• "Nadie volverá a ponerte la mano encima"
    Fandom Game of Thrones
    CategorĆ­a Aventura
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    慤慤慤慤Ė¹ šŸœ² 慤š‘†š‘Žš‘›š‘ š‘Ž š‘†š‘”š‘Žš‘Ÿš‘˜
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    “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž”

    Esas eran las últimas palabras que había escuchado una y otra vez mientras sus hermanos juramentados, Alliser Thorne y Olly lo apuñalaban una y otra vez. Esas eran las palabras que su cerebro repitió como un eco hasta que su conciencia se extinguió con la misma velocidad que la sangre se extendía sobre la nieve pálida de aquella noche de verano casi a punto de concluir.

    “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž”

    Asesinado por sus propios hermanos tan solo por velar y tratar de salvar todas las vidas humanas posibles. ¿Acaso valía más la pena la vida de un hombre del sur del muro que la de un niño del otro lado de este? No. Para Jon Nieve no. Una vida era una vida. Y con las cosas que el bastardo de Invernalia había visto los últimos años lo cierto era que iban a necesitar todos los hombres posibles. La muerte marcharía sobre el muro más tarde o más temprano y solo existía una cosa: carne viva y carne muerta. Cuantos más miembros del pueblo libre salvase, más probabilidades tendría Poniente de salvarse.

    “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž”

    No había esperado sobrevivir a aquella lluvia de puñaladas y, sin embargo, sus pulmones volvieron a acoger aire, sus ojos volvieron a abrirse. Desorientado, Jon Nieve había tenido que hacerse a la idea de que había sido asesinado por sus propios hermanos, que lo habían traicionado, que habían cometido un acto tan deplorable como era el de matar a su Lord Comandante…

    “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž”

    Sí. Por la guardia.. Ahora era su deber poner fin a esa rebelión, sofocarla y dar ejemplo de lo que sucedía en el Castillo Negro si se osaba levantar un arma contra otro hermano… No era de buen gusto.

    Mientras avanzaba entre lo escasos hermanos de la Guardia de la noche que quedaban, mientras caminaba hacia el cadalso donde Alliser Thorne, Olly y otros dos hermanos juramentados aguardaban, Jon no dejaba de pensar en aquella tarde estival cuando su padre, Ned Stark, había impartido la justicia del rey contra otro hermano de la guardia de la noche. No dejaba de pensar en el modo en que Hielo, el espadón, había cercenado la cabeza de ese joven. Nunca era de buen grado matar a un hombre a sangre fría, claro. Pero… ¿Acaso sus hermanos habían mostrado más misericordia con él? No, claro que no.

    A pesar de la frialdad de Thorne, a pesar de la mirada de odio de Olly aquello no se hacia mucho más facil. Cortar la cuerda que mantenía con vida a esos cuatro hombres fue, probablemente, una de las decisiones más difíciles que habría tenido que tomar Jon Nieve y tambien la última que tomaría como Lord Comandante.

    Después de aquello le cedió su capa de Lord Comandante a Ed El Penas. Había muerto por la Guardia de la noche. Su guardia había terminado. Ahora tenia un destino mucho más oscuro e incierto delante de si… Pero, desde luego no estaría ligado a la guardia de la Noche.

    Estaba preparado para partir. Al Sur, lo más probable… Era la única opción. A pesar de la insistencia de Ed, a pesar de lo que los dos sabían que habían visto en Casa Austera tambien sabían los dos que Jon no podía quedarse. No podía quedarse en el Norte, no después de abandonar la Guardia, no podía volver a casa porque ya no quedaba casa a la que volver… No sabia qué otra cosa hacer. Y entonces un cuerno sonó… Como si hubiese estado buscando una respuesta de forma silenciosa.

    “Un toque para un explorador que vuelve.”

    Solo que no esperaban explorador alguno.

    Jon salió rápidamente de sus dependencias y, cuando se asomó a la barandilla para observar al recién llegado casi creyó estar viendo un fantasma o un espejismo. Habían pasado los años, se la veia cansada del viaje, sucia, pero… ni la nieve ni el polvo habían hecho mella en aquel rostro que conocía desde que era un niño. Reconocería ese cabello rojizo entre un millar de cabezas.

