-Esta vez... gané, Diluc...
Mencionó la rubia con una clara agitación en su voz, su rostro sudoroso e incluso los mechones de su cabello alborotado tras aquella batalla. Jean acostumbraba a retar al Mayor a alguno que otro combate de práctica cada que tuvieran oportunidad de los cuales más de la mitad de ellos los ganaba el varón .
- 50-48...
Dijo la Gran Maestra con una sonrisa en sus labios, sabía que el marcador estaba del lado del contrario, pero dijo los números a su favor. Con la rodilla sobre torso del pelirrojo se aseguraba de tenerlo a raya mientras que con la espada de práctica clavada al costado de su cuello aseguraba su victoria.
Aquél combate lleno de adrenalina le había hecho decir su nombre cosa que, a pesar de tenerle confianza siempre lo ha respetado como su Mayor nombrándolo con su ex rango la mayor parte del tiempo. Había sido un combate tan intenso que con las habilidades de ambos de no ser espadas de práctica cualquiera pensaría que eran duelos a muerte, habilidades que con excepción sus capitanes, no podía explotar con sus caballeros pues aún les faltaba entrenamiento.
Mencionó la rubia con una clara agitación en su voz, su rostro sudoroso e incluso los mechones de su cabello alborotado tras aquella batalla. Jean acostumbraba a retar al Mayor a alguno que otro combate de práctica cada que tuvieran oportunidad de los cuales más de la mitad de ellos los ganaba el varón .
- 50-48...
Dijo la Gran Maestra con una sonrisa en sus labios, sabía que el marcador estaba del lado del contrario, pero dijo los números a su favor. Con la rodilla sobre torso del pelirrojo se aseguraba de tenerlo a raya mientras que con la espada de práctica clavada al costado de su cuello aseguraba su victoria.
Aquél combate lleno de adrenalina le había hecho decir su nombre cosa que, a pesar de tenerle confianza siempre lo ha respetado como su Mayor nombrándolo con su ex rango la mayor parte del tiempo. Había sido un combate tan intenso que con las habilidades de ambos de no ser espadas de práctica cualquiera pensaría que eran duelos a muerte, habilidades que con excepción sus capitanes, no podía explotar con sus caballeros pues aún les faltaba entrenamiento.
-Esta vez... gané, Diluc...
Mencionó la rubia con una clara agitación en su voz, su rostro sudoroso e incluso los mechones de su cabello alborotado tras aquella batalla. Jean acostumbraba a retar al Mayor a alguno que otro combate de práctica cada que tuvieran oportunidad de los cuales más de la mitad de ellos los ganaba el varón .
- 50-48...
Dijo la Gran Maestra con una sonrisa en sus labios, sabía que el marcador estaba del lado del contrario, pero dijo los números a su favor. Con la rodilla sobre torso del pelirrojo se aseguraba de tenerlo a raya mientras que con la espada de práctica clavada al costado de su cuello aseguraba su victoria.
Aquél combate lleno de adrenalina le había hecho decir su nombre cosa que, a pesar de tenerle confianza siempre lo ha respetado como su Mayor nombrándolo con su ex rango la mayor parte del tiempo. Había sido un combate tan intenso que con las habilidades de ambos de no ser espadas de práctica cualquiera pensaría que eran duelos a muerte, habilidades que con excepción sus capitanes, no podía explotar con sus caballeros pues aún les faltaba entrenamiento.