Verano de 1897 Encontrándose en el salón de la mansión Phantomhive, Jean se sentía sofocado.
Ni siquiera vistiendo un fino traje de lino se sentía cómodo. Seguramente, ni desnudo soportaría este infierno.
Hacia tanto calor que no importaba cuánto se ventilara con el abanico, el sudor se acumulaba en su cara y en su cuerpo molestamente....