Si los humanos pueden, ¿por qué yo no?

 

Ese pensamiento determinó su rol en el clan Demonic y marcó el inicio de una larga, macabra carrera entre laboratorios y salas de especímenes. Ysayle no podía conformarse con ser una súcubo cualquiera, limitar su vida a torturar a los hombres y alimentarse de su energía sexual... Era algo que cualquiera podía hacer ¡era su razón de ser! Ella necesitaba más. Esa ambición se sació con lo que los mortales llamaban ciencia, sin las limitaciones morales de aquellas criaturas ¿qué podría conseguir? ¿Hasta dónde podría llegar? Y por supuesto... ¿En qué medida podría beneficiar a su señora Leena?

 

Ese placer a menudo era más satisfactorio que el sexo que humanos o demonios le pudiesen regalar. Sus métodos poco ortodoxos le permiten llegar más lejos que nadie, su intoxicante aura de demonio le facilita acceder a especímenes por mucho que se resistan... ¿Quién puede decir que no a una belleza como ella? ¿A sus labios de fresa, sus ojos de oro? ¿Quién puede negar que su inteligencia es atractiva y que su ambición, aunque aterradora, también es irresistible? Su magnetismo es inequívoco, su disfraz impecable...

 

Solo cuando sea demasiado tarde comprenderás que has aceptado un trato con la muerte y que tu alma, tu corazón y tu cuerpo están en manos de una de las criaturas más viles que el Infierno se atrevió a crear.

 

Llegada del segundo círculo, Ysayle Narak te hará llegar al cielo antes de caer sobre su mesa de experimentos...

 

Entonces ya será demasiado tarde.

Entonces ya serás suyo.