Lying world

Lyange Nuluk residía en un pueblo alejado de las grandes metrópolis de Canadá. Descendía de un padre nativo mientras que su madre era una citadina que decidió renunciar a la vida urbana y experimentar la vida del campo. Eran una familia en extremo tradicionalista, cuidaban de sus vestimentas, sus conmemoraciones, aprendían sobre la tierra y por sobre todo la respetaban. Era común que cierta época del año, el pequeño pueblo se viera visitado por infinidad de turistas que llegaban a curiosear o investigar sobre los orígenes de aquel país. En un principio no eran bien recibidos, conforme la globalización se fue expandiendo es que hubo más apertura y pronto aquellos indeseados turistas iban siendo invitados a participar en festivales tradicionales.

Fue en una de esas temporadas donde Lyange conoció a la persona que pensaba era la indicada, ya había tenido un matrimonio donde tuvo dos hijos, solamente que enviudó demasiado pronto, dejándola con una gran carga y el deseo de volver a casarse. Creía que se repetiría la historia como con sus padres, que aquel turista coreano que llegó motivado por sus estudios abandonaría la ciudad para vivir en el campo con ella. Entregó todo lo que tenía, pero llegado el momento, él la abandonó dejándola con un embarazo y totalmente avergonzada. Fue rechazada por su familia, la apoyaron con sus primeros dos hijos ya que la muerte de su esposo no fue algo que se pudiera controlar, pero no la aceptarían con una tercera cría.

Lyange tuvo que gastar todo lo que tenía para poner una casa en un trozo de tierra que sus padres le dejaron y ahí iniciar un sembradío de legumbres necesarias para los inviernos. Solo llegó a contar con una vaca que le proporcionaba leche para consumo y venta, un par de gallinas de los que conseguía huevos y gallos que daban alimento cuando ya no servían de sementales. Su único lujo era un caballo que le ayudaba a moverse por el pueblo y viajar a la ciudad más cercana a vender su mercancía cuando era necesario. Danielle nació en pleno invierno, Lyange la parió por sí misma, la experiencia de dos partos anteriores le ayudó a no necesitar una partera que no podía costear.



Corrupt world

La pequeña Danielle creció conociendo el trabajo duro, siempre teniendo cosas que hacer, nunca descansando, nunca teniendo una infancia, iba a la escuela un día a la semana y trabajaba el resto de ella. Siempre detestó esa vida, al menos desde que su hermano mayor le habló de lo que existía fuera de ese campo; música, canto, cine, pinturas, tecnología, edificios, desde ese entonces se vio fascinada por el concepto de “películas” y “actuación”, se lo describieron como contar historias que todo mundo vería y ella quería que absolutamente todos vieran lo que tenía para contar.

Fue su hermano mayor quien tras ir a vender a la ciudad, volvió con lo que sería la primera cámara para Dani. Él nunca le contó de dónde la consiguió, pero fue la ventana a lo que sería ella en el futuro.

Encontró contenido peligroso y prohibido para cualquier persona con un ápice de moral y consciencia, tan grave fue que sin necesidad de saber que era, entendió que no debía decirlo, de hacerlo sólo causaría problemas para todos. Extrañamente, en vez de asustarse por lo que descubrió, se vio curiosa por todo ese cine teñido de rojo, quizá su inexplicable gusto por lo que veía, era algo heredado por su desaparecido padre.

Con el pasar de los años, usó esa cámara para grabar diferentes situaciones de la vida de la naturaleza, violentas en su mayoría. Cuando ya esas historias no le parecían interesantes, descubrió la vida secreta de su hermano mayor, grabó todo lo que pudo hasta que este descubrió los ojos curiosos de su pequeña hermana, cuando verificó el contenido de la cámara fue como si hubiera hallado una mina de oro. Él más que nadie sabía que en el mundo urbano filmes de ese tipo se vendían como pan caliente. Guiados por la ambición y la mera necesidad de tener una vida mejor, ambos empezaron a vender esos filmes, cuando dejaron de ser novedad, Danielle se encargó de grabar más.

Fue rápida la manera en la que sus vidas mejoraron, ya no vestían ropas viejas y remendadas, pudieron conseguir más ganado y Danielle pudo ir a la escuela como normalmente se hacía. Todo iba perfecto.



