo oscuro, parecía tallado a mano desnuda, como si no perteneciera a la estructura en sí, la curiosidad ganó más que su interés por dormir. Se acercó rápidamente, sin miedo, sin vacilar, su fe y habilidades eran más grandes que cualquier desafío.
    ⠀⠀Solo para toparse con una puerta, una que no recordaba de aquellos planos. Miró a ambos lados, ninguna de las hermanas estaba cerca, de hecho... nadie, parecía que todo el patio se vació repentinamente.

    ⠀⠀Finalmente, tocó la puerta.
    [Vesse1] ⠀ ⠀⠀Era una tarde particularmente gris en España. El antiguo convento se alzaba como un testigo mudo, tallado sobre ruinas que nunca terminaron de morir. Los muros, oscurecidos por la humedad y el tiempo, respiraban el aliento agrio de un pasado más antiguo que el cristianismo mismo. Sobre su portón romano aún se podía distinguir, casi borrado, el perfil de una historia de mármol, susurros recorrían sus oídos al tocarlo. ⠀⠀El antiguo monasterio de Poblet, brindaba una especie de confort al transeúnte, probablemente por el tipo de estructura que fue y lo grande que es. Tocó el mármol una vez más, viejo y repleto de polvo, cuántas historias habrían ocurrido aquí. ⠀⠀Pero algo ocurría aquí, una extraña sensación, de la que no podía quitarse ese sabor amargo, no como un café o vino añejo, más bien como una flema que no podías escupir. Observó detrás de sí, dos hermanas, una anciana y otra joven. ⠀⠀⸻ "Señor Cipriano, un gusto. Soy la hermana Eunice. Ella es la hermana Dakota, recién ingresada." ⸻ La más anciana habló, la joven respondió con una reverencia. Ahora mismo, el santo lucía como apenas un mocoso de unos veinte y cinco años, pero era por siglos mucho más mayor que ellas. ⠀⠀Silencioso y cortante, dedicó una miada fría y se acercó a las mismas, también le daban una sensación extraña, ocultaban algo, pero no musitó palabras, su lenguaje corporal fue más que suficiente, pasando de largo. ⸻ "Prepárenme una habitación, dormiré temprano." ⸻ Susurró en un perfecto español. Para luego ingresar nuevamente a la estructura. La hermana más joven quedó atónita, incluso a punto de decirle algo, pero la más anciana simplemente la detuvo, no era bueno provocar la ira de un santo. ⠀⠀En su camino por los antiguos pasillos del monasterio, se quedó en silencio, parecía que nadie recorría esta área. A su derecha, la fuente del patio central, a la izquierda, un pasillo oscuro, parecía tallado a mano desnuda, como si no perteneciera a la estructura en sí, la curiosidad ganó más que su interés por dormir. Se acercó rápidamente, sin miedo, sin vacilar, su fe y habilidades eran más grandes que cualquier desafío. ⠀⠀Solo para toparse con una puerta, una que no recordaba de aquellos planos. Miró a ambos lados, ninguna de las hermanas estaba cerca, de hecho... nadie, parecía que todo el patio se vació repentinamente. ⠀⠀Finalmente, tocó la puerta. ⠀
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  • Una fría noche de invierno viendo caer los copos de nieve fue cuando mis ojos se cruzaron con los tuyos, fue un instante mágico.
    Una fría noche de invierno viendo caer los copos de nieve fue cuando mis ojos se cruzaron con los tuyos, fue un instante mágico.
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  • Tras su despedida con la pequeña Freya, Elías volvió a la casa con algo más que solo las palabras de la pequeña, había aprendido mucho, pero había más... Una nueva sensación.

    Al entrar en la casa, Elías colocó la flor que la pequeña le había dado en un pequeño frasco que había en una mesita en la entrada - Así me acordaré de ella al entrar - Murmuró el demonio para si mismo, ahora de vuelta en su soledad, la misma soledad que ahora le resultaba tan extraña.

    Pasaron las horas, Elías hizo su vida como siempre había hecho, había ordenado la casa a pesar de ya estar limpia, había salido a cuidar de las flores, todo buscando algo con lo que distraer su mente, hasta que se encontró en el salón, leyendo un libro, la luz del sol entraba por las ventanas, la chimenea estaba encendida y aún así, había algo que Elías no lograba sacarse de la mente, dejo salir un suspiro mientras ojeaba el libro, levantando la mirada un momento. - La casa se siente más fría sin ella por alguna razón, es verano, he encendido la chimenea, y aún así sigue haciendo frío -.

