El sol del mediodía brillaba sobre la imponente Jujutsu High de Tokyo, donde los estudiantes se apresuraban a sus aulas para sus lecciones de jujutsu. Entre la multitud de jóvenes prometedores, destacaba un hombre alto, con cabello blanco y ojos misteriosos. Era Satoru Gojo, el Jujutsu Sorcerer más fuerte de su generación y profesor en la escuela.

Él se movía con una elegancia relajada, como si estuviera danzando entre la realidad y la magia. Un aura de confianza y poder lo rodeaba, pero su sonrisa despreocupada hacía que los estudiantes se sintieran cómodos a su alrededor.

En un rincón del campus, un grupo de estudiantes susurraba emocionado. "¡Mira, es Gojo-sensei! Dicen que es el más fuerte de todos los Jujutsu Sorcerers". Otro añadió, "¡Y también el más guapo!".

El aura de Gojo resonaba con una energía enigmática, y los estudiantes no podían evitar emocionarse por lo que les deparaba su tiempo en la escuela bajo su tutela. ¿Quiénes serían aquellos que se postularían para ser sus alumnos?