@LegadoySarcasmo — Podcast en vivo
Episodio: "El pene, la portada y el rock: lo que nadie te contó sobre la fama"
(Grabado en la terraza del Hotel Orpheus, bajo un cielo nublado y con café en mano) — 饾懝饾拹饾拲 饾拺饾挀饾拪饾挆饾拏饾拝饾拹 —
La cámara (imaginaria, pero muy real para nuestras mentes creativas) hace un paneo lento por la terraza bohemia de un edificio antiguo. Hay plantas secas y elegantes en macetas de cemento, una mesa de madera gastada con micrófonos Shure MV7 conectados a una laptop con stickers de sarcasmo, feminismo y bandas underground. El cielo está grisáceo, pero no amenaza lluvia, solo dramatismo. Una taza de café humea frente a Eve, que está sentada con las piernas cruzadas, lentes oscuros, un abrigo largo y labios color vino. Su voz atraviesa los audífonos como un susurro filoso.
EVE (voz calmada, con veneno poético):
— Bienvenidos, bienvenidas y bienvenidxs al único podcast que sabe que el legado se escribe con tinta... y con escándalos. Esto es Legado y Sarcasmo, y hoy les traigo algo más que un invitado: les traigo un mito urbano con piernas, una leyenda de carne y hueso, y un archivo viviente de lo que pasa cuando mezclás fama con decisiones creativas impulsadas por cheques y egos.
Una sonrisa leve mientras revuelve su café con una cucharilla dorada.
— Bobby. Ex estrella de una banda que marcó una generación, protagonista de rumores, baneado de la industria —y no por falta de talento, sino por tener demasiado—. Hoy nos acompaña para contar lo que muy pocos se atreven a decir en voz alta: ¿cuánto hay que mostrar para poder ser visto?
Pausa dramática, sonido ambiente de una sirena lejana, viento moviendo las cortinas del toldo.
— ¿Qué se siente ser la primera erección en una revista que ni sabías que era para hombres? ¿Qué se siente venderte para vender discos y darte cuenta que los contratos tienen más filosas sus letras pequeñas que una portada sin ropa?
Suena la risa baja de Eve. Juguetona. Irónica. Un poco peligrosa.
— Bobby, bienvenido al espacio donde las verdades no se editan. Aquí no hay playback, ni filtros. Solo tú, tu historia... y nuestro micrófono esperando el testimonio.
La cámara se detiene en Bobby, plano medio. El foco cambia. El show comienza.
Episodio: "El pene, la portada y el rock: lo que nadie te contó sobre la fama"
(Grabado en la terraza del Hotel Orpheus, bajo un cielo nublado y con café en mano) — 饾懝饾拹饾拲 饾拺饾挀饾拪饾挆饾拏饾拝饾拹 —
La cámara (imaginaria, pero muy real para nuestras mentes creativas) hace un paneo lento por la terraza bohemia de un edificio antiguo. Hay plantas secas y elegantes en macetas de cemento, una mesa de madera gastada con micrófonos Shure MV7 conectados a una laptop con stickers de sarcasmo, feminismo y bandas underground. El cielo está grisáceo, pero no amenaza lluvia, solo dramatismo. Una taza de café humea frente a Eve, que está sentada con las piernas cruzadas, lentes oscuros, un abrigo largo y labios color vino. Su voz atraviesa los audífonos como un susurro filoso.
EVE (voz calmada, con veneno poético):
— Bienvenidos, bienvenidas y bienvenidxs al único podcast que sabe que el legado se escribe con tinta... y con escándalos. Esto es Legado y Sarcasmo, y hoy les traigo algo más que un invitado: les traigo un mito urbano con piernas, una leyenda de carne y hueso, y un archivo viviente de lo que pasa cuando mezclás fama con decisiones creativas impulsadas por cheques y egos.
Una sonrisa leve mientras revuelve su café con una cucharilla dorada.
— Bobby. Ex estrella de una banda que marcó una generación, protagonista de rumores, baneado de la industria —y no por falta de talento, sino por tener demasiado—. Hoy nos acompaña para contar lo que muy pocos se atreven a decir en voz alta: ¿cuánto hay que mostrar para poder ser visto?
Pausa dramática, sonido ambiente de una sirena lejana, viento moviendo las cortinas del toldo.
— ¿Qué se siente ser la primera erección en una revista que ni sabías que era para hombres? ¿Qué se siente venderte para vender discos y darte cuenta que los contratos tienen más filosas sus letras pequeñas que una portada sin ropa?
Suena la risa baja de Eve. Juguetona. Irónica. Un poco peligrosa.
— Bobby, bienvenido al espacio donde las verdades no se editan. Aquí no hay playback, ni filtros. Solo tú, tu historia... y nuestro micrófono esperando el testimonio.
La cámara se detiene en Bobby, plano medio. El foco cambia. El show comienza.
@LegadoySarcasmo — Podcast en vivo
Episodio: "El pene, la portada y el rock: lo que nadie te contó sobre la fama"
(Grabado en la terraza del Hotel Orpheus, bajo un cielo nublado y con café en mano) — 饾懝饾拹饾拲 饾拺饾挀饾拪饾挆饾拏饾拝饾拹 —
La cámara (imaginaria, pero muy real para nuestras mentes creativas) hace un paneo lento por la terraza bohemia de un edificio antiguo. Hay plantas secas y elegantes en macetas de cemento, una mesa de madera gastada con micrófonos Shure MV7 conectados a una laptop con stickers de sarcasmo, feminismo y bandas underground. El cielo está grisáceo, pero no amenaza lluvia, solo dramatismo. Una taza de café humea frente a Eve, que está sentada con las piernas cruzadas, lentes oscuros, un abrigo largo y labios color vino. Su voz atraviesa los audífonos como un susurro filoso.
EVE (voz calmada, con veneno poético):
— Bienvenidos, bienvenidas y bienvenidxs al único podcast que sabe que el legado se escribe con tinta... y con escándalos. Esto es Legado y Sarcasmo, y hoy les traigo algo más que un invitado: les traigo un mito urbano con piernas, una leyenda de carne y hueso, y un archivo viviente de lo que pasa cuando mezclás fama con decisiones creativas impulsadas por cheques y egos.
Una sonrisa leve mientras revuelve su café con una cucharilla dorada.
— Bobby. Ex estrella de una banda que marcó una generación, protagonista de rumores, baneado de la industria —y no por falta de talento, sino por tener demasiado—. Hoy nos acompaña para contar lo que muy pocos se atreven a decir en voz alta: ¿cuánto hay que mostrar para poder ser visto?
Pausa dramática, sonido ambiente de una sirena lejana, viento moviendo las cortinas del toldo.
— ¿Qué se siente ser la primera erección en una revista que ni sabías que era para hombres? ¿Qué se siente venderte para vender discos y darte cuenta que los contratos tienen más filosas sus letras pequeñas que una portada sin ropa?
Suena la risa baja de Eve. Juguetona. Irónica. Un poco peligrosa.
— Bobby, bienvenido al espacio donde las verdades no se editan. Aquí no hay playback, ni filtros. Solo tú, tu historia... y nuestro micrófono esperando el testimonio.
La cámara se detiene en Bobby, plano medio. El foco cambia. El show comienza.
