"¡UN MOMENTO!" Michael ajustó el nudo de su corbata con un gesto perezoso mientras la sala de juicios comenzaba a llenarse.—Vaya —murmuró con una media sonrisa—, siempre es divertido ver tanta gente reunida solo para decidir si alguien se portó mal.
Se dejó caer en su silla con la elegancia de alguien que parecía no tener prisa por nada, aunque sus ojos...