El primer registro de Zalgiem se pierde en las brumas del tiempo. Hijo de la diosa oscura Lilith, fue temido y adorado a partes iguales, el primer escrito o mencion que se tiene de el es de la antigua babilonia ¿su especialidad? Tratos a cambio de almas que luego consumia haciendose más poderoso, siempre tergirversaba, dejaba huecos, y ponia trampas para hacerse con los y las desdichadas que hacian tratos con él. Eso le gano el titulo de señor de los tratos y las trampas. Todo iba bien, el tiempo avanzaba y todo fluía tenia lo que el definía como "un traje" de humano moviendose entre ellos haciendo fortuna y poder hasta que abrio una de las discotecas mas exclusivas de la ciudad el 9° infierno, alli los seres no humanos, no tenian que guardar las apariencias.
Solo muy pocos humanos y selectos entraban sabiendo lo que alli habia, algunos incluso alimentando por ejemplo a los vampiros donando su sangre, para obtener su "chute".
El como se convirtio en dios de la vida y acabo en Davent es algo que jamas cuenta.
  • en Hiatus
  • Género Masculino
  • Raza Demonio/Dios de la vida
  • Fandom Cronicas de Davent
  • Dueño de la discoteca 9° infierno
  • 13 Publicaciones
  • 7 Escenas
  • Se unió en marzo 2024
En una relación con
Otra información
  • Longitud narrativa
    Una línea , Semi-párrafo , Párrafo , Multi-párrafo
  • Categorías de rol
    Acción , Aventura , Contemporáneo , Fantasía , Original , Otros , Terror
Publicaciones Recientes
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    https://youtu.be/JvD75Zp0DO8?si=lJZJ48KQoKDj3icd
    https://youtu.be/JvD75Zp0DO8?si=lJZJ48KQoKDj3icd
    Me gusta
    1
    0 comentarios 0 compartidos 307 vistas
  • Paso mucho desde la destrucción de Kaelem
    Zalgiem paseaba por la pradera había salido de un espeso bosque, se había cansado del mundo humano y se había autoexiliado había ido a parar a aquel extraño reino, una brisa movió las briznas de hierba, quería una vida tranquila, alzo la cabeza frente a él había dos figuras humanoides de humo, una de color azul y la otra purpura, sin facciones solo unos ojos dorados se podían distinguir. Le cortaban el paso.

    —¿Quién eres extraño? —La figura azul hablo. —No me suenas.

    —Solo soy un viajero, no quiero problemas.

    La silueta morada dio un paso hacia delante.

    —Mas respeto, somos dos de los dioses de Thyndor estas ante Oscuridad y este es mi hermano Caos.

    —Oh lo lamento entonces. —Zalgiem hizo una reverencia. —Si me disculpan.

    Paso entre ambas figuras con la cabeza agachada y su petate colgado del hombro.

    —Apesta a demonio hermano…

    —Y nos ha faltado al respeto esto no puede quedar asi…
    Caos tomo el hombro de Zalgiem y lo lanzo por los aires hacia atrás.

    —Oh hermano ¿vamos a jugar con el demonio?

    —Si hermana creo que tenemos un nuevo juguete.

    Zalgiem se levantó y dejo el petate en el suelo.

    —No quiero problemas, solo busco asentarme y tener una vida tranquila.

    Los dioses intercambiaron una mirada, este tipo no les tenía miedo, todos en Thyndor tenían pánico ante su presencia. Tendrían que hacerle entender cuál era su lugar.
    Se abalanzaron ambos a la vez contra el con la velocidad de un rayo, paro la pierna de Caos con el antebrazo, iba directa al cuello.

    —¡Te pille! —Oscuridad se agacho propinándole un duro puñetazo el en pecho. —.

    Dio dos pasos hacia atrás frotándose el pecho, si hubiera sido un humano normal le habría roto la caja torácica. Lo dioses no le daban un segundo de tregua, habían hecho que se cerrara en defensa tenía que esquivar 4 brazos y 4 piernas que no le daba tregua, cada, golpe, cada parada le destrozaba, pero se lograba regenerar, aunque cada vez más lento.