    Y aun asi seguía pareciendo totalmente irreal…

    No podía apartar la mirada de ella mientras bajaba las escaleras. Porque a cada paso que daba más temía verla desaparecer en el aire. Nunca habían sido grandes amigos, lo cierto era que no se soportaban y no la había visto desde que la vio subir a un carruaje camino de Desembarco del Rey. Y allí estaba tantos años después…

    Sus pasos se aceleraron a medida que acortaba el camino y para comprobar que era real acudió a estrecharla entre sus brazos, quizás con la misma fuerza con que Sansa Stark, su hermana, lo abrazaba de vuelta.

    La emotividad del rencuentro fraternal no duró demasiado, pues si algo había estado claro desde el día en que nació era que Sansa podía parecer tan Tully como su madre, pero era más terca que todos los Stark vivos o muertos. La joven loba tenia solo una idea en mente: recuperar Invernalia. Algo que resultaba… imposible siquiera de pensar…

    Mientras la veia marchar a las habitaciones que habían conseguido destinarle, Jon pensaba en que si Sansa queria recuperar Invernalia, ella sola seria capaz de conseguirlo. Pero… no le vendría mal una espada o dos. Y él… Pobre de él, la seguiría a donde fuera. Por el miedo a la venganza fantasma de su padre y porque no pensaba volver a dejarla sola nunca más…

    Aquella mañana había decidido no volver a pasar una sola noche más en aquel castillo y ahora, sin embargo… seguía tumbado en la cama del Lord Comandante. Su cuerpo se retorcía sumido en una serie de pesadillas que no era capaz de controlar. Sangre, muertos, caminantes blancos, los gritos… La mirada dolida de Ygritte cuando descubrió que nunca había dejado a los Cuervos… Todas esas imágenes pasando a toda velocidad ante sus ojos hasta que Jon despertó agitado empapado en un inusual sudor a pesar de la temperatura invernal del exterior. Se levantó del camastro y acudió a la pequeña tinaja de agua la cual vertió en la pila que le hacia de lavabo. Se mojó la cara un par de veces y se miró en el espejo siendo apenas capaz de ver su propio reflejo a causa de la tenue luz de las velas.

    Necesitaba despejarse y en esa habitación no encontraría nada más que pesadillas y quebraderos de cabeza, así que se colocó su jubón de cuero negro y salió al estrecho pasillo de madera y piedra con intención de encontrar la puerta al exterior, pero… algo llamó su atención desde las dependencias cercanas a su propia habitación. Un sollozo casi ahogado. Y supo enseguida de quien se trataba.

    Como si su brújula interna de pronto hubiera encontrado otro norte, los pies de Jon se internaron en el pasillo hasta dar con la puerta entreabierta de la habitación que le habían cedido a Sansa Stark.

    -Sansa… -susurró Jon entrando en las dependencias de su hermana y acudiendo en tres zancadas hasta su camastro donde se acuclilló casi rendido al ver sus orbes azules brillantes a causa de aquellas mudas lágrimas. Tomó rápidamente la mano de su hermana tratando de calentarla entre las propias- Estoy aquí… Estás a salvo… No dejaré que nadie más te ponga un dedo encima. Mataré a quien ose volver a hacerte daño…- aseguró el bastardo antes de llevarse la mano de su hermana a los labios y dejando un beso en el dorso de estos- Te lo prometo…


