ㅤㅤ｢ 不運 | 𝔩𝔬𝔬ӄ 𝔴𝔥𝔞𝔱 𝔶𝔬𝔲 𝔪𝔞ӄ𝔢 𝔪𝔢 𝔡𝔬 | ᴄᴇʀʀᴀᴅᴏ」
ㅤEra costumbre que después una buena y ajetreada noche en Distorsión, Bobby tuviera que apartar la mañana siguiente para limpiar el desastre que dejaban los clientes ebrios antes de volver a abrir de nuevo. Eso no le molestaba porque era cuando más ventas había y si limpiar era el precio que debía pagar, pues estaba más que contento de hacerlo.
ㅤBobby no vio a Medianoche mientras movía una cajas de botellas apiladas y terminó aplastando su cola. El felino chilló dando un salto casi que diabólico y después de un zarpazo terminó por morderle la mano.
¡𝘾𝙃𝘼𝘾𝙆!
ㅤEl ardor fue inmediato. Bobby soltó un grito corto sintiendo cómo el dolor le subía por el brazo como una corriente. Sacudió la mano y ahí cuando sintió que todo a su alrededor se oscureció como si una nube solitaria se posara sobre su cabeza y una sombra pesada se pegara a sus pies. Bobby se sintió inmediatamente cansado.
ㅤJusto después de eso, una de las lámparas del bar parpadeó frenéticamente y luego ¡BLAM! Un espejo del pasillo estalló en pedazos y desde ese momento todo fue en picada.
ㅤPrimero, se cortó cuando recogía los vidrios del espejo. Se resbaló tres veces con rodajas de limón que de la nada aparecían tiradas en el piso. Cuando almorzó el mensaje en su galleta de la fortuna fue tan explicito que Bobby supo de quién hablaba.
"ᴀʟɢᴜɪᴇɴ ᴇɴ ᴇꜱᴛᴀ ʜᴀʙɪᴛᴀᴄɪᴏɴ ᴇꜱᴛᴀ ᴅᴇꜱᴇᴀɴᴅᴏ ʟᴏ ᴘᴇᴏʀ ᴘᴀʀᴀ ᴛɪ."
ㅤSus ojos se entrecerraron y con la mirada buscó a Medianoche, solo para encontrarlo mirándolo de vuelta con una expresión que lo juzgaba en silencio.
ㅤBobby intentó hacer las pases con Medianoche durante todo su turno pero cada vez que estiraba la mano para acariciarlo las luces parpadeaban y sentía la mano más hinchada y caliente.
Y como si eso no fuera suficiente:
ㅤAlguien se vomitó en la cabina de fotos y quedó fuera de servicio. Cada vez que Bobby elegía una canción, la rocola la reproducía al revés. Se tiró un coctel de Baileys encima cuando lo servía y tuvo que quedarse con esa mancha café en la camisa. Los espejos se agrietaban solo al pasar frente a ellos e incluso juró escuchar a una clienta decir "𝘦𝘴𝘦 𝘣𝘢𝘳𝘵𝘦𝘯𝘥𝘦𝘳 𝘩𝘶𝘦𝘭𝘦 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘢 𝘢𝘫𝘰". ¡El colmo!
ㅤ¿Pero lo peor de todo? Hubo un corte de luz… selectivo. ¡Había luz en todo el bloque menos en Distorsión! Y claro, eso hizo que toda la clientela en el lugar desapareciera antes de la hora de cierre.
ㅤBobby hizo el cierre de caja con una vela titilando sobre la barra. Y entonces lo vio.
ㅤPor el rabillo del ojo, juró ver a Medianoche parado sobre dos patas, mirándolo desde un rincón del bar solo que esta vez se veía extrañamente más grande de lo que recordaba.
ㅤUn escalofrío le recorrió la espalda. Le zumbaron los oídos y sintió la urgente necesidad de salir de ahí… pero su desesperación era más grande que el miedo.
—¡Suficiente! ¿Qué quieres? ¿Salmón? ¿Eh? Nueve días de comida gourmet solo para ti. ¡Solo… déjame en paz! Perdóname…
ㅤSe dejó caer sobre la barra, agotado, la cabeza entre los brazos. Entonces Medianoche apareció en silencio y se subió a la barra sentándose frente a él. Lo miró, se acercó a la mano, la olfateó y la lamió.
El ardor desapareció.
Las luces dejaron de parpadear.
ㅤLa electricidad volvió al bar como si nada hubiera pasado. Bobby lo tomó como una señal y aunque no lo dijo en voz alta, supo que el gato lo maldijo… y luego lo perdonó.
—Es increíble que tu precio sea salmón...
