Aquella musa. Tuve la oportunidad de verla a ella, una vez, pintada sobre mi ser. Fue a través de un espejo, puesto justo frente mío.
Nunca la reconocí como a mí misma. Ella era distinta, sus ojos llenos de experiencias, su porte y carácter reflejaban ideas y pensamientos que yo no podría poseer.
Cuando decidí darme vida fuera del lienzo, pude sentir como...