    #Personajes3D #3D #Comunidad3D #Jonsa #GameOfThrones
    慤慤慤慤 ā§½ š’š“š€š‘š“š„š‘ 慤慤慤慤Ė¹ [N.Q.Stark] 慤慤 慤慤慤慤慤 “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž” Esas eran las últimas palabras que había escuchado una y otra vez mientras sus hermanos juramentados, Alliser Thorne y Olly lo apuñalaban una y otra vez. Esas eran las palabras que su cerebro repitió como un eco hasta que su conciencia se extinguió con la misma velocidad que la sangre se extendía sobre la nieve pálida de aquella noche de verano casi a punto de concluir. “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž” Asesinado por sus propios hermanos tan solo por velar y tratar de salvar todas las vidas humanas posibles. ¿Acaso valía más la pena la vida de un hombre del sur del muro que la de un niño del otro lado de este? No. Para Jon Nieve no. Una vida era una vida. Y con las cosas que el bastardo de Invernalia había visto los últimos años lo cierto era que iban a necesitar todos los hombres posibles. La muerte marcharía sobre el muro más tarde o más temprano y solo existía una cosa: carne viva y carne muerta. Cuantos más miembros del pueblo libre salvase, más probabilidades tendría Poniente de salvarse. “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž” No había esperado sobrevivir a aquella lluvia de puñaladas y, sin embargo, sus pulmones volvieron a acoger aire, sus ojos volvieron a abrirse. Desorientado, Jon Nieve había tenido que hacerse a la idea de que había sido asesinado por sus propios hermanos, que lo habían traicionado, que habían cometido un acto tan deplorable como era el de matar a su Lord Comandante… “š‘ƒš‘œš‘Ÿ š‘™š‘Ž š‘”š‘¢š‘Žš‘Ÿš‘‘š‘–š‘Ž” Sí. Por la guardia.. Ahora era su deber poner fin a esa rebelión, sofocarla y dar ejemplo de lo que sucedía en el Castillo Negro si se osaba levantar un arma contra otro hermano… No era de buen gusto. Mientras avanzaba entre lo escasos hermanos de la Guardia de la noche que quedaban, mientras caminaba hacia el cadalso donde Alliser Thorne, Olly y otros dos hermanos juramentados aguardaban, Jon no dejaba de pensar en aquella tarde estival cuando su padre, Ned Stark, había impartido la justicia del rey contra otro hermano de la guardia de la noche. No dejaba de pensar en el modo en que Hielo, el espadón, había cercenado la cabeza de ese joven. Nunca era de buen grado matar a un hombre a sangre fría, claro. Pero… ¿Acaso sus hermanos habían mostrado más misericordia con él? No, claro que no. A pesar de la frialdad de Thorne, a pesar de la mirada de odio de Olly aquello no se hacia mucho más facil. Cortar la cuerda que mantenía con vida a esos cuatro hombres fue, probablemente, una de las decisiones más difíciles que habría tenido que tomar Jon Nieve y tambien la última que tomaría como Lord Comandante. Después de aquello le cedió su capa de Lord Comandante a Ed El Penas. Había muerto por la Guardia de la noche. Su guardia había terminado. Ahora tenia un destino mucho más oscuro e incierto delante de si… Pero, desde luego no estaría ligado a la guardia de la Noche. Estaba preparado para partir. Al Sur, lo más probable… Era la única opción. A pesar de la insistencia de Ed, a pesar de lo que los dos sabían que habían visto en Casa Austera tambien sabían los dos que Jon no podía quedarse. No podía quedarse en el Norte, no después de abandonar la Guardia, no podía volver a casa porque ya no quedaba casa a la que volver… No sabia qué otra cosa hacer. Y entonces un cuerno sonó… Como si hubiese estado buscando una respuesta de forma silenciosa. “Un toque para un explorador que vuelve.” Solo que no esperaban explorador alguno. Jon salió rápidamente de sus dependencias y, cuando se asomó a la barandilla para observar al recién llegado casi creyó estar viendo un fantasma o un espejismo. Habían pasado los años, se la veia cansada del viaje, sucia, pero… ni la nieve ni el polvo habían hecho mella en aquel rostro que conocía desde que era un niño. Reconocería ese cabello rojizo entre un millar de cabezas. Y aun asi seguía pareciendo totalmente irreal… No podía apartar la mirada de ella mientras bajaba las escaleras. Porque a cada paso que daba más temía verla desaparecer en el aire. Nunca habían sido grandes amigos, lo cierto era que no se soportaban y no la había visto desde que la vio subir a un carruaje camino de Desembarco del Rey. Y allí estaba tantos años después… Sus pasos se aceleraron a medida que acortaba el camino y para comprobar que era real acudió a estrecharla entre sus brazos, quizás con la misma fuerza con que Sansa Stark, su hermana, lo abrazaba de vuelta. La emotividad del rencuentro fraternal no duró demasiado, pues si algo había estado claro desde el día en que nació era que Sansa podía parecer tan Tully como su madre, pero era más terca que todos los Stark vivos o muertos. La joven loba tenia solo una idea en mente: recuperar Invernalia. Algo que resultaba… imposible siquiera de pensar… Mientras la veia marchar a las habitaciones que habían conseguido destinarle, Jon pensaba en que si Sansa queria recuperar Invernalia, ella sola seria capaz de conseguirlo. Pero… no le vendría mal una espada o dos. Y él… Pobre de él, la seguiría a donde fuera. Por el miedo a la venganza fantasma de su padre y porque no pensaba volver a dejarla sola nunca más… Aquella mañana había decidido no volver a pasar una sola noche más en aquel castillo y ahora, sin embargo… seguía tumbado en la cama del Lord Comandante. Su cuerpo se retorcía sumido en una serie de pesadillas que no era capaz de controlar. Sangre, muertos, caminantes blancos, los gritos… La mirada dolida de Ygritte cuando descubrió que nunca había dejado a los Cuervos… Todas esas imágenes pasando a toda velocidad ante sus ojos hasta que Jon despertó agitado empapado en un inusual sudor a pesar de la temperatura invernal del exterior. Se levantó del camastro y acudió a la pequeña tinaja de agua la cual vertió en la pila que le hacia de lavabo. Se mojó la cara un par de veces y se miró en el espejo siendo apenas capaz de ver su propio reflejo a causa de la tenue luz de las velas. Necesitaba despejarse y en esa habitación no encontraría nada más que pesadillas y quebraderos de cabeza, así que se colocó su jubón de cuero negro y salió al estrecho pasillo de madera y piedra con intención de encontrar la puerta al exterior, pero… algo llamó su atención desde las dependencias cercanas a su propia habitación. Un sollozo casi ahogado. Y supo enseguida de quien se trataba. Como si su brújula interna de pronto hubiera encontrado otro norte, los pies de Jon se internaron en el pasillo hasta dar con la puerta entreabierta de la habitación que le habían cedido a Sansa Stark. -Sansa… -susurró Jon entrando en las dependencias de su hermana y acudiendo en tres zancadas hasta su camastro donde se acuclilló casi rendido al ver sus orbes azules brillantes a causa de aquellas mudas lágrimas. Tomó rápidamente la mano de su hermana tratando de calentarla entre las propias- Estoy aquí… Estás a salvo… No dejaré que nadie más te ponga un dedo encima. Mataré a quien ose volver a hacerte daño…- aseguró el bastardo antes de llevarse la mano de su hermana a los labios y dejando un beso en el dorso de estos- Te lo prometo… #Personajes3D #3D #Comunidad3D #Jonsa #GameOfThrones
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    慤
    慤
    慤慤慤慤慤慤Ya lo advertía la casa Stark desde hacía siglos.
    "Se acerca el Invierno". Lo que habia podido convertirse en un lema que habia perdido su significado y se habia diluido en el tiempo tras el largo verano ahora era una realidad palpable. Se notaba en el ambiente, incluso desde el Mar Angosto uno podía notar que las calimas y la temperatura del aire habia descendido. No lo suficiente para abotargar los sentidos. No lo suficiente como para tener que calzar gruesas botas y pesadas pieles. Era solo... una ligera sensación de vez en cuando.