ㅤDesde entonces, cuando algo se rompe solo o cree ver una sombra moverse, Bobby no duda. Se da la vuelta y busca al gato justo a tiempo para verlo entrar tranquilamente al bar.
ㅤEra costumbre que después una buena y ajetreada noche en Distorsión, Bobby tuviera que apartar la mañana siguiente para limpiar el desastre que dejaban los clientes ebrios antes de volver a abrir de nuevo. Eso no le molestaba porque era cuando más ventas había y si limpiar era el precio que debía pagar, pues estaba más que contento de hacerlo.
ㅤBobby no vio a Medianoche mientras movía una cajas de botellas apiladas y terminó aplastando su cola. El felino chilló dando un salto casi que diabólico y después de un zarpazo terminó por morderle la mano.
¡𝘾𝙃𝘼𝘾𝙆!
ㅤEl ardor fue inmediato. Bobby soltó un grito corto sintiendo cómo el dolor le subía por el brazo como una corriente. Sacudió la mano y ahí cuando sintió que todo a su alrededor se oscureció como si una nube solitaria se posara sobre su cabeza y una sombra pesada se pegara a sus pies. Bobby se sintió inmediatamente cansado.
ㅤJusto después de eso, una de las lámparas del bar parpadeó frenéticamente y luego ¡BLAM! Un espejo del pasillo estalló en pedazos y desde ese momento todo fue en picada.
ㅤPrimero, se cortó cuando recogía los vidrios del espejo. Se resbaló tres veces con rodajas de limón que de la nada aparecían tiradas en el piso. Cuando almorzó el mensaje en su galleta de la fortuna fue tan explicito que Bobby supo de quién hablaba.
"ᴀʟɢᴜɪᴇɴ ᴇɴ ᴇꜱᴛᴀ ʜᴀʙɪᴛᴀᴄɪᴏɴ ᴇꜱᴛᴀ ᴅᴇꜱᴇᴀɴᴅᴏ ʟᴏ ᴘᴇᴏʀ ᴘᴀʀᴀ ᴛɪ."
ㅤSus ojos se entrecerraron y con la mirada buscó a Medianoche, solo para encontrarlo mirándolo de vuelta con una expresión que lo juzgaba en silencio.
ㅤBobby intentó hacer las pases con Medianoche durante todo su turno pero cada vez que estiraba la mano para acariciarlo las luces parpadeaban y sentía la mano más hinchada y caliente.
Y como si eso no fuera suficiente:
ㅤAlguien se vomitó en la cabina de fotos y quedó fuera de servicio. Cada vez que Bobby elegía una canción, la rocola la reproducía al revés. Se tiró un coctel de Baileys encima cuando lo servía y tuvo que quedarse con esa mancha café en la camisa. Los espejos se agrietaban solo al pasar frente a ellos e incluso juró escuchar a una clienta decir "𝘦𝘴𝘦 𝘣𝘢𝘳𝘵𝘦𝘯𝘥𝘦𝘳 𝘩𝘶𝘦𝘭𝘦 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘢 𝘢𝘫𝘰". ¡El colmo!
ㅤ¿Pero lo peor de todo? Hubo un corte de luz… selectivo. ¡Había luz en todo el bloque menos en Distorsión! Y claro, eso hizo que toda la clientela en el lugar desapareciera antes de la hora de cierre.
ㅤBobby hizo el cierre de caja con una vela titilando sobre la barra. Y entonces lo vio.
ㅤPor el rabillo del ojo, juró ver a Medianoche parado sobre dos patas, mirándolo desde un rincón del bar solo que esta vez se veía extrañamente más grande de lo que recordaba.
ㅤUn escalofrío le recorrió la espalda. Le zumbaron los oídos y sintió la urgente necesidad de salir de ahí… pero su desesperación era más grande que el miedo.
—¡Suficiente! ¿Qué quieres? ¿Salmón? ¿Eh? Nueve días de comida gourmet solo para ti. ¡Solo… déjame en paz! Perdóname…
ㅤSe dejó caer sobre la barra, agotado, la cabeza entre los brazos. Entonces Medianoche apareció en silencio y se subió a la barra sentándose frente a él. Lo miró, se acercó a la mano, la olfateó y la lamió.
El ardor desapareció.
Las luces dejaron de parpadear.
ㅤLa electricidad volvió al bar como si nada hubiera pasado. Bobby lo tomó como una señal y aunque no lo dijo en voz alta, supo que el gato lo maldijo… y luego lo perdonó.
—Es increíble que tu precio sea salmón...
ㅤDesde entonces, cuando algo se rompe solo o cree ver una sombra moverse, Bobby no duda. Se da la vuelta y busca al gato justo a tiempo para verlo entrar tranquilamente al bar.
