No sólo ha terminado de entrenarse, sino que se ha salido al exterior para meditar un buen rato. Le ayuda a regenerar chakra y a poner en orden sus ideas; se ha alejado a una distancia prudencial, por si alguien pudiera ser capaz de violar el perímetro de seguridad establecido alrededor de la guarida subterránea.
Bajo la sombra de un frondoso árbol, se sienta. El piar de los pájaros y la brisa del mediodía meciendo las hojas ayudan a la kunoichi a sintonizar con su interior.
Cuánto silencio...
Tan sólo roto por los caprichos de la naturaleza.
No sólo ha terminado de entrenarse, sino que se ha salido al exterior para meditar un buen rato. Le ayuda a regenerar chakra y a poner en orden sus ideas; se ha alejado a una distancia prudencial, por si alguien pudiera ser capaz de violar el perímetro de seguridad establecido alrededor de la guarida subterránea.
Bajo la sombra de un frondoso árbol, se sienta. El piar de los pájaros y la brisa del mediodía meciendo las hojas ayudan a la kunoichi a sintonizar con su interior.
Cuánto silencio...
Tan sólo roto por los caprichos de la naturaleza.