    Por supuesto la Reina de Plata no tenia verdadera conciencia de aquello, siempre habia vivido en el largo verano, pero... sí sus capitanes y sus consejeros Ponientís.

    Aun así, la trémula y tímida brisa fría que anticipaba aquel invierno no congelaba el animo de los miles de barcos que surcaban el Mar Angosto. Miles de barcos rompían las ligeras olas, sus mascarones siendo salpicados de ligeras gotas. Velas negras con el emblema del dragón tricéfalo en color rojo. Velas anaranjadas con el sol rojizo atravesado por una lanza. Velas verdes con la rosa dorada. Una comitiva envidiable. Un augurio de vientos de cambio.

    Por absurdo que pudiera parecer, Daenerys Targaryen era incapaz de moverse de la cubierta de aquel barco, no de momento. No era la primera vez que veia el mar, claro. Pero aquella vez era diferente. Ahora no pretendía reclamar el trono de las ciudades esclavistas, no pretendía liberar esclavos... Aquello era muy distinto. Volvía a casa. Sabia que no sería fácil. No era tan necia como lo habia sido Viserys. No era tan tonta como para pensar que, en secreto, el populacho brindaba en su nombre. Sabía que conquistar y reinar Poniente sería duro y complicado. Pero... Su vida no habia sido sencilla hasta ese momento, ¿verdad? Habia tenido que pelear y luchar por cada cosa que habia querido.