ㅤㅤ｢ 不運 | 𝔩𝔬𝔬ӄ 𝔴𝔥𝔞𝔱 𝔶𝔬𝔲 𝔪𝔞ӄ𝔢 𝔪𝔢 𝔡𝔬 | ᴄᴇʀʀᴀᴅᴏ」
ㅤEra costumbre que después una buena y ajetreada noche en Distorsión, Bobby tuviera que apartar la mañana siguiente para limpiar el desastre que dejaban los clientes ebrios antes de volver a abrir de nuevo. Eso no le molestaba porque era cuando más ventas había y si limpiar era el precio que debía pagar, pues estaba más que contento de hacerlo.
ㅤBobby no vio a Medianoche mientras movía una cajas de botellas apiladas y terminó aplastando su cola. El felino chilló dando un salto casi que diabólico y después de un zarpazo terminó por morderle la mano.
¡𝘾𝙃𝘼𝘾𝙆!
ㅤEl ardor fue inmediato. Bobby soltó un grito corto sintiendo cómo el dolor le subía por el brazo como una corriente. Sacudió la mano y ahí cuando sintió que todo a su alrededor se oscureció como si una nube solitaria se posara sobre su cabeza y una sombra pesada se pegara a sus pies. Bobby se sintió inmediatamente cansado.
ㅤJusto después de eso, una de las lámparas del bar parpadeó frenéticamente y luego ¡BLAM! Un espejo del pasillo estalló en pedazos y desde ese momento todo fue en picada.
ㅤPrimero, se cortó cuando recogía los vidrios del espejo. Se resbaló tres veces con rodajas de limón que de la nada aparecían tiradas en el piso. Cuando almorzó el mensaje en su galleta de la fortuna fue tan explicito que Bobby supo de quién hablaba.
"ᴀʟɢᴜɪᴇɴ ᴇɴ ᴇꜱᴛᴀ ʜᴀʙɪᴛᴀᴄɪᴏɴ ᴇꜱᴛᴀ ᴅᴇꜱᴇᴀɴᴅᴏ ʟᴏ ᴘᴇᴏʀ ᴘᴀʀᴀ ᴛɪ."
ㅤSus ojos se entrecerraron y con la mirada buscó a Medianoche, solo para encontrarlo mirándolo de vuelta con una expresión que lo juzgaba en silencio.
ㅤBobby intentó hacer las pases con Medianoche durante todo su turno pero cada vez que estiraba la mano para acariciarlo las luces parpadeaban y sentía la mano más hinchada y caliente.
Y como si eso no fuera suficiente:
ㅤAlguien se vomitó en la cabina de fotos y quedó fuera de servicio. Cada vez que Bobby elegía una canción, la rocola la reproducía al revés. Se tiró un coctel de Baileys encima cuando lo servía y tuvo que quedarse con esa mancha café en la camisa. Los espejos se agrietaban solo al pasar frente a ellos e incluso juró escuchar a una clienta decir "𝘦𝘴𝘦 𝘣𝘢𝘳𝘵𝘦𝘯𝘥𝘦𝘳 𝘩𝘶𝘦𝘭𝘦 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘢 𝘢𝘫𝘰". ¡El colmo!
ㅤ¿Pero lo peor de todo? Hubo un corte de luz… selectivo. ¡Había luz en todo el bloque menos en Distorsión! Y claro, eso hizo que toda la clientela en el lugar desapareciera antes de la hora de cierre.
ㅤBobby hizo el cierre de caja con una vela titilando sobre la barra. Y entonces lo vio.
ㅤPor el rabillo del ojo, juró ver a Medianoche parado sobre dos patas, mirándolo desde un rincón del bar solo que esta vez se veía extrañamente más grande de lo que recordaba.
ㅤUn escalofrío le recorrió la espalda. Le zumbaron los oídos y sintió la urgente necesidad de salir de ahí… pero su desesperación era más grande que el miedo.
—¡Suficiente! ¿Qué quieres? ¿Salmón? ¿Eh? Nueve días de comida gourmet solo para ti. ¡Solo… déjame en paz! Perdóname…
ㅤSe dejó caer sobre la barra, agotado, la cabeza entre los brazos. Entonces Medianoche apareció en silencio y se subió a la barra sentándose frente a él. Lo miró, se acercó a la mano, la olfateó y la lamió.
El ardor desapareció.
Las luces dejaron de parpadear.
ㅤLa electricidad volvió al bar como si nada hubiera pasado. Bobby lo tomó como una señal y aunque no lo dijo en voz alta, supo que el gato lo maldijo… y luego lo perdonó.
—Es increíble que tu precio sea salmón...
ㅤDesde entonces, cuando algo se rompe solo o cree ver una sombra moverse, Bobby no duda. Se da la vuelta y busca al gato justo a tiempo para verlo entrar tranquilamente al bar.
