—Nosotros estamos sin una moneda, Zelgadiss.

—Hoy Martina se ha llevado la oferta en hechizos. Primero una bola de fuego y después un matadragones.

¿El sepelio quién se lo paga?

¡Tranquila Reena!

Alguien tan vulgar es imposible que entienda la nobleza.

¿Pero qué tiene que ver tu origen con las fuerzas del bien y del mal?

Te recuerdo que yo tengo origen noble. Yo no estoy acostumbrada a ver cómo luchan los demonios.

Pero si era bastante obvio que lo era desde que le vimos luchar...

¡Por que Xellos me engañó y no me dijo que era un demonio!

Ay, no recuerdes esos tiempos, Reena. ¡Qué horror!