    Una niña que habia sido exiliada de su hogar, que habia crecido bajo la sombra de un hermano con ínfulas de rey, una niña vendida a un caudillo dothraki solo por la ambición de su hermano de conseguir un trono de hierro que siempre le quedaría demasiado lejos. Una khaleesi que habia sido despreciada en Qarth. Una khaleesi cuyos dragones habían sido robados y a los cuales tuvo que recuperar. Una reina libertadora en Meereen y Astapor... Una princesa que solo buscaba regresar a casa bajo el amparo de las casas que en su día debieron protegerla por estricto juramento.

    Una reina que no se dejaría vencer, que ni siquiera se movería por ahora de la cubierta de aquel barco. Daenerys Targaryen habia sobrevivido a demasiadas cosas y se prometía sobrevivir a aquellos vientos de invierno.


    #Personajes3D #3D #Comunidad3D #DaenerysTargaryen #HouseTargaryen #GameOfThrones

    https://www.youtube.com/watch?v=FmZtWQIhRr0
    慤慤 慤 慤慤慤慤š‘‰iš‘’nš‘”oš‘  š‘‘e Iš‘›vš‘–eš‘Ÿnš‘œ 慤慤慤慤ā§½ šŒšŽššŽš‘šŽš‹ 慤 慤 慤慤慤慤慤慤Ya lo advertía la casa Stark desde hacía siglos. "Se acerca el Invierno". Lo que habia podido convertirse en un lema que habia perdido su significado y se habia diluido en el tiempo tras el largo verano ahora era una realidad palpable. Se notaba en el ambiente, incluso desde el Mar Angosto uno podía notar que las calimas y la temperatura del aire habia descendido. No lo suficiente para abotargar los sentidos. No lo suficiente como para tener que calzar gruesas botas y pesadas pieles. Era solo... una ligera sensación de vez en cuando. Por supuesto la Reina de Plata no tenia verdadera conciencia de aquello, siempre habia vivido en el largo verano, pero... sí sus capitanes y sus consejeros Ponientís. Aun así, la trémula y tímida brisa fría que anticipaba aquel invierno no congelaba el animo de los miles de barcos que surcaban el Mar Angosto. Miles de barcos rompían las ligeras olas, sus mascarones siendo salpicados de ligeras gotas. Velas negras con el emblema del dragón tricéfalo en color rojo. Velas anaranjadas con el sol rojizo atravesado por una lanza. Velas verdes con la rosa dorada. Una comitiva envidiable. Un augurio de vientos de cambio. Por absurdo que pudiera parecer, Daenerys Targaryen era incapaz de moverse de la cubierta de aquel barco, no de momento. No era la primera vez que veia el mar, claro. Pero aquella vez era diferente. Ahora no pretendía reclamar el trono de las ciudades esclavistas, no pretendía liberar esclavos... Aquello era muy distinto. Volvía a casa. Sabia que no sería fácil. No era tan necia como lo habia sido Viserys. No era tan tonta como para pensar que, en secreto, el populacho brindaba en su nombre. Sabía que conquistar y reinar Poniente sería duro y complicado. Pero... Su vida no habia sido sencilla hasta ese momento, ¿verdad? Habia tenido que pelear y luchar por cada cosa que habia querido. Una niña que habia sido exiliada de su hogar, que habia crecido bajo la sombra de un hermano con ínfulas de rey, una niña vendida a un caudillo dothraki solo por la ambición de su hermano de conseguir un trono de hierro que siempre le quedaría demasiado lejos. Una khaleesi que habia sido despreciada en Qarth. Una khaleesi cuyos dragones habían sido robados y a los cuales tuvo que recuperar. Una reina libertadora en Meereen y Astapor... Una princesa que solo buscaba regresar a casa bajo el amparo de las casas que en su día debieron protegerla por estricto juramento. Una reina que no se dejaría vencer, que ni siquiera se movería por ahora de la cubierta de aquel barco. Daenerys Targaryen habia sobrevivido a demasiadas cosas y se prometía sobrevivir a aquellos vientos de invierno. #Personajes3D #3D #Comunidad3D #DaenerysTargaryen #HouseTargaryen #GameOfThrones https://www.youtube.com/watch?v=FmZtWQIhRr0
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    慤慤慤慤Kš¢nš sš„aš²eš«... Qš®ešžnš¬lššyšžr...
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    慤慤慤慤Ė¹ Jaime Lannister
    慤
    慤慤
    慤慤慤慤La travesía a través del Mar Angosto había sido larga y ardua para el grueso de aquel enorme ejercito que Daenerys de la Tormenta llevaba hasta Poniente. Los dothrakis no estaban acostumbrados a navegar y para ellos aquella travesía resultaba pesada y agobiante. Los vaivenes de las embarcaciones no ayudaban a la digestión de algunos de ellos, otros palidecían… Pero, por muy arduo que fuera aquel viaje a su khalasar, a Daenerys Targaryen los dias se le hacían eternos, como si nunca fuesen a avistar tierra… Llevaba toda su vida soñando con el momento en que volviera a pisar tierra ponientí. Llevaba toda su vida anhelando recuperar lo que era suyo por derecho y ahora que lo tenia tan cerca, parecía que el momento se le escapaba entre los dedos.

