• —— Curioso traje, Bob Reynolds

    Al igual que su madre —— una de ellas —— piensa que los trajes de los superhéroes son ridículos. Como hija de villanas, criadas por esta desde que Ivy la encontrase de bebé en los bosques, ha salido a estas, con la crueldad de las tres mujeres fusionadas en una sola persona, pero enmascarándolo mejor que las sirenas originales.
    —— Curioso traje, [dream_scarlet_donkey_841] Al igual que su madre —— una de ellas —— piensa que los trajes de los superhéroes son ridículos. Como hija de villanas, criadas por esta desde que Ivy la encontrase de bebé en los bosques, ha salido a estas, con la crueldad de las tres mujeres fusionadas en una sola persona, pero enmascarándolo mejor que las sirenas originales.
    0 turnos 0 maullidos
  • —— ¿Le gusta el color verde, 𝑳𝒐𝒌𝒊 ?

    Es precisamente detallar ese color en el contrario lo que la anima a dejar su aversión por las personas atrás. Ahora mismo en su trastornada cabeza solo existe Ivy, su madre, —— a la que más cercana es de sus tres madres —— y su amor por ese mismo color también.
    —— ¿Le gusta el color verde, [G0dofMischief] ? Es precisamente detallar ese color en el contrario lo que la anima a dejar su aversión por las personas atrás. Ahora mismo en su trastornada cabeza solo existe Ivy, su madre, —— a la que más cercana es de sus tres madres —— y su amor por ese mismo color también.
    0 turnos 0 maullidos
  • La casa de mi talentosa madre
    La casa de mi talentosa madre 🏡
    Me encocora
    1
    0 comentarios 0 compartidos
  • —Mientras volaba por el lugar donde crecio,se encontro a otra variable de si mismo,en esta ocasión se encontro a la uno de los pocos invencibles que no mostraban su rostro,estaba parado enfrente de su casa,a lo cual bajo a ver de que se trataba—

    —¿Ya la mataste verdad?

    Full Masked Mark:"¿a quien?"

    —A mamá,eso no se vale amigo,yo habia pedido matarla desde antes de que nos transportaran a este universo

    Full Masked Mark:"yo iba a matarla...es solo que ella no esta"

    —El estaba mintiendo,sabia que ella estaba escondida en alguna parte de la casa,pero no queria hacerle daño,el solo queria a su madre de vuelta—

    —Entonces dejame hacer pedazos esta casa,al menos como premio consuelo

    —Full Masked Mark puso su mano en el pecho de su otro yo,evitando que avanzara,esto no le gusto nada al Mark Sinientro,por lo que intento entrar a la fuerza,pero Full Masked Mark le propino un golpe que lo aparto unos metros de la casa—


    —Ahora si que me enoje...


    —Cuando estaba a punto de empezar un pequeño combate entre los dos Invencibles,uno de los drones de Armstrong aparecio,molesto por eso,Mark Siniestro solo de cruzo de brazos y puso una expresion furiosa—

    —La proxima vez no habra nadie que te salve

    —Con el sabor amargo de no poder haber cumplido su sueño retorcido,solo se retiro resignado,buscando algo grande para destrozar y desquitarse—
    —Mientras volaba por el lugar donde crecio,se encontro a otra variable de si mismo,en esta ocasión se encontro a la uno de los pocos invencibles que no mostraban su rostro,estaba parado enfrente de su casa,a lo cual bajo a ver de que se trataba— —¿Ya la mataste verdad? Full Masked Mark:"¿a quien?" —A mamá,eso no se vale amigo,yo habia pedido matarla desde antes de que nos transportaran a este universo Full Masked Mark:"yo iba a matarla...es solo que ella no esta" —El estaba mintiendo,sabia que ella estaba escondida en alguna parte de la casa,pero no queria hacerle daño,el solo queria a su madre de vuelta— —Entonces dejame hacer pedazos esta casa,al menos como premio consuelo —Full Masked Mark puso su mano en el pecho de su otro yo,evitando que avanzara,esto no le gusto nada al Mark Sinientro,por lo que intento entrar a la fuerza,pero Full Masked Mark le propino un golpe que lo aparto unos metros de la casa— —Ahora si que me enoje... —Cuando estaba a punto de empezar un pequeño combate entre los dos Invencibles,uno de los drones de Armstrong aparecio,molesto por eso,Mark Siniestro solo de cruzo de brazos y puso una expresion furiosa— —La proxima vez no habra nadie que te salve —Con el sabor amargo de no poder haber cumplido su sueño retorcido,solo se retiro resignado,buscando algo grande para destrozar y desquitarse—
    Me gusta
    Me encocora
    4
    0 turnos 0 maullidos
  • Hijo de una bruja nigromante y de un caballero licantropo.
    Con habilidades que su madre jamás creyó posibles, a pesar de que siempre busca su bienestar, es imposible de negar cómo de vez en cuando, su mente le juega los peores trucos.