    Zalgiem solo quería paz, había perdido todo después de la destrucción de Kaelem, pero no encontraba un momento de paz, rugió ya le daba todo igual estos iban pagar los platos rotos. Su cuerpo se lleno de llamas oleadas de fuego le recorrían.

    Ambos dioses le dieron un puñetazo que paro con las manos y las cerro como si fueran cepos, intentaron soltarse, se asustaron un poco al no poder liberarse.

    —Gracias…asi no tengo que controlarme…

    Dejo libre toda su energía quemado el terreno alrededor y los lanzo por los aires, le igualo en velocidad y los golpeo estrellándolos contra el suelo donde empezó a patearlos, sin piedad, sin compasión, su furia estaba libre.

    —Hermana…haz algo…—Caos tosió sangre de color azul, ese demonio los estaba humillando. —No podemos…permitir esto…

    Oscuridad cambio su forma era una mujer pelirroja con un traje de seda blanco que puso las manos delante de la cara temblando asustada.

    —…No por…favor…mi vida…

    Zalgiem se quedo paralizado a mitad del golpe con la pierna en alto.

    —Imposible…estas muerta…te vi…

    —Amor toca mi mano. Soy real.

    Zalgiem rozo la mano aun dudando, era real noto el calor de su piel.

    —Pero es…cómo es posible...Amanda…

    —Ellos me han traído como ofrenda de paz…para que vivamos tranquilos tal como querías…

    La mujer se intentó levantar débil y Zalgiem la ayudo abrazándola, sus llamas menguaron, su furia se disipaba.

    —Creí…que no te volvería a ver…Amanda.

    —Ya, ya paso todo. Estarás en paz. Te daré el descanso que mereces…el descanso eterno demonio.

    Zalgiem abrió los ojos cuando la mano de Amanda le atravesó el pecho y se volvió de un color morado vaporoso.

    —Mira por donde una humana es tu punto débil. —Oscuridad saco la mano limpiando la sangre del color de la lava en el hombro de Zalgiem y liberándolo del abrazo. —No me lo esperaba para nada eso.

    Oscuridad ayudo a su hermano y Zalgiem cayo de rodillas al suelo su fuego, se iba pagando y sonrió, estos dos seres o dioses sin saberlo le iban a dar al final la paz.

    —¿Hermano por qué se ríe?

    Caos se puso de rodillas mirándolo.

    —La humana que amaba esta muerta…y el va a morir, le hemos hecho un favor…Oscuridad…nuestro hermano el dios de la vida…ya no está entre nosotros ¿verdad?

    —No porque lo preguntas…oooh ya entiendo… eres retorcido, me gusta.

    —Nos has faltado al respeto…—De la muñeca de caos broto sangre dorada dejando caer 7 gotas en la herida. —Te has enfrentado abiertamente, y después de humillarnos…pretendes que te dejemos morir. No, no vas a tener tu recompensa demonio, te hare eterno. Y me asegurare que sufras durante todo esa eternidad, ella y yo nos encargaremos de frustrar todos tu intentos, en cuanto algo te haga feliz nos encargaremos de corromperlo, estropearlo, destruirlo y jamás morirás. Bienvenido a la familia dios de la vida.