    O asi pareció ser durante aquellas semanas. Hasta que… al final sus botas pisaron la playa de arena fina de Rocadragón. No recordaba ese lugar a pesar de haber nacido entre los muros de la fortaleza. ¿Como recordarlo? Tuvo que huir de su hogar poco tiempo después. Exiliada, vendida… tuvo que labrarse su propio destino y pelear lo que era suyo por nacimiento.

    Ahora que algunas lunas habían pasado y había podido recorrer el castillo se daba cuenta de que no se sentía como, se supone debía sentirse. Se suponía que debía sentir euforia, alegría… Pero… Nada de eso… Se sentía una extraña en aquel castillo, se sentía una extraña en aquella tierra y una parte de ella le decía que no debió de dejar Meereen… Pero decidió acallar a esa voz cobarde. Ahora que estaba tan cerca no pensaba detenerse… No podía dar marcha atrás, no ahora que todo Poniente sabia que ella y sus dragones habían llegado a su hogar.

    La espera la estaba consumiendo, aquella calma que precedía a la tempestad lograba sacarla de quicio. ¿Qué habría hecho Viserys teniendo tres dragones, cien mil dothrakis y mas de veinte mil inmaculados? ¿Qué habría hecho Viserys con el apoyo de las casas Tyrell, Martell y los diez mil barcos de los Greyjoy? Probablemente habría atacado Desembarco del Rey esa misma semana. Y puede que hubiera ganado… Hubiera conquistado Poniente en menos de un mes, pero… tal y como apuntó Tyrion Lannister, Daenerys no había vuelto a Poniente para conquistar. Su intención era reinar…

    A pesar de que le habían servido bien, Daenerys no podía evitar recelar de ciertos miembros de su consejo: Lord Varys, la araña… Ese hombre había servido a su padre, Aerys y lo había visto morir. Había servido al Usurpador y lo había visto morir. No sin antes tramar un plan para matarla. A ella… ¿Cómo fiarse de aquellos consejeros…?
    Sus dias en Rocadragón constaban de reuniones y mas reuniones. Todo conversaciones y nada de actuación…

    Yara Greyjoy, Olenna Tyrell y Ellaria Arena abogaban por atacar Desembarco del Rey. Tyrion Lannister apuntaba la larga lista de perdidas humanas que aquello conllevaría.

    Daenerys decidió hacer caso de los consejos de su Mano de la Reina, Tyrion Lannister… En lugar de atacar directamente la capital optaría por sitiarla. Rodearla por todas partes para que esta no pudiera abastecerse. Y para ello necesitaba un ejercitó Ponientí: el ejercito de los Martell y los Tyrell. Mientras tanto, Lyon Lannister y su flota se desplazarían a Roca Casterly siendo respaldados por una avanzadilla de los Inmaculados de Gusano Gris. Al menos aquel había sido el consejo de Tyrion y parecía lo más sensato, por eso Daenerys le había dejado presentar el plan a su consejo.

    A pesar de que Tyrion le había servido bien, lady Olenna se encargó, en petit comité, de implantar una duda en la mente de la reina de plata. ¿Realmente servía Tyrion a su reina?

    -¿Sois una oveja? No, sois un dragón… Sed un dragón.