    "Busca venganza" "Daña por el hecho de dañar" "Hazlos sufrir"

    Pero es su madre, quien lo vuelve a guiar por el camino que ella considera el mejor: No se daña por dañar, no se toma venganza y sobre todo, no se obtiene nada del sufrimiento ajeno.

    Pero el chico... El desea ver todo arder solo para volver a tener a su familia reunida.
    Hijo de una bruja nigromante y de un caballero licantropo. Con habilidades que su madre jamás creyó posibles, a pesar de que siempre busca su bienestar, es imposible de negar cómo de vez en cuando, su mente le juega los peores trucos. "Busca venganza" "Daña por el hecho de dañar" "Hazlos sufrir" Pero es su madre, quien lo vuelve a guiar por el camino que ella considera el mejor: No se daña por dañar, no se toma venganza y sobre todo, no se obtiene nada del sufrimiento ajeno. Pero el chico... El desea ver todo arder solo para volver a tener a su familia reunida.
    Me encocora
    2
    0 turnos 0 maullidos
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    ¡Madre mía el pedazo de hombre con el que estoy saliendo!
    ¡Madre mía el pedazo de hombre con el que estoy saliendo!
    #SeductiveSunday

    Estoy preparado para un verano único y especial
    0 comentarios 0 compartidos
  • El móvil vibró sobre la encimera mientras me servía un café. Número italiano.
    Papá.
    Tragué antes de contestar. Ya intuía el tono.

    —Papá.

    —Figlia mia, buongiorno… ¿molesto?

    No. Solo estás llamando después de meses para hablar de algo que no quiero oír. Pero no lo dije.

    —Dime.

    Habló del tiempo en Nápoles, de los tomates que plantó en su jardín, de un político al que “ya no se le puede confiar ni los cubiertos”. Escuché.
    Esperé.
    Y entonces llegó.

    —¿Y los niños, Leah?

    Me apoyé contra la encimera. Cerré los ojos.

    —¿Qué niños?

    —I figli, por supuesto. Si vas a casarte con esa chica —mordió la palabra “chica” como si le molestara decirla—, alguien tendrá que continuar el nombre. Nuestra sangre no puede morir en ti. ¿Lo habéis hablado?

    Sentí un calor subir por la nuca. Frustración vieja, mezclada con el cansancio de fingir paciencia.

    —No es tu asunto, papá.

    —Claro que lo es. Eres mi hija. Y tú sabes cómo funciona nuestro mundo. Tienes apellido. Tienes posición. Y si tú no dejas algo detrás…

    —¿Detrás de qué? ¿Del negocio? ¿De la vida? —interrumpí—. ¿Quieres que tenga un hijo para que herede un imperio manchado de sangre? ¿O quieres una foto para enseñar en tus cenas?

    Hubo un silencio. Pero no por respeto. Por cálculo.

    —Leah, non fare la drammatica. Solo digo que pienses a futuro. Esa muchacha ¿Ya te ha dicho si quiere ser madre? ¿O vas a dejar que decida por ti?

    Ahí perdí el control.

    —Mía no me debe nada. Y si algún día quiere hablar de eso, lo hablaremos. Pero no voy a ponerle un calendario encima solo porque tú quieres nietos con mis ojos y su boca.

    Lo dije rápido. Frío. Y en voz baja.
    La rabia controlada duele más que el grito.

    Papá bufó al otro lado.

    —Estás cambiando, Leah.

    —Sí. Estoy dejando de obedecer.

    Corté la llamada antes de que pudiera responder. Apoyé el móvil sobre la mesa, sin fuerza, pero con una tensión en el pecho que no me dejaba tragar el café.

    No era miedo.
    Era culpa.
    Porque tenía razón en una cosa: no lo había hablado con Mía.

