∆ Contenido gore. Estás advertido ∆
- Mentira. -
Susurré mientras me agarraba la cabeza. Eso no podía ser verdad. Yo nunca, yo nunca... Nunca podría.
- Es la verdad, es lo que erés y te guste o no esto a sido tu culpa. -
Sus ojos vacíos me miraban con indiferencia, esto era algo muy pateitco y ridículo para él, pero para mí sería algo que nunca olvidaría y me llenaría de un dolor infernal durante mucho tiempo.
- ¡No! ¡Yo no pude hacer eso! ¡Tu me estás culpando! -
Le grite horrorizada, negándome a creer en la verdad, no quiera ver, no quería entender.
Él me tomo con fuerza de la muñeca, tanto que me lastimaba y me obligo a ver.
- ¡Mocosa estúpida! ¡Mira bien lo que haz hecho! ¡Si están muertos es por tú culpa! -
Me tomo del cabello y me acerco a los cadáveres de esas personas. Estaban descuartizados, les faltaban partes que por más que buscarán nunca las encontrarían, no las encontrarían por mi culpa.
- ¡Tú los mataste! ¡Tú! ¡Tú eres la única responsable de esto! -
Molesto me lanzó a los cuerpos. Se veían horrible, el cuerpo de una mujer tenía la mitad de la cabeza comida, uno de sus ojos colgaba por el nervio óptico y la mitad del cerebro estaba esparcido en el suelo lleno de sangre, le faltaba parte de su mejilla derecha y su oreja, sus brazos estaban doblados de formas grotescas y su estómago estaba abierto, dejando al aire sus intestinos mordidos al aire, atrayendo a las moscas y cuervos deceosos por su festín. El hombre estaba partido, pero no como la mujer que tenía las tripas expuestas, él estaba doblado a la mitad como si fuera una hoja de papel, le faltaba un brazo y de la parte que le quedaba se veía mordisqueando, como si un perro hubiera llegado y se lo hubiera tragado, su espalda estaba abierta y sus costillas estaban volteadas, su imagen era muy similar al de la águila sangrienta, no tenía sus pulmones, ni corazón o hígado, sus piernas estaban dobladas al revés en la parte de las rodillas y en la espinilla estaban partidas, el hueso había perforado la piel y se podían ver con claridad.
Era horrible la escena y yo era la única que tenía las manos escurriendo en sangre, era la única que tenía ese delicioso sabor metálico en la boca y que manchaba mi rostro y ropa... Yo era la única que tenía el estómago llenó.
#+18 #violencia #gore #oc
- Mentira. -
Susurré mientras me agarraba la cabeza. Eso no podía ser verdad. Yo nunca, yo nunca... Nunca podría.
- Es la verdad, es lo que erés y te guste o no esto a sido tu culpa. -
Sus ojos vacíos me miraban con indiferencia, esto era algo muy pateitco y ridículo para él, pero para mí sería algo que nunca olvidaría y me llenaría de un dolor infernal durante mucho tiempo.
- ¡No! ¡Yo no pude hacer eso! ¡Tu me estás culpando! -
Le grite horrorizada, negándome a creer en la verdad, no quiera ver, no quería entender.
Él me tomo con fuerza de la muñeca, tanto que me lastimaba y me obligo a ver.
- ¡Mocosa estúpida! ¡Mira bien lo que haz hecho! ¡Si están muertos es por tú culpa! -
Me tomo del cabello y me acerco a los cadáveres de esas personas. Estaban descuartizados, les faltaban partes que por más que buscarán nunca las encontrarían, no las encontrarían por mi culpa.
- ¡Tú los mataste! ¡Tú! ¡Tú eres la única responsable de esto! -
Molesto me lanzó a los cuerpos. Se veían horrible, el cuerpo de una mujer tenía la mitad de la cabeza comida, uno de sus ojos colgaba por el nervio óptico y la mitad del cerebro estaba esparcido en el suelo lleno de sangre, le faltaba parte de su mejilla derecha y su oreja, sus brazos estaban doblados de formas grotescas y su estómago estaba abierto, dejando al aire sus intestinos mordidos al aire, atrayendo a las moscas y cuervos deceosos por su festín. El hombre estaba partido, pero no como la mujer que tenía las tripas expuestas, él estaba doblado a la mitad como si fuera una hoja de papel, le faltaba un brazo y de la parte que le quedaba se veía mordisqueando, como si un perro hubiera llegado y se lo hubiera tragado, su espalda estaba abierta y sus costillas estaban volteadas, su imagen era muy similar al de la águila sangrienta, no tenía sus pulmones, ni corazón o hígado, sus piernas estaban dobladas al revés en la parte de las rodillas y en la espinilla estaban partidas, el hueso había perforado la piel y se podían ver con claridad.
Era horrible la escena y yo era la única que tenía las manos escurriendo en sangre, era la única que tenía ese delicioso sabor metálico en la boca y que manchaba mi rostro y ropa... Yo era la única que tenía el estómago llenó.
#+18 #violencia #gore #oc
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- Mentira. -
Susurré mientras me agarraba la cabeza. Eso no podía ser verdad. Yo nunca, yo nunca... Nunca podría.
- Es la verdad, es lo que erés y te guste o no esto a sido tu culpa. -
Sus ojos vacíos me miraban con indiferencia, esto era algo muy pateitco y ridículo para él, pero para mí sería algo que nunca olvidaría y me llenaría de un dolor infernal durante mucho tiempo.
- ¡No! ¡Yo no pude hacer eso! ¡Tu me estás culpando! -
Le grite horrorizada, negándome a creer en la verdad, no quiera ver, no quería entender.
Él me tomo con fuerza de la muñeca, tanto que me lastimaba y me obligo a ver.
- ¡Mocosa estúpida! ¡Mira bien lo que haz hecho! ¡Si están muertos es por tú culpa! -
Me tomo del cabello y me acerco a los cadáveres de esas personas. Estaban descuartizados, les faltaban partes que por más que buscarán nunca las encontrarían, no las encontrarían por mi culpa.
- ¡Tú los mataste! ¡Tú! ¡Tú eres la única responsable de esto! -
Molesto me lanzó a los cuerpos. Se veían horrible, el cuerpo de una mujer tenía la mitad de la cabeza comida, uno de sus ojos colgaba por el nervio óptico y la mitad del cerebro estaba esparcido en el suelo lleno de sangre, le faltaba parte de su mejilla derecha y su oreja, sus brazos estaban doblados de formas grotescas y su estómago estaba abierto, dejando al aire sus intestinos mordidos al aire, atrayendo a las moscas y cuervos deceosos por su festín. El hombre estaba partido, pero no como la mujer que tenía las tripas expuestas, él estaba doblado a la mitad como si fuera una hoja de papel, le faltaba un brazo y de la parte que le quedaba se veía mordisqueando, como si un perro hubiera llegado y se lo hubiera tragado, su espalda estaba abierta y sus costillas estaban volteadas, su imagen era muy similar al de la águila sangrienta, no tenía sus pulmones, ni corazón o hígado, sus piernas estaban dobladas al revés en la parte de las rodillas y en la espinilla estaban partidas, el hueso había perforado la piel y se podían ver con claridad.
Era horrible la escena y yo era la única que tenía las manos escurriendo en sangre, era la única que tenía ese delicioso sabor metálico en la boca y que manchaba mi rostro y ropa... Yo era la única que tenía el estómago llenó.
#+18 #violencia #gore #oc