Rol con:
Angel Dust
(Si, ahora porque acá faltan unas horas pero sé que queda poco en España)
—Normalmente esas celebraciones le importaría muy poco, sin mencionar que por lo general es cuando se lleva a cabo el exterminio anual en el infierno. ¿Quién celebraría que tengas que huir de la muerte encargada a manos de los ángeles que bajaban?
Hasta antes de convertirse en un mero esclavo y trabajar en el hotel, solía pasar año nuevo encerrado en su casino. Encerrado en la seguridad de su edificio, jugando y apostando. Ignorando los gritos de terror que inundaban las calles provinientes de las pobres almas desafortunadas que parecían bajo manos angelicales. Y aunque luego de convertirse en esclavo aquella tradición de ignorarlo todo y encerrarse a jugar (gracias a que su casino seguía en pie aunque ya no fuera realmente dueño del lugar) bebiendo y apostando, no se había perdido del todo... Aquel año era distinto.
Ahora acababa por terminar de arreglarse. Desempolvando su viejo traje de overlord. Su interés de pasar aquel día en el hotel era solo un viejo recuerdo, interesado, casi hasta emocionado, por esta vez pasarlo en el hotel junto a la única persona que le importaba; Angel.
Nada demasiado elaborado. Solo una tranquila velada en la terraza dónde podrían verlo todo desde la altura y al mismo tiempo relajarse con la tranquilidad que la lejana ubicación del hotel proporcionaba.
Una pequeña mesa para dos con dos plato de exquisita comida italiana en cada uno. Dos copas, una con sidra para él y con una bebida sin alcohol apta para Angel que serviría para brindar, esperando la llegada de un nuevo año.
Aunque no acostumbraba a usar su móvil, lo sacó del interior de uno de los bolsillos de su saco y buscó entre sus contactos a Angel.—
"Hay un pequeño obsequio para ti sobre la cama. Estoy en la terraza"
—Fue todo lo que escribió, dando una calada a su cigarro que sostenía con una de sus manos antes de exhalar, aguardando su llegada.
Una caja sobre la cama, tal como prometió en el mensaje, con un vestido para Angel que creyó le gustaría por si deseaba arreglarse para celebrar el año por venir—
Rol con: [Ange1Dust]
(Si, ahora porque acá faltan unas horas pero sé que queda poco en España)
—Normalmente esas celebraciones le importaría muy poco, sin mencionar que por lo general es cuando se lleva a cabo el exterminio anual en el infierno. ¿Quién celebraría que tengas que huir de la muerte encargada a manos de los ángeles que bajaban?
Hasta antes de convertirse en un mero esclavo y trabajar en el hotel, solía pasar año nuevo encerrado en su casino. Encerrado en la seguridad de su edificio, jugando y apostando. Ignorando los gritos de terror que inundaban las calles provinientes de las pobres almas desafortunadas que parecían bajo manos angelicales. Y aunque luego de convertirse en esclavo aquella tradición de ignorarlo todo y encerrarse a jugar (gracias a que su casino seguía en pie aunque ya no fuera realmente dueño del lugar) bebiendo y apostando, no se había perdido del todo... Aquel año era distinto.
Ahora acababa por terminar de arreglarse. Desempolvando su viejo traje de overlord. Su interés de pasar aquel día en el hotel era solo un viejo recuerdo, interesado, casi hasta emocionado, por esta vez pasarlo en el hotel junto a la única persona que le importaba; Angel.
Nada demasiado elaborado. Solo una tranquila velada en la terraza dónde podrían verlo todo desde la altura y al mismo tiempo relajarse con la tranquilidad que la lejana ubicación del hotel proporcionaba.
Una pequeña mesa para dos con dos plato de exquisita comida italiana en cada uno. Dos copas, una con sidra para él y con una bebida sin alcohol apta para Angel que serviría para brindar, esperando la llegada de un nuevo año.
Aunque no acostumbraba a usar su móvil, lo sacó del interior de uno de los bolsillos de su saco y buscó entre sus contactos a Angel.—
"Hay un pequeño obsequio para ti sobre la cama. Estoy en la terraza"
—Fue todo lo que escribió, dando una calada a su cigarro que sostenía con una de sus manos antes de exhalar, aguardando su llegada.
Una caja sobre la cama, tal como prometió en el mensaje, con un vestido para Angel que creyó le gustaría por si deseaba arreglarse para celebrar el año por venir—