    Empujo a Zalgiem que quedo tumbado en el suelo en shock, noto como la vida que iba perdiendo ahora volvía a el de nuevo, no podía ser, eso no podía estar pasando. Pero en realidad, si estaba pasando.
    Paso mucho desde la destrucción de Kaelem Zalgiem paseaba por la pradera había salido de un espeso bosque, se había cansado del mundo humano y se había autoexiliado había ido a parar a aquel extraño reino, una brisa movió las briznas de hierba, quería una vida tranquila, alzo la cabeza frente a él había dos figuras humanoides de humo, una de color azul y la otra purpura, sin facciones solo unos ojos dorados se podían distinguir. Le cortaban el paso. —¿Quién eres extraño? —La figura azul hablo. —No me suenas. —Solo soy un viajero, no quiero problemas. La silueta morada dio un paso hacia delante. —Mas respeto, somos dos de los dioses de Thyndor estas ante Oscuridad y este es mi hermano Caos. —Oh lo lamento entonces. —Zalgiem hizo una reverencia. —Si me disculpan. Paso entre ambas figuras con la cabeza agachada y su petate colgado del hombro. —Apesta a demonio hermano… —Y nos ha faltado al respeto esto no puede quedar asi… Caos tomo el hombro de Zalgiem y lo lanzo por los aires hacia atrás. —Oh hermano ¿vamos a jugar con el demonio? —Si hermana creo que tenemos un nuevo juguete. Zalgiem se levantó y dejo el petate en el suelo. —No quiero problemas, solo busco asentarme y tener una vida tranquila. Los dioses intercambiaron una mirada, este tipo no les tenía miedo, todos en Thyndor tenían pánico ante su presencia. Tendrían que hacerle entender cuál era su lugar. Se abalanzaron ambos a la vez contra el con la velocidad de un rayo, paro la pierna de Caos con el antebrazo, iba directa al cuello. —¡Te pille! —Oscuridad se agacho propinándole un duro puñetazo el en pecho. —. Dio dos pasos hacia atrás frotándose el pecho, si hubiera sido un humano normal le habría roto la caja torácica. Lo dioses no le daban un segundo de tregua, habían hecho que se cerrara en defensa tenía que esquivar 4 brazos y 4 piernas que no le daba tregua, cada, golpe, cada parada le destrozaba, pero se lograba regenerar, aunque cada vez más lento. Zalgiem solo quería paz, había perdido todo después de la destrucción de Kaelem, pero no encontraba un momento de paz, rugió ya le daba todo igual estos iban pagar los platos rotos. Su cuerpo se lleno de llamas oleadas de fuego le recorrían. Ambos dioses le dieron un puñetazo que paro con las manos y las cerro como si fueran cepos, intentaron soltarse, se asustaron un poco al no poder liberarse. —Gracias…asi no tengo que controlarme… Dejo libre toda su energía quemado el terreno alrededor y los lanzo por los aires, le igualo en velocidad y los golpeo estrellándolos contra el suelo donde empezó a patearlos, sin piedad, sin compasión, su furia estaba libre. —Hermana…haz algo…—Caos tosió sangre de color azul, ese demonio los estaba humillando. —No podemos…permitir esto… Oscuridad cambio su forma era una mujer pelirroja con un traje de seda blanco que puso las manos delante de la cara temblando asustada. —…No por…favor…mi vida… Zalgiem se quedo paralizado a mitad del golpe con la pierna en alto. —Imposible…estas muerta…te vi… —Amor toca mi mano. Soy real. Zalgiem rozo la mano aun dudando, era real noto el calor de su piel. —Pero es…cómo es posible...Amanda… —Ellos me han traído como ofrenda de paz…para que vivamos tranquilos tal como querías… La mujer se intentó levantar débil y Zalgiem la ayudo abrazándola, sus llamas menguaron, su furia se disipaba. —Creí…que no te volvería a ver…Amanda. —Ya, ya paso todo. Estarás en paz. Te daré el descanso que mereces…el descanso eterno demonio. Zalgiem abrió los ojos cuando la mano de Amanda le atravesó el pecho y se volvió de un color morado vaporoso. —Mira por donde una humana es tu punto débil. —Oscuridad saco la mano limpiando la sangre del color de la lava en el hombro de Zalgiem y liberándolo del abrazo. —No me lo esperaba para nada eso. Oscuridad ayudo a su hermano y Zalgiem cayo de rodillas al suelo su fuego, se iba pagando y sonrió, estos dos seres o dioses sin saberlo le iban a dar al final la paz. —¿Hermano por qué se ríe? Caos se puso de rodillas mirándolo. —La humana que amaba esta muerta…y el va a morir, le hemos hecho un favor…Oscuridad…nuestro hermano el dios de la vida…ya no está entre nosotros ¿verdad? —No porque lo preguntas…oooh ya entiendo… eres retorcido, me gusta. —Nos has faltado al respeto…—De la muñeca de caos broto sangre dorada dejando caer 7 gotas en la herida. —Te has enfrentado abiertamente, y después de humillarnos…pretendes que te dejemos morir. No, no vas a tener tu recompensa demonio, te hare eterno. Y me asegurare que sufras durante todo esa eternidad, ella y yo nos encargaremos de frustrar todos tu intentos, en cuanto algo te haga feliz nos encargaremos de corromperlo, estropearlo, destruirlo y jamás morirás. Bienvenido a la familia dios de la vida. Empujo a Zalgiem que quedo tumbado en el suelo en shock, noto como la vida que iba perdiendo ahora volvía a el de nuevo, no podía ser, eso no podía estar pasando. Pero en realidad, si estaba pasando.
    Me encocora
    Me shockea
    2
    1 turno 1 maullido 1005 vistas
  • El demonio respiraba entrecortadamente. La mano fria como el hielo atravesaba su pecho, habia consguido retenerla para que no le llegase al corazón.