    Y la sola idea de presionarla me revolvía el estómago.

    Me quedé mirando por la ventana, con la taza caliente entre las manos.

    “Tendremos esa conversación… pero cuando sea su momento. No el de él. No el mío. El de ella.”

    Y punto.

    Poco después las manos de mi prometida alrededor de mi cintura y su aroma llegando a mi nariz, me volteé viéndola recién levantada y la besé con urgencia, necesitándola despues de la tensa conversación

    Mía Russo
    El móvil vibró sobre la encimera mientras me servía un café. Número italiano. Papá. Tragué antes de contestar. Ya intuía el tono. —Papá. —Figlia mia, buongiorno… ¿molesto? No. Solo estás llamando después de meses para hablar de algo que no quiero oír. Pero no lo dije. —Dime. Habló del tiempo en Nápoles, de los tomates que plantó en su jardín, de un político al que “ya no se le puede confiar ni los cubiertos”. Escuché. Esperé. Y entonces llegó. —¿Y los niños, Leah? Me apoyé contra la encimera. Cerré los ojos. —¿Qué niños? —I figli, por supuesto. Si vas a casarte con esa chica —mordió la palabra “chica” como si le molestara decirla—, alguien tendrá que continuar el nombre. Nuestra sangre no puede morir en ti. ¿Lo habéis hablado? Sentí un calor subir por la nuca. Frustración vieja, mezclada con el cansancio de fingir paciencia. —No es tu asunto, papá. —Claro que lo es. Eres mi hija. Y tú sabes cómo funciona nuestro mundo. Tienes apellido. Tienes posición. Y si tú no dejas algo detrás… —¿Detrás de qué? ¿Del negocio? ¿De la vida? —interrumpí—. ¿Quieres que tenga un hijo para que herede un imperio manchado de sangre? ¿O quieres una foto para enseñar en tus cenas? Hubo un silencio. Pero no por respeto. Por cálculo. —Leah, non fare la drammatica. Solo digo que pienses a futuro. Esa muchacha ¿Ya te ha dicho si quiere ser madre? ¿O vas a dejar que decida por ti? Ahí perdí el control. —Mía no me debe nada. Y si algún día quiere hablar de eso, lo hablaremos. Pero no voy a ponerle un calendario encima solo porque tú quieres nietos con mis ojos y su boca. Lo dije rápido. Frío. Y en voz baja. La rabia controlada duele más que el grito. Papá bufó al otro lado. —Estás cambiando, Leah. —Sí. Estoy dejando de obedecer. Corté la llamada antes de que pudiera responder. Apoyé el móvil sobre la mesa, sin fuerza, pero con una tensión en el pecho que no me dejaba tragar el café. No era miedo. Era culpa. Porque tenía razón en una cosa: no lo había hablado con Mía. Y la sola idea de presionarla me revolvía el estómago. Me quedé mirando por la ventana, con la taza caliente entre las manos. “Tendremos esa conversación… pero cuando sea su momento. No el de él. No el mío. El de ella.” Y punto. Poco después las manos de mi prometida alrededor de mi cintura y su aroma llegando a mi nariz, me volteé viéndola recién levantada y la besé con urgencia, necesitándola despues de la tensa conversación [Top_modelx95]
    Me gusta
    1
    37 turnos 0 maullidos
  • Y como diría mi madre "Mijo nunca confies en un calienta braguetas porque son los mas mentirosos" El migajero anda con las migajas de mi hermano, si supiera lo que le decía a mi hermano de el, tengo pruebas de todo, hmph me rio de lo falsa que puede ser la gente
    Y como diría mi madre "Mijo nunca confies en un calienta braguetas porque son los mas mentirosos" El migajero anda con las migajas de mi hermano, si supiera lo que le decía a mi hermano de el, tengo pruebas de todo, hmph me rio de lo falsa que puede ser la gente
    Me enjaja
    1
    0 turnos 0 maullidos
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    // asopotamadre el spam de pj misteriosos fue de esta cuenta? JAJJAJAJA
    // asopotamadre el spam de pj misteriosos fue de esta cuenta? JAJJAJAJA
    1 comentario 0 compartidos
  • —Un like y le parto su madre a este femboy.
    —Un like y le parto su madre a este femboy.
    Me enjaja
    Me gusta
    4
    2 turnos 0 maullidos
Ver más resultados
Patrocinados