    Antes de que el demonio se diera cuenta, una nueva sensación había aparecido dentro de él, la soledad ya no era lo mismo que era antes, tras haber recibido sus afectuosas caricias y haber dejado claro que no le temía, más bien lo admiraba, la mente del demonio se encontraba constantemente divagando hacia la pequeña -¿Qué estará haciendo ahora? - Fueron las últimas palabras que se le cruzaron por la mente al demonio, antes de continuar leyendo con intención de distraerse.
    Tras su despedida con la pequeña Freya, Elías volvió a la casa con algo más que solo las palabras de la pequeña, había aprendido mucho, pero había más... Una nueva sensación. Al entrar en la casa, Elías colocó la flor que la pequeña le había dado en un pequeño frasco que había en una mesita en la entrada - Así me acordaré de ella al entrar - Murmuró el demonio para si mismo, ahora de vuelta en su soledad, la misma soledad que ahora le resultaba tan extraña. Pasaron las horas, Elías hizo su vida como siempre había hecho, había ordenado la casa a pesar de ya estar limpia, había salido a cuidar de las flores, todo buscando algo con lo que distraer su mente, hasta que se encontró en el salón, leyendo un libro, la luz del sol entraba por las ventanas, la chimenea estaba encendida y aún así, había algo que Elías no lograba sacarse de la mente, dejo salir un suspiro mientras ojeaba el libro, levantando la mirada un momento. - La casa se siente más fría sin ella por alguna razón, es verano, he encendido la chimenea, y aún así sigue haciendo frío -. Antes de que el demonio se diera cuenta, una nueva sensación había aparecido dentro de él, la soledad ya no era lo mismo que era antes, tras haber recibido sus afectuosas caricias y haber dejado claro que no le temía, más bien lo admiraba, la mente del demonio se encontraba constantemente divagando hacia la pequeña -¿Qué estará haciendo ahora? - Fueron las últimas palabras que se le cruzaron por la mente al demonio, antes de continuar leyendo con intención de distraerse.
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  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
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    — Bajo la tempestad la lluvia empapa la ciudad el ímpetu lo traigo a la mitad.

    La noche está muy fría y, otra vez, sin compañía voy caminando a ningún lugar.

    Bajo la tempestad y con muy buena voluntad esa ironía del paraguas en mi hogar. Mientras el paraguas ríe de mí a carcajadas, yo lo tomo con un grano de sal.

    Al mundo le salió al revés, pues justo como a Moisés toda esa lluvia se abre a mis pies.

    Me siento con mucho poder, me siento persona de interés
    Más lo cabrón no quita lo cortés

    ¡O al revés... al revés!
    — Bajo la tempestad la lluvia empapa la ciudad el ímpetu lo traigo a la mitad. La noche está muy fría y, otra vez, sin compañía voy caminando a ningún lugar. Bajo la tempestad y con muy buena voluntad esa ironía del paraguas en mi hogar. Mientras el paraguas ríe de mí a carcajadas, yo lo tomo con un grano de sal. Al mundo le salió al revés, pues justo como a Moisés toda esa lluvia se abre a mis pies. Me siento con mucho poder, me siento persona de interés Más lo cabrón no quita lo cortés ¡O al revés... al revés! :STK-72:
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  • Se que me extrañas, que el pensar en mi te mata, si fueras valiente vendrías y me hablarías. Pero tienes tanto miedo de lo que pueda suceder. Mientras tanto yo aquí con una sonrisa, mirando la nieve que es igual de fría que tu sonrisa.


    Me llaman, Romeo JA
    Se que me extrañas, que el pensar en mi te mata, si fueras valiente vendrías y me hablarías. Pero tienes tanto miedo de lo que pueda suceder. Mientras tanto yo aquí con una sonrisa, mirando la nieve que es igual de fría que tu sonrisa. Me llaman, Romeo JA
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  • La fría impotencia el exilio del Plano Astral, el vació infinito sin tacto, sin gusto ni vida pero nunca en paz.
    La fría impotencia el exilio del Plano Astral, el vació infinito sin tacto, sin gusto ni vida pero nunca en paz.
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  • Una noche de cielo libre de nubes, la luna iluminando el bosque que tanto tiempo había recorrido ¿Cuánto tiempo estuvo caminando? ¿Cuando fue la última vez que se paró a descansar? No tenía respuesta, una estática en parte de su mente, recuerdos mezclados con gritos y un color rojo, el recuerdo del sabor de la carne aún recorriendo su lengua, sin respuestas, sin objetivo, sin su maestro... La única sensación que si recordaba... El hambre.

    -"¿Donde estoy?"- Pensó el demonio para si mismo, analizando sus alrededores tan pronto como su consciencia volvió a su cuerpo, pero no reconocía el lugar, un callejón en medio de lo que parecía un pequeño pueblo, un lugar donde sin la luz del día, nadie lo vería y un sabor familiar en su boca, el dulce sabor de la carne humana -"Ah... Ha vuelto a pasar"- Exclamó levemente con voz fría y carente de emoción, consciente de haber pasado tanto tiempo sin comer, que en el momento que su consciencia se desvaneció, su cuerpo tomó una vida inocente con un solo propósito, alimentarse.