    —¿Te resistes a la muerte hermano?—Duneadan sonreía, el frio se iba extendiendo apagando el calor de Zalgiem.—No me creo que seas tan cabezota...je...me diviertes..

    Zalgiem libero una mano que sujetaba aquella fria cuchilla y lanzo un puñetazo al cuello de su hermano que hizo un crater en el suelo, Duneadan dio solo un par de pasos atras. Lo necesario, para que lo liberará y tomara distancia.
    Miro atrás Kaelem estaba arrasado, su mundo destruido. Sus amigos muertos, su amada...

    —Vamos Zal...céntrate en mi, ellos estan muertos ya...padre tenia razón tienes luz en tu alma eso te hace débil ¡Me das asco!

    —Duneadan para esta locura.—Se sujetaba la herida que iba cerrando con su magia.—Ya has creado bastante caos...

    El oscuro demonio torció la cabeza riendo y lo señalo.

    —No, aun no, conservas la esperanza y hasta que no la erradicque de tu interior. Hasta que no te arrebate todo no pararé...

    Creo una pequeña bola de energía azul, que enterro en suelo mientras reía.

    —¡Que has hecho insensato!—Zalgiem bramo furioso.—Estas enfermo...

    —La manera mas rapida de arrebatarte todo Zal destruir tu mundo... literalmente.—Duneadan alzo las manos.—Tranquilo no soy tan cruel.

    Movio las manos y unas cadenas, unas cadenas que mas tarde llevaria como una eterna condena,se enroscaron al cuerpo de Zalgiem atandolo a una montaña, cuanto mas trataba de liberarse y mas rompia las cadenas, mas salian atandolo, grito. maldijo, insultó cada vez con menos fuerza.
    Duneadan se acerco a él y le sujeto la barbilla, girandole la cara a una columna que emergio, atada con cadenas tambian, habia una mujer de cabello rojo la cabeza baja pero se veia sangre en la frente, la armadura esta rota, era Amanda.

    —Shhh, eres muy escandaloso, mira te he traido un regalo. Esta un poco apalizada y se lo han pasado bien con ella pero ¡oye respira! ¡Eso es mucho! Ya que voy a convertir este mundo en polvo que menos que muráis juntos—Suspiro riendo.—Soy todo un romántico...Tan cerca y tan lejos. Bueno disfrutad del fin del mundo.

    Abrio un portal desapareciendo por el. Zalgiem forcejeo apretando los diente tirando de las cadenas.

    —¡Amanda!¡Amanda despierta!

    La mujer movio la cabeza arrugando la mariz y entreabrio los ojos, confusa.

    —Z..Zal...Lo..siento...no...te hice caso...—Trato de sonreírle sin fuerzas.—Tienes...razón soy...una...cabezota...

