—Cuando vives mucho y sabes que no tienes un límite de tiempo como tal, es normal perder la sensibilidad ante muchas cosas. La moralidad y la inmoralidad. Pero si reflexiono al respecto, nunca fui una persona demasiado sensible, ni cuando era más "humano".
—Cuando vives mucho y sabes que no tienes un límite de tiempo como tal, es normal perder la sensibilidad ante muchas cosas. La moralidad y la inmoralidad. Pero si reflexiono al respecto, nunca fui una persona demasiado sensible, ni cuando era más "humano".