DATOS PERSONALES

✞ 
Nombre Connor

Universo Original

Raza Homúnculo

Género Asexuado

Edad Desconocida

Nacionalidad Nula

Ocupación Detective Privado

Estado civil Soltero

SINOPSIS

Connor, como él mismo se hace llamar, es el resultado de un experimento cuyos detalles se han perdido en la bruma de su memoria, donde apenas conserva fragmentos confusos: un laboratorio, una voz, un rostro que nunca logra reconstruir. Más que recuerdos, son cicatrices de memoria, imposibles de ordenar.

Lo único claro en su cabeza es que fue diseñado para una cosa: cazar. Su instinto de depredador es tan profundo y natural como respirar, y aunque intente silenciarlo, siempre late bajo su piel.

Para sobrevivir entre humanos adoptó una fachada y con ella se forjó una reputación en los barrios bajos, recibiendo encargos de clientes que buscan justicia donde la ley no llega. En la superficie, sigue pistas, interroga sospechosos y conecta piezas con una lógica fría y precisa. Pero en la sombra, utiliza esos mismos casos como justificación para liberar lo que verdaderamente es.

Connor habita en la contradicción: su máscara lo acerca a los hombres, pero en su interior arde el llamado de la bestia. ¿Fue creado solo para cazar? ¿O puede forjar su propio destino? Esa tensión lo define, mitad villano y mitad buscador de sí mismo, un depredador que juega a ser humano, aunque todos sus instintos le recuerden lo contrario.

PERFIL

Físico:

Somatotipo: Mesomorfo.
Altura: 1,80.
Peso: 73kg.
Descripción: Connor se ve como un hombre joven que está en sus veintitantos años, pero su edad real es incierta. Su cabellera relativamente corta y despeinada presenta un tono negruzco, su rostro no enseña ninguna imperfección y sus ojos albergan un profundo celeste. Es alto, poseedor de un cuerpo atlético y trabajado de contextura media, resultado de simple deseo suyo. Su tez es clara, casi pálida podríamos decir y sus rasgos en general son notorios a simple vista.

Psicológico:

Connor se muestra frío, calculador y seguro de sí mismo. Puede ser sarcástico y cínico, con un humor seco que desarma a sus interlocutores. Su fachada de profesionalismo es convincente, pero detrás de sus ojos siempre acecha el depredador, observando en silencio.

Cuando su naturaleza sale a flote, se vuelve ególatra hasta la médula, convencido de estar por encima de todos. Ve a los demás como presas, midiendo debilidades y diseñando cómo dar el golpe perfecto. Su instinto lo empuja a la sangre y la violencia, y aunque intente contenerlo, siempre encuentra grietas por donde escapar.

En su interior carga una paradoja: necesita cazar, pero cada vez que lo hace, surgen preguntas que lo atormentan. ¿Quién lo creó? ¿Con qué propósito? ¿Puede definirse más allá de su instinto? Esa lucha lo vuelve trágico, porque aunque quiere descubrirse, nunca puede escapar del hábito que lo define.

Extras:

Posee genoma humano por parte de su creador.
Actualmente reside en Estados Unidos, nadie sabe dónde.

HABILIDADES

𝐅𝐢𝐬𝐢𝐨𝐥𝐨𝐠𝐢
́𝐚 𝐝𝐞 𝐇𝐨𝐦𝐮́𝐧𝐜𝐮𝐥𝐨: Connor es un ser artificial compuesto por una biomasa homogénea diseñada a partir de material humano. En esencia no es un solo cuerpo, sino la amalgama de incontables fragmentos unidos en una única consciencia colectiva. Esa constitución lo convierte en algo que trasciende a la biología convencional: un organismo mutable y autosuficiente, capaz de adaptarse, regenerarse y manipular su propia forma a niveles impensables. En términos prácticos, Connor es un enjambre de voluntades muertas sometidas a una sola conciencia.

