-Varios clones de Yasuoka están peleando entre ellos. Es algo preocupante, debido a la igualdad de fuerza, la gran mayoría está aferrada una a la otra, como si fueran artes marciales antiguas.-

Cronus, esto es todo tu culpa.

~¿Qué hice yo?

Negarte a ayudarme.

~¿Qué tiene que ver con que de alguna manera no te dejes ayudar por tí mismo?

Cállate y dame una mano, o te haré lo mismo que los clones se hacen.

-Chasqueando los dedos, llamas azules consumirían a Yasuoka, causando que Cronus sea invocado. Las llamas se manifestarían en sus formas transformadas.-

¿Listo?

~Nope. Somos dos contra ocho.

Cobarde.

-Ambos desaparecerían, apareciendo con sus espadas correspondientes, la Saturn Daiken y la Cronus Daiken. Rápidamente, entablarían combate con los clones de Yasuoka, que desaparecerían en nubes de humo al ser heridos gravemente.-

-La pelea acaba rápidamente, con Saturn y Cronus cayendo al suelo en una rodilla, espadas extendidas imitando la forma de una polilla. Les encanta posar.-

~¿Podrías dejar de hacer clones tan fuertes?

¿Acabas de--...?

~Tch, que el cumplido no se te suba.

-Cronus desaparecería en llamas azules, su espada desapareciendo con el.-

-Yasuoka cae al suelo destransformado, se nota que los clones le dieron una paliza.-

Creo que tienes razón...

-Reiría, arrastrandose hasta la banca y sentandose con la espada en mano.-