    慤慤慤*慤慤慤慤慤慤慤慤慤慤*慤慤慤慤慤慤慤慤慤慤*

    La tarde había caído en Rocadragón y mientras los barcos de los Greyjoy, Martell y Tyrell comenzaban su trajín para zarpar, al igual que sus inmaculados, Daenerys observaba por los ventanales sin cristales de la sala del consejo. Las antorchas ancladas por el camino alumbraban perfectamente el descenso de las tropas hacia las naves. Cientos de barcas navegando hacia los barcos apostados unas millas más allá, esperando en mitad del mar.

    Todavía la conversacion con Olenna Tyrell paseaba por su cabeza sin darle un momento de descanso a la Reina. ¿Y si tenia razon? Su propia experiencia había estado basada en hombres que habían buscado en ella solo lo que querían: Drogo, Jorah, Xaro Xhoan Daxos, Hizdahr Zo Loraq… ¿Y si Tyrion Lannister era otro nombre mas de esa lista? ¿Qué interés personal podía tener Tyrion? Bien es verdad que la guerra era contra su hermana, una hermana que, aseguraba, nunca lo había querido. Una hermana que había pedido su cabeza, pero… ¿Cómo de fuerte era el vinculo de sangre? Daenerys no sabia demasiado de aquello. Había visto morir a su propia rémora y no había sentido… nada.

    Sus pensamientos se esfumaron en el aire cuando unos pasos llegaron hasta el umbral de aquella sala. Daenerys se giró para descubrir allí a Gusano Gris, quien se supone que ya debía estar embarcando. La mirada de la Reina era interrogante, exigiendo una explicación a porqué no estaba cumpliendo con la orden dada acorde al plan establecido.

    -Mi reina… Los Inmaculados descubrir intrusos en fortaleza… Hacer prisioneros que aguardar en celdas… ¿Qué hacer?

    El ceño de Daenerys se frunció con cierta confusión. ¿Intrusos? ¿Quién en su sano juicio osaría hacer tal estupidez?

