• [glimmer_salmon_panda_798] ¿Sigues vivo?
    [glimmer_salmon_panda_798] ¿Sigues vivo? 🧐
    Me gusta
    Me entristece
    2
    0 turnos 0 maullidos
  • Fragmentos de un mundo que no me pertenece
    Fandom OC
    Categoría Original
    El aire nocturno de la ciudad olía a hierro y humo, nada que ver con el frío limpio de los bosques nevados. Lysander caminaba por un callejón húmedo, la capucha cubriéndole el rostro y sus ojos brillando con ese reflejo sobrenatural que tanto esfuerzo le costaba ocultar. A su lado, enroscada alrededor de su brazo, la serpiente siseaba con un tono casi burlón.

    —“No perteneces aquí, Lysander. Estos humanos te miran como a un extraño, aunque no lo sepan.”
    —Lo sé… —murmuró él, apretando los puños—. Pero tampoco pertenezco allá arriba… y tú lo sabes.

    La voz se le quebró, apenas un susurro, cargado de frustración. Era cierto: en el cielo lo miraban como un error, un híbrido mal concebido; en la tierra, era un monstruo oculto entre multitudes.

    Una botella rota crujió bajo sus botas. El callejón no estaba vacío. Tres figuras emergieron de la penumbra, hombres de rostro áspero, con sonrisas que mezclaban burla y amenaza.

    —Eh, chico raro… —dijo uno de ellos, alzando un bate—. ¿Qué haces solo en esta parte de la ciudad? Parece que te perdiste…

    Lysander respiró hondo. “No pierdas el control, no pierdas el control…” repitió para sí mismo, recordando las palabras de su madre.

    —No quiero problemas. Déjenme pasar.

    Los hombres rieron, acercándose más. La serpiente siseó, enroscándose hasta su cuello.

    —Míralo, hasta tiene mascota. Qué adorable. —escupió otro, avanzando—. ¿Sabes cuánto puede valer esa piel en el mercado?

    El corazón de Lysander latió con furia. Sus alas invisibles —esas que siempre ocultaba en el mundo humano— parecieron presionar desde dentro, rogando por desplegarse. Sus ojos brillaron más, dorados, como brasas encendidas.

    —Dije… que no quiero problemas. —su voz retumbó, grave, casi no humana.

    El silencio cayó por un instante, pero el primero soltó una carcajada y levantó el bate para golpear. Fue el error más grande que pudo cometer.

    En un movimiento fluido, Lysander lo detuvo, la madera del bate crujiendo bajo la presión de su mano. El hombre apenas tuvo tiempo de gritar antes de ser lanzado contra la pared con fuerza sobrenatural. Los otros dos retrocedieron, pero Lysander ya había dado un paso al frente, la serpiente siseando en sincronía con su respiración.

    —Les advertí… —susurró, y sus ojos se encendieron como brasas al viento.

    Uno intentó correr, pero el híbrido lo sujetó de la chaqueta y lo estampó contra el suelo, la sangre tiñendo el cemento húmedo. El último quedó paralizado, temblando, observando cómo el muchacho que parecía perdido se transformaba en un ser de sombras y luz, un ángel y un demonio al mismo tiempo.

    —Váyanse de mi vista. —dijo finalmente, liberando al único que aún respiraba. Su voz sonó como un juicio, como si cada palabra pesara toneladas.

    El hombre huyó tambaleando, dejando un rastro de miedo tras de sí. Lysander se quedó quieto, respirando con dificultad, mirando sus propias manos manchadas de sangre.

    —“No eres como ellos, pero tampoco como los otros. ¿Cuánto más podrás contenerte?” —preguntó la serpiente, con un siseo casi paternal.

    Lysander se dejó caer contra la pared del callejón, mirando el cielo apenas visible entre los edificios.