    —No, no...—Trato de sonar tranquilo.—Se que estas cansada, pero me tienes que hacer caso.

    Veia que la conciencia de la mujer iba y venia.

    —Eh, pelirroja, quedate conmigo...—Era su mote cariñoso hacia ella.—Por favor Amanda necesito que reacciones.

    —Nunca...me...iria..de..tu lado...

    —Esa es mi guerrera...Duneadan va a destruir Kaelem lo va a hacer estallar. Creo que puedo liberarte, cuando lo haga corre a casa, tengo alli la guadaña, usala y esper...

    —No...Zal...olvidalo...

    —No es momento de ser orgullosa, ere fuerte no lo pongo en duda, pero esto es demasiado, necesito que lo hagas...

    —No...es...orgullo...cielo...—lo miro estaba palida. Bajo la cabeza a sus piernas.—No..malgastes..energia...

    Zalgiem palidecio. En su traje rojo había una manchaas oscura en las piernas, tenia una hemorragia bastante grave.

    —No...no pasa...nada Amanda, te puedo liberar...y sanar...puedo...

    —¿Quien de los dos...es...ahora..el..cabezota? ¡Liberate vive maldita sea!

    No hubo tiempo a mas fue rapido, lo que dura un paradeo y desde otros lugares del universo, apenas se darian cuenta de que habia una estrella menos.