Dark world

Park Nam venía de una familia poderosa que tenían a su nombre varios hoteles que servían de tapadera y lavado de dinero, en realidad eran un clan de la mafia. Por mucho tiempo se habían encargado de ser la conexión directa entre la mafia china de Boston con los Yakuza. Eran el clan que realizaba los negocios y hacían los tratos de importación y exportación de mercancía, sin embargo, tras la pérdida de poder de la mafia coreana, los Park se decantaron por un lado, siendo esta la mafia china. Mientras dicha organización se iba expandiendo, sus hoteles también lo hicieron.  

El líder de dicho clan nunca se molestó para moverse bajo el agua como la mayoría, en muchas ocasiones el FBI intentó atraparlo con las manos en la masa, pero jamás obtuvieron resultados pese a tanta imprudencia, por lo que el buen nombre de la cadena de hoteles jamás fue señalado. Por otro lado, en su vida personal tenía la fama de ser el más cruel de la sección coreana; nunca se tentó el corazón para garantizar el éxito de sus negocios, eso incluía la vida de sus hijos. No fue hasta que el mayor de ellos, Nam decidió acabar con su criadero de descendencia para hacerse del poder.

Fue este quien decidió mejorar la sección, encargándose de la trata de personas. Todo controlado y con el equipo necesario para realizarlo, para ese punto, ya tenía el poder suficiente para cubrir las huellas de sus crímenes.

Herido por las atrocidades de su padre, buscó a todo aquel niño que tuviera su sangre, todo aquel del que sospechara pues, estaba decidido que ninguno de sus hijos carecería de algo, todo aquel que llevará su sangre gozaría del exceso y lujos tanto como quisiera. Fue así que 17 años después, llegó en la busca de Danielle. La prueba de ADN fue solo una formalidad, la chica tenía de herencia todos sus rasgos y la quiso enseguida consigo. Lyange peleó, pero al final, la niña decidió irse con su padre, abandonando así el negocio que había formado con su hermano, hizo la promesa de que volvería en el futuro, cuando fuera una gran directora de cine.  

Danielle adoptó el apellido de su padre, tomó su lugar como la más pequeña de sus hijos y empezó a estudiar todo lo que él le pidió. El coreano fue lo primero que tuvo que aprender, sufrió muchísimo para lograr un nivel medio, más no quería decepcionar a su padre y este le volviera a la vida del campo.

Un par de años más tarde descubrió que su padre no era el CEO de una cadena de hoteles, no era rico por esto, sino por sus movimientos en la mafia. En lugar de espantarse por los crímenes que descubrió, encontró un lugar de calma, un sitio seguro donde podría vivir como siempre había querido… pese a que su padre y hermanastros/tras mayores no les pareciera la idea.

Tiempo después, se apuntó para ingresar a la universidad de Boston, siendo el cine lo que quiso estudiar. Nam jamás le dijo nada, no le importaba lo que sus hijos hicieran con sus vidas mientras alguno le resultara funcional para seguir con el legado mafioso. Todo estaba bien, lo único que le disgustaba era que, de su descendencia, aquella niña era la más salvaje, la más inquieta, la que menos clase tenía, le causaba vergüenza moverla con la gente de la alta sociedad y parecía no aprender.

Eso fue lo que le impulsó a convencerla de que tomara clases particulares de etiqueta y se enfocará en relacionarse con gente de la alta sociedad. Estaba convencido de que algo debería aprender de esa convivencia, lo único que quería era que aprendiera y creara relaciones sin que nadie la guiara, era una Park después de todo.

Debía estar a la altura y saber representarlos, con ello espera que algún día logré formar parte de la elite estudiantil.
 
DATOS EXTRA
 
  1.  Aunque se considera lesbiana, no puede negar que a veces peca de homocuriosa, algunos hombres si llegan a despertar su interés sexual, pero jamás los ve como algo romántico.
  2. Está consciente de que sus vídeos son un crimen, pero no le importa, aprovechará todo lo que ha obtenido de su padre para salir bien librada. 
  3. Carece de empatía. 
  4. Le gustan las mujeres de personalidad dulce, pero nunca le dice que no a alguien.