    —No lo sé… —susurró, con un hilo de voz—. No lo sé…

    Y por un instante, el chico que era un híbrido celestial y tengu se sintió exactamente lo que los demás veían en él: un extraño perdido en un mundo que nunca lo aceptaría del todo.
    El aire nocturno de la ciudad olía a hierro y humo, nada que ver con el frío limpio de los bosques nevados. Lysander caminaba por un callejón húmedo, la capucha cubriéndole el rostro y sus ojos brillando con ese reflejo sobrenatural que tanto esfuerzo le costaba ocultar. A su lado, enroscada alrededor de su brazo, la serpiente siseaba con un tono casi burlón. —“No perteneces aquí, Lysander. Estos humanos te miran como a un extraño, aunque no lo sepan.” —Lo sé… —murmuró él, apretando los puños—. Pero tampoco pertenezco allá arriba… y tú lo sabes. La voz se le quebró, apenas un susurro, cargado de frustración. Era cierto: en el cielo lo miraban como un error, un híbrido mal concebido; en la tierra, era un monstruo oculto entre multitudes. Una botella rota crujió bajo sus botas. El callejón no estaba vacío. Tres figuras emergieron de la penumbra, hombres de rostro áspero, con sonrisas que mezclaban burla y amenaza. —Eh, chico raro… —dijo uno de ellos, alzando un bate—. ¿Qué haces solo en esta parte de la ciudad? Parece que te perdiste… Lysander respiró hondo. “No pierdas el control, no pierdas el control…” repitió para sí mismo, recordando las palabras de su madre. —No quiero problemas. Déjenme pasar. Los hombres rieron, acercándose más. La serpiente siseó, enroscándose hasta su cuello. —Míralo, hasta tiene mascota. Qué adorable. —escupió otro, avanzando—. ¿Sabes cuánto puede valer esa piel en el mercado? El corazón de Lysander latió con furia. Sus alas invisibles —esas que siempre ocultaba en el mundo humano— parecieron presionar desde dentro, rogando por desplegarse. Sus ojos brillaron más, dorados, como brasas encendidas. —Dije… que no quiero problemas. —su voz retumbó, grave, casi no humana. El silencio cayó por un instante, pero el primero soltó una carcajada y levantó el bate para golpear. Fue el error más grande que pudo cometer. En un movimiento fluido, Lysander lo detuvo, la madera del bate crujiendo bajo la presión de su mano. El hombre apenas tuvo tiempo de gritar antes de ser lanzado contra la pared con fuerza sobrenatural. Los otros dos retrocedieron, pero Lysander ya había dado un paso al frente, la serpiente siseando en sincronía con su respiración. —Les advertí… —susurró, y sus ojos se encendieron como brasas al viento. Uno intentó correr, pero el híbrido lo sujetó de la chaqueta y lo estampó contra el suelo, la sangre tiñendo el cemento húmedo. El último quedó paralizado, temblando, observando cómo el muchacho que parecía perdido se transformaba en un ser de sombras y luz, un ángel y un demonio al mismo tiempo. —Váyanse de mi vista. —dijo finalmente, liberando al único que aún respiraba. Su voz sonó como un juicio, como si cada palabra pesara toneladas. El hombre huyó tambaleando, dejando un rastro de miedo tras de sí. Lysander se quedó quieto, respirando con dificultad, mirando sus propias manos manchadas de sangre. —“No eres como ellos, pero tampoco como los otros. ¿Cuánto más podrás contenerte?” —preguntó la serpiente, con un siseo casi paternal. Lysander se dejó caer contra la pared del callejón, mirando el cielo apenas visible entre los edificios. —No lo sé… —susurró, con un hilo de voz—. No lo sé… Y por un instante, el chico que era un híbrido celestial y tengu se sintió exactamente lo que los demás veían en él: un extraño perdido en un mundo que nunca lo aceptaría del todo.
    Tipo
    Individual
    Líneas
    Cualquier línea
    Estado
    Disponible
    Me gusta
    Me encocora
    3
    0 turnos 0 maullidos
  • Bien, después del descanso, lo mejor es ponerse a buscar aventuras epicas, también buscar mis recuerdos perdidos, al menos recupere que tengo un hermano, aunque se la viva perdido y aveces de señales de vida.
    Bien, después del descanso, lo mejor es ponerse a buscar aventuras epicas, también buscar mis recuerdos perdidos, al menos recupere que tengo un hermano, aunque se la viva perdido y aveces de señales de vida.
    Me gusta
    Me encocora
    4
    4 turnos 0 maullidos
  • Eso fue , facil no? Robar esta mal pero ese era un ladron que no se dio cuenta ..... mejor le devolver a dueño este momeredo .
    Eso fue , facil no? Robar esta mal pero ese era un ladron que no se dio cuenta ..... mejor le devolver a dueño este momeredo .
    Me gusta
    2
    0 turnos 0 maullidos
  • Disfrutando de relajarse junto a Abby, bonito martes a todos
    Disfrutando de relajarse junto a Abby, bonito martes a todos
    Me gusta
    Me encocora
    2
    0 turnos 0 maullidos
  • — No, definitivamente es mala —