    El único pensamiento que llegó a su mente, fue la curiosidad del lugar en el que se encontraba, parecía lleno de vida fuera del callejón a pesar de ser lo que parecía medianoche -"Fascinante"- Pensó antes de casi instintivamente agacharse a relamer los restos de la víctima de sus instintos. -¿Habrá algún humano interesante en este lugar?- Pensó mientras se relamía.
    Una noche de cielo libre de nubes, la luna iluminando el bosque que tanto tiempo había recorrido ¿Cuánto tiempo estuvo caminando? ¿Cuando fue la última vez que se paró a descansar? No tenía respuesta, una estática en parte de su mente, recuerdos mezclados con gritos y un color rojo, el recuerdo del sabor de la carne aún recorriendo su lengua, sin respuestas, sin objetivo, sin su maestro... La única sensación que si recordaba... El hambre. -"¿Donde estoy?"- Pensó el demonio para si mismo, analizando sus alrededores tan pronto como su consciencia volvió a su cuerpo, pero no reconocía el lugar, un callejón en medio de lo que parecía un pequeño pueblo, un lugar donde sin la luz del día, nadie lo vería y un sabor familiar en su boca, el dulce sabor de la carne humana -"Ah... Ha vuelto a pasar"- Exclamó levemente con voz fría y carente de emoción, consciente de haber pasado tanto tiempo sin comer, que en el momento que su consciencia se desvaneció, su cuerpo tomó una vida inocente con un solo propósito, alimentarse. El único pensamiento que llegó a su mente, fue la curiosidad del lugar en el que se encontraba, parecía lleno de vida fuera del callejón a pesar de ser lo que parecía medianoche -"Fascinante"- Pensó antes de casi instintivamente agacharse a relamer los restos de la víctima de sus instintos. -¿Habrá algún humano interesante en este lugar?- Pensó mientras se relamía.
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  • —Vamos, Aarón, que no está tan fría —bromea alguien, pero su voz se pierde rápido en el eco del recinto.

    -Aarón ya no escucha. Ha saltado hace casi un minuto, y desde entonces no ha salido. El agua lo envuelve como un sudario azul, y él permanece inmóvil en el fondo de la piscina olímpica, con los ojos abiertos y la respiración contenida desde mucho antes de tocar el agua.

    -Los segundos pasan. Treinta… cuarenta… uno de los chicos al borde de la piscina se pone de pie, inquieto.

    —¿Está bien? —pregunta, mirando al entrenador.

    —Tranquilos, tiene buen aguante —responde, aunque su ceño se frunce sutilmente.

    -Aarón sigue allí abajo, completamente quieto, los brazos flotando a los lados como si estuviera muerto… pero está más despierto que nunca. Las ondas del agua distorsionan la luz, y por un instante, le parece ver algo. Un reflejo que no cuadra. Una silueta que no es la suya.

    -Piensa en el guion. En ese fragmento que escribió sin pensar demasiado, donde alguien se hundía en una piscina y no salía jamás. Lo había tachado. Lo había olvidado. ¿O no?

    -Tres minutos. Silencio arriba. Duda. Inquietud.

    -Aarón parpadea bajo el agua, y finalmente, con una lentitud casi fantasmal, empieza a subir. Como si decidiera regresar de un lugar del que aún no estaba del todo convencido de querer salir.

    —Vamos, Aarón, que no está tan fría —bromea alguien, pero su voz se pierde rápido en el eco del recinto. -Aarón ya no escucha. Ha saltado hace casi un minuto, y desde entonces no ha salido. El agua lo envuelve como un sudario azul, y él permanece inmóvil en el fondo de la piscina olímpica, con los ojos abiertos y la respiración contenida desde mucho antes de tocar el agua. -Los segundos pasan. Treinta… cuarenta… uno de los chicos al borde de la piscina se pone de pie, inquieto. —¿Está bien? —pregunta, mirando al entrenador. —Tranquilos, tiene buen aguante —responde, aunque su ceño se frunce sutilmente. -Aarón sigue allí abajo, completamente quieto, los brazos flotando a los lados como si estuviera muerto… pero está más despierto que nunca. Las ondas del agua distorsionan la luz, y por un instante, le parece ver algo. Un reflejo que no cuadra. Una silueta que no es la suya. -Piensa en el guion. En ese fragmento que escribió sin pensar demasiado, donde alguien se hundía en una piscina y no salía jamás. Lo había tachado. Lo había olvidado. ¿O no? -Tres minutos. Silencio arriba. Duda. Inquietud. -Aarón parpadea bajo el agua, y finalmente, con una lentitud casi fantasmal, empieza a subir. Como si decidiera regresar de un lugar del que aún no estaba del todo convencido de querer salir.
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