"'Estoy aquí, Lucia'.
Este lugar ha cambiado. A ella evoco de nuevo, hablo sola otra vez. Ahora, sin embargo, ya no tengo la certeza de que mis palabras se quedan flotando en el aire, con la lluvia como su único testigo.
Esta vez, quizás por los nervios, la incertidumbre y el miedo, juro que ella ha podido escucharme, que los muros que nos separan se han agrietado lo suficiente.
Estoy aquí, en el lugar donde todo comenzó, y donde todo tiene que terminar".
Este lugar ha cambiado. A ella evoco de nuevo, hablo sola otra vez. Ahora, sin embargo, ya no tengo la certeza de que mis palabras se quedan flotando en el aire, con la lluvia como su único testigo.
Esta vez, quizás por los nervios, la incertidumbre y el miedo, juro que ella ha podido escucharme, que los muros que nos separan se han agrietado lo suficiente.
Estoy aquí, en el lugar donde todo comenzó, y donde todo tiene que terminar".
"'Estoy aquí, Lucia'.
Este lugar ha cambiado. A ella evoco de nuevo, hablo sola otra vez. Ahora, sin embargo, ya no tengo la certeza de que mis palabras se quedan flotando en el aire, con la lluvia como su único testigo.
Esta vez, quizás por los nervios, la incertidumbre y el miedo, juro que ella ha podido escucharme, que los muros que nos separan se han agrietado lo suficiente.
Estoy aquí, en el lugar donde todo comenzó, y donde todo tiene que terminar".