    Se repitió en voz alta como por.... ¿Quinta vez?
    A veces tenía discusiones consigo mismo respecto a la magia... Aunque había hechizos oscuros que podían salvar cientos de vidas... ¡¡Definitivamente era mala!!
    — No, definitivamente es mala — Se repitió en voz alta como por.... ¿Quinta vez? A veces tenía discusiones consigo mismo respecto a la magia... Aunque había hechizos oscuros que podían salvar cientos de vidas... ¡¡Definitivamente era mala!!
    Me gusta
    1
    0 turnos 0 maullidos
  • Todo empezó con una copa de vino blanco. Apenas la conocía, solo de vista, un par de palabras cruzadas y nada más. Pero yo no podía quedarme ahí. El vino tinto siempre fue mejor, más intenso, más honesto… y con él llegaron sabores nuevos, la excusa perfecta para acercarme y conocernos mejor.

    La piscina y la luna llena fueron testigos de lo que comenzó a nacer entre nosotros. Algo que ninguno buscaba, pero que apareció de todos modos. Y ahora, sin lunas que interfieran, sin influencias extrañas, lo que siento no se detiene… crece.

    Ella dijo que sí, si a ser algo más, si a caminar conmigo. Y ese simple “sí” vale más que cualquier promesa.

    Isla Rowan
    Todo empezó con una copa de vino blanco. Apenas la conocía, solo de vista, un par de palabras cruzadas y nada más. Pero yo no podía quedarme ahí. El vino tinto siempre fue mejor, más intenso, más honesto… y con él llegaron sabores nuevos, la excusa perfecta para acercarme y conocernos mejor. La piscina y la luna llena fueron testigos de lo que comenzó a nacer entre nosotros. Algo que ninguno buscaba, pero que apareció de todos modos. Y ahora, sin lunas que interfieran, sin influencias extrañas, lo que siento no se detiene… crece. Ella dijo que sí, si a ser algo más, si a caminar conmigo. Y ese simple “sí” vale más que cualquier promesa. [legend_peridot_mule_195]
    Me gusta
    Me encocora
    4
    2 turnos 0 maullidos
  • Aunque los años pase , mi amor por mi caballero siempre será único y lo espera siempre.
    Aunque los años pase , mi amor por mi caballero siempre será único y lo espera siempre.
    Me gusta
    2
    0 turnos 0 maullidos

  • Hace un tiempo no se llegaba a los 100...
    :STK-26: Hace un tiempo no se llegaba a los 100... :STK-26:
    Me gusta
    Me encocora
    3
    3 turnos 0 maullidos
  • — Sure as the tide rolls in at night...
    I'll still be here at the of days screaming at the sky, let the fire consume and cleanse what's before me.... Behold, I'll build my empire before the ashes hit the ground...
    — Sure as the tide rolls in at night... I'll still be here at the of days screaming at the sky, let the fire consume and cleanse what's before me.... Behold, I'll build my empire before the ashes hit the ground...
    Me gusta
    1
    0 turnos 0 maullidos
Patrocinados