┊ ✧ : Dᴇʟ Lɪʙʀᴏ ᴅᴇ Gᴜᴋ﹣Kʜᴀɴ﹐ Lᴀ Gᴜᴇʀʀᴀ ᴅᴇ ʟᴏs Gɪɢᴀɴᴛᴇs : ✧ ┊

Entre la oscuridad y los siglos, el resentimiento y la sed de sangre, el control es una ilusión. A expensas del Gran Señor Oscuro, los más poderosos de sus siervos se enemistaron y, en un momento de distracción o, quizá, vulnerabilidad, se alzó entre las entrañas de la tierra y vastedad de las cimas nevadas La Guerra de los Gigantes; Balrogs, con sus poderosas armaduras y armas de hierro negro, junto a sus cientos y miles de escuderos orcos, contra los temibles dragones y su aliento de fuego.

Cuando un dragón rugía, los orcos cantaban:

Adelante vuelan hacia la tierra
Rojas sus garras, negras sus fauces
Odio en sus mentes, muerte en sus ojos
Entonces van a guerra y la guerra los encuentra

Aplastando todo, lo santo y lo impío
Quema las alas, quema la carne
Deja que la sangre fluya y sigue su cause
Esta es la hora de la venganza

El dragón que ama, que protege
Hace de su hogar su corazón
Acaba con el corazón y acabarás con el dragón
Y saborea la victoria en tu martillo

Entonces, mientras los temibles Balrogs enfrentaban a los Dragones, los escurridizos orcos corrían más allá, asaltaban los nidos, acababan con las madres y las crías, y los padres, en la batalla, sintiendo la muerte de sus amados, simplemente caían.
┊ ✧ : Dᴇʟ Lɪʙʀᴏ ᴅᴇ Gᴜᴋ﹣Kʜᴀɴ﹐ Lᴀ Gᴜᴇʀʀᴀ ᴅᴇ ʟᴏs Gɪɢᴀɴᴛᴇs : ✧ ┊ Entre la oscuridad y los siglos, el resentimiento y la sed de sangre, el control es una ilusión. A expensas del Gran Señor Oscuro, los más poderosos de sus siervos se enemistaron y, en un momento de distracción o, quizá, vulnerabilidad, se alzó entre las entrañas de la tierra y vastedad de las cimas nevadas La Guerra de los Gigantes; Balrogs, con sus poderosas armaduras y armas de hierro negro, junto a sus cientos y miles de escuderos orcos, contra los temibles dragones y su aliento de fuego. Cuando un dragón rugía, los orcos cantaban: Adelante vuelan hacia la tierra Rojas sus garras, negras sus fauces Odio en sus mentes, muerte en sus ojos Entonces van a guerra y la guerra los encuentra Aplastando todo, lo santo y lo impío Quema las alas, quema la carne Deja que la sangre fluya y sigue su cause Esta es la hora de la venganza El dragón que ama, que protege Hace de su hogar su corazón Acaba con el corazón y acabarás con el dragón Y saborea la victoria en tu martillo Entonces, mientras los temibles Balrogs enfrentaban a los Dragones, los escurridizos orcos corrían más allá, asaltaban los nidos, acababan con las madres y las crías, y los padres, en la batalla, sintiendo la muerte de sus amados, simplemente caían.
Me shockea
1
0 turnos 0 maullidos 245 vistas
Patrocinados
Patrocinados