• El sol acariciaba el cielo cuando ella descendió del Olimpo, con una ultima misión. Su risa aún tenía la inocencia de los siglos, pero sus ojos… sus ojos hablaban de experiencias que antes no conocía. Había cambiado. Ya no era solo la diosa de la juventud: era el resultado de haber sido herida… y haber renacido.

    Caminaba descalza sobre la hierba, y a cada paso, pequeñas flores brotaban bajo sus pies. Su cabello, largo y blanco como la paz eterna, flotaba con cada brisa, brillante, fuerte, indomable.

    —Antes creía que la juventud era eterna sólo por serlo —susurró, alzando un mechón entre sus dedos—. Pero aprendí que incluso la luz necesita cuidados para no apagarse.

    Se detuvo frente a un espejo de agua. Su reflejo era más que belleza: era resiliencia.

    —Me rompieron, sí… —dijo, sin bajar la mirada—. Pero me recompongo más fuerte. Y ahora, no hay sombra que me apague.

    A su lado, un frasco blanco con dorado del shampoo: Pantene, descansaba como un tesoro celestial. Ella lo alzó entre sus manos con la misma reverencia con la que brindaba néctar a los dioses.

    —Esto no es un simple shampoo. Es un escudo, un bálsamo, un recordatorio de que incluso las diosas necesitan cuidarse. Mi cabello no solo brilla… resiste. Vive. Habla de mí.

    Y con una sonrisa traviesa, pero decidida, se giró al espectador invisible que la miraba desde el mundo terrenal.

    —Si quieres sentirte radiante, viva… y fuerte, como yo… Elige bien. Pantene. Brilla con fuerza. Como una diosa.

    #momentopeloteo #desafiodivino
    El sol acariciaba el cielo cuando ella descendió del Olimpo, con una ultima misión. Su risa aún tenía la inocencia de los siglos, pero sus ojos… sus ojos hablaban de experiencias que antes no conocía. Había cambiado. Ya no era solo la diosa de la juventud: era el resultado de haber sido herida… y haber renacido. Caminaba descalza sobre la hierba, y a cada paso, pequeñas flores brotaban bajo sus pies. Su cabello, largo y blanco como la paz eterna, flotaba con cada brisa, brillante, fuerte, indomable. —Antes creía que la juventud era eterna sólo por serlo —susurró, alzando un mechón entre sus dedos—. Pero aprendí que incluso la luz necesita cuidados para no apagarse. Se detuvo frente a un espejo de agua. Su reflejo era más que belleza: era resiliencia. —Me rompieron, sí… —dijo, sin bajar la mirada—. Pero me recompongo más fuerte. Y ahora, no hay sombra que me apague. A su lado, un frasco blanco con dorado del shampoo: Pantene, descansaba como un tesoro celestial. Ella lo alzó entre sus manos con la misma reverencia con la que brindaba néctar a los dioses. —Esto no es un simple shampoo. Es un escudo, un bálsamo, un recordatorio de que incluso las diosas necesitan cuidarse. Mi cabello no solo brilla… resiste. Vive. Habla de mí. Y con una sonrisa traviesa, pero decidida, se giró al espectador invisible que la miraba desde el mundo terrenal. —Si quieres sentirte radiante, viva… y fuerte, como yo… Elige bien. Pantene. Brilla con fuerza. Como una diosa. #momentopeloteo #desafiodivino
    Me gusta
    2
    0 turnos 0 maullidos
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    ¿Por qué los habitantes del inframundo nunca cuentan sus problemas?

    Porque saben que se los van a llevar a la tumba.

    #desafiodivino

    (Se que es malo pero mi creatividad estaba un poco en -100)
    ¿Por qué los habitantes del inframundo nunca cuentan sus problemas? Porque saben que se los van a llevar a la tumba. #desafiodivino (Se que es malo pero mi creatividad estaba un poco en -100)
    Me enjaja
    2
    2 comentarios 0 compartidos
  • #escenadebatalla #desafiodiarioolimpico
    #desafiodivino #DiosesdelOlimpo

    Hebe se escondió tras una columna de mármol, temblando de emoción contenida mientras se tapaba la boca con ambas manos. Su corazoncito latía como un tambor alegre. «¡Oh, oh… creo que me pasé un poquitín!»pensó, conteniendo una risita traviesa.

    Todo había comenzado con la brillante idea de usar su 'Chrysós Dólos', su linda hondita dorada, para hacer volar la copa de néctar de Hefesto. Solo un jueguito inocente, nada más. Pero su balín de goma, en lugar de derramar el néctar, había impactado con un sonoro *¡Paf!* en la nuca de su padre, Zeus.

    El Olimpo se quedó en silencio.

    Zeus se volteó con el ceño fruncido, y sus rayos centellearon al ver a Hefesto con su copa intacta en la mano.

    —¡¿Tú te atreves?!—tronó la voz DEL rey del Olimpo.

    —¿Eh?! ¡Pero si yo ni hice na—!

    Demasiado tarde. Un relámpago y una llamarada chocaron en el aire, desatando el caos. Dioses corriendo, mesas volando, el néctar derramado.

    Hebe, acurrucada tras la columna, se mordió el labio, temblando de emoción. «Bueno… al menos no fui yo.» Y con una risita silenciosa, disfrutó el espectáculo.

    #escenadebatalla #desafiodiarioolimpico #desafiodivino #DiosesdelOlimpo Hebe se escondió tras una columna de mármol, temblando de emoción contenida mientras se tapaba la boca con ambas manos. Su corazoncito latía como un tambor alegre. «¡Oh, oh… creo que me pasé un poquitín!»pensó, conteniendo una risita traviesa. Todo había comenzado con la brillante idea de usar su 'Chrysós Dólos', su linda hondita dorada, para hacer volar la copa de néctar de Hefesto. Solo un jueguito inocente, nada más. Pero su balín de goma, en lugar de derramar el néctar, había impactado con un sonoro *¡Paf!* en la nuca de su padre, Zeus. El Olimpo se quedó en silencio. Zeus se volteó con el ceño fruncido, y sus rayos centellearon al ver a Hefesto con su copa intacta en la mano. —¡¿Tú te atreves?!—tronó la voz DEL rey del Olimpo. —¿Eh?! ¡Pero si yo ni hice na—! Demasiado tarde. Un relámpago y una llamarada chocaron en el aire, desatando el caos. Dioses corriendo, mesas volando, el néctar derramado. Hebe, acurrucada tras la columna, se mordió el labio, temblando de emoción. «Bueno… al menos no fui yo.» Y con una risita silenciosa, disfrutó el espectáculo.
    Me enjaja
    Me shockea
    2
    0 turnos 0 maullidos
Patrocinados