    -Los recibiré en la sala del trono… -dijo, solamente- Informa a Lord Tyrion…


    #Personajes3D #3D #Comunidad3D #GameOfThrones #Jaimerys
    慤慤 慤慤慤 慤慤慤慤Kš¢nš sš„aš²eš«... Qš®ešžnš¬lššyšžr... 慤慤慤慤ā§½ š’š“š€š‘š“š„š‘ 慤慤慤慤Ė¹ [The_Lion] 慤 慤慤 慤慤慤慤La travesía a través del Mar Angosto había sido larga y ardua para el grueso de aquel enorme ejercito que Daenerys de la Tormenta llevaba hasta Poniente. Los dothrakis no estaban acostumbrados a navegar y para ellos aquella travesía resultaba pesada y agobiante. Los vaivenes de las embarcaciones no ayudaban a la digestión de algunos de ellos, otros palidecían… Pero, por muy arduo que fuera aquel viaje a su khalasar, a Daenerys Targaryen los dias se le hacían eternos, como si nunca fuesen a avistar tierra… Llevaba toda su vida soñando con el momento en que volviera a pisar tierra ponientí. Llevaba toda su vida anhelando recuperar lo que era suyo por derecho y ahora que lo tenia tan cerca, parecía que el momento se le escapaba entre los dedos. O asi pareció ser durante aquellas semanas. Hasta que… al final sus botas pisaron la playa de arena fina de Rocadragón. No recordaba ese lugar a pesar de haber nacido entre los muros de la fortaleza. ¿Como recordarlo? Tuvo que huir de su hogar poco tiempo después. Exiliada, vendida… tuvo que labrarse su propio destino y pelear lo que era suyo por nacimiento. Ahora que algunas lunas habían pasado y había podido recorrer el castillo se daba cuenta de que no se sentía como, se supone debía sentirse. Se suponía que debía sentir euforia, alegría… Pero… Nada de eso… Se sentía una extraña en aquel castillo, se sentía una extraña en aquella tierra y una parte de ella le decía que no debió de dejar Meereen… Pero decidió acallar a esa voz cobarde. Ahora que estaba tan cerca no pensaba detenerse… No podía dar marcha atrás, no ahora que todo Poniente sabia que ella y sus dragones habían llegado a su hogar. La espera la estaba consumiendo, aquella calma que precedía a la tempestad lograba sacarla de quicio. ¿Qué habría hecho Viserys teniendo tres dragones, cien mil dothrakis y mas de veinte mil inmaculados? ¿Qué habría hecho Viserys con el apoyo de las casas Tyrell, Martell y los diez mil barcos de los Greyjoy? Probablemente habría atacado Desembarco del Rey esa misma semana. Y puede que hubiera ganado… Hubiera conquistado Poniente en menos de un mes, pero… tal y como apuntó Tyrion Lannister, Daenerys no había vuelto a Poniente para conquistar. Su intención era reinar… A pesar de que le habían servido bien, Daenerys no podía evitar recelar de ciertos miembros de su consejo: Lord Varys, la araña… Ese hombre había servido a su padre, Aerys y lo había visto morir. Había servido al Usurpador y lo había visto morir. No sin antes tramar un plan para matarla. A ella… ¿Cómo fiarse de aquellos consejeros…? Sus dias en Rocadragón constaban de reuniones y mas reuniones. Todo conversaciones y nada de actuación… Yara Greyjoy, Olenna Tyrell y Ellaria Arena abogaban por atacar Desembarco del Rey. Tyrion Lannister apuntaba la larga lista de perdidas humanas que aquello conllevaría. Daenerys decidió hacer caso de los consejos de su Mano de la Reina, Tyrion Lannister… En lugar de atacar directamente la capital optaría por sitiarla. Rodearla por todas partes para que esta no pudiera abastecerse. Y para ello necesitaba un ejercitó Ponientí: el ejercito de los Martell y los Tyrell. Mientras tanto, Lyon Lannister y su flota se desplazarían a Roca Casterly siendo respaldados por una avanzadilla de los Inmaculados de Gusano Gris. Al menos aquel había sido el consejo de Tyrion y parecía lo más sensato, por eso Daenerys le había dejado presentar el plan a su consejo. A pesar de que Tyrion le había servido bien, lady Olenna se encargó, en petit comité, de implantar una duda en la mente de la reina de plata. ¿Realmente servía Tyrion a su reina? -¿Sois una oveja? No, sois un dragón… Sed un dragón. 慤慤慤*慤慤慤慤慤慤慤慤慤慤*慤慤慤慤慤慤慤慤慤慤* La tarde había caído en Rocadragón y mientras los barcos de los Greyjoy, Martell y Tyrell comenzaban su trajín para zarpar, al igual que sus inmaculados, Daenerys observaba por los ventanales sin cristales de la sala del consejo. Las antorchas ancladas por el camino alumbraban perfectamente el descenso de las tropas hacia las naves. Cientos de barcas navegando hacia los barcos apostados unas millas más allá, esperando en mitad del mar. Todavía la conversacion con Olenna Tyrell paseaba por su cabeza sin darle un momento de descanso a la Reina. ¿Y si tenia razon? Su propia experiencia había estado basada en hombres que habían buscado en ella solo lo que querían: Drogo, Jorah, Xaro Xhoan Daxos, Hizdahr Zo Loraq… ¿Y si Tyrion Lannister era otro nombre mas de esa lista? ¿Qué interés personal podía tener Tyrion? Bien es verdad que la guerra era contra su hermana, una hermana que, aseguraba, nunca lo había querido. Una hermana que había pedido su cabeza, pero… ¿Cómo de fuerte era el vinculo de sangre? Daenerys no sabia demasiado de aquello. Había visto morir a su propia rémora y no había sentido… nada. Sus pensamientos se esfumaron en el aire cuando unos pasos llegaron hasta el umbral de aquella sala. Daenerys se giró para descubrir allí a Gusano Gris, quien se supone que ya debía estar embarcando. La mirada de la Reina era interrogante, exigiendo una explicación a porqué no estaba cumpliendo con la orden dada acorde al plan establecido. -Mi reina… Los Inmaculados descubrir intrusos en fortaleza… Hacer prisioneros que aguardar en celdas… ¿Qué hacer? El ceño de Daenerys se frunció con cierta confusión. ¿Intrusos? ¿Quién en su sano juicio osaría hacer tal estupidez? -Los recibiré en la sala del trono… -dijo, solamente- Informa a Lord Tyrion… #Personajes3D #3D #Comunidad3D #GameOfThrones #Jaimerys
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