Un espécimen de sexo masculino caminaba a su lado y le decía cosas impropias, de una manera vulgar y grosera, por lo general Ohime era bastante paciente, alegre y amable, pero también tenía su carácter, no era una mujer débil. Se detuvo en seco y lo encaró
— ¿Crees que me visto y me arreglo así para que tipos como tú me digan su asquerosa e insultante opinión? Claro que no. ¿Te parece buena idea andar abordando mujeres en la calle de esta manera, crees que lograrás algo? Es la peor manera de llamar la atención de las mujeres, así nadie te hará caso, ahora por favor, piérdete. —
Se giró y siguió su camino, molesta y con ganas de soltarle una bofetada al sujeto ese, afortunado era que no hubiera un policía cerca.
— ¿Crees que me visto y me arreglo así para que tipos como tú me digan su asquerosa e insultante opinión? Claro que no. ¿Te parece buena idea andar abordando mujeres en la calle de esta manera, crees que lograrás algo? Es la peor manera de llamar la atención de las mujeres, así nadie te hará caso, ahora por favor, piérdete. —
Se giró y siguió su camino, molesta y con ganas de soltarle una bofetada al sujeto ese, afortunado era que no hubiera un policía cerca.
Un espécimen de sexo masculino caminaba a su lado y le decía cosas impropias, de una manera vulgar y grosera, por lo general Ohime era bastante paciente, alegre y amable, pero también tenía su carácter, no era una mujer débil. Se detuvo en seco y lo encaró
— ¿Crees que me visto y me arreglo así para que tipos como tú me digan su asquerosa e insultante opinión? Claro que no. ¿Te parece buena idea andar abordando mujeres en la calle de esta manera, crees que lograrás algo? Es la peor manera de llamar la atención de las mujeres, así nadie te hará caso, ahora por favor, piérdete. —
Se giró y siguió su camino, molesta y con ganas de soltarle una bofetada al sujeto ese, afortunado era que no hubiera un policía cerca.