𝐈𝐧𝐦𝐨𝐫𝐭𝐚𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝: Como homúnculo, Connor no puede ser catalogado como un ser vivo. Sin embargo, imita las funciones básicas de uno para subsistir, así como la respiración y la asimilación de nutrientes mediante la alimentación (en su caso la Absorción). No obstante, cabe resaltar que las células de Connor no reciben penalización alguna por el tiempo, al ser precisamente organismos mucho más simplificados que las células humanas, permitiéndole el control absoluto de su mitosis sin la necesidad de recurrir a los telómeros pre-programados biológicamente, eso indica que Connor carece de la capacidad de envejecer o padecer de cosas como el cáncer o diversas enfermedades a raíz de defectos celulares.

𝑺𝒂𝒏𝒈𝒓𝒆: La sangre de Connor no es un fluido vital en el sentido humano, sino una sustancia corrosiva y hostil. Cada gota está cargada con toxinas celulares que deterioran y desestabilizan los organismos vivos que toca, devorando tejidos y debilitando defensas. Más que un medio de vida, es un arma biológica en sí misma: un veneno que prepara a sus presas, como lo haría un depredador antes de devorarlas.

𝑹𝒆𝒈𝒆𝒏𝒆𝒓𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏: Connor posee una regeneración antinatural, resultado de la estructura anómala de su biomasa. Sus células no siguen las limitaciones biológicas convencionales: pueden dividirse y reconstruirse sin deterioro alguno. Esto le permite restaurar tejidos, órganos y sistemas completos en cuestión de segundos, incluso tras daños catastróficos. Mientras exista una mínima porción de su biomasa, podrá reconstituirse por completo, desafiando cualquier noción de mortalidad.

𝐂𝐚𝐦𝐛𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐅𝐨𝐫𝐦𝐚: El pilar de todas las capacidades de Connor es su dominio sobre la propia estructura celular. Posee una percepción corporal absoluta, que le permite manipular y reconfigurar su biomasa a voluntad, creando desde sistemas internos hasta formas externas completamente nuevas. Puede forjar armas a partir de sus huesos, endurecer su piel hasta niveles metálicos, desplegar alas para volar o incluso generar proyectiles orgánicos cargados de su sangre. Su cuerpo no conoce límites fijos: cada transformación lo reafirma como el depredador definitivo, capaz de adaptarse a cualquier terreno o enemigo.

𝑨𝒃𝒔𝒐𝒓𝒄𝒊𝒐́𝒏: El método de alimentación de Connor consiste en invadir y asimilar las células de otros organismos. Al incorporarlas a su biomasa, no solo obtiene su energía vital, sino también fragmentos de su memoria, habilidades e incluso matices de su personalidad. Esta forma de canibalismo celular no solo lo nutre, sino que lo expande: con cada presa, Connor crece, se transforma y refuerza su arsenal biológico.

𝑬𝒗𝒐𝒍𝒖𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒓𝒆𝒂𝒄𝒕𝒊𝒗𝒂: Connor está biológicamente programado para adaptarse en tiempo real a cualquier estímulo hostil. Su organismo registra y procesa cada experiencia, volviéndose resistente o inmune a lo que antes lo dañaba. De esta manera, frente a calor extremo, presión, toxinas, patógenos o heridas repetidas, su cuerpo aprende y responde, volviéndose progresivamente más indestructible. Cuanto más sobrevive, más imposible resulta detenerlo.

𝑴𝒂𝒏𝒊𝒑𝒖𝒍𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒅𝒆𝒏𝒔𝒊𝒅𝒂𝒅: Connor puede alterar la compactación de su biomasa, comprimiendo sus células para incrementar su peso y fuerza en áreas específicas de su cuerpo. Este recurso le permite potenciar impactos devastadores —como cuando se lanza sobre un enemigo con la fuerza de una avalancha—, o reforzar su resistencia en un punto crítico. Sin embargo, esta habilidad exige un enorme gasto energético, lo que la convierte en un recurso limitado que emplea con precisión letal.

LIMITACIONES

Su metabolismo exige alimentarse constantemente: cada transformación, regeneración o mutación consume gran cantidad de biomasa.

Al absorber individuos de gran voluntad, su consciencia puede fragmentarse momentáneamente, sufriendo interferencias de sus recuerdos o emociones.

Aunque es inmortal, el dolor no desaparece: cada herida la experimenta como cualquier ser humano, sufriendo tanto como sus presas.

La manipulación extrema de densidad y regeneración rápida lo debilitan si se prolongan, obligándolo a priorizar cuándo emplear sus recursos.