No nació para sentir. Nació para sobrevivir entre ruinas, para caminar sobre los cuerpos que dejaba atrás.
En su mundo, el silencio es más leal que cualquier juramento, y la sangre derramada, la única certeza.
Es precisión, es la noche hecha carne.Durante siglos, su mirada no tembló.
Pero el destino "ese traidor que se ríe de las...