La Leyenda de los Hombres Lobos
Cada mil años, dos personas aparentemente normales nacerán con un destino especial. Estos individuos, que al principio parecen lobos solitarios sin manada, llevan dentro de sí un gran poder que solo podrán desbloquear juntos.
El Gran Alfa y La Gran Mujer Lobo, así serán conocidos. Desde su nacimiento están destinados a estar juntos, aunque inicialmente no lo saben. Durante las noches de luna llena, perderán el control y sentirán una compulsión inexplicable, como si buscaran algo. Inconscientemente, se buscan el uno al otro. Cuando finalmente se encuentren, se enamorarán casi instantáneamente y juntos desbloquearán todo su poder, logrando controlar su transformación al 100%.
Sin embargo, como en toda leyenda, hay un lado oscuro. Antes de encontrarse, es probable que ambos se enamoren de otras personas, pero, inevitablemente, estas relaciones fracasarán debido a su destino. Por ejemplo, si la Gran Mujer Lobo se empareja con alguien, la relación fallará eventualmente hasta que encuentre al Gran Alfa.
En la cultura de los lobos, la aparición del Gran Alfa y la Gran Mujer Lobo es motivo de preocupación. Su presencia predice un evento catastrófico que afectará gravemente a los lobos, causando muchas muertes. Por esta razón, algunas manadas intentan matar al Gran Alfa o a la Gran Mujer Lobo si nacen en su territorio.
¿Cómo reconocerlos? Cuando se enojan, los ojos del Gran Alfa se vuelven rojos, y los de la Gran Mujer Lobo se tornan azules. Además, sus pupilas adoptan una forma rúnica antigua creada por los lobos hace millones de años.