Siguió tarareando mientras caminaba, claramente alegre, casi que hasta su habitual sonrisa parecía más genuina.
Giraba su bastón de forma distraída entre una de sus manos antes de dejarlo quieto, con ambas manos y el bastón detrás de la espalda.
Postura erguida mientras estaba de pie frente a una puerta.
Su sombra apareció en la pared al lado de la entrada, casi invitándole a pasar primero con cortesía.
— ¡Oh, tan amable como siempre! —
Le dijo de forma risueña antes de fundirse en las sombras bajo sus pies y traspasar la puerta al otro lado, reapareciendo después.
Observó el cuarto alzando una ceja.
— Alguien necesita cambiar sus gustos por la decoración — Comentó por lo bajo, su sombra rió detrás de él.
Retomó su andar tarareando por lo bajo, sin importarle pisar algún patito de hule tirado por ahí.
Sí, se había escabullido en la habitación de Lucifer 𝕾𝖆𝖒𝖆𝖊𝖑 𝕸𝖔𝖗𝖓𝖎𝖓𝖌𝖘𝖙𝖆𝖗 , y no solo eso.
Sino que se había recostado a su lado en el lecho, observándole dormir. Recostado boca abajo con su mentón apoyado en sus dos manos mientras distraídamente sus pies se tambaleaban hacia delante y atrás.
— Tal parece que ser el rey del infierno no exige demasiado trabajo — Comentó en un tono burlón, en un tono de voz alto para que el otro lo escuchase y despertase
Giraba su bastón de forma distraída entre una de sus manos antes de dejarlo quieto, con ambas manos y el bastón detrás de la espalda.
Postura erguida mientras estaba de pie frente a una puerta.
Su sombra apareció en la pared al lado de la entrada, casi invitándole a pasar primero con cortesía.
— ¡Oh, tan amable como siempre! —
Le dijo de forma risueña antes de fundirse en las sombras bajo sus pies y traspasar la puerta al otro lado, reapareciendo después.
Observó el cuarto alzando una ceja.
— Alguien necesita cambiar sus gustos por la decoración — Comentó por lo bajo, su sombra rió detrás de él.
Retomó su andar tarareando por lo bajo, sin importarle pisar algún patito de hule tirado por ahí.
Sí, se había escabullido en la habitación de Lucifer 𝕾𝖆𝖒𝖆𝖊𝖑 𝕸𝖔𝖗𝖓𝖎𝖓𝖌𝖘𝖙𝖆𝖗 , y no solo eso.
Sino que se había recostado a su lado en el lecho, observándole dormir. Recostado boca abajo con su mentón apoyado en sus dos manos mientras distraídamente sus pies se tambaleaban hacia delante y atrás.
— Tal parece que ser el rey del infierno no exige demasiado trabajo — Comentó en un tono burlón, en un tono de voz alto para que el otro lo escuchase y despertase
Siguió tarareando mientras caminaba, claramente alegre, casi que hasta su habitual sonrisa parecía más genuina.
Giraba su bastón de forma distraída entre una de sus manos antes de dejarlo quieto, con ambas manos y el bastón detrás de la espalda.
Postura erguida mientras estaba de pie frente a una puerta.
Su sombra apareció en la pared al lado de la entrada, casi invitándole a pasar primero con cortesía.
— ¡Oh, tan amable como siempre! —
Le dijo de forma risueña antes de fundirse en las sombras bajo sus pies y traspasar la puerta al otro lado, reapareciendo después.
Observó el cuarto alzando una ceja.
— Alguien necesita cambiar sus gustos por la decoración — Comentó por lo bajo, su sombra rió detrás de él.
Retomó su andar tarareando por lo bajo, sin importarle pisar algún patito de hule tirado por ahí.
Sí, se había escabullido en la habitación de [LuciHe11] , y no solo eso.
Sino que se había recostado a su lado en el lecho, observándole dormir. Recostado boca abajo con su mentón apoyado en sus dos manos mientras distraídamente sus pies se tambaleaban hacia delante y atrás.
— Tal parece que ser el rey del infierno no exige demasiado trabajo — Comentó en un tono burlón, en un tono de voz alto para que el otro lo escuchase y despertase
5
turnos
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maullidos