-Arañó con profundidad una de las paredes cerca de su habitación antes de entrar, cerrando la puerta detrás de él.
Su torso aún cubierto de sangre y la herida aún dolía, incluso más que cuando Adán se la hizo.
Caminó con una mano ensangrentada en el pecho hasta llegar a su tocador donde se sostuvo con ambas manos. Levantando su mirada para ver su reflejo en el espejo, notando su aspecto desaliñado y la sangre sobre su ropa, sus garras se clavaron sobre la madera del mueble dejando profundos arañazos antes de lanzar todo lo que hubiera encima con evidente furia.
El sonido de alguna botella de licor fuerte que tenía sobre el tocador al estrellarse contra el suelo resonando en la amplia habitación.-
Si es que acaso cree que lo dejaré así...
-Comenzó farfullando entre dientes, usando su magia para volver a cocer la herida hasta que se detuvo de repente. Una sensación, medio conocida medio desconocida lo detuvo desconcertandolo.
La pérdida de algo que le pertenecía.
La estática de radio se escuchó por un momento, incluso los diales en sus ojos aparecieron mientras él se quedaba como piedra.
La habitación parecía repentinamente hundida en una penumbra sepulcral, un silencio estremecedor. La calma antes de la tormenta.
Se percató enseguida. Lo notó. Una pequeña mascota suya se había librado de sus cadenas sin su consentimiento....-
Su torso aún cubierto de sangre y la herida aún dolía, incluso más que cuando Adán se la hizo.
Caminó con una mano ensangrentada en el pecho hasta llegar a su tocador donde se sostuvo con ambas manos. Levantando su mirada para ver su reflejo en el espejo, notando su aspecto desaliñado y la sangre sobre su ropa, sus garras se clavaron sobre la madera del mueble dejando profundos arañazos antes de lanzar todo lo que hubiera encima con evidente furia.
El sonido de alguna botella de licor fuerte que tenía sobre el tocador al estrellarse contra el suelo resonando en la amplia habitación.-
Si es que acaso cree que lo dejaré así...
-Comenzó farfullando entre dientes, usando su magia para volver a cocer la herida hasta que se detuvo de repente. Una sensación, medio conocida medio desconocida lo detuvo desconcertandolo.
La pérdida de algo que le pertenecía.
La estática de radio se escuchó por un momento, incluso los diales en sus ojos aparecieron mientras él se quedaba como piedra.
La habitación parecía repentinamente hundida en una penumbra sepulcral, un silencio estremecedor. La calma antes de la tormenta.
Se percató enseguida. Lo notó. Una pequeña mascota suya se había librado de sus cadenas sin su consentimiento....-
-Arañó con profundidad una de las paredes cerca de su habitación antes de entrar, cerrando la puerta detrás de él.
Su torso aún cubierto de sangre y la herida aún dolía, incluso más que cuando Adán se la hizo.
Caminó con una mano ensangrentada en el pecho hasta llegar a su tocador donde se sostuvo con ambas manos. Levantando su mirada para ver su reflejo en el espejo, notando su aspecto desaliñado y la sangre sobre su ropa, sus garras se clavaron sobre la madera del mueble dejando profundos arañazos antes de lanzar todo lo que hubiera encima con evidente furia.
El sonido de alguna botella de licor fuerte que tenía sobre el tocador al estrellarse contra el suelo resonando en la amplia habitación.-
Si es que acaso cree que lo dejaré así...
-Comenzó farfullando entre dientes, usando su magia para volver a cocer la herida hasta que se detuvo de repente. Una sensación, medio conocida medio desconocida lo detuvo desconcertandolo.
La pérdida de algo que le pertenecía.
La estática de radio se escuchó por un momento, incluso los diales en sus ojos aparecieron mientras él se quedaba como piedra.
La habitación parecía repentinamente hundida en una penumbra sepulcral, un silencio estremecedor. La calma antes de la tormenta.
Se percató enseguida. Lo notó. Una pequeña mascota suya se había librado de sus cadenas sin su consentimiento....-