The Dark urge


Nombre: Kohaku (Le fue dado por sus "padres" humanos).
Nombre real: Dark Urge o Ansia Oscura.
Edad: Varios miles de años. Aunque no lo recuerda y aparenta unos 20-25.
Género: Masculino.
Orientación sexual: Indiferente. Es más, puede tener descendencia tanto con varones como con féminas, pues puede engendrar y dejar en estado.
Especie: "Deidad"/Akuryō (Espíritu maligno) 
Apariencia física: Un varón de aspecto andrógino, hermoso e incluso delicado, casi angelical. Cabello largo, ondulado y blanco como la nieve. Ojos de un rosado casi carmín. Piel extremadamente pálida y de aspecto suave. Cuerpo atlético y algo trabajado, aunque no exageradamente tonificado. Altura de 1.75m.

Uso de armas: Dagas y cuchillos principalmente. En ocasiones espadas.

Clase: Hechicero / Pícaro.

 

Vayamos al grano, ¿quién es Dark Urge?:


Bhaal spawn (Bhaal es una de las deidades menores, dios del asesinato, que ascenció a deidad tras una serie de rituales y actos deleznables). Es la forma más rápida de describir a esta criatura. 
 El hijo del poderoso dios del asesinato, Bhaal. Pero no nació del vientre de una mujer como otros tantos de sus vástagos, Dark Urge fue creado a partir de la a carne y sangre de dicho dios, mezclados con un agónico y errante espíritu maligno que apareció tras cometer una serie de asesinatos, un hijo perfecto que algún día, tras atormentar al mundo y bañarlo en sangre en nombre de su padre, le tomaría el relevo para ser el nuevo dios del asesinato.
Dark Urge creció lejos del culto a su padre, fue encontrado por una amable pareja japonesa cuando no era más que un bebé, y estos lo criaron como a su propio hijo. Con el paso de los años las ansias oscuras en su mente, el deseo de mutilar y masacrar iba creciendo, se sentía tan natural, tan placentero. Llegó el día en que asesinó a toda su familia y su verdadero padre, Bhaal, lo acogió en su seno para que tomase el legado que le pertenecía. Lideró el culto a su padre por muchos años, llegando a ser incluso venerado en varios lugares del mundo. Pero un día, mientras tramaba un plan exquisito de dominación mundial junto a los elegidos de los dioses Bane (dios de la tiranía) y Myrkul (dios de la muerte), con claras intenciones de traicionarlos en algún momento, fue él quien resultó traicionado por su propia sangre. Uno de los vástagos de Bhaal que se había mantenido en la sombra de Dark Urge, venerándolo, tomó ventaja y le clavó una daga en la cabeza. Muchos le dieron por muerto ya que ese vástago, Orin la Roja, se deshizo de su cuerpo, tomando ella el relevo como sucesora de Bhaal. 

Pero no, Dark Urge no murió, tan solo despertó sin recuerdos, con un terrible dolor de cabeza y la sensación de que su mente no era más que un asqueroso colador lleno de agujeros. Lo único que recordaba eran sus nombres: Dark Urge y Kohaku, eso era él, fuese lo que fuese. Desde entonces ha vagado realizando cualquier trabajo por el que le paguen algo por muy difícil, raro o ilegal que sea. Intentando descubrir su pasado, quién es realmente. Poco a poco dejándose llevar más y más por sus fuertes instintos, comentiendo actos deleznables por mera diversión, otras veces tan solo simples travesuras.
Aún conserva algunos poderes y facultades propias de sus días de gloria, pero la gran mayoría quedaron menguados por el simple hecho de que no sabe quién es, tan solo vienen a su mente pequeños retazos de su vida, pinceladas carmesí de un sangriento sendero.
En cuanto a su personalidad, es alguien impredecible, brusco y sin pelos en la lengua, descarado, todo le importa una mierda para ser claros. Aun que parece no estar conforme con las muestras de afecto, el sexo está bien, pero se le hace incómodo que le intenten dar "cariño". En ocasiones siente impulsos agresivos, impulsos que ni el peor de los psicópatas podría llegar a experimentar. No sabe por qué, pero cuando los sacia se siente tan... Bien. Solo se siente verdaderamente feliz cuando mata. Pues él no lo sabe, pero su padre lo observa de cerca, mandando a Sceleritas Fel, el imp mayordomo que le fue asignado, a vigilar sus movimientos y, cuando llegue el momento en el que sus recuerdos regresen, darle la oportunidad de vengarse de Orin y retomar su vil y sangriento legado...


Pero... ¿Se resistirá finalmente a su destino y cambiará el rumbo de este? ¿O aceptará de buen grado volver a ser la mano derecha, el elegido de Bhaal y sumir el mundo en la peor de las pesadillas?