    Zalgiem abrio los ojos flotando en el vacio del espacio, no quedaba nada de su mundo sus amigos....de ella.
    El demonio respiraba entrecortadamente. La mano fria como el hielo atravesaba su pecho, habia consguido retenerla para que no le llegase al corazón. —¿Te resistes a la muerte hermano?—Duneadan sonreía, el frio se iba extendiendo apagando el calor de Zalgiem.—No me creo que seas tan cabezota...je...me diviertes.. Zalgiem libero una mano que sujetaba aquella fria cuchilla y lanzo un puñetazo al cuello de su hermano que hizo un crater en el suelo, Duneadan dio solo un par de pasos atras. Lo necesario, para que lo liberará y tomara distancia. Miro atrás Kaelem estaba arrasado, su mundo destruido. Sus amigos muertos, su amada... —Vamos Zal...céntrate en mi, ellos estan muertos ya...padre tenia razón tienes luz en tu alma eso te hace débil ¡Me das asco! —Duneadan para esta locura.—Se sujetaba la herida que iba cerrando con su magia.—Ya has creado bastante caos... El oscuro demonio torció la cabeza riendo y lo señalo. —No, aun no, conservas la esperanza y hasta que no la erradicque de tu interior. Hasta que no te arrebate todo no pararé... Creo una pequeña bola de energía azul, que enterro en suelo mientras reía. —¡Que has hecho insensato!—Zalgiem bramo furioso.—Estas enfermo... —La manera mas rapida de arrebatarte todo Zal destruir tu mundo... literalmente.—Duneadan alzo las manos.—Tranquilo no soy tan cruel. Movio las manos y unas cadenas, unas cadenas que mas tarde llevaria como una eterna condena,se enroscaron al cuerpo de Zalgiem atandolo a una montaña, cuanto mas trataba de liberarse y mas rompia las cadenas, mas salian atandolo, grito. maldijo, insultó cada vez con menos fuerza. Duneadan se acerco a él y le sujeto la barbilla, girandole la cara a una columna que emergio, atada con cadenas tambian, habia una mujer de cabello rojo la cabeza baja pero se veia sangre en la frente, la armadura esta rota, era Amanda. —Shhh, eres muy escandaloso, mira te he traido un regalo. Esta un poco apalizada y se lo han pasado bien con ella pero ¡oye respira! ¡Eso es mucho! Ya que voy a convertir este mundo en polvo que menos que muráis juntos—Suspiro riendo.—Soy todo un romántico...Tan cerca y tan lejos. Bueno disfrutad del fin del mundo. Abrio un portal desapareciendo por el. Zalgiem forcejeo apretando los diente tirando de las cadenas. —¡Amanda!¡Amanda despierta! La mujer movio la cabeza arrugando la mariz y entreabrio los ojos, confusa. —Z..Zal...Lo..siento...no...te hice caso...—Trato de sonreírle sin fuerzas.—Tienes...razón soy...una...cabezota... —No, no...—Trato de sonar tranquilo.—Se que estas cansada, pero me tienes que hacer caso. Veia que la conciencia de la mujer iba y venia. —Eh, pelirroja, quedate conmigo...—Era su mote cariñoso hacia ella.—Por favor Amanda necesito que reacciones. —Nunca...me...iria..de..tu lado... —Esa es mi guerrera...Duneadan va a destruir Kaelem lo va a hacer estallar. Creo que puedo liberarte, cuando lo haga corre a casa, tengo alli la guadaña, usala y esper... —No...Zal...olvidalo... —No es momento de ser orgullosa, ere fuerte no lo pongo en duda, pero esto es demasiado, necesito que lo hagas... —No...es...orgullo...cielo...—lo miro estaba palida. Bajo la cabeza a sus piernas.—No..malgastes..energia... Zalgiem palidecio. En su traje rojo había una manchaas oscura en las piernas, tenia una hemorragia bastante grave. —No...no pasa...nada Amanda, te puedo liberar...y sanar...puedo... —¿Quien de los dos...es...ahora..el..cabezota? ¡Liberate vive maldita sea! No hubo tiempo a mas fue rapido, lo que dura un paradeo y desde otros lugares del universo, apenas se darian cuenta de que habia una estrella menos. Zalgiem abrio los ojos flotando en el vacio del espacio, no quedaba nada de su mundo sus amigos....de ella.
    Me gusta
    Me encocora
    Me entristece
    3
    0 turnos 1 maullido 1085 vistas
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    Caminante, no hay camino,
    se hace camino al andar.
    Al andar se hace el camino,
    y al volver la vista atrás
    se ve la senda que nunca
    se ha de volver a pisar.
    Me gusta
    1
    0 comentarios 0 compartidos 612 vistas
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    ¡Oh señora! Reina de la tristeza, ángel del dulce dolor. Bebe la hiel de mi boca, blasfema, ven y hazme el amor.
    Me gusta
    2
    0 comentarios 0 compartidos 633 vistas
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    En la habitación hacia frio, el vaho era visible con la respiración, ante el la niña de 15 años a la cual había dado su primera comunión hacía unos años había desaparecido, se retorcía blasfemando.
    —¡Satanas dominus meus est et condemnavit homines!
    —En el nombre de dios deja a su hija. —Ezequiel se cuadro ante el demonio que había en la cama. —¡El poder de cristo te obliga!
    El ser se quedo quieto y dos juegos de pupilas se hicieron presentes cuando clavo la mirada en el párroco.
    —Oh Ezequiel, el nazareno llora en su cruz, le habéis fallado, habéis prostituido su palabra. Dime padre ¿a cuantas monjas te has fornicado? O no son…de tu agrado…prefieres los hombres…—Se paso las manos por el cuerpo de manera obscena. —¿más jóvenes quizás?
    Ezequiel roció con el Acetre al ser impío. Que retrocedió siseando como una áspid.
    —¡Silencio! ¿Cuál es tu nombre demonio?
    —Llegas tarde cura…—El ser volvió su voz gruesa y tenebrosa. —¡PADRE EZEQUIEL LA ZORRA ES MIA, ARDERA EN EL INFIERNO!
    El padre abrió los ojos incorporándose de la cama, solo era un sueño, un recuerdo se dijo para calmar su corazón desbocado. Miro el reloj digital de la mesita, los números verdes marcaban las 3:33 Am.
    Tosió un poco tenia la garganta seca, y se acerco al mueble bar donde se sirvió un vaso de wiski, miro la estatuilla de cristo de la pared.
    —Por favor, no me mires asi, es solo para dormir el dolor.
    Me gusta
    Me shockea
    3
    0 comentarios 0 compartidos 537 vistas
Ver más…